El carbón se forma a partir de la descomposición de materia orgánica de plantas que vivieron hace millones de años. Existen diferentes tipos de carbón según su contenido de carbono y las presiones y temperaturas a las que se formó, como la turba, el lignito, la hulla y la antracita. El carbón tiene ventajas como su bajo costo y alto poder calorífico, pero también inconvenientes como su carácter contaminante y los peligros de la minería.