El documento describe la evolución de la educación pública en México a través del tiempo. Señala que inicialmente solo los hijos de las clases altas recibían educación por parte de la iglesia. Más tarde, la constitución de 1857 estableció que la educación debía ser laica, obligatoria y gratuita. Entre 1920 y 1940, la Secretaría de Educación Pública extendió la educación primaria a las zonas rurales. Los educadores revolucionarios buscaban asegurar la participación de México en el sistema moderno y fomentar valores