El documento analiza las diferencias y similitudes entre la labor de un tutor en aulas virtuales y un profesor en aulas convencionales, destacando la importancia del rol del tutor como comunicador y facilitador del aprendizaje. Se identifican dos tipos de tutorías y se detallan las funciones, características y competencias necesarias para ser un buen tutor, así como los desafíos específicos del entorno virtual. Finalmente, se enfatiza que la formación continua en herramientas tecnológicas es fundamental para que los docentes puedan adaptarse y convertirse en tutores efectivos.