El documento analiza la evaluación de diferentes soportes educativos y bibliotecas, destacando su propósito informativo y educativo, así como la autoridad y precisión de la información proporcionada. Se enfatiza la importancia de mantener actualizados los recursos y la funcionalidad de los mismos, incluyendo herramientas interactivas y enlaces a otras fuentes. Además, se subraya la necesidad de establecer criterios claros para seleccionar información relevante en un entorno digital saturado.