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Hugo Pardo Kuklinski
                       GEEKONOMÍA
                       Un radar para producir
                       en el postdigitalismo




                                            COL.LECCIÓ
                                           TRANSMEDIA
                                              XXI
2
geekonomía       Un radar para producir en el postdigitalismo
GEEKONOMÍA
Un radar para producir
en el postdigitalismo

Hugo Pardo Kuklinski
GEEKONOMÍA
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               Un radar para producir
                                               en el postdigitalismo

                                               Se debe citar:
                                               Pardo Kuklinski, Hugo (2010). Geekonomía. Un radar para producir en el postdigitalismo.
                                               Col·lecció Transmedia XXI. Laboratori de Mitjans Interactius / Publicacions i Edicions de
                                               la Universitat de Barcelona. Barcelona

                                               eBook de acceso gratuito bajo un sistema de donaciones.
                                               Versión 0.1 / Enero 2010.
                                               ISBN de la edición electrónica: 978-84-475-3424-1

                                               Depósito legal: B-4.010-2010
     2
                                               Primera edición en papel limitada a 1000 ejemplares. Enero 2010.
geekonomía




                                               ISBN de la edición en papel: 978-84-475-3425-8
                                               Impreso en España.

                                               Parte de los ejemplares impresos estarán destinados a universidades, bibliotecas y
                                               centros de investigación. Pueden solicitarlo al Laboratori de Mitjans Interactius (LMI).
                                               Universitat de Barcelona. info@lmi.ub.es

                                               CC 2010 Hugo Pardo Kuklinski / Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona.
                                               Este libro se publica bajo Licencia Reconocimiento 3.0 España de Creative Commons.
                                               Usted es libre de: copiar, distribuir y comunicar públicamente la obra; hacer obras
                                               derivadas. http://creativecommons.org/licenses/by/3.0/es

                                               Diseño gráfico y maquetación: BesadaCukar. www.besadacukar.com
                                               Foto de contraportada: Francesc Macià. SAV-UVic.

                                               Se accede a esta edición electrónica desde: www.geekonomia.net

                                               hugo.pardo@lmi.ub.es
                                               CV disponible en: www.lmi.ub.es/lmi/CV_Hugo_Pardo_Kuklinski_English.pdf

                                               Nota: Este libro es de acceso gratuito vía Web. Sin embargo, hemos creado un sistema de
                                               donaciones con tres valores alternativos (2, 5 y 10 euros) para quien desee contribuir al
                                               crecimiento de la Col·lecció Transmedia XXI y a la impresión de una mayor cantidad de
                                               ejemplares para su distribución gratuita en instituciones educativas.

                                               Puede contribuir en www.geekonomia.net
COL.LECCIÓ
          TRANSMEDIA
             XX I

Sobre la Col·lecció Transmedia XXI
Laboratori de Mitjans Interactius / Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona.




                                                                                                            Un radar para producir en el postdigitalismo
Coordinación editorial
Hugo Pardo Kuklinski

Comité editorial
Antonio Bartolomé Pina | Antonio Mercader | Mariona Grané Oró | Cilia Willem |
Joan Frigola Reig | Jordi Sancho Salido | Rafael Suárez Gómez | Fabiane Pianowski

El Laboratori de Mitjans Interactius (LMI) es un centro de I+D+i de la Universitat de Barcelona
especializado en la investigación en el ámbito de la educación y los medios de comunicación.

Nuestras líneas de investigación son:
• comunicación audiovisual digital
• (meta)narrativas y sintaxis audiovisual y multimedia
• formulaciones artísticas de participación
• entornos formativos potenciados por la tecnología
• alfabetización digital
• diversidad e inclusión social en contextos mediáticos
• evaluación de los aprendizajes con TIC
• infancia y pantallas

Laboratori de Mitjans Interactius (LMI)                                                                                   3
UNIVERSITAT DE BARCELONA




                                                                                                            geekonomía
Pg. de la Vall d’Hebron 171 | Edifici Llevant 005 | CP 08035 Barcelona | Catalunya, España
tel. +34 93 403 50 65 | info@lmi.ub.es




Próximo trabajo de la Col·lecció Transmedia XXI

Bridge-IT. Hacia la inclusión digital de las minorías (título provisional)
Fecha prevista de edición: junio 2010.

Bridge-IT es un proyecto de red temática financiado por la Comisión Europea a través del programa
de soporte a las políticas de fomento del uso de las TIC (PSP ICT). Sus principales objetivos son la
identificación, el intercambio y la aplicación de buenas prácticas dentro del ámbito de las TIC y de la
diversidad cultural y la integración social del colectivo inmigrante en Europa. En el proyecto participan
35 entidades entre instituciones públicas, universidades, sindicatos y ONG. Los distintos productos
del proyecto se preparan en pequeños grupos de trabajo, para luego ser validados por el resto de los
socios. Se trata de procesos participativos y abiertos.

Este segundo libro de la Col·lecció Transmedia XXI será el primer resultado del trabajo colectivo sobre
las prácticas en marcha para responder a las necesidades de mejorar la inclusión digital de colectivos
en riesgo, como el de los inmigrantes. Este trabajo de divulgación fortalecerá nuestro objetivo de
estudiar y encontrar formas eficientes de potenciar la inclusión digital y social de este colectivo.
El libro identificará las ayudas, proyectos y cursos que fomentan la participación de los inmigrantes en
la vida cotidiana: cómo se organizan, se forman y se integran utilizando las TIC (ordenadores, Internet,
teléfonos móviles, etc.) para llevar a cabo trámites administrativos, responder a requisitos laborales o
disfrutar de sus aficiones.
Agradecimientos

                                               A Antonio Bartolomé Pina y a todos los miembros del Laboratori de Mitjans Interactius (LMI)
                                               de la Universitat de Barcelona, por darme cabida en su grupo de investigación y brindarme
                                               la responsabilidad de dirigir esta nueva Col·lecció Transmedia XXI.

                                               A la Universitat de Vic, por financiar mi segunda estadía de investigación en Stanford
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               University, donde escribí gran parte de este libro. Al Servei d’Audiovisuals de la UVic
                                               (Francesc Macià y Ricard Parra) por sus fotos y sus vídeos.

                                               A Cristóbal Cobo, Marcelo Bentancour y Elizabeth Martínez por revisar los manuscritos
                                               exhaustivamente y ayudarme a mejorar el trabajo. A Jordi del Río, por producir el
                                               lanzamiento mediático en Barcelona. A Carlos Scolari, por su constancia en digitalismo.com
                                               y por el prólogo.

                                               To the Stanford Green Library’s staff, for their generosity and their bibliographical advice.
                                               To Joann and Glenn MacDonell for those fun evenings drinking cocktails in Redwood City.
                                               To them for taking me into their home and treating me as an older son.




     4
geekonomía
Índice

Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI
Producir contra la invisibilidad
Por Antonio Bartolomé Pina	                                          07




                                                                          Un radar para producir en el postdigitalismo
Prólogo. Pensando lo “post”, en espera del “pre”
Por Carlos A. Scolari	                                               15

Capítulo 0
Bienvenidos al postdigitalismo	                                      19

Capítulo 1
Sobre buzzwords y conceptos marco de la geekonomía	                  37

Capítulo 2
Un estudio de caso de nuevas formas de intermediación:
los open access journals	                                            61

Capítulo 3
La geografía cambiante del planeta Web 2.0:
transformación narcisista e identidad única	                         73                 5

Capítulo 4




                                                                          geekonomía
La crisis de la universidad iberoamericana en el postdigitalismo:
liderazgo social o marca blanca	                                    109

Capítulo 5
El dulce discurso de la I+D+I.
Entornos significativos o voluntarismo	                             157

Bibliografía	                                                       180
6
geekonomía       Un radar para producir en el postdigitalismo
Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI
Introducción
a la Col·lecció
Transmedia XXI
                                      7

Producir contra


                         geekonomía
la invisibilidad
Antonio Bartolomé Pina
Gabriel García Márquez comenzaba Cien años de
                                               soledad remitiéndonos al futuro del coronel Aure-
                                               liano Buendía. Así también, esta introducción comienza remi-
                                               tiendo a la nueva década. Años después, los académicos que han
                                               participado en el lanzamiento de esta colección recordaremos el
                                               momento en que el autor nos propuso ir más allá de las reglas del
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               juego en el mundo de las publicaciones académicas en Iberoamé-
                                               rica, diseñar una nueva colección (ya no sólo un libro) y publicarla
                                               bajo descarga gratuita vía Web. Dicho sistema ya está consolidado
                                               en el mundo anglosajón (William Mitchell fue el precursor publican-
                                               do su City of Bits en 1996), pero aún es incipiente en nuestro entorno
                                               universitario. Este texto es una introducción por partida doble. Lo
                                               es del trabajo de Hugo Pardo Kuklinski, miembro de nuestro grupo
                                               de investigación consolidado, el Laboratori de Mitjans Interactius
                                               (LMI). Y lo es también de la colección que lanzan conjuntamente el
                                               LMI y Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona.1

                                               Por qué Transmedia XXI

                                                  La historia de la producción de nuestro LMI es transmediática,
     8
                                               mucho antes de que Henry Jenkins popularizara el concepto en su
                                               Convergence Culture (2006). El LMI comenzó su camino producien-
geekonomía




                                               do los primeros y casi únicos programas multimedia educativos en
                                               soporte videodisco Laservisión (1998, NTF, RIE). Posteriormente in-
                                               trodujo los hipertextos en soporte CD-ROM (1992, Hypermedia for
                                               Teaching). Llevó el multimedia al mundo de los niños menores de
                                               seis años desafiando a quienes pensaban que utilizar ordenadores
                                               en el aula “mataría la afectividad” del niño (1994, Proyecto Grimm).
                                               Diseñó y desarrolló espacios de creación colectiva del conocimien-
                                               to para niños cuando todavía no existía el término Web 2.0 (1998,
                                               Mediakids: how we were). Montó una de las primeras maestrías
                                               audiovisuales a distancia en la Web con una fuerte presencia de
                                               vídeo (1998, ANTE). Lanzó la que probablemente fue la primera te-
                                               levisión educativa infantil en Internet en España (2000, GrimmTV).
                                               Atrás quedan una veintena de proyectos europeos, más de la mitad
                                               presentados y coordinados por el LMI. Siempre hemos sido un gru-

                                               1. Esta colección se ha puesto en marcha con el apoyo de varias instituciones. Específicamente
                                               con una ayuda de la Agrupació de Recerca en Ciències de l’Educació para grupos de
                                               investigación correspondiente al año 2008.
po de investigación y producción transmediática y en estos tiempos
y con esta nueva colección pretendemos fortalecer aún más nuestra
seña de identidad científica.

   En tanto, Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona re-
coge las actividades relacionadas con la producción en todo tipo de
soportes dentro de la Universitat de Barcelona (UB). Esto incluye desde




                                                                                              Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI
libros, manuales, revistas, hasta DVD y CD-ROM pasando por eBooks
y otros formatos. Sus 113 colecciones incluyen casi todas las áreas de
conocimiento de la UB, y su volumen de edición la hace comparable a
algunas de las editoriales científicas más reputadas del mundo.

   Cuando el LMI y Publicacions i Edicions de la Universitat de Barce-
lona lanzan una nueva colección con el formato de descarga gratui-
ta vía Web bajo una licencia Creative Commons, no se está ante un
ejercicio de ingenuidad o inexperiencia, sino ante la consecuencia
de un análisis en profundidad de la realidad editorial del siglo en
que vivimos. Bien, ya tenemos aquí el segundo término del título
de la colección: xxi. Pero esta referencia al siglo actual no proviene
únicamente de las características del proceso de distribución de la
                                                                                                           9
colección: mixto a través de entornos digitales e impresos, abiertos
y comerciales.2 También hace referencia al contenido de sus textos.




                                                                                              geekonomía
Se pretende ofrecer lo más reciente, en la línea de trabajo habitual
del LMI, pero en textos rigurosos, suficientemente extensos para
abordar en profundidad los temas que preocupan a quienes trabaja-
mos en entornos audiovisuales a comienzos del siglo xxi.

   El término transmedia fue necesario para poder identificar las lí-
neas en las que se mueve el LMI, un grupo que recoge aproximacio-
nes a la comunicación, el arte y la educación en el marco de los me-
dios. No podíamos limitarnos a los sistemas multimedia, expresión
que ya en sus comienzos fue discutida. ¿Y qué decir de la digitaliza-
ción en un mundo postdigital? La transversalidad a los medios era el
elemento común, el corazón, el common core de la colección.


2. La distribución se comercializa a través de Publicacions i Edicions de la Universitat de
Barcelona, tanto en librerías tradicionales en papel, como a través de Amazon.com y otros
sistemas de venta por Internet. El acceso a la edición electrónica puede realizarse desde
la web del LMI y las direcciones propias de cada texto. Este texto está disponible en:
http://www.geekonomia.net
Dicho lo anterior, la Col·lecció Transmedia xxi es un nuevo empren-
                                               dimiento conjunto del Laboratori de Mitjans Interactius (LMI) y de Pu-
                                               blicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona, la editorial de pu-
                                               blicaciones científicas de la Universitat de Barcelona. Esta colección se
                                               crea en 2010 con el objetivo de promover el trabajo de nuestros inves-
                                               tigadores en formato libro y, como ya señalamos, bajo dos sistemas
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               en paralelo de distribución: 1) el tradicional, con precio de portada y
                                               venta en librerías y en Internet; 2) un e-book con un diseño diferencia-
                                               do y contenidos extras para aprovechar todas las virtudes de la Web
                                               2.0, editado bajo licencia copyleft y de acceso gratuito en la Red. La
                                               misión de la Col·lecció Transmedia xxi es publicar los resultados de las
                                               investigaciones del conjunto del LMI, así como el trabajo individual
                                               de nuestros investigadores y el de invitados externos, siempre dentro
                                               de la temática general que engloba nuestra área de conocimiento. La
                                               Col·lecció Transmedia xxi se crea bajo la consigna de “producir con-
                                               tra la invisibilidad” y responde a la comprensión de los miembros del
                                               LMI de que parte del prestigio de los investigadores viene dado por
                                               el grado de atención de la comunidad científica y académica a la que
                                               pertenece. Como señala el autor en el capítulo 4: “Nada resulta más
                                               frustrante que producir investigación o textos que luego nadie lee ni
10
                                               indexa. También podría referirme a los libros que nadie consulta, y
                                               mucho peor aún, que no están disponibles en las librerías. La invisibi-
geekonomía




                                               lidad es una experiencia demasiado habitual en la producción cientí-
                                               fica y académica de nuestras universidades y todos la hemos sufrido
                                               en carne propia en alguna etapa de nuestra carrera. En la era de la
                                               sobreinformación, el prestigio está configurado por el grado de aten-
                                               ción de los otros. Un profesional de la educación reconocido es aquel
                                               que es leído, citado, consultado y cuyos pdfs se bajan de la Red”. La
                                               escritura bajo licencias Creative Commons y de acceso gratuito, pero
                                               avalada por una editorial con prestigio como Publicacions i Edicions
                                               de la Universitat de Barcelona, resulta un canal atractivo para dar a co-
                                               nocer nuestro trabajo de forma masiva, más allá del habitual recorrido
                                               editorial o de las revistas científicas.

                                                 Para conocer mejor los ámbitos en que se mueve el LMI se puede
                                               acceder a su web.3 Pero esta relación de líneas de investigación pue-
                                               de dar una idea clara de nuestros intereses:


                                               3. http://www.lmi.ub.es
• comunicación audiovisual digital
  • (meta)narrativas y sintaxis audiovisual y multimedia
  • formulaciones artísticas de participación
  • entornos formativos potenciados por la tecnología
  • alfabetización digital
  • diversidad e inclusión social en contextos mediáticos
  • evaluación de los aprendizajes con TIC




                                                                          Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI
  • infancia y pantallas

   Por lo tanto Transmedia xxi no pretende competir con otros es-
fuerzos editoriales presentes en el mercado ni con el dinamismo y
actualidad de los blogs y páginas personales de tantos profesores
y expertos en tecnología educativa, que constituyen una riqueza
infrecuente en otros campos. La colección busca la reflexión y la
solidez al fijarse en lo que recién nace. Es una colección en caste-
llano que pretende liderar los textos relacionados con los medios,
la comunicación, el arte y la educación. Es por tanto un espacio de
encuentro para Iberoamérica y en especial para los académicos y
profesores interesados que deseen tener alternativas a los textos en
inglés y otras lenguas.
                                                                               11

Geekonomía. Un radar para producir




                                                                          geekonomía
en el postdigitalismo

   Y llegamos al primer texto de la colección, es decir, a la segunda
parte de esta introducción. Junto a Cristóbal Cobo Romaní, Hugo Par-
do Kuklinski publicó en 2007 un libro que se ha consolidado como
uno de los referentes de la literatura en Web 2.0 en castellano: Plane-
ta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food. Con casi 150.000
descargas (a enero de 2010), el trabajo publicado por Flacso México
y la Universitat de Vic, también estuvo disponible en papel y para su
descarga gratuita. El profesor Pardo también coordina el proyecto
CampusMovil.net, y a través de su digitalismo.com es posible acce-
der a algunas de las noticias más relevantes en el campo.

  El autor es un experto en el análisis comunicativo de la Web y
como tal no ha dudado en generar un nuevo término que él define
como provisorio: geekonomía. Pero ¿qué quiere decir este término?
Un nuevo modo de comprender el digitalismo y el postdigitalismo
desde un análisis económico de las relaciones en la Red. ¿Y quién
                                               mueve esta economía del mundo digital? Los geeks, estos creadores
                                               y adoptadores tempranos de tecnología, testeadores de programas,
                                               precursores de lo que los mortales comunes consumiremos en la
                                               próxima década.
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                                  Para ser un texto en castellano, parece que nos trae muchos tér-
                                               minos en inglés. Efectivamente, explicados en detalle, no siempre
                                               es prudente traducir términos en lo que quizás sería más una trai-
                                               ción que un signo de respeto.4 Así encontraremos términos como
                                               buzzwords, me-spheres, empowernment, cloud computing, open ac-
                                               cess journals, groundswell, gatekeepers, Googlejuice, e-magazines,
                                               blended learning y tantos otros que aparecen a lo largo del texto.
                                               Estos términos nos permiten también realizar un nuevo análisis de
                                               conceptos tan controvertidos como el copyright, la acreditación uni-
                                               versitaria, el modelo de I+D+I, las universidades marcas blancas, la
                                               crisis de la intermediación cultural, etc. La lectura de Geekonomía es
                                               un soplo de aire fresco frente a los tópicos y falsedades que pode-
                                               mos escuchar en ciertos medios tradicionales, espoleados por los
                                               viejos detentadores de un poder que hoy ven amenazado por una
12
                                               nueva economía, creada desde la sociedad digital que ellos creían
                                               controlar. Un texto social, económico y político, pero también cul-
geekonomía




                                               tural y que afecta profundamente a los educadores. Un texto ideal
                                               para iniciar esta colección.

                                               Y los próximos libros

                                                  No todos los libros seguirán exactamente la misma tónica. Al-
                                               gunos recogerán experiencias en aspectos relevantes como la e-In-
                                               clusión o el aprendizaje ampliado. Otros preferirán las aportaciones
                                               de varios autores. Es posible que quien lea estas líneas piense que
                                               puede aportar algo a la colección. Pues bien, es también una colec-
                                               ción abierta. No es un espacio para publicar entre amigos, sino una
                                               interfaz meritocrática y abierta al mundo académico de la comuni-




                                               4. Véase al respecto la peculiar traducción como “bloc” de lo que fue una divertida evolución
                                               de web-log (registro de la web) hacia la forma verbal We blog.
cación iberoamericana.5 Aunque a diferencia del Macondo de Ga-
briel García Márquez, se trata de un mundo real. ¿O quizás también
es un mundo mágico?



                                             Dr. Antonio Bartolomé Pina
                           Director Laboratori de Mitjans Interactius (LMI)




                                                                                              Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI
                                                  Universitat de Barcelona




                                                                                                  13




                                                                                              geekonomía




5. Puede ponerse en contacto con cualquiera de los miembros del Comité Editorial, del grupo
LMI o directamente escribiendo a info@lmi.ub.es
14
geekonomía        Un radar para producir en el postdigitalismo
Prólogo



                      prólogo
                       15

Pensando lo “post”,


                      geekonomía
en espera del “pre”
Carlos A. Scolari
A comienzos del siglo xx la combinación de una
                                               serie de tecnologías –desde el coche tirado por
                                               caballos hasta el motor de cuatro tiempos inven-
                                               tado por Nikolaus A. Otto en 1876, pasando por
                                               los neumáticos que John Boyd Dunlop creó en
                                               1887 para la bicicleta de su hijo– generó una nue-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               va interfaz: el automóvil con motor a explosión.
                                               En esa época de pioneros todavía no estaba claro que precisamente
                                               ésa sería la tecnología dominante en el mundo del transporte. En
                                               1900 había en los Estados Unidos 4.192 automóviles: 1.681 funcio-
                                               naban a vapor, 1.575 eran eléctricos y sólo 936 se movían con motor
                                               a gasolina. Los vehículos con motor eléctrico o a vapor también se
                                               disputaban el futuro, mientras que los carros con tracción animal
                                               no se resignaban a abandonar el lugar que les correspondía como
                                               medio de transporte milenario. Pero, como sabemos, en pocos años
                                               las máquinas mecánicas creadas por Henry Ford y Giovanni Agnelli
                                               le ganaron la pulseada a los caballos y el “automóvil con motor a
                                               explosión” pasó a ser simplemente “automóvil”, a secas.

16
                                                  A comienzos del siglo xxi empezaron a circular por las calles de
                                               algunas metrópolis “automóviles eléctricos”. Como esto es un pró-
geekonomía




                                               logo y conviene ser breve, el resto de la historia se lo pueden imagi-
                                               nar: si algún día todos los automóviles terminan siendo eléctricos,
                                               a nadie se le ocurrirá decir “Mira, un automóvil eléctrico”. Todos
                                               serán “automóviles”, a secas.

                                                  Algo parecido está pasando con lo “digital”. A finales del siglo xx
                                               la tecnología digital abandonó los laboratorios y se derramó por
                                               el mundo. En pocos años nos vimos rodeados de “máquinas digi-
                                               tales”, “comunicación digital”, “diseño digital” y hasta de una “eco-
                                               nomía digital”. Hoy estamos atravesando el momento de transición,
                                               el pasaje de una tecnología que era new (y por lo tanto muy visible)
                                               en las décadas de 1980-1990 y que por ello requería un adjetivo
                                               específico. Cada día que pasa esa misma tecnología se vuelve más
                                               invisible. Estamos asistiendo a la rápida muerte del adjetivo “digi-
                                               tal”. Podría decirse que Geekonomía. Un radar para producir en el
                                               postdigitalismo habla precisamente de esto: de la lenta disolución
                                               del adjetivo “digital”.
Hugo Pardo Kuklinski apuesta por el concepto de postdigital. Lo
entiendo: no es fácil hablar de lo nuevo. Cada vez que tenemos que
nombrar algo nuevo no nos queda otra alternativa que recurrir a
las palabras que ya conocemos. Cuando a finales del siglo xix unas
extrañas y ruidosas criaturas con ruedas comenzaron a verse en las
calles de las grandes metrópolis, los asustados peatones no tuvie-
ron más remedio que recurrir a las palabras que ya conocían: “un
coche sin caballo”. Tampoco descartemos que algún alucinado pea-
tón haya dicho en una esquina de Londres o París: “Cuidado, deja
pasar a ese coche post-tracción animal”.

   En eso estamos. Viviendo un momento de cambios donde, como
escribía Karl Marx, todo lo que creíamos sólido se disuelve en el aire.
Una economía de la información se deshace mientras otra comienza
a nacer (véase capítulo 1). Otro Marx, Groucho, dijo que nunca en-
traría en una institución que lo aceptara como miembro. El autor del
libro y el autor de este prólogo nos movemos cotidianamente en una




                                                                          prólogo
de esas instituciones sospechosas que a duras penas logran mante-
nerse a flote en medio del flujo postdigital: la universidad. Al igual
que el periodismo, la escuela primaria, los mercados financieros o la
                                                                           17
industria cultural, la universidad está viviendo (¿o debo escribir “su-
friendo”?) las consecuencias de un cambio de paradigma. Lo viejo




                                                                          geekonomía
no termina de irse y lo nuevo llega marcado por la constitución de
redes ubicuas, la crisis de las intermediaciones y la pérdida general
de orientación institucional. La universidad, al igual que la escue-
la primaria o los bachilleratos, se pregunta: ¿hacia dónde vamos?,
¿sirve a los alumnos lo que estamos enseñando?, ¿qué deberíamos
enseñar?, ¿cómo deberíamos enseñarlo? (véase capítulo 4).

   Pero la universidad no sólo transmite conocimiento a las nue-
vas generaciones: también lo genera. El cambio de paradigma que
mencioné anteriormente también afecta a las formas tradicionales
de generar, distribuir y consumir el conocimiento científico. El con-
solidado modelo de negocio de los journals hace agua por todos
lados, mientras en el horizonte los open access journals marcan un
camino (véase capítulo 2). La web colaborativa se introduce en el
mundo científico y corroe desde sus entrañas un sistema lento, cos-
toso y a veces poco transparente de circulación del conocimiento. Y
mientras los investigadores tratamos de posicionarnos en la nueva
economía del conocimiento científico, nuestros alumnos construyen
                                               sus relaciones en Facebook, Twitter y Tuenti, las redes sociales que
                                               hoy, a finales de 2009, están de moda pero cuyo status institucional
                                               podría cambiar cuando este libro llegue a las librerías (véase capítu-
                                               lo 3). En la geekonomía el concepto de new media o new technology
                                               nace condenado a la obsolescencia.
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                                  El postdigitalismo se derrama por el mundo de diferente manera.
                                               No es lo mismo el nicho californiano que el latinoamericano o el es-
                                               pañol (véase capítulo 5). Los actores, las instituciones y los procesos
                                               son interpretados y asumen un perfil diferente en cada uno de estos
                                               barrios de la nueva ecología de la información. Si algo nos enseña la
                                               historia es que los modelos de desarrollo no son automáticamente
                                               exportables. Lo que funciona en Cupertino no necesariamente es
                                               reproducible en L’Hospitalet o Rosario: cada nicho socio-tecnoló-
                                               gico debe construir su propio camino de crecimiento, integrando a
                                               sus mejores actores y potenciando lo que mejor sabe hacer.

                                                  Éste es un libro que flota en la fluidez de una transición. Sabemos
                                               lo que estamos dejando atrás (la fascinación por lo digital) pero no
18
                                               terminamos de tener claro lo que vendrá. Flotamos en el postdigi-
                                               talismo. En otras palabras, el lector está a punto de leer un libro
geekonomía




                                               “postdigital” que en el futuro podrá adjetivarse de otra manera,
                                               quizás anteponiendo el prefijo “pre”, pero por ahora es demasiado
                                               temprano para saberlo.
capítulo 0
Capítulo 0
                   19

Bienvenidos al


                  geekonomía
postdigitalismo
“Anything that is in the world when you’re born is
                                               normal and ordinary and is just a natural part of
                                               the way the world works. Anything that’s invented
                                               between when you’re fifteen and thirty-five is new
                                               and exciting and revolutionary and you can probably
                                               get a career in it. Anything invented after you’re
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               thirty-five is against the natural order of things.”
                                                                         adams, Douglas (2002). The Salmon of Doubt:
                                                                                 Hitchhiking the Galaxy One Last Time



                                                  Se le atribuye a Alan Key la cita “technology is technology only for
                                               people who are born before it was invented”. Castells (1996) decía
                                               que “la tecnología es sociedad y ésta no puede ser comprendida o
                                               representada sin sus herramientas técnicas”. En este sentido, todos
                                               los avances tecnológicos de la historia fueron relevantes a nivel de
                                               evolución social. Sin embargo, hablar de una revolución tecnológica
                                               cuando se hace referencia a las TIC suena presuntuoso y ubica injus-
                                               tamente el aludido ecosistema industrial en el centro del universo
20
                                               de las innovaciones. Dicho guión no sorprende, porque el progreso
                                               ha devenido siempre de la mano de un discurso presente-céntrico
geekonomía




                                               y utópico sobre el futuro. Pero desde la edad de piedra se podrían
                                               mencionar decenas de tecnologías significativas en cada siglo y to-
                                               das fueron relevantes para el desarrollo humano. La agricultura en
                                               Asia, la civilización hidráulica, el hierro, la ingeniería civil en China
                                               y Roma antes de Cristo, la invención de los tipos móviles, la arqui-
                                               tectura medieval, la revolución industrial, etc. Y qué decir de las
                                               transformaciones de los siglos xix y xx, empezando por la aviación
                                               civil y la electricidad. Seidensticker (2006) afirma que el ser humano
                                               sobreestima la importancia de los nuevos inventos y desestima los
                                               inventos con los que vivió toda la vida. Nos comportamos como ni-
                                               ños ante el nuevo juguete y olvidamos el que nos seducía un año an-
                                               tes. Siempre estamos fascinados con el nuevo artilugio tecnológico.
                                               Por esto, las personas que nacieron antes de que una tecnología se
                                               torne popular y ubicua, la consideran realmente como tal y obser-
                                               van su faceta transformadora. Pero quienes nacen a posteriori de
                                               que una tecnología se convierta en masiva y social, la ven como un
                                               fruto del orden natural de las cosas. Se trata de una forma distorsio-
nada de ver la relevancia de la innovación. En ese sentido, Headrick
(2009) hace una cronología precisa de la evolución tecnológica y su
repercusión social, reafirmando la importancia de todas y cada una
de ellas. Veamos un ejemplo. La ramificación social y económica de
la democratización de la electricidad a fines del siglo xix ha sido
totalmente disruptiva. Alteró el ritmo de vida de las personas y de
las comunicaciones humanas y afectó decisivamente la economía
industrial. Según Carr (2008) la electricidad creó el confort del ho-
gar, propició el crecimiento de la clase media, la expansión de la
educación pública y la cultura de masas, así como el movimiento de
la población desde las ciudades a los suburbios. ¿Qué tecnología
fue más relevante en términos de influencia social: la electricidad o
las TIC? No tiene valor discutirlo en términos dicotómicos y absolu-
tos. ¿Por qué entonces creer que el digitalismo de la segunda mitad
del siglo xx es la más revolucionaria de las transformaciones? ¿Por
qué pensar que, como Terceiro y Matías (2001) definieron con opti-




                                                                          capítulo 0
mismo, se trata de una fase diferente al capitalismo? Piscitelli (2009)
provoca diciendo que el capitalismo es creativo, inteligente, estético
y relacional y se demuestra con la evolución de las TIC. Además de
estas cualidades, también es adaptativo. Y son precisamente las em-
                                                                           21
presas e instituciones capitalistas las que redefinieron el digitalismo
haciéndolo omnipresente. En consecuencia, es hora de empezar a




                                                                          geekonomía
reconsiderar la economía digital como economía a secas y dar un
paso terminológico hacia el futuro.

   La visión de McLuhan hace cuarenta y seis años en Understanding
Media era precisa. Todas las tecnologías son extensiones del hom-
bre. Y las TIC son una extensión de nuestro acotado universo físico
que nos limita a estar en un lugar y en un solo momento. McLuhan
afirmaba que los medios crean nuevos patrones sociales que rees-
tructuran las percepciones. Más allá de los contenidos del medio,
éstos tienen sus propios efectos en la percepción humana y la re-
configuran. Ése es el principal mensaje del medio. Bajo esta lógica,
McLuhan demandaba una equidistancia entre el análisis del medio
y el de los contenidos del medio. Esa demanda recorre todo este
libro haciendo foco en la reconversión mediática más que en sus
contenidos, y entendiendo los medios como sinónimo de mediado-
res. En ese contexto, la universidad es un medio. Y por eso dedicaré
un capítulo a ella. La innovación también funciona como mediadora
entre el mercado y los consumidores. El digitalismo ha creado patro-
                                               nes sociales de acceso a la información que han reconfigurando la
                                               gestión del conocimiento afectando a: las instituciones educativas;
                                               el rol de los distribuidores e intermediarios en la economía, espe-
                                               cialmente en la industria cultural; la comunicación de uno a muchos
                                               en los medios masivos; una Internet que pasó de ser un portal de in-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               formación a un medio de comunicación bottom-up, la investigación
                                               y comunicación científica; etc. Estos patrones ya se han integrado
                                               definitivamente en una sociedad que avanza hacia otra nueva evo-
                                               lución tecnológica que denomino provisoriamente postdigitalismo.

                                                  A través de este trabajo, intento escapar al lugar común del dis-
                                               curso de la revolución tecnológica y sus generalizaciones y centrar-
                                               me en las fases evolutivas cada vez más cortas y focalizadas y en
                                               el nuevo argot que busca su espacio en el ecosistema semántico.
                                               En este sentido el principal término que se ve afectado por esta
                                               constante evolución es precisamente el digitalismo. Aunque se trate
                                               de un concepto inexistente en el mundo científico anglosajón, ha
                                               resultado más útil en la economía, en la sociología y en la pren-
                                               sa. Se puede rastrear su origen en 1948, con la publicación de un
22
                                               trabajo esencial en el desarrollo de las ciencias de la información:
                                               el artículo “A Mathematical Theory of Communication”, de Claude
geekonomía




                                               Shannon. Ese nuevo enfoque sobre los flujos de información como
                                               un valor objetivo y medible de una serie de bits (dígitos binarios),
                                               creó una clara diferenciación entre la información analógica y la
                                               digital. El trabajo de Shannon mostraba que la información se podía
                                               medir como un flujo a través de su digitalización. Esto suponía un
                                               paso adelante en la medición de la comunicación humana y de la
                                               información generada en la naturaleza. La codificación digital hizo
                                               más eficiente el procesamiento de la información, suprimiendo el
                                               ruido. La teoría de Shannon fue el punto de partida de gran parte
                                               de la transformación tecnológica de la segunda mitad del siglo xx.
                                               En el mismo año, el libro de Norbert Wiener Cybernetics: or Control
                                               and Communication in the Animal and the Machine (1948), también
                                               contribuyó a ampliar las fronteras de lo digital hacia campos de co-
                                               nocimiento que el trabajo de Shannon no incluía. Los conceptos de
                                               información y de cibernética englobaron nuevas y amplias discipli-
                                               nas como las ciencias de la información, la computación, la sistémi-
                                               ca y nuestras ciencias de la comunicación, entre otras influencias.
Por defecto memético, el concepto de digital se hizo sinónimo
de electrónico, pero la teoría de Shannon no hacía ese paralelismo.
En su trabajo, digital era sinónimo de discreto o entero. En tanto,
analógico se igualaba a continuo. Por ejemplo, el alfabeto es digital
del mismo modo que lo era el telégrafo de Gauss y Weber creado
en 1833. La medida de información de un libro impreso con sus cien
páginas es un producto discreto y sin ambigüedades, o sea, digital.
Algo similar sucede con un periódico impreso. Entonces, ¿a qué nos
referimos cuando hablamos de la digitalización de la prensa? En
ese caso, no se hace referencia al flujo de información medible que
existe en las páginas de un periódico, sino a parte del proceso téc-
nico de elaboración del hardware, o sea el proceso de impresión en
rotativa. Actualmente, la palabra digital se ha tornado muy confusa
porque quienes la utilizan no acostumbran a hacer diferencia entre
los flujos de información y las tecnologías utilizadas. Muchas veces
se abusa de ella o se utiliza incorrectamente. El proceso tradicional




                                                                         capítulo 0
de impresión a tinta es analógico, pero la información de un libro
impreso es digital. El mundo real es analógico. Pero la economía
de la información está totalmente digitalizada. Es evidente que el
término digital ha perdido capacidad de categorización. Cultura di-
                                                                          23
gital, sociedad digital, brecha digital son ideas que todos compren-
demos pero que irradian imprecisión desde dos aspectos: a) por de-




                                                                         geekonomía
masiado genéricas e inclusivas; b) porque priorizan la inclusión de
las TIC en el proceso productivo y se olvidan del origen del término
y su referencia directa a los flujos de Shannon.

   ¿Qué significa hablar de economía digital en 2010? El adjetivo
digital ha funcionado en los últimos veinte años como un sinónimo
de TIC, como una metáfora de superación tecnológica y con un sig-
nificado cultural que todos entienden pero que no es muy preciso.
Con ánimo de ordenar la confusión, Luca Mari (2000) propone que
se acote el término analógico al campo de las leyes de la física y el
término digital al campo de las leyes de la información. Así, el pano-
rama se aclara un poco más, pero en cualquier caso no nos libera de
la responsabilidad de hablar de un nuevo ciclo postdigital.

  Piscitelli (2009) afirma que hasta la irrupción de las TIC e Inter-
net vivíamos en un tiempo cíclico hiperlento que era sinónimo de
seguridad. Para Piscitelli, este comienzo de siglo es un momento
tecnológico que conduce a la indeterminación, a la contingencia
                                               radical y a la inseguridad crónica. Considero que esa turbulencia
                                               hace fascinante el análisis del presente y muy compleja su captura
                                               en conceptos e ideas fuerza perdurables. Mientras todos los que
                                               trabajábamos en el entorno de las TIC nos sentíamos cómodos ha-
                                               blando de la dicotomía analógico-digital, lo digital se convirtió en la
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               norma y el digitalismo abarcó todo el discurso tecnológico. Capriotti
                                               (2009) distingue entre dos velocidades en el fenómeno de Internet.
                                               Por un lado, los avances tecnológicos, que van introduciendo nove-
                                               dades y herramientas con un ritmo muy alto. Por otro, los cambios
                                               sociológicos de aceptación y utilización de esos avances y nuevas
                                               herramientas por parte de las personas, que es gradual y mucho
                                               más lento. En los últimos años, se ha impuesto la categoría de co-
                                               municación digital, como artilugio diferenciador para enfatizar lo
                                               nuevo. La sociedad está aún aprendiendo a utilizar las infraestruc-
                                               turas digitales. La academia analiza y enseña el digitalismo. Pero
                                               como ya he señalado, los procesos industriales de la economía de
                                               la información son ahora exclusivamente digitales y el término irra-
                                               dia ambigüedad. Si todos los flujos de información generados en el
                                               espacio de las TIC son digitales, ¿por qué aún se hace énfasis en tal
24
                                               condición?
geekonomía




                                                  Con vocación de meme pero a sabiendas de cierta precariedad
                                               conceptual, quizá sea hora de inaugurar la segunda década del siglo
                                               xxi dando la bienvenida al postdigitalismo. La economía postdigital
                                               se define por la ubicuidad de los flujos digitales en las transacciones
                                               informacionales. Pero antes de ser objeto de cuestión por apresu-
                                               rarme a definir una nueva fase de la sociedad red que con precisión
                                               analizó Manuel Castells (1996), enfatizo en la observación de Csiks-
                                               zentmihalyi (1996) cuando decía que “en las ciencias sociales las
                                               afirmaciones no suelen ser ni verdaderas ni falsas; tan sólo declaran
                                               superioridad estadística de una hipótesis sobre otra”. Somos acto-
                                               res exclusivos de nuestro tiempo y debemos ser precisos en definir-
                                               lo, sin pesadas herencias conceptuales del pasado. En 1881 Thomas
                                               Edison viajó a París para mostrar su red eléctrica a la International
                                               Exposition of Electricity. ¿Se imaginan una exposición sobre la elec-
                                               tricidad en la segunda mitad del siglo xx? De la misma manera que
                                               los congresos sobre Internet se multiplicaron en los últimos quince
                                               años desde la invención de la World Wide Web, hoy pierden fuerza
por inconsistentes y demasiado vagos temáticamente hablando. En
la economía de la información del siglo xxi todos los flujos son digi-
tales y suceden en Internet. En consecuencia, no habrá una cultura
digital, ni tecnologías digitales. Que este texto sirva para alertar al
lector sobre este cambio. Todas las conversaciones que se divulgan
desde estas páginas ponen énfasis en describir parte de las precon-
diciones que son punto de partida de esta nueva fase que, reitero,
provisionalmente denomino postdigitalismo.

Vivir en la geekonomía.
Los mediadores del siglo xxi

   El rol de los geeks en la economía no es nuevo. Su actuación más
espectacular fue a partir de la década de 1980 en Estados Unidos
reconfigurando su macroeconomía de la mano de las TIC. Los geeks
fueron los actores principales en la construcción de la sociedad digi-




                                                                          capítulo 0
tal y continuarán brillando en el postdigitalismo. Aptos técnicamen-
te, se trata de una élite que está rediseñando nuestra percepción
del mundo desde hace cuatro décadas. Suelen ser también los más
relevantes early adopters de la mayoría de tecnologías y sus princi-
                                                                           25
pales beta testers. Ellos configuran el mundo en el que viven según
sus necesidades. Como se explicó en la definición de postdigitalis-




                                                                          geekonomía
mo, hasta la irrupción de la Teoría Matemática de la Información,
estos actores sociales estaban condenados al ostracismo, porque
su conocimiento no era relevante para la vida de la mayoría de los
mortales. A posteriori, cuando la computación evolucionó hacia su
masificación, los geeks comenzaron a adoptar un decisivo rol tecno-
social. Hace cuarenta años, era muy difícil volverse un programador
porque no había suficiente hardware disponible y el que había era
muy costoso de utilizar y no estaba accesible a cualquier estudiante
para practicar el método de ensayo y error. Su uso estaba limitado a
muy pocos científicos e ingenieros. Pero hoy, son los geeks quienes
a su modo rediseñan la economía convirtiéndola en geekonomía. A
su vez son ellos quienes configuran los formatos de nuestras rela-
ciones personales. Desde la irrupción de Internet y la computación
personal, los geeks son los nuevos escribas del mundo, capaces de
crear los instrumentos que utilizan, o apropiarse de manera espe-
cial de los ya creados. Ellos configuran y la sociedad consume. Al
comienzo del nuevo siglo, son los geeks quienes están al frente del
capitalismo. La geekonomía se hace fuerte en la construcción de las
                                               redes, y su clase social dominante, la netocracia, ocupa los lugares
                                               más relevantes en la economía globalizada, desplazando a políticos
                                               y burócratas.

                                                  En tanto el poder es diseñado desde la construcción de signi-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               ficado en la opinión pública, el rol de la netocracia es central en
                                               la sociedad de la información. En su excelente tratado sociológico
                                               sobre la comunicación y el poder, Castells (2009) considera que el
                                               poder no es un atributo, sino una relación que se construye en los
                                               procesos comunicacionales y en la mente de los individuos. Por eso
                                               es tan importante el rol de mediación de geeks y netócratas como
                                               influenciadores. Castells afirma: “el poder se basa en el control de la
                                               comunicación y la información. Ya sea el macropoder del Estado y
                                               de los grupos de comunicación o el micropoder de todo tipo de or-
                                               ganizaciones. (...) El poder depende del control de la comunicación.
                                               El contrapoder de romper dicho control”. Para Castells, el Estado
                                               es sólo un nodo más –uno importante– de la red social. Pero este
                                               nodo se solapa con otros de igual o mayor relevancia para la cons-
                                               trucción de las relaciones de poder dentro del imaginario social.
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                                               En ese sentido, el nodo institucional ha perdido jerarquía en detri-
                                               mento de las múltiples redes ciudadanas, muchas de ellas globales,
geekonomía




                                               conformadas por los netócratas en función de sus intereses. Lo más
                                               relevante es la capacidad de reconfiguración de estas redes, en fun-
                                               ción de las necesidades de sus constructores. Según Castells: “las
                                               redes están programadas y pueden autoconfigurarse en una bús-
                                               queda interminable de disposiciones de red más eficientes”. Lo más
                                               relevante del trabajo de Castells sobre la comunicación y el poder
                                               es su explicación de por qué las redes institucionales eran las do-
                                               minantes hasta la irrupción de las TIC. Otras redes eran ineficaces y
                                               lentas para crear nuevos nodos. El surgimiento de las TIC expandió
                                               todas las potencialidades de las redes no burocráticas y modificó el
                                               panorama del poder, sobre todo a partir de la década de 1990 con
                                               la masificación de Internet: “La superioridad histórica de las organi-
                                               zaciones verticales jerárquicas sobre las redes horizontales se debe
                                               a que las organizaciones sociales en red tenían límites materiales
                                               que vencer, fundamentalmente en relación con la tecnología dispo-
                                               nible. La fuerza de las redes radica en su flexibilidad, adaptabilidad
                                               y capacidad de autorreconfiguración. (…) Las estructuras verticales
pequeñas eran más eficientes como red en la era preelectrónica de
comunicación.”

   En su famoso artículo “Spacewar” (Rolling Stone Magazine, di-
ciembre de 1972), el ultra-geek Stewart Brand vaticinaba que las
personas utilizarían sus computadoras para escapar del control de
los planificadores de la sociedad y liberarlos de sus roles predeter-
minados y de la rutina. En la línea tecnoutópica del posterior y míti-
co anuncio del lanzamiento del Macintosh en 1984, Brand daba un
enorme valor al rol social de los ordenadores y las TIC en la libera-
ción de los ciudadanos del aparato del Estado. Y algo de esto suce-
dió, aunque con matices y una mayor complejidad que el discurso
optimista de la era pre-Internet. Una nueva clase socioeconómica
comenzaría a ocupar su espacio modificando la relación del acceso
y la distribución de la información entre los ciudadanos y sus insti-
tuciones. Esta clase fue la netocracia.




                                                                         capítulo 0
   La netocracia tiene a su servicio redes de eficiencias muy dis-
pares. Como programadores de las redes, no tienen en cuenta la
configuración institucional ni las fronteras de los Estados-naciones,
                                                                          27
afectando aún más el poder de las burocracias y la política. Geeks
y netócratas (muchas veces son lo mismo) constituyen la élite tec-




                                                                         geekonomía
nocognitiva que ocupa los espacios de poder digital (Soderqvist y
Bard, 2003), que el sistema democrático (políticos y administrado-
res) no alcanza por una cuestión de incapacidad y de una pobre
formación técnica. En este sentido, Xavier Roig (2008) se pregunta
cuántos empleados de las administraciones públicas se dedican a
velar por el bienestar y la libertad de los ciudadanos y no por sus
intereses corporativos o por el de los partidos políticos que les han
colocado en esa función. Roig cuestiona el excesivo protagonismo
que la administración pública está adquiriendo en las democracias
del Estado de bienestar. Además, ni el sistema de premios y castigos
ni las inclemencias del mercado afectan a dicha burocracia, mien-
tras sí lo hacen con los emprendedores y los trabajadores del sector
privado. La consecuencia de esta incompetencia que describe Roig
hace que sean los netócratas quienes construyen el verdadero dis-
curso público y presionan a los representantes de la democracia,
otorgándoles o quitándoles espacio conforme a sus intereses. Son
los dueños de las redes y las grandes empresas de tecnología y co-
municación. Mayoritariamente los nuevos intermediarios y no todas
                                               las corporaciones mediáticas del siglo xx: gatekeepers, propietarios
                                               de medios e intermediarios de la cultura digital, dueños de empre-
                                               sas tecnológicas, creadores y administradores de redes privadas y
                                               públicas, emprendedores de compañías 2.0, etc. Los mediadores del
                                               siglo xxi. Según Benkler (2006), la transformación viene dada por el
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               paso de una esfera pública dominada por los medios masivos a una
                                               esfera pública en red arbitrada por los ciudadanos. La netocracia es
                                               una clase pragmática y sus partidarios no pretenden involucrarse en
                                               estructuras políticas, porque no necesitan de esta lógica para cons-
                                               truir poder. Como ya señalé, ellos diseñan plataformas a su medida
                                               y adaptadas a sus fines. Los netócratas trabajan en la geekonomía
                                               contribuyendo con sus redes a la creación de un caos espontáneo
                                               emergente que infravalora aún más a la democracia representativa y
                                               a sus burócratas. En esa lucha de poder “las burocracias son reticen-
                                               tes a utilizar tecnología en red que suponga compartir sus prácticas
                                               y pueda poner en peligro su capacidad para conservar el control
                                               sobre sus atribuciones” (Castells, 2009). Pero en la geekonomía, el
                                               poder no lo tiene quien gobierna las instituciones o los países, sino
                                               quien domina la relación entre las redes y tiene mayor capacidad
28
                                               para reconfigurar una red dada y adaptarla con flexibilidad a sus
                                               intereses. Por último, un rasgo de poder esencial de la netocracia
geekonomía




                                               es el control de los nodos más grandes o hubs y la capacidad de no
                                               depender de otros nodos más pequeños.

                                                  Al margen del sistema político tradicional, estas redes netocrá-
                                               ticas poseen estrategias muy variadas. Una de ellas es el formato
                                               de la arquitectura y administración de las redes, que condicionan
                                               su funcionamiento. Otra es el diseño de la Web social que gestio-
                                               na la conversación social al margen de los canales institucionales.
                                               Una tercera estrategia es el ciberactivismo. Ugarte (2008) lo define
                                               como una acción “que persigue el cambio de la agenda pública, la
                                               inclusión de un nuevo tema en el orden del día de la gran discusión
                                               social, mediante la difusión de un determinado mensaje y su pro-
                                               pagación a través del boca a boca y multiplicado por los medios de
                                               comunicación y la publicación electrónica personal”. Es una acción
                                               más de lo que Rheingold (2002) denominó multitudes inteligentes.
                                               Lo más relevante de los netócratas es que se han infiltrado definiti-
                                               vamente en las estructuras creadas por la burocracia para gestionar
el aparato del Estado. Ugarte (2008) agrega que “todos somos po-
tencialmente ciberactivistas (…) estamos tan acostumbrados a vivir
en redes de poder descentralizadas, que confundimos la organiza-
ción de la representación con la organización de la acción colectiva.
La perversión de la descentralización ha llegado a tal punto que la
democracia se ha convertido en un sinónimo de elección de repre-
sentantes, es decir de nodos filtro”.

    La diferencia de productividad y eficiencia entre las redes neto-
cráticas en la geekonomía y las redes democráticas de la economía
industrial es hoy transparente, pero no siempre fue así. Después de
décadas de promesas, el e-government ha resultado en un estado
poco evolucionado de las redes tecnológicas. Por su altísimo coste
y la necesidad de ser utilizadas con la mayor productividad posible,
las computadoras de la fase mainstream eran institucionales y per-
tenecían a los gobiernos. Por eso, mediante sus recursos financieros




                                                                         capítulo 0
públicos, las instituciones del Estado han tenido la oportunidad de
actuar haciendo frente al poder de los primeros netócratas. Sin em-
bargo, la administración electrónica ha resultado en costosas pla-
taformas de comunicación vertical, de escaso valor social y poco
                                                                          29
orientadas a la participación ciudadana. Pero los comienzos del e-
government fueron más alentadores. En 1989 en Santa Mónica, Ca-




                                                                         geekonomía
lifornia, se creó PEN, el primer boletín electrónico con sala de chat
de una administración pública local en el mundo (Losh, 2009), un
temprano intento de construir una ciudad digital, anterior incluso a
la famosa experiencia de Amsterdam. Veinte años después, desde
1989 al Team Obama (FastCompany designó así a la campaña presi-
dencial de Barack Obama en la Web social; según la revista, el Team
Obama fue la empresa más innovadora de 2008), la conversación de
la esfera pública gubernamental ha sido transformada, pero no por
vocación de la propia administración, sino por cuenta y obra de los
emprendedores web, los diseñadores de interfaces y los programa-
dores, o sea por parte de la netocracia. Estos actores transversales y
ajenos a la lógica del gobierno de turno, aportaron un carácter me-
nos burocrático a dicha reconfiguración y, una vez más, trasladaron
parte del poder público a la sociedad civil y a las empresas. Se trató
de una señal de las profundas limitaciones que las administraciones
públicas tuvieron para adaptarse a la sociedad de la información y
la incapacidad de sus recursos humanos para crear valor comunita-
rio en la gestión de la información pública. Si bien es cierto que en
                                               los tiempos pre-Netscape investigadores y universidades compar-
                                               tían la Red con los gestores públicos, estos últimos se han quedado
                                               rezagados como desarrolladores y han cedido el protagonismo a la
                                               iniciativa privada, conformando la geekonomía. Una de las mayores
                                               virtudes de Internet es el empowerment y la posibilidad de ofrecer
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               una coordinación pública descentralizada. Sin embargo, la pseudo-
                                               interactividad de las plataformas web gubernamentales dificulta la
                                               innovación de prácticas sociales de carácter público, como veremos
                                               en el capítulo 5 con los modélicos ejemplos de innovación social
                                               colaborativa dirigida por entidades privadas en Estados Unidos.

                                                  Me atrae la idea de un sistema operativo cultural que mejore tan-
                                               to la participación ciudadana como la de los grupos creados con
                                               fines específicos. Este sistema ha logrado influir notoriamente en
                                               la retórica del discurso tecnológico cotidiano a través del rol de la
                                               netocracia, pero ha tenido escasa influencia en las instituciones del
                                               Estado. El caso es que fue la netocracia de la mano de los geeks, y
                                               no las instituciones, la que definió la retórica digital y las conven-
                                               ciones de sus géneros, como el uso de las redes distribuidas o el
30
                                               hipertexto. Esta organización de la cosa pública no es un asunto
                                               menor. Desde siempre, gobiernos y medios organizaron la informa-
geekonomía




                                               ción de manera centralizada y la distribuyeron acorde con sus inte-
                                               reses. Pero uno de los grandes cambios que aporta Internet es la
                                               descentralización de la información pública. La propia constitución
                                               técnica de la Red facilita que los ciudadanos se organicen sin tutelas
                                               políticas. Cada vez más la innovación social requiere de redes bien
                                               diseñadas y neutrales que favorezcan la solución de problemas de
                                               forma más eficiente que la que proponen las instituciones verticales
                                               tradicionales. Los costes decrecientes del alojamiento en la nube,
                                               el acceso a Internet ubicuo, el abaratamiento de los dispositivos y
                                               la masificación del consumo de las redes sociales harán posible un
                                               total recall system en las instituciones. Aún no se puede precisar si
                                               este sistema de reconfiguración permanente contribuirá a quebrar
                                               la espiral de ineficiencia a la que nos tienen acostumbradas ciertas
                                               organizaciones. Este debate se presenta en varios pasajes del libro a
                                               través de los mediadores que iré analizando de forma diferenciada
                                               en cada capítulo.
Al interior de “Geekonomía. Un radar para producir
en el postdigitalismo”
   Una vez definidos geekonomía y postdigitalismo, los dos térmi-
nos que de forma transversal recorren todo este trabajo, puedo in-
troducirlos en los contenidos del libro.

   En el capítulo 1 se trabaja sobre un componente común de la
economía de Internet: la reconfiguración de viejos formatos, la apa-
rición de nuevas lógicas narrativas, industriales y legales, así como
la existencia de nuevos paradigmas relacionales. En esta primera
parte, el guión gira sobre tres ejes: 1) profundiza en términos como
copyleft y piratería y en sus teorías complementarias. En estos pá-
rrafos se cuestiona el discurso oficial de los intermediarios y los dis-
tribuidores culturales del siglo xx que se empeñan en criminalizar
a una gran parte de los usuarios de la Red sólo para mantener el
control de una industria que solía operar bajo la filosofía de la esca-




                                                                           capítulo 0
sez; 2) enfatiza sobre la creciente relevancia del cloud computing, el
espacio virtual remoto donde se alojan los datos en la Red y cómo
su trascendencia modificará las prácticas industriales de gestión de
la información y el consumo y acceso a los datos de los ciudadanos;
                                                                            31
3) convoca a la construcción de esferas personales de identidad en
la Red bajo una comunicación distribuida, para evitar el riesgo de




                                                                           geekonomía
caer en la invisibilidad.

   Las ideas clave del primer eje son: Creative Commons, crisis de
los gatekeepers, criminalización de los usuarios, innovación en la
intermediación, peer to peer ilegal versus streaming legal, gratuidad
y pago como modelos de negocio complementarios, filosofía del
remix, cultura DIY, ética hacker, empowerment, socialismo digital y
transmedia storytelling. Los conceptos clave alrededor del texto so-
bre el cloud computing son: memoria digital, megaservidores, ex-
ternalización de las TIC, ahorro de costes en infraestructuras, foco
en el negocio central y economía de las intenciones. Finalmente, las
palabras clave en torno a las me-spheres son: egocasting, mercado
como conversaciones, invisibilidad, falsa escasez, estrategia distri-
buida y conectividad a través de nichos.

  El capítulo 2 es un estudio de caso que hace un zoom en el pre-
sente de las revistas científicas y cuestiona el statu quo papirocén-
trico de las editoriales profesionales. El panorama diferente en la
                                               geekonomía es que journals científicos más desintermediación de-
                                               rivan en open access journals, un nuevo formato de la comunicación
                                               científica que, sin afectar la imprescindible revisión entre pares, no
                                               daña de forma tan pronunciada a los recursos financieros de las uni-
                                               versidades y permite privilegiar la calidad de los textos y los autores
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               sobre el prestigio de las publicaciones. Este breve capítulo funciona
                                               como un conector entre la crisis del rol de la intermediación mediá-
                                               tica tradicional del capítulo 1 y el presente de la Web social y sus
                                               plataformas colaborativas analizados en el capítulo 3. También se
                                               puede enlazar directamente con el capítulo 4, donde se observa la
                                               situación de la universidad y sus actores en esta primera década del
                                               siglo xxi. Los conceptos clave del capítulo 2 son: Science Commons,
                                               reputación del texto y no de la revista, gratuidad de acceso y diver-
                                               sidad nacional de los investigadores.

                                                  En el capítulo 3 se analiza la cambiante geografía del planeta
                                               Web 2.0 haciendo foco en el presente de la escritura colaborativa
                                               en Internet, su faceta identitaria y sus nuevas potencialidades de
                                               negocio. También se deconstruyen algunas aplicaciones exitosas.
32
                                               Por último, me sumo a la polémica sobre la crisis del formato blog.
                                               La Web social está en constante evolución y sus características no
geekonomía




                                               son las mismas que las descritas junto a Cristóbal Cobo a finales de
                                               2007. Por eso, este capítulo se puede leer como un bonus track a la
                                               lectura de Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food.

                                                  Las nociones del capítulo 3 se dividen según sus secciones. En
                                               la introducción, los conceptos centrales son: arquitectura de plata-
                                               formas distribuidas, open source, mobile web 2.0, narcisismo en la
                                               Web, atención/reciprocidad y groundswell. En el fragmento sobre
                                               Google las ideas clave son: Googlejuice, era post-desktop, monopolio
                                               meritocrático y colonización de la nube. Cuando se habla de Face-
                                               book y Twitter, los ejes argumentales son: consumo snack, identi-
                                               dades reales, comunidades de intereses, medio dominante de so-
                                               cialización, anonimato/transparencia, digitalización de la identidad,
                                               lazos sociales débiles, ciberencuentro glocal y tecnologías invisibles.
                                               Las ideas fuerza en torno al fenómeno de Craigslist son: filosofía
                                               ácrata, ilusión comunitaria posthippie y pragmatismo. Por último,
                                               en el análisis de la crisis de los blogs, los conceptos centrales son:
e-magazines, saturación y penetración en el mainstream, adjunción
preferencial, splogs, dinámica de charlatanería, redes sociales gene-
ralistas y microblogging.

   El capítulo 4 es el más extenso del libro y el que más conforme me
ha dejado. Escribir sobre la universidad iberoamericana y sus prota-
gonistas era una tarea pendiente que me debía hace mucho tiempo
y me tomé el gusto de hacerlo de forma metódica y ordenada en
este trabajo. La decisiva influencia de las TIC en la gestión del conoci-
miento universitario y en todas sus prácticas ubica a estas institucio-
nes en el postdigitalismo y las obliga a adoptar una posición hacia el
liderazgo social o a permanecer intactas como marcas blancas distri-
buidoras de títulos oficiales. Profesores, alumnos y administradores
tienen el mismo peso de la responsabilidad en esa transformación.
No se trata de creer que son los estudiantes de esta primera década
del siglo xxi un sector tecnológicamente avanzado al que hay que




                                                                            capítulo 0
seguir a ciegas y al cual los demás actores deberíamos adaptarnos.

   Las nociones clave en la introducción sobre las universidades del
siglo xxi son: marcas blancas, crisis de interfaces y métodos de apren-
                                                                             33
dizaje, perpetuación del poder preconcebido, proletarización de la
docencia, fin del monopolio de la acreditación, rotura del vínculo




                                                                            geekonomía
entre los usuarios y la institución, OpenCourseWare, equilibrio entre
gratuidad y escasez, edupunk, desintermediación, aprendizaje pro-
fundo y universidad-hotel versus universidad-laboratorio. En el párra-
fo sobre los nativos digitales, las palabras clave son: millennials, mito
de la productividad, signos de un tiempo, smart spots, dispersión a
través del multitasking, comunitarismo autista e information literacy.
En el texto en el que se analiza el rol de los estudiantes, las ideas
centrales son: connective knowledge, aprender a olvidar, currículum
en la Red, identidades mosaico, intertextualidad, aprendizaje auto-
didacta, colateral y durante toda la vida, blended learning, combate a
la cultura de la queja, conocimiento volátil, tolerancia a la ambigüe-
dad y nomadismo. En cuanto a los profesores, los conceptos clave
son: tutorización frente a divulgación de contenidos, conocimiento
construido y no recibido, nuevos modelos mentales, evitar los moti-
vadores arbitrarios, trabajo en beta, lucha contra la entropía, polial-
fabetización, producción contra la invisibilidad, rotura de territorios
preconcebidos, meritocracia sin endogamia, educación estudiante-
céntrica y funky research. Por último, en el subcapítulo dedicado a las
                                               aplicaciones de educación abierta, las palabras clave son: intérpretes
                                               y sintetizadores, e-competencias, apertura de plataformas, megacam-
                                               pus y colaboratorios.

                                                  El capítulo 5 conecta con el anterior y profundiza en el discurso
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               público de la investigación más desarrollo más innovación tecno-
                                               lógica (I+D+I) y compara dos ecosistemas disímiles, Silicon Valley
                                               como un entorno significativo que sirve de referencia mundial, y Es-
                                               paña como un entorno voluntarista, que –a pesar de no poseer una
                                               posición degradada a nivel mundial en cuanto a la I+D+I– requiere
                                               de un esfuerzo mayor de sus actores estratégicos para no perder
                                               competitividad.

                                                  Los ejes para analizar Silicon Valley son: innovación dirigida por
                                               los usuarios, changemakers, cultura del riesgo empresarial, olas
                                               de innovación, desagregación de empresas, valoración del fraca-
                                               so, investigación de élite, captación mundial de recursos humanos,
                                               trabajadores fundadores, reconstrucción y rediseño permanente e
                                               inyección de capital riesgo. Las ideas clave para analizar la I+D+I en
34
                                               España son: voluntarismo, escaso esfuerzo financiero público-priva-
                                               do, ausencia de la banca privada en el capital riesgo, baja inversión
geekonomía




                                               educativa, especulación financiera, pocos doctores en el tejido em-
                                               presarial y precarias recompensas institucionales.

                                                  Para simplificar su lectura y hacerla más amena, la producción
                                               textual de este libro estará acompañada con contenidos multime-
                                               dia, infografías, una oferta de lecturas básicas accesible en forma
                                               gratuita en la red, las nociones centrales de cada capítulo, un deli-
                                               cious.com/geekonomia con los principales enlaces externos, entre
                                               otros complementos. Todos estos contenidos extras se producen
                                               con el objetivo de que los lectores y la comunidad docente puedan
                                               utilizar este trabajo con fines pedagógicos. El uso docente es uno de
                                               los objetivos principales de Transmedia XXI, la nueva colección que
                                               lanza Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona junto al
                                               Laboratori de Mitjans Interactius (LMI). El trabajo introductorio de
                                               esta nueva colección es precisamente este Geekonomía.
Me gusta reseñar libros. Lo hago habitualmente en digitalismo.com,
el blog que hacemos con Carlos Scolari desde 2005. Si tuviera que re-
señar mi propio trabajo diría que este libro no se preocupa demasia-
do por las definiciones hegemónicas. En Geekonomía me inclino por
un pensamiento divergente, paradójico, flexible. No existe un único
argumento. Es como un libro de breves ensayos de diferentes auto-
res, pero con una historia central que permite recorrerlo en forma
hipertextual. Su principal vocación es dar pistas e incitar al lector a
realizar nuevas lecturas y aprender o repensar algunas nociones de
la economía de Internet. Como un early observant, quiero compartir
una gran cantidad de lecturas que hice en el último semestre y dar
pistas para que cada uno de vosotros pueda ampliar estas lecturas en
función de sus intereses. Espero poder cumplir con ese objetivo.




  ¡Gracias por estar inmerso en estas páginas!




                                                                          capítulo 0
                                              Hugo Pardo Kuklinski
                                                                           35
                                          Entre Palo Alto y Barcelona
                                         Agosto a diciembre de 2009




                                                                          geekonomía
Recursos extras

                                               El uso docente es uno de los objetivos principales de este libro y de
                                               la Col·lecció Transmedia XXI. Por esto se han creado varios recursos,
                                               enlaces útiles y resúmenes de capítulos para que el lector pueda
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               interactuar con las líneas argumentales que se proponen.

                                               Marcadores de Geekonomía en línea:
                                               http://delicious.com/geekonomia

                                               Canal Geekonomía en YouTube:
                                               www.youtube.com/user/Geekonomia

                                               Ideas principales y recursos en la Web al final de cada capítulo.

                                               blog:
                                               www.digitalismo.com

                                               Hugo Pardo Kuklinski en Twitter:
36
                                               http://twitter.com/Hugo_pardo
geekonomía




                                               Hugo Pardo Kuklinski en Facebook:
                                               www.facebook.com/people/Hugo-Pardo-Kuklinski/622651888

                                               Skype:
                                               callto:hugo.pardo

                                               e-mail:
                                               hugo.pardo@lmi.ub.es
capítulo 1
Capítulo 1
                     37

Sobre buzzwords


                    geekonomía
y conceptos marco
de la geekonomía
En este capítulo se verán tres de las principales
                                               transformaciones que está sufriendo de forma
                                               irreversible la economía de la información. Se tra-
                                               ta de cambios que afectan al ecosistema postdigital de la industria
                                               cultural, a las relaciones laborales y personales y a la gestión del
                                               conocimiento social en la Red. Estos cambios tienen una matriz co-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               mún: la reconfiguración de viejos formatos, la aparición de nuevas
                                               lógicas narrativas e industriales y la existencia de nuevos paradig-
                                               mas relacionales. No se trata de una foto fija, pero, como señalo
                                               en la introducción, tampoco hablaré de fenómenos revolucionarios
                                               para darme aires generacionales de exclusividad. Simplemente es
                                               un análisis de cambios que seguirán sucediendo, para fortuna de
                                               aquellos a los que nos seduce observar y analizar las transformacio-
                                               nes sociales producidas por la constante irrupción de nuevas tecno-
                                               logías. Divido el capítulo en tres grandes ejes:



                                               Concepto 1. La caducidad del copyright y el dilema pirata.
                                               Concepto 2. El cloud computing como la memoria ubicua
                                                             de la sociedad.
38
                                               Concepto 3. Vivir distribuidos en las me-spheres o morir invisibles.
                                                  	
geekonomía




                                                  Ya que resulta muy arriesgado hacer predicciones relacionadas
                                               con la evolución de las TIC más allá del corto plazo, en este capítulo
                                               me refiero indistintamente a buzzwords o conceptos marco. Hago
                                               esta aclaración ya que las palabras de moda pueden perder presen-
                                               cia o bien terminar transformándose en memes, y posteriormente
                                               en tendencias profundas de la geekonomía. Esto ya no es mi res-
                                               ponsabilidad y será resuelto por la superioridad estadística de las
                                               hipótesis a la que hice referencia en la introducción.

                                               1. La caducidad del copyright y el dilema pirata

                                                  ¿Tiene el modelo de copyright fecha de caducidad? Es difícil saber-
                                               lo, pero existen claros indicios de que la presión de sectores civiles
                                               en favor de leyes de la propiedad intelectual y los derechos de autor
                                               más flexibles y permisivos hacia el consumidor se ha convertido en
                                               una batalla política, especialmente en Europa y Estados Unidos.1 El
                                               debate está abierto y seguramente desembocará en la transforma-
ción de una legislación que se inició hace trescientos años con la
primera ley de copyright en 1709.2 El beneficio de un cambio legal
sería notable para los principales protagonistas del acto cultural de
compartir conocimiento: los creadores y los usuarios. Los primeros
se verían beneficiados por un sistema de distribución mucho más
visible, eficiente y económico. En tanto los usuarios tendrían acceso
a una mayor libertad de elección a menor coste, sin los condiciona-
mientos de gatekeepers y distribuidores. Los principales perjudica-
dos por una posible transformación legal del copyright son los in-
termediarios culturales del siglo xx, la industria que ha sido la más
afectada desde la masificación de Internet en la década de 1990. En
un entorno donde los costes de producir, distribuir y autopromo-
cionarse tienden a cero, ya no existen grandes motivos para que un
creador ceda a los distribuidores los derechos de su obra y la mayor
parte de sus futuras ganancias.3
   	




                                                                         capítulo 1
   Vale decir que esta posible transformación legal no sería un ata-
que a la filosofía original del copyright. Como bien señala Bollier
(2008), la primera justificación de la creación del copyright no fue
proteger el dinero de los autores y mucho menos el de los distribui-
                                                                          39
dores, sino promover la recompensa económica de la creatividad ar-
tística y la innovación. El problema comienza con la política abusiva




                                                                         geekonomía
de las corporaciones intermediarias de medios que han desfigurado
dicha filosofía utilizando su poder económico para ejercer presión
en los estamentos políticos de Estados Unidos. Así, extendieron sus
privilegios más allá de los términos originales, afectando con ello al
interés general. Según Bollier, los términos del copyright fueron am-
pliados once veces desde 1961 y hoy representan un beneficio mo-
nopólico para las corporaciones (y la economía norteamericana)4
de noventa y cinco años de derechos desde la muerte del autor.
Bollier señala: “A limited monopoly granted by the U.S. Constitution
has morphed into an expansive, near-perpetual monopoly, enforced
by intrusive technologies and draconian penalties”. Sin embargo, los
orígenes del copyright no fueron tan conflictivos. Los problemas co-
menzaron con la revisión de la ley de 1976 en Estados Unidos y
posteriormente con la digitalización del proceso productivo y el sur-
gimiento de la Web. La digitalización e Internet se convirtieron en
grandes dinamizadores de la creación y distribución de contenidos.
Antes de 1978, toda obra era por defecto de dominio público. Pero a
partir de ese momento se invirtió la lógica y una obra artística, cul-
                                               tural o científica, poseería derechos de copyright desde el momento
                                               de su creación. Las licencias Creative Commons y la creación del co-
                                               pyleft, introducidas a fines de 2002 en Estados Unidos, otorgaron un
                                               marco jurídico más apropiado al uso y distribución de las obras. A
                                               partir de entonces, cientos de colaboradores en Creative Commons
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               International adaptaron esas licencias a más de cincuenta países. Y
                                               el proceso continúa.

                                                  Comienzo redefiniendo la piratería. Normalmente se denomina
                                               piratas a aquellos consumidores que violan las leyes de copyright
                                               propagando masivamente o copiando a otra persona un documen-
                                               to con propiedad intelectual, sin pagar por ello o sin obtener permi-
                                               so del autor de la obra. Esta definición no da margen a matices. La
                                               piratería cultural se ha ganado su desprestigio a fuerza de presión
                                               mediática y política e inversión publicitaria de la industria de la in-
                                               termediación. Compartir es una forma más precisa de denominar a
                                               una actividad que millones de usuarios realizan sin fines de lucro.
                                               En tanto, una minoría que se lucra con la propiedad intelectual (el
                                               negocio del top manta, por ejemplo) desprestigia a la mayoría de
40
                                               consumidores que sólo descargan contenidos en plataformas ilega-
                                               les para disfrute personal. La industria de la intermediación es la
geekonomía




                                               que impulsa el modelo del copyright con mayor presión, diseñando
                                               barreras legales y técnicas para dificultar el acceso a la información
                                               digital. Todo ello con el propósito de que compartir un archivo no
                                               resulte atractivo ni sencillo. Pero la batalla está perdida de antema-
                                               no porque se les hace muy difícil controlar el enorme mercado de la
                                               distribución que significa Internet. Además, constantemente surgen
                                               nuevos actores que a través de tecnologías disruptivas logran trans-
                                               formar y posibilitar el acceso de los consumidores a una infinidad de
                                               productos culturales. Cuantas más barreras diseñan los distribuido-
                                               res tradicionales, más facilidades ofrecen estos actores emergentes.
                                               La productividad del software BitTorrent es un ejemplo de ello. Tal
                                               como la experiencia de Napster nos enseñó, mientras la justicia se
                                               demora en penalizar a un desarrollador peer to peer, se crean otras
                                               plataformas con un servicio más eficiente y capaces de aprender
                                               de los errores y resquicios legales del pasado. La Recording Industry
                                               Association of America (RIAA) atacó a Napster en sus escasos dos
                                               años de existencia (1999-2001) y consiguió popularizarlo aún más
y luego sólo matar al mensajero. En el período que duró la primera
fase del litigio contra Napster, la publicidad resultante en los medios
duplicó el número de usuarios y la cantidad de archivos descargados
de la aplicación.5 Además provocó una mayor popularidad para los
canales peer to peer, así como la aparición de una decena de nuevos
actores con innovadoras y diversificadas estrategias para evitar ser
llevados a los tribunales. Hubo un paso hacia delante. Gnutella, Ka-
zaa y otros post-Napster fueron plataformas diseñadas en forma de
redes dispersas. Dada su estructura descentralizada no pudieron ser
desconectadas y sobrevivieron hasta hoy al ataque de la industria
de la música (Bunz, 2007). Aunque no se trataba de un servicio des-
centralizado ni peer to peer, uno de los ganadores de esta contienda
fue Apple con su iTunes, comprendiendo el tipo de consumo que
realizaban los usuarios y moviéndose en esa dirección aportando
legalidad. Tuomi (2002) habla de innovación usuario-céntrica y no
objeto-céntrica. Según Tuomi, son los usuarios quienes reinventan y




                                                                          capítulo 1
se apropian de los productos a través de sus prácticas. Así, las inno-
vaciones se vuelven tales cuando comienzan a jugar un rol de senti-
do en la práctica social. Esto es lo que ha sucedido profundamente
con el mercado de la música y en toda la industria cultural.
                                                                           41

    Precisamente son las prácticas de los usuarios las que definen que




                                                                          geekonomía
copyright y copyleft no compitan entre sí sino que se complementen,6
del mismo modo que copyright y piratería no son competencia di-
recta (O’Reilly, 2002; Anderson, 2009). En su estrategia publicitaria,
la industria de la intermediación se pregunta por qué un usuario
va a pagar por un producto que se puede descargar de Internet de
forma gratuita. Pero intencionalmente se pasa por alto que la ex-
periencia de usuario es vital para decidir una práctica de consumo.
Muchos consumidores compran libros que podrían solicitar gratis
en la biblioteca pública, o van al cine en vez de alquilar un DVD o
descargarlo de la Red. Se trata de diferentes experiencias de usua-
rios adaptadas al tipo de consumidor. Si el tiempo del usuario es muy
valioso y no tiene problemas de dinero, su opción es comprarse un
contenido en un formato tradicional y disfrutar de su calidad. Pero
si la ecuación tiempo-dinero de un usuario es inversa (o sea mucho
tiempo y poco dinero), es probable que su preferencia sea bajarse
una canción o una película de Internet. Nadie garantiza que, si no
pudiera ser descargado de la Red, el segundo perfil de consumi-
dor compraría ese producto cultural por la vía tradicional. Son dos
                                               mercados autónomos que merecen un tratamiento diferenciado, sin
                                               que ello implique criminalizar a un grupo de usuarios. Por esto la
                                               gratuidad y el pago se complementan. Ruppel Shell (2009) habla de
                                               economía bipolar: una gran parte de los consumidores buscan re-
                                               bajas, marcas blancas o gratuidad, pero hay un tipo de consumidor
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               capaz de pagar lo que sea necesario para que su experiencia sea
                                               óptima.7 Según Anderson (2009) ciertos usuarios piratean porque
                                               consideran que los precios de mercado no los decide el artista, sino
                                               el intermediario, y en general son excesivos para el valor real que,
                                               según estos consumidores, debería tener el producto. Al no haber
                                               alternativas de precio diferenciado, se opta por las descargas gra-
                                               tuitas e ilegales en sitios peer to peer. En la economía basada en
                                               bits el problema que tienen los distribuidores tradicionales no se
                                               resuelve con juicios a los usuarios, sino con estrategias innovadoras
                                               en las prácticas de distribución e intermediación. Para Anderson,
                                               esta nueva forma de gratuidad del siglo xxi8 se basa en la habilidad
                                               de reducir los costes a casi cero. El problema es que la economía de
                                               los átomos es inflacionaria, ya que mover los productos al punto
                                               de venta es cada vez más costoso. En cambio la distribución de los
42
                                               bits es deflacionaria y tiende a valer cero con la reducción de costes
                                               de hardware y software. De hecho, el comienzo de la segunda dé-
geekonomía




                                               cada del siglo xxi presenta un panorama novedoso que muestra la
                                               movilidad y constante transformación del mercado de la industria
                                               cultural: el consumo ilegal de música y vídeos vía plataformas peer
                                               to peer pierde terreno de forma considerable frente a las platafor-
                                               mas legales vía streaming, como Spotify o Hulu, entre otras. En este
                                               nuevo cambio de actitud de consumo ganan los usuarios y también
                                               la industria.

                                                  Doctorow (2008) considera que debatir sobre los derechos de
                                               autor no es exclusivamente hablar de copyright o copyleft, sino que
                                               es poner en juego el derecho constitucional de la libertad de expre-
                                               sión. Por otra parte, las corporaciones intermediarias introducen en
                                               el escenario el supuesto daño causado a los creadores presionando
                                               sobre la legislación del copyright y manipulando el debate. Pero en
                                               realidad lo que les preocupa es perder los márgenes de ganancia
                                               obtenidos de un modelo que se sabe anacrónico e ineficiente. La
                                               inquietud de los intermediarios tradicionales no responde necesa-
riamente a los intereses de los autores a quienes dicen defender y
–peor aún– no responde al interés público. Bunz (2007) señala que
para la industria de la intermediación “la juventud dejó de ser una
promesa para convertirse en una amenaza”.

    En un documento referencial sobre la piratería,9 O’Reilly (2002)
elabora lecciones asociadas con este debate. Destaco cuatro de
ellas. 1) La falta de visibilidad de una obra es para los autores un
problema mucho mayor que la piratería. O’Reilly da un ejemplo:
aproximadamente se publican cien mil libros al año sólo en Estados
Unidos. Un 10% de ellos tienen ventas significativas (y un 1% está
disponible en las grandes librerías). Para el 90% de autores restan-
tes que no logran la visibilidad de su trabajo, lo importante no es
ganar dinero con los derechos de autor, sino ser leídos y salir de
la oscuridad en la que se encuentran, producto de un modelo de
distribución que a priori los margina y los perjudica. Su esfuerzo




                                                                         capítulo 1
lo miden en visibilidad. Una situación similar se da en la industria
del cine, donde existen miles de directores y productores a nivel
mundial que no tienen una distribución aceptable de sus obras en
cartelera ni llegan a las principales salas, afectados por un modelo
                                                                          43
de distribución dominado por la producción de Hollywood. 2) La
piratería es un impuesto progresivo. A cambio de afectar a un mí-




                                                                         geekonomía
nimo porcentaje de las ganancias en los autores más vendidos, fa-
vorece la visibilidad de la mayoría de autores que en muchos casos
ni siquiera tienen la suerte de llegar a las tiendas, ni pueden inver-
tir en marketing y publicidad para lograr atención y trascendencia
mediática. 3) Como norma, y si se dan las condiciones adecuadas,
los consumidores quieren hacer las cosas correctamente. La mejor
forma de reducir la piratería es darles opciones alternativas a pre-
cios razonables. 4) Las redes peer to peer no afectan a las obras de
los artistas, sino a los distribuidores e intermediarios de las obras
de los artistas, como bien ya señalé. A pesar de que la industria de
la intermediación denuncia constantemente que la piratería daña al
creador, seguirán existiendo múltiples soportes de intermediación
rentables puesto que representan la única forma de que millones
de usuarios se interrelacionen con millones de creadores. A lo que
verdaderamente está afectando es al statu quo de la industria cul-
tural hegemónica del siglo xx que operaba bajo la filosofía de la
escasez: discográficas, editores, prensa tradicional, canales de te-
levisión, distribuidoras cinematográficas, agencias de publicidad,
                                               grandes superficies, etc. Se están creando innovadoras formas de
                                               intermediación que ocupan un lugar preponderante en la econo-
                                               mía postdgital. Como se verá en el capítulo 3, Google ha creado un
                                               modelo de negocio gratuito basado en administrar y gestionar la
                                               abundancia de información. Ello, entre otras cosas, le ha permitido
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               convertirse en el intermediario líder. Dedicaré el próximo capítulo
                                               a analizar la industria de los journals científicos como un estudio de
                                               caso de nuevos modelos de intermediación.

                                                  Más allá de la defensa de la libertad de expresión y de los intere-
                                               ses de los autores, existe un fenómeno que impulsa la distribución
                                               gratuita de contenidos y en muchos casos la piratería: la cultura DIY
                                               (do it yourself) de la mano de la inteligencia colectiva. El fenómeno
                                               está bien documentado y con teorías complementarias. Himanen
                                               (2002) se refiere a la ética hacker. Mason (2008) analiza el dilema
                                               pirata. Lessig (2008) estudia la filosofía del remix. Kelly (2009) habla
                                               del nuevo socialismo. Sunstein (2003 y 2006) teoriza sobre el pensa-
                                               miento republicano y las infotopías. Scolari (2009) trabaja el concep-
                                               to de transmedia storytelling.10 Revisaré dichas teorías.
44
                                                  	
                                                  El texto de Himanen (2002) iguala el hermetismo y la política de
geekonomía




                                               patentes de la empresa capitalista del siglo xx al silencio monaste-
                                               rial del medioevo. O la catedral y el bazar, según Raymond (2001).
                                               La falta de voluntad para distribuir las ideas colectivamente y su
                                               consecuente monopolio del conocimiento acrecentaba el poder de
                                               la Iglesia, pero afectaba al conjunto social. Himanen plantea que In-
                                               ternet no sería lo que hoy es si sus creadores hubieran fomentado la
                                               propiedad cerrada con derechos de copyright en lugar del desarrollo
                                               open source y la ética hacker. Según Himanen esta ética fomenta la
                                               apertura, el libre acceso y el reconocimiento entre pares y tiene su
                                               antecedente en el trabajo de la comunidad científica, donde cada
                                               investigación es inclusiva, parcial y se sustenta en el conocimiento
                                               previamente generado. La tarea de un investigador está destinada a
                                               ser ignorada, cuestionada, ampliada o rediseñada y es la comunidad
                                               científica la que legitima su validez y le otorga prestigio y visibili-
                                               dad. Con esta lógica se ha desarrollado Internet. Y aún continúa
                                               sustentada bajo los mismos principios.
La noción de dilema pirata de Mason (2008) va un paso adelan-
te en la ética de compartir e involucra tanto a los nativos digitales
como a otras generaciones. Mason señala que compartir los pro-
ductos culturales sin pagar licencias abusivas es un debate que no
se reduce a la última década sino que tiene un largo recorrido.11 El
autor se pregunta: ¿cómo deberíamos reaccionar ante las condicio-
nes cambiantes de nuestro entorno digital? ¿Están los denomina-
dos piratas para robarnos o para salvarnos? ¿Son un grupo al que
se debe combatir o innovadores con quienes se debería competir
con inteligencia aprendiendo de sus desarrollos y prácticas? Mason
cree que la industria cultural debería comprender las prácticas de
piratería en los jóvenes y adaptarse a su lógica de consumo. Estos
jóvenes son líderes de opinión y crean nuevos espacios de difusión
e intercambio afines a sus intereses y no tiene sentido competir
con esa práctica cultural criminalizándolos. Es empowerment que
resulta en desarrollo socioeconómico, creando nuevas empresas y




                                                                        capítulo 1
modelos industriales. Mason argumenta que la cultura DIY afecta a
los monopolios de facto, propiciando industrias independientes y
descentralizadas con menos privilegios. Esto revaloriza la economía
ya que no sólo participan las grandes corporaciones, sino actores
                                                                         45
más pequeños, como hace tiempo sucede en el negocio de la mú-
sica. El modelo de distribución vía Red se está tornando ubicuo y




                                                                        geekonomía
se mueve bajo nuevos mecanismos que ya se empiezan a percibir
como dominantes y que son completamente diferentes a los que
existieron en el siglo xx. Vale recordar experiencias de transforma-
ción de modelos de negocios originados en la cultura joven que
han surgido en la periferia, y que han sido marginales a los canales
de distribución de la época, rompiendo reglas e ignorando tradi-
ciones y viejas jerarquías comerciales, combinando altruismo con
autointerés. Movimientos como las radios piratas, la música rock, el
rhythm & blues, el jazz y el punk se originaron en esa transgresión
de los valores culturales establecidos, generando atención y nuevos
mercados para unos contenidos a priori fuera del circuito masivo de
la época. Cuando un producto cultural se vuelve cool, es absorbido
y digerido rápidamente por el mainstream y el círculo de la destruc-
ción creativa y distributiva vuelve a comenzar. Algo nuevo nacido en
un pequeño entorno se convierte en objeto de codicia de los cool-
hunters, quienes valiéndose de las técnicas del marketing lo tornan
popular, vaciándolo de transgresión.12 Mason cree que la industria
cultural es un negocio que aún no ha encontrado el equilibrio en-
                                               tre la regulación, el respeto a la propiedad intelectual y la libertad
                                               creativa para mezclar.

                                                   A la filosofía del remix se refiere Lessig (2008). El fundador de
                                               Creative Commons considera que el copyright es importante para
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               una cultura saludable, aunque el problema es que bajo estos princi-
                                               pios se desarrolla un viejo régimen que lucha contra la innovación,
                                               la creatividad y la libertad y que en alguna ocasión hasta impidió el
                                               nacimiento de nuevas industrias. El problema se agrava cuando en
                                               pos de sus beneficios económicos, las corporaciones construyen un
                                               discurso donde se califica de delincuente a toda una generación.
                                               Lessig cree que es tiempo de dejar de gastar recursos federales, po-
                                               liciales e institucionales para sancionar a unas redes de conectivi-
                                               dad extraordinariamente eficientes. Sobre todo teniendo en cuenta
                                               que ya no existe un control perfecto sobre la distribución de copias
                                               como en el siglo pasado y que en el futuro el control será aún más
                                               difícil, por no decir imposible. Una anécdota paradójica al respecto
                                               es que la mayoría de contenidos ilegales subidos a las plataformas
                                               peer to peer no proviene de compradores originales sino de actores
46
                                               del interior de la industria sin motivación extra para proteger el co-
                                               pyright de la obra durante el proceso de produccion y distribución
geekonomía




                                               de las copias. Me refiero a trabajadores de empresas de grabación
                                               en formato DVD, de productoras, de distribuidoras, etc. El argu-
                                               mento central del trabajo de Lessig es el beneficio del híbrido legal
                                               copyright/copyleft. La cultura del remix requiere de un marco legal
                                               donde se quite presión y se fomente la creatividad amateur en base
                                               a la limitación de los alcances de los derechos de autor.

                                                   Kelly (2009) traduce la cultura DIY y los productos derivados de la
                                               inteligencia colectiva y habla de un nuevo socialismo digital,13 donde
                                               la propiedad de los bienes está en manos de los trabajadores, quie-
                                               nes en este caso son los propios creadores y accionistas de las em-
                                               presas. Un provocador texto de Kevin Kelly que se atreve a reflotar
                                               la filosofía socialista y utilizarla para explicar el funcionamiento de
                                               Silicon Valley, uno de los motores del capitalismo norteamericano.
                                               Según el autor de Out of Control, el socialismo digital es un socialis-
                                               mo sin planes quinquenales ni propiedad del Estado, ni politburós,
                                               ni racionamiento y representa la más novedosa innovación, basada
en la libertad de crear, la meritocracia y el acceso libre a los produc-
tos. Kelly afirma que las aplicaciones Web 2.0 son la vanguardia de
este colectivismo social global y que la lógica comunal del consumo
en línea está siendo reconfigurado con cada nueva participación en
las redes sociales. Se podría agregar que las licencias Creative Com-
mons son el marco constitucional de este nuevo socialismo.

    Sunstein (2003 y 2006) también teoriza sobre la cultura DIY re-
firiéndose a los temores de los fundadores de la república a que
los ciudadanos observaran directamente el hecho social y pudie-
ran transgredirlo. Estos fundadores aspiraban a crear instituciones
que “filtraran” los deseos populares y garantizaran una política que
fomentara el bien público. El problema de las barreras a la circula-
ción cultural es que, cuando la información no está disponible y en
consecuencia la capacidad de decisión y las oportunidades se ven
limitadas, se corre el riesgo de que los individuos puedan acabar re-




                                                                           capítulo 1
nunciando a ellas por completo (Sunstein, 2003). Una sociedad con
productos culturales circulando libremente crea ámbitos públicos
democráticos y por ende ideológicamente diversos. Por otra parte,
también cuestiona el abusivo ciclo del copyright y el sistema de pa-
                                                                            47
tentes. Sunstein (2006) cree que el mecanismo de las patentes es útil
porque motiva a las empresas a invertir en investigación pensando




                                                                           geekonomía
en futuros dividendos. Pero a veces resulta abusivo, porque su her-
metismo y los largos plazos afectan a la innovación y al beneficio
social, propiciando que el conocimiento científico e industrial que-
de en manos de unos pocos.

   Por último, el trabajo sobre Transmedia Storytelling de Scolari
(2009) tiene aristas comunes con la cultura DIY y la filosofía del re-
mix. Para Scolari, el usuario construye su propia interpretación de un
texto complejo con multicapas y lo resignifica desde las plataformas
colaborativas o mezclando esas historias con otras que integra a su
universo cognitivo. Así, la producción de historias transmediáticas no
sólo afecta al propio contenido sino que incorpora transformaciones
en la producción y el proceso de consumo, brindando nuevas opor-
tunidades para el mercado de medios y para un tipo de consumidor
acostumbrado a un flujo multilineal de las historias. Es decir, el usua-
rio convertido en un experto cazador de información proveniente de
diversas plataformas. Scolari cree que con este tipo de estructuras se
construye un texto multicapas que necesita de una capacidad dife-
                                               rente de los usuarios para ser comprendido con nitidez.

                                               2. El cloud computing como la memoria ubicua
                                               de la sociedad14
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                                  La memoria institucional y social está siendo digitalizada en di-
                                               ferentes soportes desde hace más de dos décadas y su destino en
                                               bits no tiene punto de retorno. El componente novedoso de esta di-
                                               gitalización es el cloud computing. La nube15 permitirá hacer interco-
                                               nexiones mucho más complejas bajo una tecnología conocida como
                                               virtualización, una forma de utilizar el software que simula algunas
                                               de las atribuciones del hardware.16 Unificando dos definiciones,17 el
                                               cloud computing es “un conjunto de infraestructuras de computa-
                                               ción que utilizan la tecnología de Internet en forma masivamente
                                               escalable y administrada por terceros para alojar aplicaciones o data
                                               de usuarios finales”. Es un servicio que proveen (en orden de im-
                                               portancia en 2008)18 empresas como Google (App Engine), Microsoft
                                               (Windows Azure), IBM, Amazon (AWS), SalesForce.com y otras. Ama-
                                               zon Web Services (AWS) fue el pionero en 2006 cuando comenzó a
48
                                               comercializar el espacio disponible de servidores de Amazon.com
                                               y es, por ejemplo, el responsable de alojar toda la información que
geekonomía




                                               genera The New York Times, inclusive sus once millones de artículos
                                               producidos entre 1851 y 1989 actualmente disponibles en su por-
                                               tal web (Lasica, 2009). Vale destacar los proyectos Google/IBM Cloud
                                               Computing University Initiative, destinados a la investigación open
                                               source en entornos universitarios y el Open Cloud Manifesto, un docu-
                                               mento que propone la apertura de la nube, aprovechando su estado
                                               temprano de desarrollo.19 El cloud computing va en la dirección de las
                                               ideas de la computadora universal de Kelly.20 Carr (2009) llama a esto
                                               la World Wide Computer.

                                                  Si, como señala Logan (2000), cada lenguaje emerge en respuesta
                                               al caos de la sobrecarga de información que el lenguaje previo no
                                               pudo gestionar, se puede decir que el cloud computing se crea como
                                               una solución al enorme volumen de datos alojados en servidores
                                               propios de empresas y gestionados en forma ineficiente y antieco-
                                               nómica desde sus propios departamentos TIC. La nube capacita a las
                                               empresas para trabajar con economía de escala y sin riesgos, evi-
tando así un excesivo gasto en infraestructura de almacenamiento
propia. Externalizar la administración de los datos digitalizados en
megaservidores economiza costes en software, hardware y recursos
humanos, evita riesgos técnicos y reduce la complejidad de la ges-
tión. No existen sobrecostes, ya que las empresas pagan por lo que
utilizan y por el tiempo que lo requieran, sin tener que montar in-
fraestructuras que suelen ser infrautilizadas. Además, si la empresa
basa su negocio o parte de él en la gestión de datos en la Red, gana
en eficiencia y reputación. La ventaja es notoria, porque hasta ahora
todas las empresas con plataformas en red debían dedicarse a su ne-
gocio principal, pero también al almacenamiento y gestión de datos,
aunque su misión institucional no tuviera nada que ver con esto.
   	
   El cloud computing comenzó siendo una solución a un proble-
ma técnico y hoy es una alternativa a múltiples problemas de ruido
de interconexión. Lasica (2009) cree que el pasaje de los datos a




                                                                        capítulo 1
la nube significa mejorar la accesibilidad a estos datos y mayores
niveles de productividad en red a bajo coste. Tres datos reveladores.
Ya en 2006, Gartner21 preveía que las ventas del software como ser-
vicio pasarían del 5% en 2005 al 25% en 2011. En sólo dos años, su
                                                                         49
crecimiento se observa en distintas investigaciones. Según Forres-
ter Research (2008),22 el 25% de las compañías norteamericanas ya




                                                                        geekonomía
poseen o planean almacenar sus datos en servidores ajenos, o sea
externalizando la administración de sus datos en la Red. Según un
informe de Pew Internet & American Life Project (2008),23 el 69% de
los consumidores de Internet en Estados Unidos utiliza aplicaciones
que gestionan la información en la nube. Es decir, los usuarios pa-
san más tiempo conectados a la Red gestionando o consumiendo
datos alojados en la nube que utilizando los datos o el software
almacenados en su propio ordenador. La aplicación más popular
es el correo electrónico web, seguido por las plataformas de ges-
tión y almacenamiento de fotos. Según dicho estudio, las tres razo-
nes mayoritarias de los usuarios para utilizar plataformas de cloud
computing son facilidad y conveniencia, posibilidad de acceso des-
de cualquier ordenador conectado a Internet, y deseo de compartir
con los demás los contenidos propios. Por otra parte, hay un antes
y un después en el diseño de los sistemas operativos a partir de
la consolidación del cloud computing. Un límite que estableció Mi-
crosoft con el desarrollo de su Windows 7, pensado para funcionar
enteramente en la nube. Según The Economist (2009),24 el desarrollo
                                               del cloud computing hace que las diferencias entre el hardware y el
                                               software de los ordenadores ya no sean tan determinantes para el
                                               consumidor estándar. Si toda la información está en la nube y sólo
                                               necesitamos una conexión a Internet para trabajar, para la mayoría
                                               de usuarios da igual si poseen una netbook de quinientos euros o un
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               ordenador con mayores prestaciones. Microsoft y fabricantes como
                                               Apple o HP son muy conscientes de esa nueva regla de mercado y
                                               trabajan con rapidez para adaptarse. Esto explica en parte el gran
                                               crecimiento de la venta de netbooks en los últimos dos años.
                                                  	
                                                  Es importante considerar que también existen críticas a nivel de
                                               seguridad y acceso. En el primer caso, las empresas o los individuos
                                               no sabrían quiénes acceden a su información una vez que se coloca
                                               en la nube, puesto que se pierde el control de los datos. A nivel de
                                               acceso, estos datos sólo están disponibles cuando los usuarios están
                                               en línea. Aunque se supone que el acceso a Internet será ubicuo en
                                               menos de una década, esa situación no es aún la dominante en los
                                               países emergentes. Según Castells (2009), la penetración de Internet
                                               en 2008 era de una quinta parte de la población mundial, y menos
50
                                               del 10% de estos usuarios poseían conexión de banda ancha, lo cual
                                               demuestra que la brecha digital es aún pronunciada y queda mucho
geekonomía




                                               espacio por recorrer a nivel de conectividad. Por otra parte, dada la
                                               falta de estándares de software, también se cuestiona la dependen-
                                               cia que se puede tener de la empresa proveedora del servicio, ha-
                                               ciendo compleja la interoperabilidad y el traspaso a otros servidores.
                                               	
                                                  Para finalizar, uno de los aspectos que menos se trabaja cuando
                                               se habla del cloud computing es lo que Searls (2006)25 define como
                                               la economía de las intenciones. Un escenario futuro en la nube es la
                                               identidad abierta única, parcelada por el propio usuario según sus
                                               intereses. Searls cree que las operaciones en la nube podrían su-
                                               plantar a la industria de la publicidad y el marketing en línea, por
                                               su capacidad de cruzar datos de forma eficiente a nivel de identidad
                                               personal y potenciar así el valor de la atención. Un incipiente ejem-
                                               plo es MobileMe, una aplicación de Apple que permite interconectar
                                               todos los dispositivos propios del fabricante pudiendo compartir
                                               datos desde un servidor central.
3. Vivir distribuidos en las me-spheres o morir invisibles

   Los mercados son conversaciones y éstas se producen aunque
se las quiera ignorar. Por ello las empresas deben escuchar a sus
usuarios en todo momento. Las redes potencian al máximo la dis-
tribución de la información así como sus conversaciones derivadas.
La apertura es el mejor mecanismo para sobrevivir en la geekono-
mía. Los intercambios y las conversaciones son una oportunidad de
adaptación. El mercado de masas ha perdido protagonismo para
dar lugar al creciente mercado de nichos. Esto lo explica Anderson
(2006) con su teoría de la larga cola. En ese mercado, la clave está
en conseguir atención para nuestros productos. El problema es que
la atención cada vez se logra menos con publicidad o marketing y
más con una innovadora estrategia de desarrollo del propio produc-
to y de sus modelos de distribución. Vuelvo a Tuomi (2002) y Von
Hippel (2005)26 con la idea de la innovación centrada en el usuario.




                                                                         capítulo 1
Esta estrategia plantea dos opciones: 1) cerrar los circuitos a la in-
novación dentro de la empresa y darle un marco legal que permita
actuar en soledad en un mercado cautivo pero por un tiempo re-
ducido; 2) abrir la innovación al mercado bajo una lógica de open
                                                                          51
source y promover aportes externos a la empresa sin costes extras
mediante la inclusión de terceros desarrolladores y aportes de los




                                                                         geekonomía
usuarios. Ambas opciones son válidas, aunque la segunda se está
transformando en dominante, incluso en empresas con una filosofía
cerrada como Apple o Microsoft.
   	
   Jarvis (2009) estudia a fondo la estrategia distribuida de Google
y sus exitosos resultados. Según el autor, empresas como Yahoo! y
AOL pensaron que –como eran propietarios de los contenidos y los
canales de distribución– podían controlar el consumo de los clien-
tes, las relaciones entre ellos y sobre todo su atención. Google se
posicionó alrededor del algoritmo de búsqueda –su producto es-
trella– sin diseñar un portal, sino una plataforma distribuida en la
Red a través de sus aplicaciones complementarias y con su Google
AdSense y Adwords a la cabeza de los beneficios económicos. La ex-
periencia de Google demuestra que las empresas pueden crear más
valor operando como redes abiertas que favorecen la generación
de más conexiones, en vez de orientarse a crear núcleos cerrados
por temer a la competencia. El hermetismo tenía su lógica en un
mercado donde la información era escasa y se distribuía lentamen-
                                               te, pero ¿cuánto tiempo puede durar un secreto industrial antes
                                               de que explote por algún canal de la Red y se transforme en un
                                               commodity? Jarvis (2009) reflexiona sobre el hecho de que Yahoo! y
                                               otros portales se pensaron como un punto final de acceso. En cam-
                                               bio, Google se concibió como un canal. El error estratégico es co-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               locar a las compañías en el centro de la escena. Así no es como los
                                               clientes o consumidores piensan sus propios universos. Las personas
                                               construyen sus me-spheres con ellas como centro, y todos los demás
                                               actores –sobre todo los que quieren obtener dinero en transaccio-
                                               nes comerciales– son alojados fuera de esta esfera. Las redes socia-
                                               les de la Web 2.0 no crearon las comunidades. Las comunidades ya
                                               existían previamente, pero estaban mal comunicadas. Las start-ups
                                               Web construyeron puntos de reunión que contribuyen a que los
                                               usuarios dibujen sus esferas personales. La clave es contribuir a que
                                               las personas puedan satisfacer su instinto básico de comunicación
                                               de manera simple, atractiva, eficiente y no intrusiva.
                                                  	
                                                  Algo similar sucede con las empresas. Necesitan ser encontra-
                                               das y agregadas para construir su espacio de mercado y volverse
52
                                               públicas. Cuanto más pública sea una empresa (un autor o artista
                                               también funcionan como una empresa), más fácilmente será encon-
geekonomía




                                               trada y mayores oportunidades tendrá de hacerse un lugar en el
                                               mercado. La publicidad y el marketing se han vuelto muy ruidosos
                                               y son los últimos mensajes que alguien quiere consumir. Para esto
                                               se debe pensar en forma distribuida ocupando todos los espacios
                                               posibles que ayuden a construir las esferas de los clientes.
                                                  	
                                                  Jarvin (2009) afirma que la economía de Internet requiere aper-
                                               tura, descentralización y conectividad a través de nichos. Como ya
                                               señalé, muchas industrias –especialmente las del mercado de la
                                               intermediación– han construido su valor basándose en la escasez.
                                               Administrar la escasez significaba control, porque se regulaba el
                                               precio y las condiciones transaccionales. El negocio de los monopo-
                                               lios es controlar el mercado y explotar la demanda y la escasez bajo
                                               las condiciones que resulten más provechosas para ellos mismos,
                                               no para los usuarios. Está visto que las mejores tecnologías para el
                                               bien público no son necesariamente las mejores para el beneficio
                                               privado (Cobo Romaní y Pardo Kuklinski, 2007). También es común
observar que los estándares tecnológicos son a menudo impuestos
por grupos de la industria para asegurarse su propio provecho, más
que para establecer la mejor opción para el público. Ejemplos de es-
casez en la industria de la intermediación del siglo xx fueron: líneas
telefónicas de un solo operador, campañas publicitarias contrata-
das a una agencia porque obtiene mejores condiciones tarifarias
en los medios, una decena (o menos) de canales de TV de trans-
misión abierta que regulaban los precios de la tanda publicitaria,
touroperadores que controlaban en exclusiva el acceso a las tarifas
aéreas, pocos editores o compañías discográficas con capacidad de
imprimir y distribuir libros o música en forma masiva, unos cuantos
periódicos de distribución nacional o un periódico local como único
medio para anunciarse o para promocionar una plaza laboral. En
el mercado publicitario de la escasez creado en Madison Avenue,
las empresas pagaban por toda la audiencia de los medios masivos
y no por su público objetivo. Aún lo siguen haciendo, pero no por




                                                                         capítulo 1
mucho tiempo. Google ha creado un modelo de negocio basado en
la administración y gestión de la abundancia. En AdSense las empre-
sas pagan por click. Y Google Wave está destinado a convertirse en
el formato superador de las redes sociales, unificando el aspecto
                                                                          53
lúdico con el profesional.
   	




                                                                         geekonomía
   Para beneficio de los consumidores, la ficticia economía de la es-
casez está quedando atrás. Según Anderson (2009) vivimos en una
época de abundancia, aunque se nos haga creer que faltan recur-
sos. El autor explica que el ser humano lleva en sus genes el miedo
a la escasez, pero ese miedo no se corresponde con la realidad de
la mayoría del mundo, más allá de las economías empobrecidas.
Anderson analiza el efecto de sustitución: el ingenio humano y la
curva de aprendizaje de la ciencia y la tecnología tienden a encon-
trar recursos naturales mucho más rápido que el uso real que pueda
hacerse de ellos. Esto produce un efecto de aumento de la oferta
más rápido que la demanda, bajan los precios y se genera abundan-
cia. Sucede con los alimentos, la ropa, los bienes materiales y, por
supuesto, la tecnología en la geekonomía.
Cinco ideas principales
                                               del capítulo 1

                                               1   Operando bajo la filosofía de la escasez, la industria de la inter-
                                                   mediación del siglo xx es la más afectada por la masificación de
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               Internet. Si los costes de producir, distribuir y autopromocionarse
                                               tienden a cero, ya no hay motivos para que un creador ceda los
                                               derechos de su obra. Esta industria impulsa el modelo del copyright
                                               con mayor presión, diseñando barreras legales y técnicas con el fin
                                               de dificultar el acceso a la información digital y de que compartir no
                                               resulte atractivo para el usuario.



                                               2   En la geekonomía el problema que tienen los distribuidores his-
                                                   tóricos no se resuelve con juicios a los usuarios, sino median-
                                               te la innovación de las prácticas de distribución e intermediación.
                                               Cuantas más barreras se diseñan, más facilidades ofrecen los actores
                                               emergentes. Nada puede evitar que el modelo de intermediación
                                               cambie radicalmente en la próxima década.

54

                                               3   El cloud computing emerge como una solución externa a la admi-
                                                   nistración de los datos digitalizados de las empresas e institucio-
geekonomía




                                               nes, gestionados en forma ineficiente y antieconómica desde sus de-
                                               partamentos TIC. La nube hace realidad la noción de la computadora
                                               universal o la World Wide Computer. Es un paso decisivo hacia la iden-
                                               tidad abierta única y el fomento de la economía de las intenciones.



                                               4   El marketing y la publicidad se tornan cada vez más irrelevantes
                                                   para captar atención. La innovación centrada en el usuario y ba-
                                               sada en nuevos modelos de distribución e innovadoras estrategias de
                                               desarrollo de producto contribuyen a sintonizar con las me-spheres
                                               de los consumidores.



                                               5   Si los mercados son conversaciones y éstas se producen aunque
                                                   se las quiera ignorar, las redes están para potenciar al máximo
                                               la distribución de la información así como las conversaciones que
                                               se derivan de ellas. La apertura es el mejor mecanismo empresarial
                                               para sobrevivir en la geekonomía.
Cinco recursos relacionados
disponibles en Internet

1 Lessig, Lawrence (2008). Remix. Making Art and Commerce
  Thrive in the Hybrid Economy. Bloomsbury. Londres.
www.bloomsburyacademic.com/remix.htm



2 Bollier, David (2008). Viral spiral. How the Commoners Built a
  Digital Republic of Their Own. The New Press. Nueva York.
www.viralspiral.cc/download-book



3   Gaylor, Brett (2009). Rip! A Remix Manifesto (documental).
    www.ripremix.com



4   VVAA (2008). Los piratas son los padres. Historias en los albores




                                                                            capítulo 1
    de la era digital. Exgae. Barcelona.
http://exgae.net/docs/Los_piratas_son_los_padres.pdf



5   Lasica, Joseph Daniel (2009). Identity in the Age of Cloud Computing:
    The next-generation Internet’s impact on business, governance and
social interaction. The Aspen Institute. Washington, DC.
                                                                             55




                                                                            geekonomía
www.aspeninstitute.org/sites/default/files/content/docs/pubs/
Identity_in_the_Age_of_Cloud_Computing.pdf
Notas Capítulo 1
                                               1. La actuación electoral del Partido Pirata sueco en las elecciones parlamen-
                                               tarias europeas de 2009 le permitió colocar un legislador en dicho Parlamen-
                                               to. Según Wikipedia, en 2009 el PiratPartiet representaba la tercera fuerza
                                               política sueca en número de afiliados. www.piratpartiet.se/international/
                                               espanol. Por otra parte, un ejemplo de asociación sin fines de lucro es EXGAE,
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               una asesoría legal con sede en Barcelona, especializada en tratar los abusos de
                                               la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) española. http://exgae.net
                                               La EXGAE publicó en octubre de 2008 Los piratas son los padres. Historias
                                               en los albores de la era digital, un libro recopilatorio de buenas prácticas y
                                               argumentos en defensa del copyleft, el peer to peer y los nuevos formatos co-
                                               laborativos. El libro de la EXGAE se puede descargar gratis en http://exgae.
                                               net/docs/Los_piratas_son_los_padres.pdf. Entre textos de cuarenta y tres
                                               autores, Cristóbal Cobo y yo publicamos un pequeño artículo sobre nuestra
                                               experiencia con Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food.
                                               Existen otras asociaciones similares en todo el mapa europeo. Una de las
                                               más reconocidas es la británica Open Rights Group. En tanto, en Estados Uni-
                                               dos personalidades como Richard Stallman, Lawrence Lessig o la comunidad
                                               Creative Commons son una referencia mundial.

56
                                               2. The Statute of Anne, 1710.
                                               http://avalon.law.yale.edu/18th_century/anne_1710.asp
geekonomía




                                               3. En su número de enero de 2008, Wired Magazine publicó un artículo de
                                               investigación sobre las nuevas variables que rodean al negocio de la distribu-
                                               ción de contenidos. El músico y productor David Byrne presenta seis modelos
                                               alternativos y cuestiona claramente el modelo tradicional de los artistas tra-
                                               bajando bajo la contención de una multinacional. En la monografía de Byrne
                                               aparecen algunos datos esclarecedores: 1) bajo el modelo tradicional, más de
                                               la mitad del dinero de la venta de un CD se destina a cubrir los costes de mar-
                                               keting y distribución. Los royalties de los artistas son sólo el 10% por cada
                                               CD vendido; 2) el artista pierde el copyright de su obra para siempre, incluso
                                               para futuros posibles modelos de negocio o formatos que aún no existen;
                                               3) hasta hace muy poco no se otorgaba ningún ingreso extra a los artistas por
                                               la venta en formato mp3 bajo el modelo iTunes o similares; 4) en la venta en
                                               iTunes el artista recibe el 14% de las ganancias, pero generalmente es menos
                                               dinero que bajo el modelo tradicional, ya que la compra del producto es más
                                               económica para el consumidor; 5) el modelo de autodistribución llevado a
                                               la práctica por Radiohead en In Rainbows es el que mayor libertad otorga
a los artistas y el que en general resulta más lucrativo, sobre todo pensando
en que el artista se queda con las ganancias de licenciamiento de su obra
en todos los formatos existentes (cine, videojuegos, iTunes, contenidos para
móviles, etc) o futuros formatos.
www.wired.com/entertainment/music/magazine/16-01/ff_byrne


4. Según Bollier (2008), las leyes de copyright en Estados Unidos y el cobro
de licencias de uso en todo el mundo han contribuido enormemente a la
economía local y han sido útiles para equilibrar la balanza de pagos nor-
teamericana.


5. Según Wired Magazine (enero de 2001) de los 20 millones de usuarios
que Napster tenía antes de la orden judicial en su contra en julio de 2000,
pasó a 38 millones en octubre de 2000, luego de iniciado el proceso de
apelación. Algo similar sucedió con el número de archivos descargados. De
50 millones en julio de 2000, pasó a 98 millones en octubre del mismo año.




                                                                                capítulo 1
Todo esto sin contar los clones de Napster que aparecieron en ese período.
Más allá del caso Napster y los que le sucedieron, es notoria la lentitud de
la industria de la intermediación cultural para crear infraestructuras que le
permitan disputar espacios a los sitios de descargas ilegales. Planificada la
                                                                                 57
puesta en marcha para el primer trimestre de 2010, la industria americana
anunció el lanzamiento de una plataforma de descarga legal de películas




                                                                                geekonomía
y música, que también estaría disponible en España. El modelo a seguir es
FindAnyFilm.com, una plataforma diseñada por la industria británica lanza-
da a comienzos de 2009 y con más de tres millones de títulos disponibles.


6. Veáse el vídeo de la organización Creative Commons donde se explica
dicha complementación:
http://cyber.law.harvard.edu/blogs/gems/ion/secreativo.swf


7. La situación del mercado no está muy clara. Ruppel Shell (2009) cree que
si se hace un análisis más profundo de la relación calidad/precio, muchas
veces no existe concordancia entre ambos y el precio está determinado por
una estrategia de marketing asociada a la idea de que calidad es sinónimo
de precios altos. Según Ruppel Shell, en la era de lo barato todos somos ig-
norantes del verdadero coste de los productos y creyentes de la bondad de
nuestras decisiones de compra. Bajo este sistema de ignorancia, los fabri-
cantes más honestos, que se preocupan por la verdadera relación calidad/
precio, salen perjudicados porque sus costes son mayores y sus márgenes
menores, dada la desleal competencia del mercado. Muchas veces se com-
                                               pra más caro un producto de menor calidad, solamente porque se cree que
                                               el precio es la principal variable a tener en cuenta con respecto a la calidad.


                                               8. En “Is free the future?” (The New Yorker, 6 de julio de 2009), Malcolm
                                               Gladwell hace una revisión crítica de la idea de gratuidad y habla de uto-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               pismo tecnológico. Gladwell afirma que la gratuidad es sólo otro precio y
                                               no la norma como señala Anderson (2009) y que son los consumidores y el
                                               mercado los que deciden entre múltiples opciones. Cuestiona que Ander-
                                               son eleve a la categoría de principio filosófico los intereses de las compa-
                                               ñías de Internet y cita como ejemplo el caso de YouTube. Según Gladwell,
                                               el almacenamiento de un vídeo en YouTube cuesta “casi cero”, pero “casi
                                               cero” multiplicado por miles de millones al mes sigue siendo un coste muy
                                               importante para Google, el propietario de la plataforma. Se estima que el
                                               coste del ancho de banda de YouTube será a finales de 2009 de 360 millo-
                                               nes de dólares y YouTube perderá 500 millones de dólares en ese año. Para
                                               Gladwell la era digital está cambiando la forma de vender los productos y
                                               especialmente la información, pero no hay reglas cerradas, como las que
                                               Anderson predica. Para el autor, el modelo de gratuidad no es la totalidad,
                                               sino sólo un mercado y “otro precio” es otro mercado. www.newyorker.
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                                               com/arts/critics/books/2009/07/06/090706crbo_books_gladwell
geekonomía




                                               9. Piracy is Progressive Taxation, and Other Thoughts on the Evolution of On-
                                               line Distribution, por Tim O’Reilly. 12 de noviembre de 2002.
                                               http://tim.oreilly.com/pub/a/p2p/2002/12/11/piracy.html


                                               10. Scolari, Carlos (2009). Transmedia Storytelling: Implicit Consumers, Narra-
                                               tive Worlds, and Branding in Contemporary Media Production. International
                                               Journal of Communication, vol. 3, 2009.
                                               http://ijoc.org/ojs/index.php/ijoc/article/view/477


                                               11. Recomiendo ver el documental Rip! A Remix Manifesto (2009), dirigido
                                               por Brett Gaylor. www.ripremix.com


                                               12. Un ejemplo que observé en persona en el verano de 2009. La firma
                                               exclusiva James Perse vende en su tienda de Malibu, California, camisetas
                                               rotas estilo surf, mientras en la tienda suena la música de los años duros
                                               de David Bowie y el salón está ambientado con tablas de surf y una moto
                                               Harley Davinson. ¡Las camisetas cuestan 80 euros!
13. “The new socialism. Global Collectivist Society Is Coming Online”, Kevin
Kelly. Wired Magazine, junio de 2009. www.wired.com/culture/culturere-
views/magazine/17-06/nep_newsocialism?currentPage=all


14. Debo reconocer que no fui consciente de la relevancia y el crecimiento
del cloud computing hasta que compartí escenario en marzo de 2009 en
el TEC de Monterrey con Mike Culver, uno de los responsables de Amazon
Web Services. Allí aprendí acerca de las cifras del volumen de negocio que
representaba para su compañía y cómo pasó de ser un negocio residual a
ser una de sus principales fuentes de ingresos.
Crónica de la conferencia en http://digitalistas.blogspot.com/2009/03/
resena-final-sobre-el-siscti-2009-en-el.html


15. Prefiero utilizar el concepto de cloud computing que el de nube, ya que
me parece define mejor su aspecto técnico.




                                                                                   capítulo 1
16. El proceso de virtualización se explica claramente en “Conjuring Clouds.
How engineers are making on-demand computing a reality”, Erica Naone.
Technology Review, agosto de 2009.
www.technologyreview.com/computing/22606
                                                                                    59

17. He tomado dos definiciones del término para elaborar una tercera pro-




                                                                                   geekonomía
pia. Plummer, Daryl (et al). “Cloud Computing: Defining and Describing
an Emerging Phenomenon”. Gartner, 17 de junio de 2008. www.star.net.
uk/resources/star/home/misc/email_images/gartner%20cloud_compu-
ting_defining_and_156220.pdf
Staten, James. “Is Cloud Computing Ready For The Enterprise?” Forrester
Research, 7 de marzo de 2008. www.forrester.com/Research/Document/
Excerpt/0,7211,44229,00.html
Para comprender de forma sencilla qué es el cloud computing, recomiendo
el vídeo explicativo en castellano de SalesForce.com, una de las principales
empresas del sector. www.salesforce.com/es/cloudcomputing


18. www.forrester.com/rb/search/results.jsp?N=133001&Ntk=MainSearc
h&Ntx=mode+MatchAllPartial&Ntt=cloud+computing


19. Google and IBM Announce University Initiative to Address Internet-Scale Com-
puting Challenges. www-03.ibm.com/press/us/en/pressrelease/22414.wss
Open Cloud Manifesto:www.opencloudmanifesto.org
20. Entrevista de Carlos Scolari a Kevin Kelly en digitalismo.com, noviembre
                                               de 2007.
                                               http://digitalistas.blogspot.com/2007/11/entrevista-kevin-kelly.html


                                               21. “SaaS delivery challenges on-premise sofware”, Robert P. Desisto, Ben
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               Pring, Benoit J. Lheureux y Frances Karamouzis. Gartner Research Report.
                                               26 de septiembre de 2006.
                                               www.gartner.com/DisplayDocument?id=496811


                                               22. Sin datos disponibles en la Red.


                                               23. Use of Cloud Computing Applications and Services, John Horrigan. Pew
                                               Internet & American Life Project, 12 de septiembre de 2008.
                                               www.pewinternet.org/Reports/2008/Use-of-Cloud-Computing-Applica-
                                               tions-and-Services.aspx?r=1


                                               24. “Battle of the clouds”. The Economist. 15 de octubre de 2009.
                                               www.economist.com/opinion/displaystory.cfm?story_id=14644393

60
                                               25. “The Intention Economy”, David Searls. Linux Journal, 8 de marzo de
                                               2006. www.linuxjournal.com/node/1000035
geekonomía




                                               26. Von Hippel, Eric (2005). Democratizing Innovation. MIT Press. Disponible
                                               en forma gratuita en: http://web.mit.edu/evhippel/www/democ1.htm
capítulo 2
Capítulo 2
                            61

Un estudio de caso


                           geekonomía
de nuevas formas de
intermediación:
los open access journals
La industria de las revistas científicas1 es una de las
                                               que más está sufriendo el fenómeno de la desin-
                                               termediación en detrimento de los actores tradi-
                                               cionales. Un pequeño grupo de editoriales ha concentrado un
                                               negocio multimillonario haciendo un limitado esfuerzo para adap-
                                               tarse a la economía de la información y aún menos a los nuevos
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               tiempos postdigitales. Estas empresas han profesionalizado el di-
                                               seño de plataformas impresas para que la comunidad científica pu-
                                               blique los reportes de sus investigaciones bajo el histórico método
                                               de revisión entre pares. El sistema existía hace más de un siglo y
                                               era previamente administrado con cierta precariedad por las pro-
                                               pias asociaciones de investigadores. El salto cualitativo lo dieron las
                                               editoriales masificando el The Science Citation Index, un índice de
                                               impacto mundial creado por Eugene Garfield en la década de 1960
                                               y vendido a Thomson Reuters en 1992. En 1997 Thomson Reuters
                                               colocó dicho índice de impacto en Internet y el ranking ISI se trans-
                                               formó definitivamente en el referente mundial en la valoración de
                                               la comunicación científica. Hoy día la industria está distorsionada y
                                               focalizada en el flujo de ganancia más que en el interés por la divul-
62                                             gación y distribución del conocimiento que se genera en los labora-
                                               torios de investigación y en la academia. Según Casati, Giunchiglia y
geekonomía




                                               Marchese (2007),2 el modelo actual se basa en tres componentes: di-
                                               seminar ideas y ganar visibilidad; obtener reconocimiento; generar
                                               intercambios y redes. Pero el sistema tradicional de los journals de
                                               pago es ineficiente para cumplir estos tres objetivos (Scolari y Pardo
                                               Kuklinski, 2007). Dave Gray (2009) describe de forma ilustrada el
                                               negocio de las revistas científicas a través de una breve producción
                                               en Flickr titulada “Free the Facts”.3 Señala que aunque gran parte del
                                               conocimiento científico ha sido financiado por fondos públicos, y en
                                               consecuencia debería ser accesible a toda la comunidad, la industria
                                               de la comunicación científica impide esa atribución ciudadana, exi-
                                               giendo una suscripción para acceder a estos reportes. Según Gray,
                                               el coste promedio por artículo es de treinta y dos dólares.


                                                  Pero el diseño de open access journals y la masiva distribución de
                                               la investigación en la Red está afectando al negocio editorial, que
                                               inicialmente se había visto muy beneficiado con el uso de Internet.
                                               Se definen los open access journals como revistas periódicas de pro-
ducción científica y con revisión entre pares cuyo acceso es gratuito,
tanto para los particulares como para las instituciones. El cambio
hacia un modelo abierto será gradual, ya que existen intereses muy
arraigados dentro de la comunidad científica para mantener el statu
quo papirocéntrico4 (Harnad, 1999) y porque los investigadores aún
prefieren priorizar las publicaciones tradicionales, dado su presti-
gio acumulado y mayor valor de indexación. Las universidades son
las instituciones más perjudicadas por esta dinámica ya que tienen
que pagar dos veces a las editoriales: la primera de forma indirecta
con el salario a los investigadores para que produzcan y publiquen
reportes que luego éstos ofrecen gratis a las editoriales; la segunda
de forma directa pagando las suscripciones a las propias editoriales.
En este caso se trata de una cifra muy importante al año para que
sus investigadores y estudiantes estén al día de lo que sucede en el
mundo de la ciencia. The ISI Web of Knowledge5 es una red de más
de 23.000 revistas. Cuanto más grande es la universidad y más áreas de




                                                                         capítulo 2
conocimiento e investigación posee, más suscripciones requiere.
Las universidades deberían ser las instituciones más beneficiadas
por la circulación de los reportes científicos que se generan en sus
laboratorios. Pero, paradójicamente, el negocio editorial de los
                                                                          63
journals afecta a su economía. Sólo pueden acceder quienes pagan
y en el Tercer Mundo son muchas las universidades que no pue-




                                                                         geekonomía
den contar con estos trabajos para el beneficio de su comunidad
científica. Este mercado no sólo perjudica a las instituciones, sino a
los propios investigadores transfiriendo los derechos de autor a las
editoriales y limitando la distribución de su trabajo más allá de las
condiciones impuestas por las editoriales.

   El problema no es exclusivamente económico, sino también
metodológico. El sistema de revistas científicas fue valioso con los
métodos de distribución analógicos pre-Internet y era el canal más
eficiente para compartir los resultados de las investigaciones. Lo
que en su momento fue virtud hoy representa un modelo de distri-
bución anacrónico por su lentitud e ineficacia. Pero la crítica viene
de muy lejos. En un texto referencial de 19456 Vannevar Bush ya
cuestionaba como anticuada la lenta forma de transmitir conoci-
miento en la comunidad científica: “Professionally our methods of
transmitting and reviewing the results of research are generations old
and by now are totally inadequate for their purpose”. Bush urgía a
esta comunidad a elaborar herramientas para hacer más accesible
                                               el cuerpo de conocimiento existente. Su propuesta fue Memex, el
                                               antecedente teórico de Arpanet. Sesenta y cinco años después de
                                               Memex y con la creación de Internet de por medio, la distribución
                                               de la comunicación científica sigue el mismo modelo.
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                                  Pero los open access journals se están abriendo espacio con rapi-
                                               dez. Aunque existe desde hace décadas, el movimiento open access7
                                               se ha consolidado en los últimos años con decenas de iniciativas en
                                               todo el mundo. El horizonte mediato no es la desaparición de las
                                               revistas tradicionales, sino la convivencia entre ambos modelos, y
                                               la reducción o eventualmente eliminación del coste anual de sus-
                                               cripción o las licencias per view a las universidades. En definitiva, la
                                               construcción de modelos de negocio menos dañinos para las ins-
                                               tituciones. Una de las plataformas más reconocidas es el Directory
                                               of Open Access Journals (DOAJ),8 con cinco mil revistas accesibles en
                                               su base de datos. En 2007 SPARC Europe y el DOAJ anunciaron un
                                               proyecto a fin de desarrollar estándares para journals de acceso li-
                                               bre y proveer ayuda a los editores que se quisieran adherir a dicho
                                               formato. Por otra parte, la organización sin fines de lucro Creative
64
                                               Commons lanzó en 2005 Science Commons,9 con el objetivo de llevar
                                               sus licencias al campo científico, creando un marco legal para que
geekonomía




                                               los papers sean de acceso abierto. Otro proyecto de calidad es el Pu-
                                               blic Knowledge Project,10 iniciado en 1998 por la University of British
                                               Columbia y dedicado a mejorar los canales de distribución de la in-
                                               vestigación y buscar formas alternativas de comunicación científica
                                               a través de las TIC. También existen repositorios públicos de divul-
                                               gación como Google Scholar; innovations-report.com, un espacio con
                                               cientos de informes e investigaciones científicas a nivel europeo;
                                               ResearchGate.net, una red social diseñada por investigadores que
                                               fomenta la cooperación entre los profesionales del mundo científi-
                                               co y tecnológico; SciVee, un YouTube para investigación académica
                                               creada por la National Science Fundation de Estados Unidos; la pla-
                                               taforma de ACM en ciencias de la computación;11 la Public Library
                                               of Science (PLOS); o aplicaciones de las propias universidades (otro
                                               interesante modelo para el futuro) como el de California Institute
                                               of Technology.12 Salvo excepciones como el DOAJ, muchas de estas
                                               plataformas no poseen aún un exigente sistema de revisión y filtro,
                                               lo cual afecta su calidad y pertinencia.
En el campo de las ciencias de la comunicación existen dos exce-
lentes open journals en línea (multimedia y sin versión impresa) con
una estricta revisión entre pares. Por su juventud, aún no tienen un
alto índice de impacto en el The Social Science Citation Index. Me
refiero a The International Journal of Communication, editado por
Manuel Castells, Larry Gross y la USC Annenberg School for Commu-
nication, y First Monday, focalizado en estudios de Internet.

   Más allá de los casos puntuales existentes, lo más relevante de este
breve capítulo es analizar el cambio que podría representar el fenóme-
no de la desintermediación de las editoriales científicas con la aparición
de los open access journals y otras plataformas abiertas de comunica-
ción científica. Imagino un cambio de paradigma en cuatro aspectos:

   1. Evitar a los intermediarios significaría un gran ahorro de costes
para las universidades y una posible derivación de recursos a la cons-




                                                                             capítulo 2
trucción de plataformas propias de publicación bajo parámetros in-
ternacionales estandarizados como el DOAJ. Ese ahorro de costes de
suscripción permitiría el pago de revisores externos para la selección
de los artículos, bajo una escala tarifaria preconfigurada. Con esta
                                                                              65
derivación de recursos, también es posible centrarse más en la pro-
ducción multimedia y en el diseño gráfico de las revistas científicas,




                                                                             geekonomía
para hacerlos más atractivos a la comunidad, especialmente a los
estudiantes. Si bien no se trata de revistas con revisión entre pares,
ejemplos como Seed Magazine o Wired Science en la televisión pública
norteamericana PBS son referentes en la comunicación de la ciencia.

   2. Una nueva forma de ver la indexación es cuantificar la reputa-
ción del texto del autor, no el de la revista. El valor de un artículo
está condicionado por el dígito de indexación de la revista donde se
publica. Las nuevas redes científicas distribuidas vía Web comienzan
a consolidar la idea de que cada vez importa menos dónde se publi-
ca y más qué se publica. La clave es medir cuántos investigadores ci-
tan el artículo posteriormente. Para cumplir con este requisito vital
existen diferentes parámetros.13 Pero la clasificación de los journals
menciona el éxito de la indexación pasada, no la del futuro.

  3. Las condiciones de publicación deberían obligar a autores y
editores a hacer accesibles a la comunidad científica los reportes
de las investigaciones de manera gratuita. Vale considerar que no
                                               hablo de acceso libre a las investigaciones (que en muchos casos
                                               poseen propiedad intelectual o industrial) sino a los reportes, que
                                               en definitiva es lo que se publica.

                                                  4. Las publicaciones jóvenes y open source atienden mejor la di-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               versidad nacional de los investigadores (Lauf, 2005).14 Más allá del
                                               indiscutido liderazgo del sistema de investigación anglosajón, este
                                               nuevo tipo de valoración según el autor y no la revista puede atacar
                                               de lleno el problema del liderazgo casi monopólico de la ciencia
                                               anglosajona. Un liderazgo que se da tanto en la cantidad de journals
                                               editados como en el número de artículos publicados por sus inves-
                                               tigadores. Veamos un ejemplo en mi campo de conocimiento, las
                                               ciencias de la comunicación. La mayoría de revistas prestigiosas en
                                               este campo están editadas en Estados Unidos y todas sin excepción
                                               son en inglés. Insistiendo en el liderazgo del ecosistema de inves-
                                               tigación anglosajón, existe en el campo de las ciencias de la comu-
                                               nicación una sobredimensionada representación de investigadores
                                               de habla inglesa, y esto contribuye a una menor internacionaliza-
                                               ción de las revistas. Según Lauf, los autodenominados journals inter-
66
                                               nacionales no cumplen estrictamente con esa propiedad, habiendo
                                               sólo 16 publicaciones que superan el 50% en el índice de diversi-
geekonomía




                                               dad (más de la mitad de autores no-norteamericanos). Lauf calcula
                                               que el 80% de los journals de comunicación tienen un 80% o más
                                               de editores y autores norteamericanos. En este sentido, el 66,2% de
                                               los artículos están escritos por autores norteamericanos, o sea que
                                               dos de cada tres trabajan en ese país. El 13,2% son investigadores
                                               del Reino Unido, el tercer y cuarto lugar es para Canadá y Australia
                                               respectivamente. Es decir que el 86% de los trabajos son de países
                                               de habla inglesa. España es el único país iberoamericano presente,
                                               posicionado con el 0,6% de los trabajos, 31 trabajos de entre 4875.

                                                  El interesante trabajo de Lauf coincide con una investigación mía
                                               aún inédita (Pardo Kuklinski, 2006),15 donde se observan los artículos
                                               de investigadores iberoamericanos publicados entre 2000 y 2005 en
                                               los principales 13 journals de comunicación a nivel mundial16 (exclui-
                                               dos artículos reeditados y reseñas de libros). Los resultados (véase
                                               detalle)17 fueron los siguientes:
• Artículos publicados en el período 2000-2005: 2.632
• Autores de dichos artículos: 6.694
• Autores que trabajan en universidades iberoamericanas: 50
• Autores iberoamericanos que trabajan en universidades no-ibero-
americanas: 31
   	
   Las conclusiones de este estudio señalan que entre 2000 y 2005,
el porcentaje de autores que publicaron en las principales revistas
científicas de comunicación internacionales y trabajan en universi-
dades iberoamericanas es menor al 0,8% con respecto a todos los
autores que publicaron. En tanto, el porcentaje de autores iberoame-
ricanos que publicaron en los principales journals de comunicación
internacionales y que trabajan en universidades no-iberoamericanas
es menor al 0,5% con respecto a todos los autores que publicaron.
Estos bajísimos porcentajes de participación no se pueden atribuir
solamente a un problema estructural de monopolio lingüístico o




                                                                          capítulo 2
por países, sino también a la escasa producción internacional y de
calidad de nuestros investigadores en comunicación. Estos datos in-
dican dos cosas: falta de apertura a nuevos mercados e incapacidad
de publicar dentro de los journals más prestigiosos del mundo por
                                                                           67
parte de los investigadores iberoamericanos o de los investigadores
que trabajan en universidades iberoamericanas. El inglés de calidad




                                                                          geekonomía
es una barrera, pero para aumentar el promedio de internacionali-
dad, ISI debería considerar incluir las principales revistas nacionales
o regionales en sus índices. Quizá ese trabajo lo hagan mejor los
formatos de open access journals.
Cinco ideas principales
                                               del capítulo 2

                                               1   Un pequeño grupo de editoriales ha concentrado el gran nego-
                                                   cio de las revistas científicas, profesionalizando su estructura
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               bajo el histórico método de revisión entre pares. En 1997 Thomson
                                               Reuters colocó el ranking ISI en la Web y dicho índice de impacto se
                                               transformó en el referente mundial en valoración de la comunica-
                                               ción científica en journals.



                                               2    Proyectos de open access journals como DOAJ, Science Commons
                                                    o Public Knowledge Project están transformando el negocio de la
                                               comunicación científica. El horizonte de la industria es la reducción
                                               o eliminación del coste anual de suscripción de las universidades a
                                               las revistas, así como las licencias per view y la construcción de mo-
                                               delos comerciales menos dañinos para las instituciones.



68
                                               3    La posible pérdida de protagonismo de los intermediarios tra-
                                                    dicionales supondrá un gran ahorre de costes para las univer-
                                               sidades. Esto permitiría la derivación de recursos a la construcción
                                               de plataformas propias abiertas de publicación de sus autores bajo
geekonomía




                                               parámetros internacionales estandarizados. También se podrían
                                               desviar recursos al pago de revisores internacionales bajo una esca-
                                               la tarifaria preconfigurada.



                                               4  Las redes científicas distribuidas vía Web comienzan a consolidar
                                                  la idea de que cada vez importa menos dónde se publica y más
                                               qué se publica. Una nueva forma de ver la indexación es priorizar y
                                               cuantificar la reputación del texto del autor, no el de la revista.



                                               5   Este nuevo tipo de valoración –según el autor y no la revista–
                                                   puede atacar de lleno al problema del liderazgo casi monopóli-
                                               co de la ciencia anglosajona en la cantidad de journals editados así
                                               como en el número de artículos publicados por sus investigadores.
Cinco recursos relacionados
disponibles en Internet

1 Suber, Peter (2009). “Timeline of the Open Access Movement”.
  Open Access Project.
www.earlham.edu/~peters/fos/timeline.htm



2   Wilbanks, John; Boyle, James (2006). “An Introduction to
    Science Commons”. Creative Commons, agosto de 2006.
http://sciencecommons.org/wp-content/uploads/
ScienceCommons_Concept_Paper.pdf
Science Commons. http://sciencecommons.org/about



3   Scolari, Carlos; Pardo Kuklinski, Hugo (2007). “El diseño de
    Diálogos de la Comunicación en línea. Hacia una nueva gestión




                                                                          capítulo 2
del Conocimiento Científico en la era del Software Social”. Diálogos de
la Comunicación. Felafacs, mayo-agosto de 2007. nro. 74. Lima, Perú.
www.dialogosfelafacs.net/especial_74ScolariPardo.php
Vídeo explicativo en:
                                                                           69
www.dialogosfelafacs.net/index74.php




                                                                          geekonomía
4   Acerca de The ISI Web of Knowledge. Thomson Reuters. 2009
    http://isiwebofknowledge.com/about/whatitis



5   Directory of Open Access Journals (DOAJ). 2009. SPARC Europe.
    Lund University Libraries. www.doaj.org
Notas
                                               1. Éste es un tema por el que estoy especialmente interesado hace tiempo.
                                               Junto a Carlos Scolari, en 2007 diseñamos la versión en línea de Diálogos de
                                               la Comunicación, la revista académica de la Federación Latinoamericana de
                                               Facultades de Comunicación Social (FELAFACS).
                                               www.dialogosfelafacs.net/78
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               Para dicho relanzamiento hemos escrito un artículo explicando el proceso y
                                               hemos producido un vídeo con las principales ideas. Artículo en:
                                               www.dialogosfelafacs.net/especial_74ScolariPardo.php
                                               Vídeo en: www.dialogosfelafacs.net/index74.php


                                               2. Casati, Fabio; Giunchiglia, Fausto; Marchese, Maurizio (2007). Publish and
                                               perish: why the current publication and review model is killing research and
                                               wasting your money. Ubiquity.
                                               www.acm.org/ubiquity/views/v8i03_fabio.html


                                               3. http://flickr.com/photos/davegray/sets/72157612691100488/show


                                               4. Harnad, Stevan (1999). “Free at Last: The Future of Peer-Reviewed
                                               Journals”. D-Lib Magazine, vol. 5, nro. 12. Diciembre de 1999.
70
                                               www.dlib.org/dlib/december99/12harnad.html
geekonomía




                                               5. http://isiwebofknowledge.com/about/whatitis


                                               6. Bush, Vannevar (1945). “As We May Think”. The Atlantic Monthly, julio de
                                               1945. www.theatlantic.com/doc/194507/bush


                                               7. En un excelente trabajo, Peter Suber recopiló todas las acciones del mo-
                                               vimiento open access en el ecosistema de la comunicación científica. Aquí
                                               se han catalogado decenas de propuestas desde mediados de la década de
                                               1960, aunque el proceso se profundiza a partir de 1990 con la masificación
                                               de Internet. www.earlham.edu/~peters/fos/timeline.htm


                                               8. www.doaj.org


                                               9. http://sciencecommons.org/about


                                               10. Actualmente opera a través de una sociedad entre la Facultad de Edu-
                                               cación de la University of British Columbia, Simon Fraser University Library,
School of Education at Stanford University, y Canadian Centre for Studies in
Publishing at Simon Fraser University. http://pkp.sfu.ca/?q=ojs


11. www.acm.org/corr


12. http://library.caltech.edu


13. “The Genius Index: One Scientist’s Crusade to Rewrite Reputation Ru-
les”, Guy Gugliotta. Wired Magazine. 17 de junio de 2009. www.wired.com/
culture/geekipedia/magazine/17-06/mf_impactfactor?currentPage=2


14. En base a un estudio que abarca todos los artículos publicados entre
1998 y 2002 en las 43 revistas de estudios de comunicación mejor posicio-
nadas por ISI. Los resultados de la investigación están publicados en “Natio-
nal diversity of major international journals in the field of Communication”,
Edmund Lauf. Journal of Communication, marzo de 2005.




                                                                                 capítulo 2
http://www3.interscience.wiley.com/journal/118645436/abstract
(Nota: para acceder a esta página web, se deben aceptar las cookies de
Wiley InterScience.)

                                                                                  71
15. Pardo Kuklinski, Hugo (2006). “La producción científica iberoamericana
en comunicación y su impacto en los journals internacionales”. Inédito, en




                                                                                 geekonomía
fase de revisión.


16. A los efectos de esta investigación, se consideran investigadores ibe-
roamericanos a todos aquellos que hayan finalizado sus estudios de gra-
do en universidades iberoamericanas, sin importar la nacionalidad de
los investigadores. En cualquier caso, lo relevante es el lugar de trabajo
y no la nacionalidad de los investigadores: a) investigadores que traba-
jen en universidades iberoamericanas en el momento de la publicación
del artículo; b) investigadores iberoamericanos que trabajan en universi-
dades no-iberoamericanas en el momento de la publicación del artículo.


Publicaciones aparecidas en la categoría Comunicación de la base de da-
tos Social Sciences Citation Index, producida por ISI. Se seleccionaron los 11
principales journals internacionales de comunicación, según las valoracio-
nes de factor de impacto del DURSI (visitada el 12 de febrero de 2006), más
dos con tradición e influencia en el espacio europeo de investigación como
European Journal of Communication y Discourse and Society. Las principales
11 revistas son: Journal of Communication; Public Opinion Quarterly; Social
                                               Problems; Journal of Popular Culture; Semiotica; Human Relations; Theory,
                                               Culture & Society; Science, Technology & Human values; Cultural Studies; Jour-
                                               nal of Strategic Information Systems; The Information Society.
                                               www10.gencat.net/dursi/ca/re/aval_rec_sist_siar_llistes.htm
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               17. Lista de los 13 journals seleccionados con los datos observados en cada
                                               categoría:
                                               A: Artículos publicados en el período 2000-2005.
                                               B: Investigadores autores de dichos artículos.
                                               C: Autores que trabajan en universidades iberoamericanas.
                                               D: Autores iberoamericanos que trabajan en universidades no-iberoame-
                                               ricanas.
                                               Journal of Communication A: 199 / B: 442 / C: 1 / D: 4
                                               Public Opinion Quarterly A: 138 / B: 328 / C: 0 / D: 2
                                               Social Problems A: 182 / B: 309 / C: 1 / D: 2
                                               Journal of Popular Culture A: 243 / B: 257 / C: 3 / D: 2
                                               Semiotica A: 405 / B: 496 / C: 17 / D: 7
                                               Human Relations A: 342 / B: 656 / C: 2 / D: 1
                                               Theory, Culture and Society A: 249 / B: 280 / C: 3 / D: 2
72
                                               Science, Technology and Human Values A: 125 / B: 204 / C: 2 / D: 2
                                               Cultural Studies A: 200 / B: 223 / C: 4 / D: 1
geekonomía




                                               Journal of Strategic Information Systems A: 104 / B: 219 / C: 0 / D: 1
                                               The Information Society A: 165 / B: 258 / C: 6 / D: 3
                                               European Journal of Communication A: 98 / B: 143 / C: 0 / D: 1
                                               Discourse and Society A: 182 / B: 247 / C: 11 / D: 3
capítulo 3
Capítulo 3
                             73

La geografía cambiante


                            geekonomía
del planeta Web 2.0:
transformación narcisista
e identidad única
Desde la publicación en septiembre de 2007 de
                                               Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast
                                               food, algunas tendencias mencionadas en ese tra-
                                               bajo se han profundizado, principalmente la econo-
                                               mía de las intenciones de la mano de una identidad
                                               única y narcisista del usuario. Por esto consideré apropiado
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               dedicar un capítulo complementario –con más de dos años de dis-
                                               tancia– a modo de bonus track, con la voluntad de escribir sobre as-
                                               pectos de la Web social que no hemos mencionado en su momento.
                                               Recomiendo la lectura hipertextual junto al capítulo 1. Veamos una
                                               versión 2010 de las tendencias de la Web colaborativa en el marco
                                               del postdigitalismo.


                                               1. El horizonte mediato de la Web social se construirá bajo una ar-
                                               quitectura de plataformas distribuidas, open source, generalistas,
                                               gratuitas, pero también de target y pensadas para dispositivos móvi-
                                               les. Lo que se consolida como tendencia es el fenómeno open source
                                               (desaparecen definitivamente los portales y se afirman las plata-
                                               formas abiertas y distribuidas) y su movimiento hacia interfaces de
74
                                               dispositivos móviles. Ya dedicamos un capítulo en Planeta Web 2.0
                                               a la mobile Web 2.0, y a posteriori realicé una investigación1 y una
geekonomía




                                               infografía2 que pueden resultar útiles para describir ese fenómeno
                                               de convergencia de formatos y dispositivos. A pesar de ser una ten-
                                               dencia muy evidente que me llevó hasta la creación de una spin-off,3
                                               no haré referencia al tema mobile en este libro para no repetir ideas
                                               ya escritas en otros trabajos recientes.

                                               2. Información fácilmente organizada y accesible, utilidad, gestión
                                               en tiempo real y gran poder de procesamiento. Nos alcanza con
                                               saber qué está haciendo Google en ese sentido para comprender
                                               hacia dónde va la Web social. Es demasiado prematuro señalarlo
                                               con contundencia, pero puede que Google Wave se convierta en
                                               el modelo de una nueva etapa de la escritura colaborativa. Según
                                               Marisa Mayer (agosto de 2009),4 Google gestiona quince veces más
                                               datos (Googlejuice) que en 2002 y la clave es hacer que esos datos
                                               trabajen para el usuario y no que el usuario trabaje para obtener los
                                               datos. Google se mueve hacia delante en tres niveles: a) para que
                                               los datos sean fácilmente organizados, accesibles y útiles; b) para
darle mayor velocidad a la gestión de datos en tiempo real; c) para
escalar el poder de procesamiento de la información a un nivel sin
precedentes, con el componente agregado de intentar desbloquear
y hacer accesible la información que todavía no existe en la Red.

3. La transformación narcisista de la Web no es una variable lúdica
sino una evolución y un componente vital en el cual cada usuario se
convierte en un nodo que vive en la Red y transfiere su experiencia
(profesional, social o afectiva) a la comunidad. Lo cierto es que gran
parte de la Web ha sido absorbida por las plataformas colaborati-
vas y el ecosistema de Internet ha sufrido una gran influencia del
egocasting y la sabiduría de las multitudes donde las redes sociales
trabajan mejor. Pero no es un cambio anecdótico y pasajero, sino
una reafirmación de un comportamiento social de los usuarios de
la Red. Li y Bernoff (2009) dan una dimensión aún más amplia a
este fenómeno bajo la denominación groundswell. Traducido como




                                                                         capítulo 3
oleada de opinión, se trata de una tendencia de movimiento espon-
táneo en la cual las personas utilizan las aplicaciones en línea para
conectarse según sus propios intereses, tomando de los demás las
cosas que necesitan e ignorando a las corporaciones tradicionales.
                                                                          75
Según Li y Bernoff, una tecnología es evaluada positivamente por
sus usuarios si: a) favorece la comunicación entre las personas de




                                                                         geekonomía
un modo sencillo y productivo; b) transfiere el poder desde las insti-
tuciones a los ciudadanos con eje en la validación social; c) invita a
las sinergias con otros emprendedores o grupos de interés a través
de plataformas abiertas. En la transformación narcisista de la Web
las empresas tienen que comprender que las comunidades en la Red
–propias o ajenas– no están para influenciar a los clientes sino para
escucharlos.

4. Las estructuras enlazadas de las redes sociales no revelan la ver-
dadera interacción entre las personas. A mayor atención, mayor
reciprocidad. Una densa red de amigos o seguidores en las aplica-
ciones de la Web social no significa una mayor conectividad y una
conversación más rica. En una reciente investigación sobre Twitter
vinculada al funcionamiento de los nodos de amistad, Huberman,
Romero y Wu (2009)5 concluyen que, de forma similar al comporta-
miento de los hubs en la vida social (Barabási, 2002), un enlace en-
tre dos personas no promueve necesariamente una interacción real
entre ellos. La prioridad de relación es con aquellos pocos que son
                                               recíprocos, más allá de la densa red de followers o amigos que se
                                               pueda tener, en muchos casos insignificante a nivel de interacción.

                                               5. La economía de la sociedad de la información requiere más que
                                               nunca apertura, descentralización, conectividad y agregación a tra-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               vés de nichos y en ese camino están trabajando todos los actores.
                                               Según Jarvis (2009), los tres recursos de creación de valor de los
                                               medios 2.0 son: revelación (encontrar el contenido correcto), agre-
                                               gación (distribución por la mayor cantidad de canales posibles) y
                                               plasticidad (la capacidad de que los contenidos sean extendidos a
                                               través de mashups).

                                                  Quien más debe tomar en cuenta esta tendencia es la industria
                                               periodística. Una sociedad democrática necesita periodismo, pero
                                               esto no es sinónimo de periódicos impresos. El problema está en el
                                               hardware, no en la producción de contenidos. Si sumamos sus versio-
                                               nes impresas y digitales, el número de lectores de periódicos crece
                                               año tras año, lo cual anula el argumento de la muerte de la prensa
                                               escrita. Desde la masificación de la banda ancha, las noticias en Inter-
76
                                               net son para muchos usuarios la principal fuente de información. El
                                               caso es que la prensa debe adaptarse a un nuevo tipo de lector que
geekonomía




                                               no consume diarios impresos. Un dato relevante: en 1964, el 81% de
                                               los norteamericanos adultos leía periódicos. En 2007 lo hacía sólo el
                                               50%. Esta disminución del consumo de prensa en papel en el refe-
                                               rencial mercado norteamericano es mucho más grave en los jóvenes
                                               de entre 18 a 24 años. En 1970 era el 73% de este grupo etario y en
                                               2007 el 36%.6 A pesar de que nadie duda de la crisis del ecosistema
                                               periodístico y de su necesidad de adaptación a la creación de valor
                                               mencionada por Jarvis (2009), son las empresas tradicionales (en su
                                               formato web) las que lideran ese cambio de actitud de consumo.7
                                               Según el Departamento de Trabajo de Estados Unidos, entre 2001 y
                                               2007 el empleo en la industria de la prensa y los medios masivos cayó
                                               un 13%. Pero la crisis afecta mucho más al formato tradicional y al
                                               empleo que a los contenidos generados en las redacciones, que sigue
                                               aumentando en volumen y en cantidad de lectores.8

                                                 Junto a las tendencias descritas, en este capítulo se propone un
                                               breve análisis de la economía de la Web, y posteriormente un re-
paso rápido por sus productos y empresas más relevantes. El texto
que sigue está atravesado por una idea central: los medios se recon-
figuran con la convergencia, el mestizaje y la evolución orgánica,
proponiendo una renovada conversación, que va más allá de blogs,
redes sociales, wikis y otro tipo de formatos colaborativos. El cono-
cimiento social nace desde el pensamiento público y la conversación
derivada suele adaptarse a las prácticas de interacción dominantes,
intentando evitar el ruido. Por eso no se trata de comprometerse
con los productos o formatos, sino de analizar su evolución en pers-
pectiva y en contraposición a lo efímero de las modas de consumo.
Dado que su dinámica de consumo, lógica económica y perspecti-
vas de futuro se pueden transpolar a toda la Web social, observaré
brevemente algunos aspectos de cinco plataformas paradigmáticas:
Google, Facebook, Twitter, Craigslist y Amazon. Por último analizaré
el debate sobre la muerte de los blogs.




                                                                        capítulo 3
1. 2010 no es 2001. La economía de la participación
evitará una nueva burbuja

   Desde la irrupción de Napster en 1999 la idea de los portales
                                                                         77
web con contenidos propietarios, centralizados y unidireccionales
comenzó a perder fuerza. Como señalé en el capítulo 1, la primera




                                                                        geekonomía
aproximación masiva al fenómeno peer to peer y a los contenidos
generados por el usuario significó el comienzo del cambio de pa-
radigma de un siglo de administración centralizada de la industria
cultural, con sus empresas intermediarias decidiendo qué publicar.
Es clave comprender que la segunda ola de empresas de Internet,
la ola Web 2.0, es muy diferente a la primera: millones de personas
participan hoy en la Red con una calidad de conexión notoriamente
mejor y en una comunidad mucho más interactiva que la de 2001.
Ya no se trata de consumir sitios construidos up-down con informa-
ción empaquetada en formato broadcasting, sino que el consumo
dominante es bottom-up, con contenidos generados por los usua-
rios para la propia red.

   Urstadt (2008)9 señala que a fines de esta primera década del
siglo xxi existen algunas variables de burbuja financiera similares
a las que precedieron a la gran crisis de 2001. Describe las nuevas
empresas basadas en Internet como financieramente ineficientes,
con una política de crecimiento rápido y desproporcionado a su ca-
                                               pacidad y volumen y con una inestable estrategia central basada
                                               en construir la masa crítica de usuarios y esperar que el dinero lle-
                                               gue en algún momento (con una IPO, con la integración de capital
                                               riesgo, con venta de anuncios o de acciones u otros mecanismos).
                                               Urstadt considera que los usuarios de las redes sociales están con-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               centrados en las conversaciones y no pendientes del marketing.
                                               Esto quita eficiencia al entorno publicitario de estas plataformas.
                                               Para más datos véase el estudio de caso de Facebook.10 La red social
                                               más utilizada y de mayor crecimiento del último trienio posee más
                                               de 300 millones de usuarios activos en todo el mundo (datos de no-
                                               viembre de 2009 de la propia compañía)11. Facebook se convirtió en
                                               la segunda gran puerta de entrada a la Web, después de Google.12
                                               Microsoft compró en octubre de 2007 el 1,6% de la empresa en 240
                                               millones de dólares, lo que le daba una valuación estimada en el
                                               momento de la transacción de 15.000 millones de dólares. Dado su
                                               enorme crecimiento desde 2007 hasta hoy, su valor es un misterio,
                                               pero multiplica varias veces esa cifra. Su relevancia en la Internet
                                               ubicua de la segunda década del siglo xxi es incalculable. Sin em-
                                               bargo, lejos de dar ganancias,13 ha perdido 150 millones en 2008 y
78
                                               vive de la constante financiación que recibe. Aún le cuesta conso-
                                               lidar su modelo financiero y diseñar un revenue atractivo. Cada vez
geekonomía




                                               que quiere capitalizar la información de los usuarios, éstos se que-
                                               jan y obligan a la empresa a dar un paso atrás (su aplicación Beacon
                                               y la modificación de los términos de uso en 2009 fueron dos gran-
                                               des frustraciones). Los usuarios ven Facebook como un espacio para
                                               conversar con sus amigos, sin distracciones. Vogelstein (2009)14 cree
                                               que el éxito de Facebook depende de su habilidad para comprender
                                               el arte del comportamiento de los públicos objetivos.

                                                 Pero el análisis es parcial si no se analizan tres variables consoli-
                                               dadas desde la explosión de la burbuja de Internet en 2001:

                                                  a) A diferencia del período 1994-2001, la Web es el medio domi-
                                               nante de socialización para los jóvenes, lo cual dibuja un escenario
                                               y un tipo de interacción inexistente hace una década. Este escenario
                                               facilita y amplifica las posibilidades de aproximación al público ob-
                                               jetivo por parte de las empresas. Las redes sociales son la actividad
                                               en la Web de más rápido crecimiento a nivel de usuarios. Además,
las redes sociales móviles toman impulso para fortalecer el mercado
de la inteligencia colectiva, incorporando ubicuidad a la práctica so-
cial. Así, la Web social se torna disponible en todos los dispositivos,
con un ancho de banda con escasas limitaciones técnicas y varias
generaciones de consumidores implicadas full-time. Esta consolida-
ción definitiva de la participación hace que las nuevas empresas de
Internet no se preocupen tanto por sus modelos de negocio como
por la transformación de sus aplicaciones en plataformas socia-
les colaborativas y de uso masivo. Parecen repetir la lógica de fun-
cionamiento de la primera era de la Web, pero el mercado es muy
diferente. El foco está centrado en el crecimiento viral. Después de
la crisis de 2001, las nuevas ideas en la segunda generación Web
no eran bienvenidas si no existía un claro modelo de negocio, pero no
es así como funciona la economía de la Red. No fue así como se con-
solidaron Google, Facebook, YouTube, Wikipedia, Twitter, Blogger o
Craigslist, por nombrar sólo algunas de las plataformas más exitosas.




                                                                          capítulo 3
La prioridad siempre fue crear un buen producto. Si consiguen sobre-
vivir financieramente, pensar en cómo hacer dinero es considerado
una distracción porque sin usuarios no podrán crecer en el corto plazo
y en la Web el dinero sigue a los consumidores.
                                                                           79

   b) Según Lacy (2008), en el primer ciclo Web el éxito no era evalua-




                                                                          geekonomía
do en revenue, sino que el objetivo principal era cotizar en la Bolsa.
Por esto la crisis surgió en el Nasdaq, con cientos de empresas coti-
zadas sin haber podido generar ganancias y sin un claro modelo de
negocio. Antes de la explosión de la burbuja, más de 1.000 empre-
sas tecnológicas se habían vuelto públicas. Como ejemplo: en 1999,
270 se hicieron públicas con inversión de capital riesgo; en 2006,
solamente 57. Según Lacy (2008), la economía americana opera ha-
ciendo limpieza cada cierto tiempo.15 Pero de las cenizas del primer
ciclo Web surgieron las empresas más rentables y las que transfor-
maron el horizonte industrial de la geekonomía. En la segunda ola,
la estrategia cambió desde el aprendizaje. Éste es un gap entre ge-
neraciones de emprendedores basado en la mala experiencia y que
consolida la actual economía de la Web y la aleja de una burbuja
similar a la de 2001. El momento de hacerse público se retrasa el
mayor tiempo posible hasta que la empresa sea sólida, tenga una
masa crítica de usuarios muy potente y haya construido su modelo
de negocio. De hecho Facebook aún no cotiza en el Nasdaq.16 Una
vez lograda su consolidación, es la empresa –y no Wall Street– la
                                               que pone las condiciones para su apertura al mercado financiero. El
                                               ejemplo más claro fue la exitosa IPO17 de Google en 2004, que diseñó
                                               su propia estrategia, rompió las normas del mercado bursátil y has-
                                               ta provocó un pequeño boicot de algunas instituciones financieras.
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                                  c) Los costes de crear una aplicación y sostener una startup web
                                               son mucho menores de lo que eran antes de 2001.18 La reducción de
                                               gastos por consumo de ancho de banda, almacenamiento de datos
                                               en la nube y derechos de uso de software ha sido enorme, lo cual
                                               disminuye el riesgo de iniciar un proyecto y la dependencia de los
                                               emprendedores con los fondos de capital riesgo. Durante el ciclo de
                                               las puntocom, una de las primeras inversiones que debían realizar
                                               las empresas era en servidores, para poder sostener la calidad y
                                               escalabilidad de sus plataformas. Esos costes eran fijos y muy altos
                                               para empresas con presupuestos acotados, lo cual significaba que
                                               un alto porcentaje de los recursos financieros que ingresaban los
                                               emprendedores se destinaba a mantener dicha infraestructura. En
                                               2010 esto ha cambiado radicalmente con la consolidación del cloud
                                               computing. También se ha reducido el coste de recursos humanos.
80
                                               Emprendedores y programadores trabajan gratis con el afán de
                                               arriesgarse por su propio proyecto. Esta práctica ya era habitual en
geekonomía




                                               la primera ola, pero se ha consolidado en la segunda. Por otra par-
                                               te, como en el caso de la salida a Bolsa mencionado en b), algo simi-
                                               lar sucede en la estrategia de acercamiento de los emprendedores
                                               con el capital riesgo: dada la falta de necesidad de recursos finan-
                                               cieros para la primera etapa de los proyectos, las empresas retrasan
                                               al máximo la entrada de inversores hasta que sea imprescindible y,
                                               entonces, tengan mayor capacidad de negociación.

                                               2. Deconstruyendo el altruismo de Google:
                                               ¿un nuevo monopolio en la era post-desktop?

                                                  Google es la empresa de referencia de la geekonomía postdigital.
                                               Desde sus comienzos la estrategia motriz fue actuar distribuidos en
                                               la Red. En el capítulo 1 se analizaba el rol creciente del cloud compu-
                                               ting en la nueva economía de Internet. A diferencia de otros gigan-
                                               tes tecnológicos, Google ha estado en la nube desde sus comienzos
                                               en 1998. En 2005, Adrian Holovaty, una rara y valiosa mezcla de
periodista y programador, rastreó el crimen en Chicago con Google
Maps y creó el mashup chicagocrime.org. Luego le agregó informa-
ción y se transformó en everyblock.com, uno de los ejemplos más
interesantes de periodismo de proximidad en Internet, trabajando
en quince ciudades norteamericanas. Lo que en cierta forma Ho-
lovaty estaba haciendo era trabajar para el sistema distribuido de
Google, atrayendo tráfico a sus productos.

   Sin embargo, y a pesar del modelo de gratuidad y de las dece-
nas de aplicaciones productivas que ofrece, el credo fundacional de
Google Don’t be evil comienza a ser cuestionado. Su tamaño y am-
bición generan desconfianza sobre su reputación de altruismo. El
efecto de red de la empresa crea productos interrelacionados cada
vez más útiles para el usuario y destruye la competencia, fomentan-
do un tipo de monopolio meritocrático.19 Quienes no ven la faceta
del mérito en su posición privilegiada, acusan a Google de utilizar




                                                                       capítulo 3
su algoritmo de búsqueda para posicionar mejor sus propios pro-
ductos. Esta percepción llega hasta la oficina antimonopolio del Go-
bierno Obama, que sigue atenta los pasos del gigante de Mountain
View. Antes de que fuera designada jefa antitrust del Departamen-
                                                                        81
to de Justicia, Christine Varney señaló en una conferencia en 2008:
“Google está repitiendo la política expansionista de Microsoft en la




                                                                       geekonomía
década de 1990. Comienza a colonizar la emergente nube de Internet
abrazando un enorme poder de mercado y potencialmente creando
un ecosistema del que los usuarios no podrán escapar”.20 Pero los
monopolios suelen ser impuestos política y económicamente, y éste
no es el caso de Google, que sigue siendo el mejor espacio en la Red
donde encontrar información. Algunos periódicos cuestionan que
Google hace mal uso de sus noticias. Mi lectura es que Google les
hace el favor de compartir su audiencia. El caso es que las críticas
no son ingenuas. Su ambiciosa misión corporativa de “organizar la
información mundial y hacerla útil y universalmente accesible” está
afectando a muchos intereses. Algunos cuestionamientos son ge-
nuinos y basados en una no-deliberada pero peligrosa colonización
cultural. Como ex-presidente de la Biblioteca Nacional de Francia,
Jean-Noël Jeanneney (2007) plantea sus dudas sobre el proyecto
Google Library.21 El cuestionamiento de voluntad hegemónica se
puede trasladar a otros proyectos de la empresa. Dado que uno
de los valores más preciados de Google es construir una eficiente
jerarquía basada en su algoritmo de búsqueda, Jeanneney se pre-
                                               gunta cómo diseñará esta biblioteca universal, cómo organizará su
                                               jerarquía y si se le dará prioridad a la cultura anglosajona y a los li-
                                               bros publicados en inglés. Según Jeanneney, sólo el 3% de los libros
                                               publicados en Estados Unidos son traducidos a otras lenguas. Sin
                                               embargo, dado los convenios que Google hizo con universidades
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               norteamericanas para digitalizar sus bibliotecas, la mayoría de estos
                                               textos serán en inglés. Pero Google es una empresa norteamericana
                                               y no tiene por qué actuar de forma equitativa con otras lenguas
                                               o consultar a otros estados soberanos para cumplir con su misión
                                               corporativa. Por otra parte, la debilidad del argumento de Jeanne-
                                               ney se demuestra en el radical cambio de posición de la propia Bi-
                                               blioteca Nacional francesa al anunciar en 2009 un acuerdo con la
                                               empresa para digitalizar su fondo.22 Otros cuestionamientos están
                                               basados en luchas por cuotas de mercado. El lobby industrial está
                                               actuando con empeño. Google tiene un creciente poder que afecta
                                               a grandes actores de la intermediación, especialmente a la industria
                                               de medios tradicionales y, con su lucha por la neutralidad de la Red,
                                               a los operadores de Internet. También afecta a los intereses de otras
                                               empresas líderes como Microsoft o Yahoo!
82

                                                   Microsoft intenta seguir el ritmo de Google, pero le resulta difícil.
geekonomía




                                               Su vocación es reconstruirse para la era post-desktop que Google
                                               lidera con nitidez. En un mercado donde el ganador se lo lleva todo,
                                               al recién llegado Bing le falta un largo recorrido para poder compe-
                                               tir en el terreno de la búsqueda. Por si esto fuera poco, en julio de
                                               2009 Google decidió emprender un ataque directo a la compañía
                                               de Redmond anunciando el lanzamiento de Chrome OS, un sistema
                                               operativo abierto que espera competir abiertamente con el recién
                                               lanzado Windows 7. Además, Google abrió una nueva área de nego-
                                               cios que ofrece servicios en la Red a las empresas, como hace años
                                               posee Microsoft o IBM. La confrontación no puede ser más evidente.
                                               A sabiendas de la posición dominante que está adquiriendo Google
                                               más allá de su plataforma principal, Microsoft y Yahoo! anunciaron
                                               en julio de 2009 un preacuerdo de diez años de sociedad. A falta de
                                               una aprobación de los reguladores antitrust,23 esta sociedad podría
                                               beneficiar a los usuarios alentando una mayor competencia a nivel
                                               de productos en la nube. Es interesante comprender qué está pasan-
                                               do a nivel empresarial y cómo evolucionará este juego de ajedrez,
porque cada movimiento de piezas de los grandes actores afecta a
todo el ecosistema. Por ejemplo, las erróneas tácticas empresariales
de Yahoo! y su ex-director ejecutivo Terry Semel dieron mayor rele-
vancia a Google. El dato más impresionante es que en 2002 Yahoo!
ofreció 3.000 millones de dólares por la adquisición de Google. Los
de Mountain View querían 5.000 millones. Esta cifra le pareció exa-
gerada a Terry Semel y su equipo directivo y la operación no se con-
cretó. Siete años después, Google es mucho más poderosa que su
competidor y su valor de mercado la ubica entre las empresas más
grandes de Estados Unidos.

3. Plataformas de Web social: el poder de la viralidad

   Es secundario ponerle nombre y apellido a la evolución de la Web
social. El ecosistema de las redes sociales generalistas se ha conver-
tido en una multiplataforma contenedora muy atractiva para las di-




                                                                         capítulo 3
ferentes generaciones de nativos y migrantes digitales, dispuestos a
adoptar y popularizar en el período de meses nuevos desarrollos si
se les ofrece una mejor interacción. En base al principio de el gana-
dor se lo lleva todo, cuanto más crece una red social, su comunidad
                                                                          83
se fideliza con mayor rapidez, ya que todas las personas con quienes
se desea interactuar están allí. Esto es lo que ha sucedido con los




                                                                         geekonomía
ejemplos que analizaré a continuación.

3.1. Facebook: un sistema operativo social. Twitter: la nueva joya
de la cultura snack

   Facebook y Twitter están de moda. En el último año he leído más
de una decena de artículos24 que hablaban sobre la transformación
radical que estas plataformas suponen. En 2007 me vi envuelto en
una pequeña polémica25 en torno a la productividad de Twitter. Más
allá del valioso espacio conversacional y productivo que ofrecen,
vale hacer matices sobre ambas. ¿Significan algo importante en tér-
minos de transformación de prácticas de alfabetización digital y
consumo en la Web? Sí y no.

   Sí. En el caso de Facebook, la construcción de identidades reales
y comunidades de acceso limitado a nivel de intereses o entornos
fue un cambio significativo. Hace pocos años la comunicación do-
minante vía red (excepto en el correo electrónico) era impersonal,
                                               anónima y con un alto porcentaje de identidades ficticias. Ese tipo
                                               de interacción está en vías de extinción con la aparición de redes
                                               sociales como Facebook. Se trata del paso del anonimato a la trans-
                                               parencia. La definitiva digitalización de la identidad. En ese sentido,
                                               MySpace perdió fuerza por problemas de perfiles falsos, adolescen-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               tes que no lo son y falta de transparencia a nivel de interacción.
                                               Diseñado en 5 idiomas y más de 60 en desarrollo, Facebook se está
                                               convirtiendo en el hub de la vida en línea de muchas personas, un
                                               sistema operativo social y un gran contenedor de aplicaciones que
                                               se utiliza hasta como nueva cuenta de correo electrónico. Según
                                               el ranking de Alexa de noviembre de 2009, ya ocupa el segundo
                                               lugar entre las plataformas más visitadas del mundo, por detrás de
                                               Google y por delante de Yahoo!. Open Stream API y Connect han
                                               sido pasos relevantes para compartir la filosofía dominante en la
                                               Red: actuar distribuido. Facebook Search es el próximo paso en esta
                                               estrategia para ganarle espacio al gigante Google, que ha respon-
                                               dido en el segundo semestre de 2009 con la aparición de Google
                                               Wave. Esta competencia es muy beneficiosa para los usuarios ya que
                                               ofrece más innovación y mejores condiciones de uso. En la línea de
84
                                               la necesidad y el deseo de las personas por comunicarse fácilmente,
                                               quizá el próximo paso de la empresa de Palo Alto sea más profundo:
geekonomía




                                               transformar Facebook en una plataforma que promueva la trans-
                                               parencia radical, acumulando tanta información de los miembros
                                               de la comunidad que permita tener un perfil bien acabado de ellas
                                               y gestionarlo de manera más eficiente y productiva como vidriera
                                               social (la economía de las intenciones; Searls, 2006).

                                                  No. El caso de Twitter es menos relevante en la transformación
                                               narrativa de la Red, aunque puede que evolucione hacia algo ma-
                                               yor. Es una aplicación pequeña comparada con la gran plataforma
                                               que se construyó alrededor de Facebook y, originalmente, la inno-
                                               vación consistió en trasladar gratis a la Red el ecosistema existente
                                               del text messaging de los dispositivos móviles. La información en
                                               Twitter circula a una mayor velocidad que en otros canales como la
                                               blogosfera y con menor esfuerzo de producción: sólo 140 caracteres
                                               de producción y consumo snack. Aunque podrían parecer una limi-
                                               tación a la hora de expresarse con solvencia, el snack-o-tainment26
                                               tiene una gran influencia en esta dinámica expresiva, ya que los
usuarios disfrutan más del consumo de pequeñas dosis de informa-
ción. Igarza (2009) se refiere a este consumo cultural de retazos de
información como “burbujas de ocio”. Es interesante analizar cómo
influye en Twitter la innovación basada en el aporte de los usuarios
(Tuomi, 2002). Twitter es algo diferente a lo que fue en sus orígenes
en 2006. El usuario final se ha apropiado del producto, introduce
nuevos usos y modifica su estructura. Lo mismo sucede con los ter-
ceros desarrolladores, que han aportado innovación al diseño de la
plataforma. Unas veces Twitter se utiliza como fuente de informa-
ción primaria (alguien twittea un hecho informativo en tiempo real
y es en esta plataforma donde somos informados del mismo). Otras
veces se utiliza como seguimiento de un evento en vivo a través de
los #hashtags. También funciona como correo electrónico a través
de las menciones o los mensajes privados. Se trata de una práctica
social más similar al mundo real que Facebook, porque habitual-
mente uno no dialoga exclusivamente con amigos, sino que se in-




                                                                        capítulo 3
volucra en múltiples conversaciones con lazos sociales débiles, con
pequeñas comunidades de interés y hasta con desconocidos.

   Dicho esto, Facebook y Twitter no representan un cambio tan sus-
                                                                         85
tancial, como en su momento representaron el correo electrónico,
la Web y más recientemente Napster o Google. Ambas plataformas,




                                                                        geekonomía
por ahora, significan solamente un paso en el proceso evolutivo de
la Red y es conveniente relativizar sus logros. Si se comparan am-
bas construcciones de producto, no existe investigación detrás que
soporte a nivel de laboratorio una profunda transformación o inge-
niería social compleja, un algoritmo poderoso como el de Google
ni nada similar. La historia de la creación de TheFacebook (Mezrick,
2009) de la mano de Mark Zuckerberg y Eduardo Severin como es-
tudiantes de Harvard sigue el típico método de ensayo y error que
hacen todas las startups web, donde las ideas son simples y existen
cientos de pequeñas decisiones empresariales acertadas y trabajo
duro a nivel de programación, diseño y construcción de equipo para
hacerlas realidad exitosamente. Desde que TheFacebook nació en
exclusiva para la comunidad universitaria de Harvard en noviembre
de 2004, los tiempos se aceleraron. En pocos meses el 85% de los
estudiantes de grado de esta universidad se habían registrado en la
aplicación. A nivel de construcción de empresa, Facebook sigue el
modelo Googleplex y allí observamos una transformación del dise-
ño de empresa industrial del siglo xx digno de estudio en cualquier
                                               MBA. Con el añadido de que todo esto sucede en una empresa diri-
                                               gida por un joven de venticinco años, donde el promedio de edad
                                               de sus trabajadores es también de venticinco años. Sus nuevas ofici-
                                               nas son un pequeño college a pasos del campus de Stanford Univer-
                                               sity. Un alto porcentaje de sus trabajadores viven a poca distancia
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               a pie de sus oficinas y se alimentan, juegan y hacen vida social en
                                               la propia empresa, como en un college. En el caso de Twitter, Jack
                                               Dorsey tenía en mente un sistema tipo SMS vía Internet antes de
                                               2000, pero en ese momento los dispositivos móviles no ofrecían co-
                                               nectividad a la Red. Lo más parecido a un smartphone era Blackberry
                                               y no funcionaba bien para este tipo de aplicaciones. El método de
                                               ensayo y error, perseverancia, y mejores capacidades técnicas de
                                               los dispositivos hicieron que Twitter comenzara a crecer en 2007 y
                                               que compañías como Comcast y Dell empezaran a utilizarlo para su
                                               comunicación institucional, o la Cruz Roja lo utilizara como un sis-
                                               tema de mensajería para emergencias. Pero, como ya ha sucedido
                                               con Second Life y otras modas, puede que Facebook y Twitter sean
                                               eclipsadas por nuevas redes sociales que –en el momento que el
                                               lector lee este libro– están siendo creadas por un grupo de geeks en
86
                                               las universidades norteamericanas.
geekonomía




                                                  A pesar de ello, Facebook tiene todas las de ganar para consolidar-
                                               se como red social generalista marco. En ese entorno, uno puede ha-
                                               cer todo lo que desea a la vez, inclusive postear para un público más
                                               fiel o, como en el caso de MySpace, convertir la interfaz en un símil
                                               de la habitación de un adolescente: caótica, con un diseño casual e
                                               invadida de carteles de sus ídolos (Boyd, 2008).27 Es el ideal de red so-
                                               cial: un espacio íntimo convertido en sala de ciberencuentros glocal.

                                               3.2. El fenómeno Craigslist o cómo burlar todas las normas de
                                               desarrollo web y ser líder

                                                 El caso de Craigslist28 es un tanto atípico y representa el paradigma
                                               del nuevo socialismo KevinKellyano que se analiza en el capítulo 1.
                                               Kelly (2009) afirma que Craigslist comenzó teniendo una pequeña
                                               audiencia regional en San Francisco en 1995 y pronto se convirtió
                                               en un tesoro nacional, operando con escaso control, muy pocos tra-
                                               bajadores y sin fondos públicos. Craigslist.org no son tan sólo unas
populares páginas amarillas gratuitas. Aunque Craig Newmark, su
creador, la autodefina como una comunidad de servicios, es un fe-
nómeno de red social sin precedentes. Líder absoluto en Estados
Unidos en las transacciones face-to-face de todo tipo vía Web, con
más de 47 millones de usuarios únicos cada mes (una quinta parte
de la población adulta de ese país). Según datos de Alexa de no-
viembre de 2009,29 ocupa el puesto 33 en la lista de sitios más visita-
dos a nivel mundial y el puesto 8 en Estados Unidos, lo cual significa
que en su país posee más tráfico que eBay y Amazon, con la diferen-
cia de que estas empresas tienen juntas más de 36.000 empleados
(Wolf, 2009) y Craigslist solamente 30 personas en plantilla, lo que
demuestra una vez más el poder de la inteligencia colectiva.30 Juan
Pablo Puerta, ingeniero de la empresa y uno de sus exclusivos de-
sarrolladores afirma en un comment de un artículo31 de digitalismo.
com: “Dirigir una empresa de Internet o (que para el caso es casi
lo mismo) ser el arquitecto de un software social es muy similar




                                                                          capítulo 3
a dirigir una campaña política: tienes que darle al usuario lo que
pide porque el exceso de oferta hará que simplemente se vaya si no
encuentra la forma de interactuar contigo y de modelar el servicio
a sus necesidades. Lo que me atrajo de Craigslist al principio no
                                                                           87
es tanto su filosofía ácrata y casi no comercial, sino el hecho que
era la primera empresa que he conocido en tres lustros en Internet




                                                                          geekonomía
que incorporaba al usuario en el proceso productivo. La ausencia
de product managers, middle managers o directores se suple por el
simple hecho de que se abren la mayor cantidad de puentes con los
usuarios, con los que se discute cualquier aspecto del sitio que vaya
a afectarles, desde lo que se cobra por categorías (para lo cual re-
querimos de su consentimiento) hasta las estrategias de expansión
internacional.”

   Craigslist es el portal más popular de Estados Unidos en la bús-
queda de empleo, alquiler de pisos, oferta de roommates, o cual-
quier cosa que se quiera comprar o vender con rapidez. En este sen-
tido, es uno de los principales culpables de la crisis del centenario
modelo empresarial de anuncios en la prensa escrita en su país de
origen. Una investigación sobre clasificados en línea de Pew Inter-
net & American Life Project (2009),32 revela que el 49% de usuarios
de Internet en Estados Unidos han utilizado sitios de anuncios como
Craigslist, comparado con el 22% de 2002 y en detrimento de la pu-
blicidad en la prensa tradicional. Por si fuera poco, se trata de una
                                               plataforma particular en el universo Web 2.0 ya que mantiene sin
                                               cambios desde 1999 su controvertido diseño33 de interfaz y no per-
                                               mite tagging, ni relaciones entre usuarios, ni se puede navegar fácil-
                                               mente entre las imágenes. Además la búsqueda no es eficiente y la
                                               información es efímera ya que es eliminada en pocos días. Craigslist
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               fue portada de Wired Magazine en septiembre de 200934 con un po-
                                               lémico artículo donde Gary Wolf critica la estrategia empresarial del
                                               proyecto, más allá de su contrastado éxito. Para Wolf, la empresa
                                               se muestra displicente con el ingreso de nuevos inversores, y hasta
                                               con la innovación de la interacción y el diseño de la interfaz. Wolf
                                               considera que la plataforma es contraria a todos los principios de
                                               usabilidad web y sentido común, mostrando “un absoluto desdén
                                               por los usuarios y por las reglas del negocio”. Sin embargo Craigslist
                                               es cada día más líder en su segmento y no tiene competencia. Pue-
                                               de que este modelo caótico sea la base de sus buenos resultados
                                               económicos con unas poquísimas categorías de anuncios pagos en
                                               algunas ciudades de Estados Unidos y más del 90% de anuncios pu-
                                               blicados por los usuarios de forma gratuita. Según cifras extraofi-
                                               ciales35 (la compañía no ofrece sus números a la prensa), Craigslist
88
                                               podría ganar en 2009 unos 300 millones de dólares. Por otra parte,
                                               la percepción de la empresa es que los usuarios no están pidiendo
geekonomía




                                               cambios. Para Wolf la plataforma está pasada de moda en muchos
                                               aspectos y cree que su público objetivo demanda cambios. El artículo
                                               de Wired también profundiza en la personalidad de su creador Craig
                                               Newmark, que se define a sí mismo como el Forrest Gump de Inter-
                                               net, por su aislamiento y su movimiento a contracorriente de las
                                               tendencias empresariales de las redes sociales. Según el artículo,
                                               Newmark procura mantenerse al margen de cualquier responsabili-
                                               dad ejecutiva en la empresa y su mayor dedicación es hacia la aten-
                                               ción al cliente.

                                                  Pero la principal virtud de Craigslist es que nació y se mantuvo
                                               respetando a rajatabla algunos principios clave en el diseño de las
                                               redes sociales: sobre todo, escuchar a los usuarios. Pero también
                                               contar una historia, definir lo que no es el producto, empezar lo
                                               más rápido posible sin optimizar prematuramente, hacer un proyec-
                                               to con el número justo de personas y no pretender crecer de forma
                                               vertiginosa porque, sin inversión, se puede morir de éxito. Como
señala Pisani (2009): “Craigslist tiene dos ingredientes que siempre
triunfan en California: pragmatismo e ilusión comunitaria posthip-
pie”. Lo más atractivo de su modelo empresarial es precisamente la
carencia de un modelo y la reafirmación de que no existen patrones
únicos de desarrollo. Aunque parezca que haya reglas precisas para
el éxito, no las hay, y existen decenas de estrategias diferentes de
empresas que llegaron a ser populares entre sus audiencias y otras
que, siguiendo el mismo camino, han fallado. El usuario siempre es
el que tiene la última palabra y en el caso de Craigslist ha sido su
principal motor de aceptación. User-driven innovation nuevamente.
Si el producto funciona tan bien y a tan bajo coste, ¿por qué cam-
biar? Mientras, todos seguimos disfrutando a coste cero de la enor-
me productividad de la lista de Craig.

3.3. Amazon. Acceso a la biblioteca universal en 60 segundos




                                                                          capítulo 3
   Desde sus orígenes en 1995, Amazon.com ha estado creciendo
de forma progresiva y se ha ido diversificando sin verse afectada por
la burbuja de 2001 ni por otras crisis que se sucedieron en paralelo.
Como bien señala James Marcus (2004) en su trabajo sobre los pri-
                                                                           89
meros años de la empresa de Seattle, su objetivo inicial era conver-
tirse en un destino para los lectores más que en una tienda de libros




                                                                          geekonomía
en línea. Y aunque fueron sus propios empleados quienes hicieron
las reseñas iniciales de su catálogo de libros, Amazon ha crecido
tanto que se ha convertido en el referente editorial más importan-
te, así como en el principal retailer vía Internet en Estados Unidos.
En 2008 vendió cerca del 15% de todos los libros comprados en
ese país y posee el 80% del mercado mundial de librerías virtuales.
Actualmente Amazon extiende su dominio a Amazon Web Services
y Kindle. De vender libros pasó a ofrecer todo tipo de productos y
luego a vender espacio en la nube con un desarrollo comercial que
sirve de referencia al mercado. Desde 2007 produce hardware para
utilizar con su tienda virtual. Es inevitable trazar un paralelismo en-
tre iTunes-iPod/iPhone y Amazon.com-Kindle. Como se analiza en el
capítulo 1 en la transformación de los distribuidores e intermedia-
rios, los editores deben encontrar modos innovadores de distribuir
la palabra escrita. En eso está Amazon. Su Kindle se introdujo de
forma significativa en el mercado36 con la misión de tener todo libro
editado disponible en Kindle en 60 segundos. En junio de 2009 la
empresa anunció acuerdos con universidades y periódicos,37 lo cual
                                               prueba su estrategia de expansión. No se puede descartar que en el
                                               futuro Amazon trabaje como editor, o mejor dicho que suprima la
                                               figura del editor, ya que puede ser a la vez comprador y vendedor
                                               de un libro, sin otra intermediación que la negociación directa con
                                               el autor.
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               4. La crisis del formato blog.
                                               La dispersión de la atención de los usuarios38

                                                  Si tuviera que trabajar de consultor o diseñador de blogs39 diría
                                               que el éxito en su construcción radica en cuatro componentes bá-
                                               sicos: foco, relevancia, autenticidad (no escribir como lo harían en
                                               un departamento de marketing) y frecuencia o persistencia. Ésa es
                                               la fórmula que utilizamos con Carlos Scolari para construir digita-
                                               lismo.com40 y nos sentimos muy gratificados con dicho esfuerzo.
                                               La Web social facilita el copia y pega, lo cual significa que se leen
                                               y replican las mismas cosas en múltiples canales. Entonces, quien
                                               aporta foco, relevancia y persistencia destaca sobre el resto. Existen
                                               pocas técnicas para ser un buen blogger: escribir opiniones origi-
90
                                               nales con un punto de vista claro; enlazar con los recursos origi-
                                               nales dando crédito al autor; postear con gran frecuencia, usar los
geekonomía




                                               enlaces permanentes para hacer las entradas más accesibles a los
                                               motores de búsqueda y enlazar con otros blogs. Pero esta tarea es
                                               muy difícil y lleva tiempo. En esta dificultad radica la crisis del for-
                                               mato, como bien señala Charles Arthur (2009) por su propia expe-
                                               riencia como editor de tecnología en The Guardian.41 Aún haciendo
                                               uso de sindicadores RSS, no hay tiempo de leer tantas bitácoras.
                                               Hay demasiadas. La saturación conduce a los usuarios y al mercado
                                               hacia nuevos horizontes. Entre 1997 y 2005 la cultura blog fue una
                                               marca pronunciada de acné en la cara de un adolescente llamado
                                               World Wide Web. Y sobre todo, la primer tecnología invisible en la
                                               Web. De forma progresiva, sus autores penetraron en los medios
                                               mainstream norteamericanos y comenzaron a hacerse un hueco en
                                               las convenciones políticas, en los debates presidenciales y en las
                                               redacciones.42 Pero la evolución continúa: las redes generalistas son
                                               un paso más allá en los blogs textuales y Flickr es un paso más allá
                                               del fotoblog. No es necesario eliminar ningún formato. Mejor es
                                               estar en todos los sitios posibles esmerándose por conseguir visi-
bilidad y atención. Todos los formatos de la escritura colaborativa
cumplen con la premisa de que el mercado son conversaciones. En
cualquier caso, serán herramientas exitosas las que logren atender
con eficiencia las necesidades de comunicación de los usuarios, po-
tenciando la creación colectiva, la cultura del remix y la producción
y el consumo desde abajo hacia arriba.

   Uno de los principales autores y expertos de la blogosfera de ha-
bla hispana, José Luis Orihuela (2009), propone un decálogo43 sobre
lo que es (y no es) un blog. Se trata de un punto de partida para
debatir la crisis del formato. Me quedo con 4 ideas centrales de su
decálogo. Según Orihuela: 1) los blogs no son un género, sino un
medio, y es el propio medio el que define el lenguaje y el formato;
2) la capacidad de influencia de los blogs está mediatizada por la
blogosfera en la que se inscriben. Aunque existen excepciones, no
se puede exigir a los autores una influencia similar a la que ofrecen




                                                                        capítulo 3
los medios masivos; 3) las referencias cruzadas hipertextuales cons-
tituyen uno de los ejes articuladores de la conversación en la blo-
gosfera y de la cultura de los blogs. O sea que no se puede medir la
participación en la blogosfera en función de los comentarios de un
                                                                         91
blog, sino que la interrelación es más compleja; 4) la relación entre
viejos y nuevos medios se rige por una dinámica de acumulación y




                                                                        geekonomía
complementariedad, y no por una de sustitución. Como bien señala
Scolari (2009) en su análisis de las narrativas transmediáticas, los
medios se influyen mutuamente y en esa influencia se transforman
en algo distinto.

   Asociado al punto 4 que señala Orihuela, los blogs están mutan-
do rápidamente, y con esa mutación algunos creemos que se con-
vertirán en otra cosa (¿e-magazines?) y dejarán de ser cuadernos de
bitácora personales con enlaces externos, como en sus orígenes
comerciales en 1999. El “fin de los blogs” representa una llamada
de atención para un formato que puede perder el ritmo de cambio
que proponen los diseñadores de las nuevas arquitecturas de las
redes sociales a gran escala. Es evidente que el tipo de escritura
en posts sigue siendo una herramienta valiosa y productiva: en mu-
chos casos borradores y versiones inacabadas del pensamiento de
sus autores. Pero algo ha cambiado. En el período 1999-2005 los
blogs eran el gestor de contenidos por excelencia; sin embargo,
en 2010 se hace difícil comenzar uno desde cero si se carece de un
                                               perfil previo atractivo que permita ganar una mínima masa crítica
                                               de usuarios.44 Rosemberg (2009) cree que cuando un autor impor-
                                               tante deja de postear y anuncia la muerte de los blogs, solamente
                                               transmite su experiencia personal y el ciclo de vida de su blog. Pero
                                               cada blogger relevante que desiste de escribir es un nodo menos
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               en la blogosfera y un comportamiento emergente que no se puede
                                               pasar por alto.

                                                  El ruido existente en Internet como consecuencia de la multiplica-
                                               ción de contenidos generados por el usuario y del preferential attach-
                                               ment (dada la elección entre dos nodos, se elegirá el nodo más conec-
                                               tado; Barabási, 2002) convierte la mayoría de blogs en casi invisibles,
                                               y por tanto irrelevantes a la hora de crear opinión pública, con lo que
                                               el crecimiento y la visibilidad se decantan hacia los hubs.45

                                                  Vale tener en cuenta dos tipos de fenómenos orgánicos que se
                                               configuran en paralelo pero poseen diferentes dimensiones. Por un
                                               lado, la evolución de la escritura y el desarrollo de las redes tecnoló-
                                               gicas. Por otro, los productos coyunturales y las modas de consumo.
92
                                               Como afirmo al comienzo del capítulo, ya no existe retroceso posi-
                                               ble en la producción de contenidos generados por los usuarios y en
geekonomía




                                               el egocasting. En cuanto a las modas de consumo mediático, todo
                                               es posible. Sufrirán los entornos que ofrezcan prácticas comunica-
                                               cionales que no consigan adaptarse con celeridad a las nuevas de-
                                               mandas de consumo. Hablo de la reorganización de la conversación
                                               social y la noción de amigos bajo las redes sociales débiles.

                                                  Si la transparencia y la autenticidad en las redes sociales se con-
                                               solidaron con los blogs y se transmitieron a otras redes sociales para
                                               convertirse en la norma, Facebook aceleró el proceso. Pero he ob-
                                               servado un comportamiento emergente que no es trivial desde que
                                               tengo mi cuenta en Facebook: posteo en mi blog, copio y pego en
                                               Facebook el contenido y recibo más comentarios en mi cuenta de
                                               Facebook que en el blog de donde proviene el texto original. La
                                               conversación en Facebook es más informal, y por ende, se presta a
                                               un mayor diálogo que en los comments de los blogs. Otra conducta
                                               relevante es la que se refiere a la conformación de las redes de amis-
                                               tad. En las redes pre-Internet los lazos tenían un componente físico
y el entorno era totalmente condicionante. Por eso, emigrar resul-
taba traumático, ya que se rompían todos los nodos constituidos y
no había plataformas disponibles a distancia para reconstituirlas.
El correo postal era lento y trabajoso. En cambio, las redes sociales
en Internet nos unen y se convierten en un depositario de nuestra
historia personal. Las personas siempre fueron conscientes de sus
amigos, pero ahora saben mucho de los amigos de sus amigos y eso
genera un proceso social complejo. Y en esa práctica, los blogs tie-
nen escaso recorrido porque son herramientas de producción indi-
vidual, donde la participación colectiva se limita a los comentarios.
Más allá de la facilidad de publicación que tienen los autores, el
funcionamiento de los blogs no es muy diferente al de las cartas de
lectores de un medio gráfico tradicional, sólo que sin edición. Aquí
está la clave del análisis sobre el futuro de los blogs: su incapacidad
para crear redes en condición de igualdad sin la obligación de ges-
tionarse desde un nodo dominante.




                                                                          capítulo 3
   Boutin (2008)46 anuncia malas noticias para los aspirantes a blo-
gueros: “You’re too late”. Boutin interpreta que escribir un blog ya
no es la idea brillante de unos años atrás y que si bien la blogosfera
                                                                           93
alguna vez fue un espacio de frescura, autoexpresión y pensamiento
independiente, hoy se ha visto inundada por un mar de contenidos




                                                                          geekonomía
de pago, marketing semioculto y amateurismo sin vocación de cali-
dad. Por otra parte, y como ya se dijo haciendo mención al decálogo
de Orihuela (2009), las referencias cruzadas entre blogs (y no los
comments) son el eje articulador de la conversación en la blogosfera.
Sin embargo estos comentarios siempre han sido una herramienta
valiosa de interacción entre el autor y sus lectores. El problema es
que en 2010 los comments han perdido la batalla del spam, promue-
ven un espacio autista alejado de la línea argumental que el autor
propone en su post, se han mudado a otras plataformas (como seña-
lé en el caso de Facebook) o son simplemente irrelevantes.

   Los blogs individuales se están convirtiendo en un tipo de plata-
forma ruidosa. La sencillez de creación a través de tecnologías in-
visibles para el autor fueron esenciales en su éxito inmediato. Para
diseñar un blog ni siquiera era preciso conocer HTML, el código
estaba oculto y el permalink constituía una página web individual,
una unidad de consulta permanente. Pero a diferencia del período
temprano de la Web 2.0, las variables tecnología invisible y facilidad
                                               de publicación hoy son comunes a todas las plataformas colabora-
                                               tivas. O sea que no existe el componente técnico diferencial de sus
                                               primeros años.

                                                  En la lista de los principales blogs de Technorati o Google Blog
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               Search, los líderes son el resultado de un esfuerzo colectivo, redes
                                               de blogs escritos por profesionales o e-magazines que lo único que
                                               mantienen de la filosofía blog es su formato y metaestructura. Más
                                               allá de estos casos particulares de producción profesional o semi-
                                               profesional, los blogs están perdiendo fuerza por varios motivos,
                                               entre los que destacan:
                                                  a) Cierta saturación del formato por carencia de actualización y
                                               muerte súbita de muchos de ellos.
                                                  b) El esfuerzo de calidad o creatividad que requiere lograr la
                                               atención diaria de los lectores frente a la competencia que propo-
                                               nen formatos de interactividad menos trabajosos como Facebook o
                                               Twitter. En este sentido, la arquitectura de los blogs fomenta que su
                                               consumo se base exclusivamente en la lectura de los últimos posts,
                                               convirtiendo los archivos en un espacio inexplorado para los nue-
94
                                               vos lectores.
                                                  c) La creación desmesurada de splogs (blogs falsos que en reali-
geekonomía




                                               dad son aplicaciones de spam), creados de forma automática para
                                               obtener rédito de los servicios de Google AdSense o Adwords a tra-
                                               vés del ascenso en las posiciones de los motores de búsqueda y/o
                                               de una exagerada política de enlaces hacia otros splogs. También es
                                               justo señalar que este fenómeno está perdiendo fuerza debido al
                                               esfuerzo de desarrollo de las propias plataformas de blogs.
                                                  d) La pérdida de jerarquía de los blogs en el algoritmo PageRank
                                               de Google, que debe atender un creciente volumen de contenidos
                                               generados por el usuario, lo que promueve una mayor invisibilidad
                                               hacia estos contenidos.
                                                  e) Ciertos blogs promueven una dinámica de charlatanería que re-
                                               sulta perjudicial para su transformación de nodo en hub. Cada blo-
                                               guero tiene derecho a decir lo que se le ocurre; sin embargo, la intras-
                                               cendencia de los contenidos y la cita abusiva a otros blogs afecta su
                                               lectura, ya que no aportan valor añadido a la conversación social.
                                                  f) Sunstein (2006) analiza los problemas de la deliberación políti-
                                               ca en la blogosfera señalando que se propagan fácilmente errores
sin constatarlos, existen múltiples perfiles escondidos y se polarizan
los grupos y las opiniones a través de una cámara de eco donde sólo
se escuchan quienes tienen pensamiento afín. Si en el debate políti-
co comunitario la deliberación es muchas veces una parodia debido
a que los opuestos no se escuchan mutuamente, en la blogosfera
esta parodia se acentúa. Un estudio basado en la campaña presiden-
cial americana de 2004 47 comprueba que la mayoría de blogs no en-
lazan con bitácoras de ideas opuestas, desperdiciando la posibilidad
de propiciar un verdadero debate público. Analizados 1.000 blogs,
el 91% sólo enlazaba con otros de pensamientos similares.

   En estos últimos diez años, las redes sociales generalistas han
evolucionado mucho más a nivel técnico y social. Blogs que se han
hecho virales a partir del esfuerzo individual como TechCrunch o
Daily Kos 48 son en 2010 exitosas editoriales que poco mantienen del
formato original. La mayoría de versiones en línea de los periódicos




                                                                         capítulo 3
tradicionales poseen blogs de sus periodistas estrella. Una de las
páginas más visitadas de la versión digital de The New York Times es
el blog del crítico tecnológico David Pogue.49 Esto demuestra que la
discusión entre medios masivos tradicionales y blogosfera alterna-
                                                                          95
tiva es una falsa dicotomía. El formato ya se ha estandarizado. Por
otra parte, y dado que las generaciones de nativos digitales han




                                                                         geekonomía
vivido en Internet con un decreciente consumo de los formatos tra-
dicionales de los medios, el truco del marketing de estos medios es
proponer productos surgidos desde espacios alternativos de la Web
social para poder ganar audiencias en la Web que le son esquivas
en sus plataformas históricas.

   Por último, los blogs han dejado de ser una moda, y en esta di-
námica de obsolescencia planificada de aplicaciones de la Web so-
cial esto tampoco es una buena noticia para dicho formato. ¿Qué
sucederá cuando la construcción de plataformas para el blogging
deje de ser un modelo de negocio rentable? Nuevos actores y for-
matos producen valor y además permiten la innovación a través de
los mashups. El darwinismo digital se encarga de la supervivencia
de los más aptos. Evan Williams, creador de Pyra Labs (Blogger.com)
en 1999 e inventor del meme blogger, dejó la empresa veinte meses
después de que fuera adquirida por Google en 2003 y creó Twitter
en 2007. Paradójicamente, hoy Twitter es una de las mayores ame-
nazas al formato blog. Es irónico leer a Evan Williams, ex CEO de
                                               Blogger y actual CEO de Twitter, decir en 2004 que los blogs “se con-
                                               vertirán en el formato por defecto de los websites personales, los
                                               cuales serán centrales en las vidas de las personas” (Stone, 2004).

                                                  La cultura DIY también condiciona la evolución de la escritura
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               colaborativa. Cuando los usuarios más avanzados no encuentran la
                                               herramienta apropiada para desarrollar cierta tarea de comunica-
                                               ción, se la inventan o modifican aplicaciones pensadas para fines
                                               diferentes. Esto provoca la creación constante de nuevos medios.
                                               A mayor velocidad de transmisión de la información vía Internet,
                                               mayor capacidad de diseñar formatos multimedia en detrimento de
                                               los formatos textuales. Esta variable no es anecdótica en el creci-
                                               miento de redes sociales más complejas y con una experiencia de
                                               usuario más atractiva. Por otra parte, se debe tener en cuenta el
                                               efecto de la Red. El resultado es mayor que la suma de sus partes.
                                               Wikis, redes sociales (generalistas o de nicho) y microblogging dan
                                               mayores facilidades para la construcción de inteligencia colectiva
                                               en tiempo real.

96
                                                  El nacimiento de Blogger en 1999 fue una representación más del
                                               consumo snack. Pero ha pasado una década. Mejor que una agenda
geekonomía




                                               en papel es 43things o Google Calendar. Ya no necesitamos escuchar
                                               todo el vinilo, en iTunes se puede comprar sólo una canción por
                                               0,99 dólares. Y mejor aún, en Spotify se puede escuchar gratis y sin
                                               violar la legalidad. Innovar y reinventarse es la fórmula mágica en la
                                               geekonomía. Los primeros usuarios que adoptaron y promovieron
                                               la cultura blog también están cambiando su dinámica de consumo
                                               hacia un modelo siempre conectados. En este sentido, y como señalé
                                               al comienzo del subcapítulo, postear de forma periódica representa
                                               un esfuerzo excesivo para ciertos autores, que lo pueden suplir con
                                               aplicaciones más sencillas a través de dispositivos móviles que ofre-
                                               cen movilidad física más conectividad. En esa filosofía innovadora
                                               ya citamos los ejemplos de blogs individuales convertidos en edito-
                                               riales con modelos de negocio consolidados con la publicidad. Otro
                                               ejemplo de transformación a la inversa es el semanario The Printed
                                               Blog, que si bien por problemas financieros tan sólo ha durado un
                                               año,50 significó un preaviso de cómo se pueden reconfigurar una y
                                               mil veces los modelos de distribución de noticias.
Los medios masivos deciden qué exponer y qué ignorar, otorgan-
do relevancia a unos contenidos sobre otros, con el fin de conquis-
tar la atención de los usuarios y en algunos casos de imponer sus
ideas políticas. Con este destacado rol, las empresas que se dedican
a crear o distribuir contenidos ganan dinero y poder decidiendo
cómo organizar la información a nivel de interfaz. El éxito de los
blogs en sus inicios radicaba en romper esa dinámica bajo el poder
del nuevo desorden digital (Weinberger, 2007). La idea es dejar de
percibir la sobrecarga de información como un problema y tomar
de ese inmenso flujo lo que interesa en el momento que interesa,
como quien abre el grifo para beber agua cuando tiene sed en vez
de guardar el agua previamente en botellas RSS.

   La idea central del texto de Weinberger (2007)51 es que las limita-
ciones físicas organizan la vida de las personas, su acceso al conoci-
miento, su forma de hacer negocios y sus creencias. Esas restriccio-




                                                                         capítulo 3
nes físicas de la información analógica no sólo limitan la percepción
del mundo, sino que también dan más poder a las personas que
controlan las organizaciones responsables de editar la información.
La paradoja es que en esa organización los editores tienen aún más
                                                                          97
poder que quienes producen los contenidos. Según Weinberger,
los editores deciden qué exponer y qué ignorar, organizando la in-




                                                                         geekonomía
formación de una manera que la desorganiza de otra. Se trata de
una construcción de sentido, de una configuración de poder legi-
timando unos elementos sobre otros que quedan relegados. Si se
cataloga un libro por orden alfabético, no se puede organizar por
año de edición, ni tamaño, ni éxito de ventas, ni color. Ése es el
histórico papel poderoso del director de un medio o del editor de
una colección de libros. En tanto la información miscelánea rompe
esa dinámica de poder, permitiendo la edición en la salida y no en
la entrada. El análisis del autor es apasionante, porque nos hace
entender que la organización de la información (en definitiva de
nuestro conocimiento) no se deriva de la organización “natural” del
mundo, sino que refleja nuestros intereses y necesidades, constru-
yendo creencias y poder. Esas limitaciones físicas de la organización
de la información no sólo afectan nuestra percepción del mundo,
sino que además dan mayor poder a las instituciones responsables
de editar la información.
En definitiva, todo lo que sea escritura colaborativa y desinterme-
                                               diación mediante etiquetas y múltiples sistemas organizativos es un
                                               valor positivo para desbaratar el orden analógico preconfigurado. El
                                               postdigitalismo profundiza esa tendencia. La Web social contribuye
                                               en esa nueva construcción de poder. Los blogs promovían una se-
                                               lección y toma de sentido a gusto del usuario y no exclusivamente
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               del editor. La organización digital les facilitaba un metaorden que
                                               prescindía del papel y su lógica unidimensional. El control cambiaba
                                               de manos y pasaba a ser del usuario. Pero todo esto pierde sentido
                                               cuando los blogs pasan a formar parte de la estructura mediática
                                               tradicional, comparten su filosofía de edición en la entrada y anulan
                                               los comentarios, como han hecho muchos periódicos. Así, ciertos
                                               blogs retroceden hasta convertirse en un formato tradicional con
                                               características particulares (artículos cortos con enlaces externos y
                                               organizados en orden decreciente de publicación), pero atendien-
                                               do a la misma lógica up-down de la escritura profesional. El debate
                                               continuará...



98
geekonomía
Cinco ideas principales
del capítulo 3

1   Los medios se reconfiguran con la convergencia, el mestizaje y
    la evolución orgánica, proponiendo una conversación renova-
da, que va más allá de la especificidad de blogs, redes sociales, wikis
y otro tipo de formatos colaborativos.



2   La transformación narcisista de la Web no es una variable lúdica
    sino una evolución y un componente vital en el cual cada usua-
rio se convierte en un nodo que vive y se autogestiona en la Red
transfiriendo su experiencia a la comunidad.



3    El horizonte mediato de la Web social se construirá mediante
     una arquitectura de plataformas distribuidas, open source, ge-




                                                                          capítulo 3
neralistas, gratuitas pero también de target y pensadas para dispo-
sitivos móviles. Información fácilmente organizada y accesible, utili-
dad, gestión en tiempo real y gran poder de procesamiento.

                                                                           99

4   No hay riesgo de crisis como en 2001. La Web es el medio domi-
    nante de socialización para los jóvenes, lo cual dibuja un esce-




                                                                          geekonomía
nario y un tipo de interacción inexistente hace una década. Por otra
parte, los costes de crear una aplicación y sostener una startup web
son mucho menores de lo que eran antes de 2001.



5   Sufrirán los entornos que ofrezcan prácticas comunicacionales
    que no se adapten con celeridad a las demandas de consumo.
Hablo de la reorganización de la conversación social y de la no-
ción de amigos bajo las redes sociales débiles. La blogosfera fue un
espacio de frescura, autoexpresión y pensamiento independiente,
pero hoy se ve afectada por contenidos de pago, marketing semi-
oculto, amateurismo sin vocación de calidad y splogs. En el caso de
su adopción por parte de la prensa tradicional, se ha retrocedido
a una lógica de edición tradicional que sólo respeta su lenguaje y
metaestructura, pero no su filosofía original de conversación y es-
critura colaborativa.
Cinco recursos relacionados
                                               disponibles en Internet

                                               1   Cobo Romaní, Cristóbal; Pardo Kuklinski, Hugo (2007). Planeta
                                                   Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food. Grup de
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               Recerca d’Interaccions Digitals, Universitat de Vic. Flacso México.
                                               Barcelona / México DF.
                                               www.planetaweb2.net



                                               2 Vogelstein, Fred. “Keyword: Monopoly”, Wired Magazine,
                                                 agosto de 2009.
                                               www.wired.com/techbiz/it/magazine/17-08/mf_googlopoly



                                               3 Urstadt, Bryan. “Social Networking Is Not a Business”.
                                                 Technology Review, agosto de 2008.
                                               www.technologyreview.com/Biztech/20922/



100
                                               4    Podcast reseña de Everything is miscellaneous. The power of
                                                    the new digital disorder, David Weinberger (Times Books.
                                               Nueva York. 2007), y The cult of the amateur. How today’s internet
                                               is killing our culture, Andrew Keen. Máster de Comunicación Digital
geekonomía




                                               Interactiva. Universitat de Vic.
                                               www.campusmovil.net/podcast/podcastwkeen.m4a



                                               5   Auletta, Ken. “The Search Party. Google squares off with its
                                                   Capitol Hill critics”. The New Yorker, 14 de febrero de 2008.
                                               www.newyorker.com/reporting/2008/01/14/080114fa_fact_
                                               auletta?currentPage=all
Notas Capítulo 3


1. Pardo Kuklinski, Hugo; Brandt, Joel y Puerta, Juan Pablo (2008). “Mobile
Web 2.0.Theoretical-technical framework and developing trends”. Interna-
tional Journal of Interactive Mobile Technologies (iJIM), vol. 2, nro. 4.
http://online-journals.org/i-jim/article/viewArticle/535


2. Infografía disponible en: http://hci.stanford.edu/jbrandt/hugo/info-
graphic/MobileWeb2_English.pdf
Versión en castellano en: http://hci.stanford.edu/jbrandt/hugo/infogra-
phic/MobileWeb2_Spanish.pdf


3. Funky Mobile Ideas SL es la spin-off española que dirijo desde 2009 en
Barcelona. Su principal producto es CampusMovil.net. Su lanzamien-
to definitivo en España fue en septiembre de 2009, y está previsto ha-
cerlo en Latinoamérica para el segundo semestre de 2010. El proyecto




                                                                                   capítulo 3
CampusMovil.net consiste en una red social gratuita vía dispositivos móvi-
les para la comunidad universitaria iberoamericana, con acceso exclusivo
y transparente a través de la cuenta de correo electrónico asignada por la
universidad a sus miembros. Se trata de un campus virtual no oficial con eje
                                                                                   101
en el uso en dispositivos móviles. Más información sobre la empresa en:
www.campusmovil.net/info-empresa.php




                                                                                   geekonomía
4. Mayer, Marissa, Innovation at Google: The physics of data. Xerox Parc, Palo
Alto. 14 de agosto de 2009.
www.parc.com/event/936/innovation-at-google.html


5. Huberman, Bernardo; Romero, Daniel; Wu, Fang. “Social networks that
matter: Twitter under the microscope”. First Monday, vol. 14, nro. 1, 5 de ene-
ro 2009. http://firstmonday.org/htbin/cgiwrap/bin/ojs/index.php/fm/
article/viewArticle/2317/2063


6. Online news. For many broadband users, the Internet is a primary news source,
John B. Horrigan. Pew Internet & American Life Project. 22 de marzo de 2006.
www.pewinternet.org/Reports/2006/Online-News-For-many-home-
broadband-users-the-internet-is-a-primary-news-source.aspx?r=1


7. Estadística de número de lectores 2008 de la Newspaper Association of
America (NAA). www.naa.org/TrendsandNumbers/Readership.aspx
8. “Confundiendo el negocio de los medios con el de la impresión”, digita-
                                               lismo.com, 5 de junio de 2009. http://digitalistas.blogspot.com/2009/06/
                                               confundiendo-el-negocio-de-los-medios.html


                                               9. “Social Networking Is Not a Business”, Bryan Urstadt. Technology Review,
                                               agosto de 2008. www.technologyreview.com/Biztech/20922/
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               10. “How Facebook Works. The social network’s technology manages a vast
                                               and rapidly expanding web of connections for its millions of users”, Alan
                                               Zeichick. Technology Review, agosto de 2008.
                                               www.technologyreview.com/communications/20921


                                               11. www.facebook.com/press/info.php?statistics


                                               12. Datos de noviembre de 2009. Ranking mundial de Alexa: www.alexa.
                                               com/topsites/global;1.


                                               13. Según datos de la propia compañía y divulgados por la agencia Reuters,
                                               en septiembre de 2009 Facebook comenzó a dar un saldo de caja positivo.
                                               www.elpais.com/articulo/economia/Facebook/logra/ingresar/gasta/
102
                                               previsto/elpeputec/20090916elpepueco_3/Tes
geekonomía




                                               14. “Great Wall of Facebook: The Social Network’s Plan to Dominate the
                                               Internet — and Keep Google Out”, Fred Vogelstein. Wired Magazine, julio
                                               de 2009. www.wired.com/techbiz/it/magazine/17-07/ff_facebookwall


                                               15. Lacy (2008) señala que con la explosión de la burbuja de Internet en
                                               2001, en Silicon Valley se perdieron unos 450.000 empleos: “Gente que
                                               creía que estaba cambiando el mundo y se demostró que nadie es indis-
                                               pensable en la corporación USA”. Lacy (2008) revela una anécdota esclare-
                                               cedora de la industria automotriz que también vivió un período de burbu-
                                               ja. Entre 1896 y 1930, había más de 1.800 fabricantes norteamericanos de
                                               coches. Sobrevivieron tres empresas que lideraron el mercado durante más
                                               de setenta años. En 2009 estas tres empresas sufren otra gran crisis que
                                               seguramente provocará una nueva ola de innovación. Excelente artículo
                                               sobre el tema en Wired Magazine, Junio 2009.
                                               www.wired.com/culture/culturereviews/magazine/17-06/nep_auto
16. Se podría afirmar irónicamente que la “IPO” de Facebook fue la entrada
de Microsoft en la empresa en 2007.


17. Google lanzó su IPO en agosto de 2004. El precio de apertura por ac-
ción fue 85 dólares y cerró la jornada con 600 dólares la acción, con lo que
colocó el valor de mercado de la empresa en su primer día en Bolsa en
28.000 millones de dólares.


18. La excelente conferencia de Guy Kawasaki de diciembre de 2007 en
Xerox Parc By the Numbers: How I built a Web 2.0, User-Generated Content,
Citizen Journalism, Long-Tail, Social Media Site for $12,107.09 explica a fondo
la reducción de costes asociados a la creación de una plataforma de la Web
social. www.parc.com/event/608/by-the-numbers.html


19. Invito a leer el excelente artículo “The Search Party. Google squares off
with its Capitol Hill critics”, Ken Auletta. The New Yorker, 14 de febrero 2008.




                                                                                   capítulo 3
www.newyorker.com/reporting/2008/01/14/080114fa_fact_auletta?
currentPage=all


20. “Keyword: Monopoly” es el artículo sobre Google de Fred Vogelstein en
                                                                                   103
la edición de agosto de 2009 de Wired Magazine. El texto es imprescindible
y plantea muchas dudas sobre la misión corporativa de Google de “hacer el




                                                                                   geekonomía
bien”. www.wired.com/techbiz/it/magazine/17-08/mf_googlopoly


21. Desde 2004 Google puso en marcha el proyecto Google Library, que con-
siste en digitalizar los libros publicados de manera progresiva. El comienzo
fue un acuerdo con Stanford University y University of Michigan para dispo-
ner de sus bibliotecas en dicho proceso.


22. www.elpais.com/articulo/sociedad/Biblioteca/Nacional/Francia/pacta/
Google/digitalizacion/fondos/elpeputec/20090820elpepusoc_8/Tes


23. No resuelta cuando este libro fue publicado en enero de 2010.


24. Destaco dos: “The most fascinating thing about Twitter is not what it’s
doing to us. It’s what we’re doing to it”, Steven Johnson. Time Magazine, 5
de junio de 2009.
www.time.com/time/business/article/0,8599,1902604,00.html
“The Message of Twitter: ‘Here It Is’ and ‘Here I Am’”, Henry Jenkins. henry-
                                               jenkins.org, 23 de agosto de 2009.
                                               http://henryjenkins.org/2009/08/the_message_of_twitter.html


                                               25. Creo que el tiempo y el desarrollo de los #hashtags reafirmaron mi postu-
                                               ra sobre el valor de la relevancia en Twitter, que mejoró notablemente con la
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               adquisición e integración de Summize en julio de 2008, al permitir rastrear
                                               conversaciones sin ser un follower y otorgándole mayor visibilidad a la con-
                                               versación global. Con respecto a la minipolémica véase “Hugo Pardo sobre
                                               Twitter”: www.ecuaderno.com/2007/09/24/hugo-pardo-sobre-twitter


                                               26. Se define al snack-o-tainment como la industria del entretenimiento ba-
                                               sada en pequeños retazos de información. Wired Magazine utilizó el térmi-
                                               no en un artículo de Nancy Miller en marzo de 2007.
                                               www.wired.com/wired/archive/15.03/snackminifesto.html
                                               La cultura snack está reflejada con minuciosa precisión y múltiples ejemplos
                                               en: Igarza, Roberto (2009). Burbujas de Ocio. Nuevas formas de consumo
                                               cultural. La Crujía. Buenos Aires.


                                               27. Taken Out of Context: American Teen Sociality in Networked Publics (2008).
104
                                               Danah Boyd. Disertación doctoral. University of California-Berkeley, School
                                               of Information. Abstract disponible en www.danah.org/papers/TOC-Abs-
geekonomía




                                               tract-English.pdf


                                               28. Más información sobre la empresa en su propia web:
                                               www.craigslist.org/about/factsheet
                                               Para conocer la filosofía de Craigslist escuchar podcast de Craig Newmark y
                                               el CEO Jim Buckmaster en la Web 2.0 Conference de 2004.
                                               http://itc.conversationsnetwork.org/shows/detail330.html
                                               Para conocer la repercusión cotidiana que tiene Craigslist en Estados Uni-
                                               dos, recomiendo el documental 24 hours on Craigslist.
                                               http://24hoursoncraigslist.com/subs/trailer.html


                                               29. Datos de noviembre de 2009. Ranking mundial de Alexa:
                                               www.alexa.com/topsites/global;1.
                                               Ranking de Estados Unidos: www.alexa.com/topsites/countries/US


                                               30. No es el único ejemplo. En el momento de ser comprada por Google en
                                               2006, YouTube tenía solamente 60 trabajadores. Para la época de su explo-
sión como canal VoiP el equipo de Skype estaba formado por 200 personas
que cubrían 53 millones de suscriptores al servicio. El ejemplo extremo es
de PlentyOfFish.com, un sitio para hacer contactos que en el momento de
convertirse en líder en Canadá tenía sólo 1 trabajador, su creador Markus
Frind. www.plentyoffish.com/about_team.aspx


31. http://digitalistas.blogspot.com/2009/08/el-exito-de-craigslistorg-o-
como-burlar.html


32. Datos de Mayo de 2009.
http://pewinternet.org/Reports/2009/7--Online-Classifieds.aspx


33. Basados en el cuestionamiento al diseño de la interfaz, varios diseña-
dores independientes han realizado propuestas para modernizar Craigslist.
Aquí un ejemplo: http://craigslist.thebignoob.com




                                                                              capítulo 3
34. “The tragedy of Craigslist”, Gary Wolf. Portada de Wired Magazine, sep-
tiembre de 2009.


35. www.wired.com/epicenter/2009/06/craigslist-revenues-100-million-
                                                                              105
%E2%80%94-or-300-million




                                                                              geekonomía
36. Medio millón de dispositivos en 2008 según Mark Mahaney (Citigroup
Research) con su plus de conexión 3G y 1.500 libros en el dispositivo. Ade-
más, los e-books representan para Amazon.com un 25% de sus ventas en
Estados Unidos.


37. Recomiendo “The evolution of Amazon”, el artículo de Adam Penenberg
en Fast Company, julio de 2009. www.fastcompany.com/magazine/137/
the-evolution-of-amazon.html


38. Una versión anterior de este artículo fue publicada en Scolari, Carlos;
Carlón, Mario (eds) (2009). El fin de los medios masivos. El comienzo de un
debate. La Crujía Colección Inclusiones. Buenos Aires.


39. Hay empresas que ofrecen este servicio a precios exageradamente altos
a pesar de que el coste de hacer un blog –o sea un gestor de contenidos
gratuito y de escritura personal– es casi cero. Dos ejemplos en Catalunya.
La Presidencia de la Generalitat de Catalunya pagó 21.000 euros en 2006
por el diseño de un blog de Pasqual Maragall, su presidente, realizado en
                                               WordPress. En junio de 2006 posteé en digitalismo: “El Blog está on-line
                                               desde el 15 de febrero de 2006 y sólo tiene 15 posts escritos. O sea que es
                                               carísimo e ineficiente”. En otro incidente muy similar, el concejal de Barce-
                                               lona Jaume Ciurana (CiU) denunció en 2009 que el blog de Jordi Hereu, el
                                               alcalde de Barcelona (PSC), costaba 315.000 euros anuales.
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               http://mas-ediciones.e-noticies.es/barcelones/el-blog-del-alcalde-lo-
                                               hacen-seis-personas-30626.html


                                               40. Digitalismo.com existe desde enero de 2005 y, en el momento de termi-
                                               nar este libro, se acercaba a los 1.000 posts escritos. Fuimos seleccionados
                                               entre los 10 mejores blogs de habla hispana de todo el mundo en la edición
                                               2007 de The BOBs Best of the Blogs, concurso realizado por el prestigioso
                                               multimedios alemán Deutsche Welle. Destaco un artículo sobre digitalis-
                                               mo.com en la prensa española: “Internacional digitalista”, en El País:
                                               www.elpais.com/articulo/semana/Internacional/Digitalista/elpeputecci
                                               b/20080529elpciblse_9/Tes


                                               41. “The long tail of blogging is dying”, Charles Arthur, The Guardian, 24
                                               de junio de 2009. www.guardian.co.uk/technology/2009/jun/24/charles-
106
                                               arthur-blogging-twitter
geekonomía




                                               42. Como ejemplo, en julio de 2008, los blogs de Gawker Media doblaban
                                               el consumo de la versión en línea de Los Angeles Times. Es muy conocido y
                                               valorado el rol de los bloggers en las últimas campañas políticas en Estados
                                               Unidos influenciando en la opinión pública. Sin embargo su peso mediático
                                               fue mucho menor en otros países e irrelevante en Iberoamérica, donde el
                                               negocio de la prensa está más concentrado y el rol de los bloggers fue me-
                                               nos activo políticamente.


                                               43. Orihuela, José Luis (2009). “Qué son los blogs y cómo dejar de confun-
                                               dirlos con otra cosa”, en Cambronero, Antonio (ed.). BlogGuest 2, 8 años.
                                               Bubok. www.blogpocket.com/blogguest


                                               44. Vale una excepción, como bien señala Gabriela Jardim en un post so-
                                               bre el tema en octubre de 2009. La masa crítica de usuarios es necesaria
                                               si hablamos de un blog abierto (la mayoría), pero éste no es un requisi-
                                               to indispensable si se trata de un blog cerrado a una audiencia específi-
                                               ca, como los blogs internos de las empresas. También es interesante la
observación que hace Jardim con respecto a los intereses pre-existentes
en la apertura de un blog. En muchos casos, puede que el objetivo del
autor no sea una gran audiencia y puede también que comenzando con
una audiencia escasa, su propio mérito le dé visibilidad al trabajo. Pero
en este último caso, vuelvo al argumento del texto principal: cada vez se
hace más difícil obtener visibilidad en una Web social con decenas de for-
matos compitiendo. Sin embargo, la visibilidad era mucho más fácil en
el origen de los blogs en 1999. De hecho, los blogs más populares en di-
ferentes rubros son los que han comenzado en los primeros años y han
tenido constancia suficiente para seguir posteando diez años después.
http://mediatizandonos.blogspot.com/2009/09/o-futuro-dos-blogs-on-
de-estamos.html


45. Sobre Linked. The new science of networks. How everything is connected
to everything else and what it means for sciencie, business and everyday life,
de Albert-László Barabási en: http://digitalistas.blogspot.com/2005/06/




                                                                                 capítulo 3
sobre-el-linked-de-barabasi-4.html


46. “Twitter, Flickr, Facebook Make Blogs Look So 2004”, Paul Boutin. Wi-
red Magazine, octubre de 2008. www.wired.com/entertainment/theweb/
                                                                                 107
magazine/16-11/st_essay




                                                                                 geekonomía
47. “The political blogosphere and the 2004 Election: divided they blog”,
Lada Adamic y Natalie Glance. 4 de marzo de 2005. blogpulse.com/
papers/2005/AdamicGlanceBlogWWW.pdf


48. TechCrunch nació en 2005 y era originalmente el blog de Michael
Arrington. Hoy, junto a un equipo de colaboradores, se dedica a mapear y
analizar las nuevas aplicaciones de la Web social surgidas en Estados Uni-
dos (también existe una versión para el Reino Unido). En dos años se ha
convertido en uno de los blogs de negocios más influyentes en la blogos-
fera americana, y punto de referencia obligada de los fondos de inversión.
Según las estadísticas de Technorati de 2008, era el cuarto blog más enlaza-
do del mundo. Según Alexa, en noviembre de 2009 era el sitio web 208 en
Estados Unidos, en cuanto al tráfico. DailyKos.com es uno de los medios po-
líticos estadounidenses en línea más influyentes. Se trata de un blog creado
en 2002 por Markos Moulitsas Zúniga, que atrae a más de medio millón
de lectores al día y que, en las elecciones primarias de 2007, convocó a los
cinco candidatos presidenciales demócratas. Véase “Blogger fest a magnet
for liberal políticos”. San Francisco Chronicle, julio de 2007.
                                               www.sfgate.com/cgi-bin/article.cgi?f=/c/a/2007/07/29/MNGRVR91RU1.
                                               DTL&feed=rss.news


                                               49. http://pogue.blogs.nytimes.com
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               50. Con distribución en Chicago y San Francisco, publicó desde 2008 en
                                               papel contenidos generados en la blogosfera local. Resultó una fórmula de-
                                               masiado optimista en medio de la profunda crisis de la prensa tradicional
                                               con reducción de costes al máximo o quiebras como en el caso de la editora
                                               de The Chicago Tribune, o la desaparición en España del diario gratuito Me-
                                               tro y de la versión digital del también gratuito ADN. El anuncio del cese del
                                               servicio en http://blog.theprintedblog.com


                                               51. Los invito a escuchar el podcast que produje para el Máster de Comu-
                                               nicación Digital Interactiva de la Universitat de Vic. Es una reseña conjunta
                                               de Everything is miscellaneous. The power of the new digital disorder, David
                                               Weinberger (Times Books. Nueva York. 2007) y de The cult of the amateur.
                                               How today’s internet is killing our culture, Andrew Keen (Double Day/Curren-
                                               cy. Nueva York. 2007). Ambos autores exponen ideas opuestas. Weinberger
108
                                               analiza la escritura colaborativa y su lógica miscelánea en el contexto de
                                               un nuevo orden digital que tiene un efecto de contrapoder y Keen cuestio-
geekonomía




                                               na desde múltiples puntos de vista la dinámica de escritura colaborativa y
                                               amateur de la Web social.
                                               www.campusmovil.net/podcast/podcastwkeen.m4a
capítulo 4
Capítulo 4
                              109

La crisis de la universidad


                              geekonomía
iberoamericana en el
postdigitalismo: liderazgo
social o marca blanca
Observo una pieza gráfica de American Airlines,
                                               “You just can’t download this”, en la que aparecen
                                               dos jóvenes mirando un cuadro de Carle Vernet en
                                               un museo. El mensaje es evidente. La compañía aérea vende la
                                               experiencia de estar en vivo mirando una obra de arte, a diferencia
                                               de verla por Internet. Una experiencia que enfatiza en el concepto
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               de la escasez al que me referí en el capítulo 1. Este anuncio publici-
                                               tario me dispara una analogía con la situación de las universidades
                                               en la sociedad de la información. Parte del sistema universitario
                                               sufre una nueva crisis desde el momento en que deja de explotar su
                                               principal valor: la escasez. Así, se deja a un lado la experiencia de
                                               pertenecer y se centra principalmente en la oferta de títulos y conte-
                                               nidos que se podrían obtener gratuitamente en la Red. Bain (2007)
                                               cree que la universidad debe poseer “una tradición educativa am-
                                               plia que valore el pensamiento crítico, la resolución de problemas,
                                               la creatividad, la curiosidad, el compromiso con los asuntos éticos,
                                               y la amplitud y profundidad tanto en el conocimiento específico
                                               como en las distintas metodologías”. La sociedad demanda a las
                                               instituciones universitarias cambios de formato hacia el liderazgo
110                                            en excelencia e innovación, una batalla que a veces ha perdido con
                                               las empresas de élite que se constituyen como referencia a múlti-
geekonomía




                                               ples prácticas sociales.

                                                  Vale una salvedad antes de continuar con la crítica. La actual cri-
                                               sis universitaria está matizada por factores que la posicionan mejor
                                               que nunca en toda su historia. Esta institución siempre ha sido cues-
                                               tionada. En cada período ha tenido que adaptarse a los cambios
                                               socioeconómicos y es bien sabido que su capacidad de movimiento
                                               no ha sido particularmente ágil. Es probable que la actual crisis de
                                               entornos, interfaces y métodos de aprendizaje sea menor que otras
                                               anteriores, puesto que la universidad del siglo xxi está mejor inte-
                                               grada en el cuerpo social: con el mayor porcentaje de ciudadanos
                                               en sus aulas1, minorías inclusive; con las mujeres ocupando un lugar
                                               preponderante; con una movilidad de estudiantes cada vez mayor;2
                                               con la formación de postgrado pasando a ser una instancia masiva
                                               impulsada por la dinámica de aprender toda la vida; con la innova-
                                               ción naciendo de sus laboratorios; con la investigación propagán-
                                               dose con rapidez y contribuyendo al crecimiento económico y a una
                                               mejor calidad de vida.
Pero la crisis existe y vamos a analizarla. Desde el proyecto pio-
nero OpenCourseWare3 del Massachusetts Institute of Technology
(MIT) en 2002, muchas universidades de élite han subido sus con-
tenidos curriculares a la Red en formato broadcasting. ¿Cuál es la
estrategia de estas instituciones que regalan sus contenidos y por
otra parte cobran una costosa matrícula de 50.000 dólares al año?
Más allá de sus contenidos, estas universidades ofrecen la expe-
riencia en vivo y planifican un entorno para interactuar con sus
miembros y construir redes sociales a medida. Bien administradas,
estas redes pueden durar toda la vida profesional de un licenciado.
Ruppel Shell (2009) considera que en un mercado de productos si-
milares, la experiencia y el precio terminan marcando la diferencia
en la decisión de consumo, porque los consumidores no razonan
sobre el coste de elaboración de un producto (y sin lugar a dudas
la educación universitaria lo es), sino que asocian el precio a una
experiencia de usuario o a su gratificación. En esto radica el prin-




                                                                         capítulo 4
cipal y escasísimo valor de las universidades de élite norteamerica-
nas: pertenecer. En el caso de Estados Unidos, un selecto grupo de
170.000 estudiantes son alumnos de universidades con un riguroso
nivel de selectividad.4 Esa cifra representa el 10% de toda la matrí-
                                                                         111
cula de los casi 1.400 colleges norteamericanos acreditados (Blum,
2009). Los cursos en línea del MIT son gratuitos y universalmente




                                                                         geekonomía
accesibles, pero obtener una titulación de grado allí es una inver-
sión familiar de 200.000 dólares. El juego por el que apuesta el MIT
a través del OCW, por ejemplo, es doble y está basado en el fino
equilibrio entre Free (Anderson, 2009) y la economía de la escasez.
Los contenidos son abundantes y se comparten, pero la experien-
cia de hacer una carrera en el MIT es única y muy escasa. Por esto
los costes de matrícula son cada vez más elevados. Por un lado, sus
contenidos de calidad disponibles gratis en la Red son marketing
institucional. Por otra parte, en términos de Anderson (2009), estas
universidades se benefician con la escasez artificial que crean a tra-
vés de su restrictivo ingreso.

   Este desequilibrio entre gratuidad y elevados costes de matrícu-
la puede generar problemas a largo plazo a las universidades. Si
la experiencia en línea se asemeja a la experiencia del curso pre-
sencial, ¿por qué no pensar que las universidades pudieran tener
dificultades de desintermediación por parte de sus públicos, como
ya sufrieron otros actores de la industria cultural? ¿Qué pasaría si la
                                               educación fuera masivamente una cultura DIY y la filosofía edupunk5
                                               se impusiera? El problema no lo tendrían las universidades de élite,
                                               que seguirían explotando la economía de la escasez y seguirán sien-
                                               do muy valoradas por su reputación. La dificultad se trasladaría a las
                                               que denomino marcas blancas universitarias. Es decir, instituciones
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               que no han sabido o no han podido construir prestigio a su alrede-
                                               dor y que se han convertido en un costoso parking de jóvenes antes
                                               de su ingreso en el mercado laboral y en un gremio de profesores
                                               carente de redes internacionales, exigencias meritocráticas y com-
                                               petencia real. En el caso de las universidades públicas, las marcas
                                               blancas se agravan por su rol funcionarial y la cultura endogámica
                                               que les ofrece el sistema, generando un proceso de proletarización
                                               de la docencia que ha impactado seriamente en su profesionaliza-
                                               ción (Díaz Barriga, 2009). El problema puede ser mayor. Las universi-
                                               dades han sido beneficiadas durante siglos al poseer la potestad de
                                               la titulación de los ciudadanos. ¿Qué sucedería si en algún momen-
                                               to se pusiera en cuestión su monopolio de la acreditación? Existe
                                               un debate muy activo en la Unión Europea sobre la validación del
                                               aprendizaje informal y el diseño de nuevos métodos de acreditación
112
                                               más allá de los que otorgan las instituciones de educación formal.6
geekonomía




                                                  Las universidades marcas blancas en Estados Unidos tienen ma-
                                               trículas más accesibles pero igualmente costosas. En cambio, en Ibe-
                                               roamérica el modelo es totalmente diferente, con menores costes
                                               de acceso y en algunos casos gratuidad.7 Las universidades de élite
                                               comparten sus contenidos porque sabiéndose un bien escaso, no
                                               creen que pueda afectarles. Pero su creciente modelo de recursos
                                               abiertos puede afectar decisivamente a sus pares marcas blancas, si
                                               los alumnos y sus familias comienzan a pensar que la experiencia
                                               de formar parte de una comunidad universitaria puede ser reem-
                                               plazada por el consumo de contenidos académicos en línea prescin-
                                               diendo del espacio formal institucional (y del coste de la matrícula).
                                               Por todo esto, las universidades deben innovar sus estrategias de
                                               enseñanza, su diseño curricular y hasta el diseño físico de los espa-
                                               cios, para facilitar un nuevo tipo de interrelación con sus públicos
                                               objetivos que privilegie la pertenencia, potenciando el trabajo en
                                               equipo, la autoformación y la formación continua. Las que más de-
                                               ben innovar son las mayoritarias marcas blancas. Ésta es la forma de
escapar a la desintermediación y al fantasma de la rotura del vínculo
usuarios/institución (o clientes/producto a ojos de algunos).

   Existe un falso argumento: si las universidades marcas blancas
resultan afectadas, pierde la educación superior. Como en otras in-
dustrias de la intermediación, es un error igualar los intereses de
las universidades marcas blancas con los del ecosistema educativo.
La justificación de la existencia de algunas universidades marcas
blancas sólo responde a intereses políticos locales8 y para perpe-
tuar espacios de poder social preconcebidos. A pesar de la crisis
de financiamiento y de productividad social de las marcas blancas
universitarias, el consumo de contenidos de origen universitario es
mayor que nunca, trasciende a los actores del sistema y favorece la
formación continua de la sociedad.

   En Iberoamérica la crisis se percibe con mayor nitidez, aunque las




                                                                             capítulo 4
universidades españolas han recuperado terreno competitivo con rela-
ción a Europa con instrumentos como el Plan Bolonia.9 Por otra parte,
los profesores de las universidades de élite privilegian la investigación
y las publicaciones sobre la docencia porque el sistema que los evalúa
                                                                             113
establece esas prioridades. En tanto, las marcas blancas no cumplen efi-
cientemente ninguna de las funciones de investigación y docencia ya




                                                                             geekonomía
que: a) contratan a investigadores recién doctorados y con poca expe-
riencia para liderar proyectos ambiciosos y, por falta de competitividad,
los dejan marchar a otras instituciones cuando adquieren experiencia y
construyen su prestigio personal; b) trabajan a tiempo parcial profesio-
nales de segunda línea que no aportan un gran valor añadido al plan
de estudios, más allá de transmitir su experiencia personal; c) en Latino-
américa la situación es más grave porque la tasa de doctores es mucho
más baja que en España y además existe la rutina consolidada hace dé-
cadas de que alumnos del último año del grado ejerzan como docentes
sin cobrar y sean ellos quienes tengan la interacción más directa con sus
pares alumnos, afectando la calidad de la enseñanza.
   	
1. ¿Pistas? para la educación universitaria
de la próxima década

  Antes que nada, quiero aclarar que no soy un pedagogo ni un ex-
perto en diseño de currículos educativos y quizá pecaré de algunas
falencias conceptuales. Tómese este texto como un boceto de ideas
                                               basadas en mi experiencia profesional como docente e investigador
                                               en Europa, América Latina y Estados Unidos. Mi principal foco de
                                               atención estará en los aspectos vinculados a la innovación de los
                                               procesos dada la irrupción definitiva de las TIC en el aula. Innovar
                                               no es una actividad eficiente y lleva tiempo. Se trata de un proceso
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               lento pero persistente. Esto se hace más complejo si se comprende
                                               que estamos educando a los universitarios de hoy para vivir en un
                                               mundo que los profesores aún desconocemos. Podemos enseñarles
                                               técnicas, brindarles recursos y ayudarles a entender el actual merca-
                                               do laboral y de ideas, pero no lo que sucederá dentro de una o dos
                                               décadas, cuando sea el apogeo de su vida profesional. Nuevas va-
                                               riables tecnocientíficas y sociales se introducen constantemente en
                                               industrias consolidadas para rediseñarlas y convertirlas en otra cosa.
                                               Aunque la universidad siempre ha sido útil para la integración profe-
                                               sional de sus estudiantes, no es una escuela de formación profesio-
                                               nal, sino un espacio donde se debe fomentar el pensamiento crítico,
                                               la duda y el aprendizaje profundo (Bain, 2007). Con la crisis y los altos
                                               índices de desempleo a los que se enfrenta la sociedad mundial a fi-
                                               nes de esta primera década del siglo xxi, la esfera pública (el espacio
114
                                               comunicativo entre el mercado y el Estado que describía Habermas)
                                               debate si las universidades deben ser espacios de reflexión y acceso
geekonomía




                                               al conocimiento para la vida, un lugar de aprendizaje de herramien-
                                               tas para salir al mercado laboral con mayor capacidad de inserción,
                                               o ambas facetas integradas en una planificación equilibrada. Estas
                                               diferentes visiones, tanto la humanista como la instrumental, condi-
                                               cionan la forma de actuar de las instituciones y a veces generan es-
                                               trategias contradictorias. Scolari (2009)10 propone evitar el modelo
                                               de la universidad-hotel, donde las instituciones se transforman en un
                                               espacio pasajero y una buena parte de sus estudiantes y profesores
                                               participan creyéndose clientes de la institución y no miembros, afec-
                                               tando al interés común de los procesos de aprendizaje.
                                                  	
                                                  El abordaje crítico de Piscitelli (2009) hacia los formatos educa-
                                               tivos tradicionales llega hasta el cuestionamiento del libro como
                                               vehículo central del aprendizaje. Según Piscitelli “estamos en-
                                               señando teorías y conceptos que no son significativos para una
                                               época que ya fue, y con modalidades anacrónicas, que cada vez
                                               interesan menos a los jóvenes. (…) nos escandalizamos cuando
nos hacemos eco de sus prácticas mediáticas, de su exhibicionis-
mo impúdico, de su mentalidad gregaria y de su escala de valo-
res tan poco compatible con la tradicional” (2009: 22). Piscitelli
afirma que “la educación debe convertirse en industria del deseo
si quiere ser industria del conocimiento”. Considera que las TIC
no servirán para recuperar el interés del alumnado y hace énfasis
en las limitaciones docentes para adaptarse a los nuevos tiempos.
Tres son las variables a cuestionar: el desprecio de los contenidos
audiovisuales como forma de conocimiento formal dentro de la
dieta cognitiva; la pobre integración de las prácticas mediáticas
de los jóvenes en el aula; y la desmitificación del rol del libro como
vehículo central del aprendizaje. Más allá de esta correcta descrip-
ción, no parece adecuado establecer una segmentación tan nítida
entre supuestos nativos digitales disruptivos y profesores analógi-
cos démodé. Es cierto que existen profesores con escasa capacidad
de adaptación en un sistema que pocas veces sanciona la incom-




                                                                         capítulo 4
petencia, pero ése es un problema histórico que no tiene que ver
con el desarrollo de las TIC.

   La crisis educativa afecta a todos sus actores por igual, geren-
                                                                         115
tes, diseñadores curriculares, profesores y alumnos. La ineficacia de
las marcas blancas está perjudicando la integración del alumnado




                                                                         geekonomía
al circuito productivo y a las estructuras de I+D+I. Los profesores
universitarios debemos adaptarnos a los nuevos tiempos y, como
veremos más adelante, la mayoría de propuestas pedagógicas van
en ese sentido. Pero, ¿cuál es la responsabilidad de los alumnos en
todo este proceso? ¿Cuál es su voluntad de pasar de sujeto pasivo
a activo de su propia educación transformando en sus mentes la
universidad-hotel en universidad-laboratorio?

1.1. Sobre la Net Generation/Millennials/nativos digitales y el
mito de la generación disruptiva

  Hay un discurso recurrente que quisiera desmantelar en esta
sección. Es el que señala que las instituciones educativas se volve-
rán irrelevantes y quedarán desfasadas si no cambian sus prácticas
educativas y se adaptan a las necesidades de la Net Generation o
nativos digitales (Tapscott, 1999 y 2009; Prensky, 2001). Este argu-
mento sitúa toda la presión del cambio en las viejas metodologías
de las instituciones y el profesorado y quita responsabilidad a los
                                               estudiantes. El argumento sobre una nueva generación de alumnos
                                               con habilidades sofisticadas para las cuales los profesores no están
                                               preparados es falso y carece de un cuerpo teórico profundo y de
                                               una consecuente investigación empírica. Además, como señala Tís-
                                               car Lara (en Grané y Willem, 2009), este guión reduce la alfabetiza-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               ción digital al aprendizaje instrumental del software, las interfaces
                                               y los dispositivos, quitándole complejidad a todo el proceso en su
                                               conjunto. Vayamos por partes.

                                                  Antes de analizar el comportamiento de los jóvenes universitarios,
                                               acotaré las definiciones generacionales y ordenaré un poco el caos
                                               terminológico, para sistematizar los conceptos clave que mencionaré
                                               de aquí en adelante. El tema ya está muy trabajado a nivel bibliográfi-
                                               co pero considero útil hacer una breve recopilación. El colectivo que
                                               mejor contiene a la actual generación de estudiantes universitarios
                                               es la Net Generation (Tapscott, 1999 y 2009), que define a los naci-
                                               dos entre 1977 y 2007. Existen otras categorías sociológicas para ese
                                               grupo de tres décadas. William Strauss y Neil Howe (2000) los defi-
                                               nen como Millennials, aunque acotan su alcance a los nacidos entre
116
                                               1982 y 2001 (doce años menos que la categoría de Tapscott). Pero
                                               básicamente Net Generation y Millenials, son el mismo grupo etario.
geekonomía




                                               Otras definiciones similares son Generación Y, Generación Next (los
                                               nacidos entre 1984 y 1993) y algunas más.11 Todas estas descripcio-
                                               nes generacionales se enrolan en lo que Prensky (2001) definió como
                                               nativos digitales, por haber nacido luego del advenimiento masivo de
                                               las TIC, especialmente del ordenador personal, Internet y los disposi-
                                               tivos móviles. Nativos digitales es el concepto que más se utiliza para
                                               analizar a la Net Generation y también resulta el más polémico. Cuatro
                                               son las referencias bibliográficas más importantes que definen a esta
                                               amplia generación: el breve artículo original “Digital Natives, Digi-
                                               tal Immigrants” (2001) de Marc Prensky; Millennials Rising: The Next
                                               Great Generation (2000) de Neil Howe y William Strauss; Born Digital:
                                               Understanding the First Generation of Digital Natives (2008) de John Pal-
                                               frey y Urs Gasser; y la más reciente investigación Grown Up Digital. How
                                               the Net Generation is changing your world (2009) de Don Tapscott.

                                                  Veamos algunos aspectos generales de estos trabajos. Prensky
                                               (2001) afirma que con los nativos digitales ha tenido lugar una dis-
continuidad del proceso cognitivo que el sistema educativo no ha
valorado en su justa medida. Para el autor, esa singularidad es la
llegada de las tecnologías digitales y su utilización ubicua por par-
te de una generación que ha nacido con ellas, lo que significa un
cambio mucho más profundo del que suponen los educadores y las
instituciones. Según Prensky los estudiantes piensan y procesan la
información de forma diferente a sus predecesores, los inmigrantes
digitales, o quienes siquiera han podido migrar hacia la digitaliza-
ción. Analiza que los nativos digitales aprenden a gran velocidad, en
forma visual y haciendo conexiones aleatorias. Ante el gap cognitivo,
Prensky se pregunta quién debería aprender de quién en las institu-
ciones educativas: los nativos digitales de los viejos métodos o los in-
migrantes de lo nuevo. Se inclina por la segunda opción, proponien-
do una reconsideración profunda de metodologías y contenidos o,
mejor dicho, llevar los contenidos al entorno de los nativos digitales:
los videojuegos, los ordenadores personales y las redes sociales.




                                                                           capítulo 4
   Neil Howe y William Strauss se refieren a los Millenials en los mis-
mos términos que Prensky. Ellos son quienes configuraron la Web
social desde su profunda alfabetización digital, su mejor educación
                                                                           117
y su mayor capacidad para trabajar en equipo. Según los autores y
en franca crítica a la Generación X, la sociedad norteamericana es-




                                                                           geekonomía
taba esperando durante décadas una generación proactiva, que “se
dejara de hablar y se pusiera a hacer”. Además, consideran que los
Millenials son racial y étnicamente más diversos, augurando para
esta generación la conducción de una “nueva revolución social”.

   Palfrey y Gasser (2008) y Tapscott (1999 y 2009) comparten con
los anteriores autores la línea argumental elogiosa hacia los nativos
digitales. Palfrey y Gasser los definen como extraordinariamente ca-
paces y creativos con las tecnologías. Según su punto de vista, viven,
trabajan, estudian y se relacionan de una manera muy diferente a
las generaciones anteriores y esto los hace mejores. Tapscott consi-
dera que la Net Generation es el grupo más inteligente de la historia
norteamericana y que su influencia cambiará el mundo. Les atribuye
pautas transformadoras como la libertad de elección y de expresión
en todo lo que hacen, personalización de los productos que consu-
men, exigencia de integridad corporativa y apertura a las empresas,
velocidad y espíritu de colaboración. Tapscott cree que, si se los
compara con las generaciones anteriores –los Baby Boomers (1946
                                               a 1964) y la Generación X (1965 a 1976)–, se trata de un grupo so-
                                               cial que vive en y con Internet, pero también en todas las pantallas
                                               digitales existentes: videoconsolas, móviles, y un poco menos tele-
                                               visión. Multifacética, puede participar en varias conversaciones a la
                                               vez e interactuar con diferentes interfaces. Son prosumers y facilitan
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               la innovación basada en el usuario.

                                                  A pesar de ser conceptos utilizados a nivel mundial, estos tra-
                                               bajos resultan de un trazo tan grueso que transmiten imprecisión,
                                               escasa especificidad y ruido conceptual. El propio Prensky (2009)12
                                               liquida su invención terminológica de nativos/inmigrantes digitales
                                               tildándola de irrelevante para los nuevos tiempos y habla de sabi-
                                               duría digital, definiéndola como un concepto de doble entrada que
                                               alude a las capacidades cognitivas de los individuos para utilizar las
                                               tecnologías, pero también a la prudencia y pertinencia de su uso.
                                               Como una obviedad darwinista, la nueva versión teórica de Prensky
                                               (2009) afirma que esta sabiduría no se enmarca en un tiempo preci-
                                               so y evoluciona constantemente. Estas definiciones no contribuyen
                                               a comprender profundamente a esta generación, y mucho menos
118
                                               permiten hacer una radiografía a nivel mundial que sea útil para
                                               planificar nuevas políticas educativas universitarias. Las respuestas
geekonomía




                                               a la crisis educativa deben sustentarse en investigación y no en in-
                                               tuiciones o simplificaciones causa-efecto. Veamos algunas limita-
                                               ciones de estos análisis:

                                                  • La Net Generation es un grupo etario que abarca tres décadas.
                                               Es demasiado amplio y heterogéneo para atribuirle categóricamente
                                               el liderazgo de la vida digital. Veamos un claro ejemplo en Estados
                                               Unidos que contradice la idea de que la Net Generation domina me-
                                               jor todos los sectores de la vida digital. Según un trabajo sobre ge-
                                               neraciones en línea de Pew Internet & American Life Project (2009),13
                                               las llamadas Generación X y Baby Boomers utilizan más la Web que la
                                               Net Generation para buscar noticias, reservar viajes, realizar transac-
                                               ciones bancarias, consultar sitios gubernamentales, utilizar los bus-
                                               cadores o hacer investigación. También son quienes mejor utilizan
                                               el correo electrónico o realizan mayor volumen de compras en línea.
                                               En tanto los más jóvenes se decantan por el uso lúdico y la sociali-
                                               zación. Otras actividades como descargar contenidos multimedia o
participar en subastas alcanzan los mismos porcentajes en todas las
generaciones menores de 70 años. En el mismo sentido profundiza
Rowland (2008) y su estudio sobre la Google Generation.14 El trabajo
concluye que no hay evidencia seria de que los jóvenes sean ma-
yores expertos en la búsqueda en la Red ni que las capacidades de
búsqueda de esta generación hayan mejorado en los últimos años.
Un estudio en curso de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC)15
realizado con adolescentes de 12 a 18 años en Catalunya revela que
este colectivo no explota adecuadamente todo el potencial que tie-
nen las TIC. Según sus autores “el mito de nativos digitales de alta
productividad es la visión de los analfabetos digitales (…) El hecho
de que más de la mitad de estos adolescentes no utilicen habitual-
mente videojuegos o que un tercio de ellos no utilicen la Web social
indica que hacen un uso muy precario y básico de la cultura digital”.
Estos y otros estudios similares confirman las contradicciones en el
discurso del liderazgo digital de la Net Generation.




                                                                        capítulo 4
   • Aunque estas categorizaciones habitualmente se aplican a todo
el mundo, los análisis originales mencionados remiten exclusiva-
mente a la sociedad norteamericana. Si ya resulta difícil analizar
                                                                        119
una misma generación dentro de la geografía de Estados Unidos
según variables de origen socioeconómico, transpolar esas limita-




                                                                        geekonomía
ciones al mapa mundial es metodológicamente inadecuado. Si se
hace un zoom sobre los nativos digitales, se encuentra una gran
complejidad de resultados y contradicciones que confirman que no
todos poseen la misma experiencia con las TIC. Aun en una región
tan acotada como América Latina, una investigación de la Funda-
ción Telefónica (2008) sobre la generación interactiva en Iberoamé-
rica16 demuestra dicha complejidad e insiste en las grandes diferen-
cias según países así como por entorno urbano o rural. A modo de
ejemplo, el informe señala que el acceso a Internet en los hogares
de adolescentes de 10 a 18 años es muy desigual. “Brasil (58%), Ar-
gentina (57%) y Chile (51%) son los más avanzados, mientras que
Colombia se queda rezagado (27%) en este indicador.” Cuestio-
nando los usos productivos de las TIC en la educación formal se
afirma: “La búsqueda del entretenimiento a través del consumo de
contenidos relacionados con el ocio se contrapone con fuerza a la
posibilidad de encontrar en Internet una fuente de conocimientos
educativos o culturales. En términos medios, sólo dos de cada diez
menores declaran visitar habitualmente recursos educativos o cul-
                                               turales”. Como ya se observará con el multitasking en los nativos
                                               digitales, una práctica de consumo interesante de analizar es el rol
                                               distractivo de las TIC en la educación formal. Según el informe de
                                               la Fundación Telefónica, el caso de Argentina es el más alarmante
                                               del continente: “la actividad más desplazada (por el uso de los dis-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               positivos electrónicos e Internet) es el estudio y el tiempo dedicado
                                               a las tareas escolares (39%), junto a la televisión (32%) y la lectura
                                               (27%)”. España también presenta profundas diferencias de forma-
                                               ción entre el colectivo de nativos digitales, con grandes sectores
                                               excluidos a pesar de la evolución del sistema educativo nacional en
                                               los últimos treinta años. Según el Informe de la Inclusión Social
                                               en España 2009,17 un 7,3% de la población española entre 18 y 24 años
                                               no posee el título de educación secundaria obligatoria y no sigue
                                               ningún tipo de formación reglada, sufriendo un serio aislamiento
                                               educativo y una vulnerabilidad formativa severa. Las cifras son más
                                               graves entre los jóvenes sin titulación secundaria post-obligatoria.
                                               Un 31% de la población de entre 18 y 24 años en 2007 no posee este
                                               tipo de estudios. A pesar de pertenecer a una economía desarro-
                                               llada, este colectivo de excluidos de la educación formal es el que
120
                                               menor alfabetización digital posee y está lejos de poseer las virtu-
                                               des de cultura digital que describen Howe y Strauss (2000), Prensky
geekonomía




                                               (2001), Palfrey y Gasser (2008) y Tapscott (2009), entre otros autores.

                                                  • Otro índice que no se tiene en cuenta cuando se habla de la
                                               Net Generation es el ámbito geográfico de pertenencia, no en el sen-
                                               tido socioeconómico sino en el cultural o de entorno creativo. Flo-
                                               rida (2005 y 2008) teoriza que las ciudades abiertas, cosmopolitas,
                                               multiculturales, tolerantes y con una infraestructura tecnológica apta
                                               fomentan el factor dónde y propician una clase creativa que es vital
                                               para el crecimiento individual de las personas y la innovación indus-
                                               trial. El factor creatividad es exponencial, cuanta más gente de ese
                                               tipo vive allí, más gente querrá vivir y habrá una mayor concentración
                                               de talentos y calidad de recursos humanos en determinadas áreas.
                                               Florida (2008) habla de clustering force. Las personas reciben mejo-
                                               res inputs, crecen profesionalmente y son más productivas si se or-
                                               ganizan en entornos creativos en los cuales se sientan identificados
                                               y realizados. Según Florida (2008), sólo un par de docenas de regio-
                                               nes del mundo concentran la innovación de la economía mundial.
Florida (2005) menciona a la clase creativa como dinamizadora de
la innovación en las ciudades. La ubicación de universidades de cali-
dad también influye en la ecuación smart spots o sitios inteligentes.
Csikszentmihalyi (1996) hace referencia a los entornos creativos desde
tres perspectivas; 1) hay que estar en situación de acceder al campo
en el que se propone trabajar; 2) la estimulación novedosa no está
homogéneamente distribuida ya que existen lugares con mayor den-
sidad de interacción y efervescencia de ideas; 3) las posibilidades de
acceso están relacionadas con el ámbito donde uno se encuentre, o
sea que la mejor estrategia personal es estar donde existen las opor-
tunidades. Con el mismo énfasis hacia los smart spots, Castells (2009)
considera que el éxito en el diseño de los entornos es la unificación
del espacio de los flujos (culturales, económicos, comunicacionales)
con el espacio de los sitios físicos. Las ciudades que tienen el liderazgo
del espacio común global lo tienen en beneficio de sus ciudadanos
locales, que son los primeros beneficiados de ese liderazgo. En ese




                                                                             capítulo 4
sentido David Byrne (2009)18 considera que las virtudes de una ciudad
perfecta deben ser el equilibrio en: tamaño (una ciudad demasiado
pequeña no tolera el ensayo y error porque estigmatiza el fracaso),
densidad (los espacios sociales con distancias a pie fomentan las inte-
                                                                             121
racciones), sensibilidad y actitud positiva, seguridad (donde los ciuda-
danos confían en sus pares y no se sienten amenazados en el espacio




                                                                             geekonomía
público), una pequeña dosis de caos para fomentar la creatividad, es-
cala humana, parques y espacios públicos, y sobre todo capacidad de
transformación y movilidad. Según Byrne una ciudad perfecta no está
nunca inmóvil. Este factor dónde también afecta a la Net Generation,
aunque no se contemple en las teorías sobre los nativos digitales. No
es lo mismo ser un nativo digital en San Francisco o Boston que en
una ciudad periférica española, como se verá en el capítulo 5 cuando
se analice Silicon Valley. Volviendo al entorno norteamericano: no es
el mismo un joven de la Net Generation criado en Palo Alto, Califor-
nia –en medio de las principales empresas de la industria tecnológica
mundial, con unos recursos humanos muy competitivos y con la in-
fluencia de Stanford University como núcleo de innovación y ciencia–
que uno criado en Nueva Orleans, con mayores índices de pobreza y
exclusión social y sin cultura emprendedora ni tecnológica.

   • El análisis de la Net Generation y de los nativos digitales igno-
ra que el ecosistema digital del que se habla fue creado mayori-
tariamente por las generaciones precedentes, Generación X y Baby
                                               Boomers. Como bien señala Gladwell (2008), los Boomers fueron los
                                               inventores de Internet y la mayoría de referentes de la industria tec-
                                               nológica pertenece a esa generación, no a la Net Generation.

                                                  • Por último, se ignora el mito de la trascendencia generacional.
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               Como se dijo en la introducción del libro, cada generación cree vi-
                                               vir el mayor período de cambios de la historia de la humanidad,
                                               sobreestimando la importancia de su tiempo y subestimando las
                                               transformaciones previas. Las virtudes de los nativos digitales son
                                               simplemente signos de su tiempo, y en cada época se pueden en-
                                               contrar condiciones transformadoras del ecosistema social y otras
                                               conductas menos dinámicas. Esta generación no es la excepción.

                                                  Vistos los déficits de análisis de la Net Generation, pasaré a las
                                               críticas. Se puede afirmar que las TIC están reviviendo la capaci-
                                               dad de escritura de los Millenials, desde textos para su educación
                                               formal, mensajes en las redes sociales hasta correos electrónicos y
                                               chats, lo cual los hace polialfabetizados (Lunsford, 2008). También
                                               es evidente que los Millenials han transformado el consumo mediá-
122
                                               tico y que se decantan por Internet y la Web social en detrimento
                                               de los formatos tradicionales. En vez de consumir la televisión pa-
geekonomía




                                               sivamente acceden a YouTube mientras realizan otras tareas. Pero
                                               esto no se puede asociar a una mayor inteligencia generacional.
                                               Para los nativos digitales, el pensamiento lateral (Bono, 1986) se
                                               transformó en multitasking cotidiano, y el desafío cognitivo y social
                                               es cómo convertir estas prácticas en innovación y riqueza social.
                                               Según Ophir, Nass y Wagner (2009),19 el crónico multitasking de esta
                                               generación provoca dispersión, dificulta la atención y el control de
                                               los procesos cognitivos relevantes. Los resultados de esta investiga-
                                               ción muestran que los multitaskers profundos son más susceptibles
                                               al estímulo de las interferencias irrelevantes del entorno y menos
                                               eficientes en suprimir la dispersión cuando se debe realizar una ta-
                                               rea sofisticada. En el mismo sentido y desde la psicología cognitiva,
                                               Rubinstein, Meyer y Evans (2001)20 concluyen que la multitarea pue-
                                               de resultar en una pérdida de concentración y sobrecarga cognitiva
                                               dada la variedad de estímulos que recibe el cerebro, haciéndola
                                               improductiva en determinados casos.
En una de las investigaciones mejor documentadas con estudios
de campo sobre la relación entre los nativos digitales y el sistema
educativo, Bennett, Maton y Kervin (2008)21 cuestionan la idea de
una generación diferente y dudan de la necesidad de un profundo
cambio en los planes de estudio con el supuesto fin de beneficiar-
los. Los autores señalan que el argumento sobre nativos digitales
disruptivos y profesores analógicos poco adaptados ha sido repeti-
damente reproducido sin una evidencia empírica que lo sustentara.
Los investigadores creen que el cambio de práctica generacional
que se vive de la mano de las TIC es sin duda un proceso evolu-
tivo pero no un hecho revolucionario que requiera una profunda
reconfiguración de la educación formal. Sugieren que si bien los
jóvenes integraron definitivamente las prácticas digitales en su vida
cotidiana, no hay evidencia de una amplia desafección con las me-
todologías educativas clásicas. Además, la investigación revela un
panorama más complejo que debe ser diferenciado por edades y no




                                                                          capítulo 4
se puede reducir a una sola y amplia generación.

    La Net Generation es probablemente la generación más alfabeti-
zada en la historia y posee ciertas capacidades que la coloca en una
                                                                          123
posición privilegiada en la sociedad del conocimiento, como bien
señalan las referencias bibliográficas mencionadas al comienzo de




                                                                          geekonomía
este segmento. Pero esto no significa que sea la más preparada de
la historia y tampoco convierte a sus miembros en mejores y más
eficientes educandos. El tipo de lectura de retazos de información
en forma de zapping y una cultura snack de consumo irrelevante,
inmediato y de corto alcance torna a los nativos digitales en semi-
analfabetos analógicos, con enormes dificultades para recuperar
ideas centrales de un texto complejo, erráticos en el conocimiento
literario transversal y con problemas para expresar ideas de forma
escrita. Esa dispersión cognitiva afecta a su productividad y la capa-
cidad para conectarse con conocimientos complejos como la cien-
cia. Brey (2009) considera que la sociedad hiperconectada crea una
fuerza disgregadora a modo de comunitarismo autista. Para Brey,
la ignorancia es atrevida, desacomplejada y cualquier crítica en su
contra es políticamente incorrecta.22 Referirse a los nativos digitales
en forma superlativa es parte de esa lógica. Para no prestarme a
polémicas innecesarias, no es mi intención señalar que los Millenials
sean peores que otras generaciones y que el consumo de Internet y
las redes sociales los hagan menos capacitados que aquéllas. Nada
                                               más lejos de mis ideas. Pero creer que son más inteligentes porque
                                               son multitasking e interactúan en las redes sociales, twittean, suben
                                               fotos a Flickr, subastan en eBay o consumen videojuegos entre otras
                                               acciones en red, es por lo menos reduccionista. Eso no es lo que
                                               indica mi experiencia docente en la universidad iberoamericana,
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               donde una parte significativa de los estudiantes sufre dispersión,
                                               tiene falta de compromiso con los estudios y escasa ética del es-
                                               fuerzo, carece de curiosidad por la autoformación y no ejerce la
                                               serendipia. Además, entrando de lleno en el terreno digital, puedo
                                               afirmar que –como profesor de software y usos profesionales de la
                                               Web social– la mayoría de estudiantes utilizan de forma muy limita-
                                               da las plataformas colaborativas, desperdiciando parte de su gran
                                               potencial, como se verá en las posteriores recomendaciones de este
                                               capítulo. En el mismo sentido, carecen de una lectura crítica de los
                                               recursos que buscan en la Red y se les hace difícil encontrar textos
                                               significativos para trabajar en una tarea específica. Lorenzo y Dziu-
                                               ban (2006)23 señalan que a los estudiantes les cuesta conectar las
                                               unidades de información dispersas en la Red y que necesitan de una
                                               information literacy que difiere totalmente de la que puedan apren-
124
                                               der con el consumo pasivo de los nuevos medios o su interacción en
                                               las redes sociales.
geekonomía




                                                  En la línea de lo que afirma Brey (2009), creo que en un sec-
                                               tor de esta generación existe desinterés y falta de curiosidad por
                                               el conocimiento como fin en sí mismo. En definitiva, es un grave
                                               error cargar toda la responsabilidad del cambio pedagógico en el
                                               profesorado, como señala Prensky (2001). Es cierto que los profe-
                                               sores tienen la obligación de digitalizarse lo antes posible y par-
                                               ticipar con fines pedagógicos en la conversación que proponen
                                               los nativos digitales en la Web social. También es necesario que los
                                               educadores conozcan a fondo técnicas de Blended Learning (Bar-
                                               tolomé, 2008), combinando situaciones de presencialidad y for-
                                               mación a distancia, utilizando las tecnologías más apropiadas
                                               para cada necesidad. Pero es imprescindible que los estudiantes
                                               asuman la parte de la responsabilidad por su formación, que va
                                               mucho más allá de sentarse en el aula, escuchar al profesor en
                                               silencio, tomar notas y participar en exámenes periódicos. No se
                                               trata de cambios drásticos de un día a otro, sino de coevolución
participativa y emergencia24 (Johnson, 2001; Mitchell, 2009) entre
todos los actores de las instituciones de la educación formal. Pero
no debemos desesperarnos. McLuhan (1964) decía que cuando
una tecnología se vuelve un medio social, penetra hasta saturar
todas las estructuras. Eso sucederá con las TIC en las instituciones
educativas. Las universidades son lentas en la adopción de las TIC
para tareas de formación y gestión del conocimiento, pero llegará
el punto de saturación que representará un no retorno y la defini-
tiva adopción del paradigma. No estamos tan lejos como a veces
se cree. Igualmente, el problema educativo es más complejo y no se
resolverá con inversión en ordenadores en el aula ni profesores
masivamente digitalizados. De más está decir que es un error creer
que las instituciones educativas rezagadas puedan encontrar en
las TIC la solución a todos sus problemas. Un informe de la Comi-
sión Europea de 200825 sobre lifelong learning evidencia los po-
bres resultados de algunas inversiones TIC en la educación formal




                                                                       capítulo 4
europea y destaca la necesidad del autoaprendizaje y el aprendi-
zaje informal entre pares como mecanismos fundamentales para
obtener mayores competencias digitales y educativas, más allá de
la infraestructura disponible en el aula. Precisamente de estos me-
                                                                       125
canismos es de lo que trata el próximo ítem.




                                                                       geekonomía
1.2. Un catálogo de buenas prácticas para estudiantes
universitarios. Aprendiendo a olvidar

   Algunas de estas propuestas no son ideas nuevas y las he divul-
gado en seminarios y ensayos ya publicados. Éste es un trabajo
de reprocesamiento basado en nuevas lecturas y discusiones con
colegas y estudiantes. Estas pistas se asientan en las críticas con-
diciones de las instituciones universitarias que he descrito breve-
mente en la introducción. Sin embargo, es imprescindible señalar
que no es un cuestionamiento colectivo ni me quiero ubicar como
observador omnisciente de todo este proceso, ya que las transfor-
maciones del entorno educativo afectan a mi trabajo y también me
corresponde ser parte de ese proceso de cambio. Convivo a diario
con excelentes alumnos y profesores, de quienes aprendo más de
lo que yo pueda transmitir. Con gran respeto por ambos colectivos,
me tomaré el atrevimiento de recomendar algunas líneas de acción
de corto alcance.
Para comenzar mencionaré lo que creo son pautas comunes
                                               que pueden resultar útiles a profesores y alumnos. Lo que Gardner
                                               (2007) considera capacidades para enfrentarse al mundo:

                                                  a) Mentalidad disciplinada. No aprender de memoria, sino saber
                                               conectar. Según Gardner, los contenidos son invención humana, por
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               lo que no se pueden aprender de forma intuitiva, sino como un
                                               proceso. Smith y Potoczniak (2005) trabajan en el mismo sentido
                                               refiriéndose a los componentes de la conectividad en el aula.26 Tam-
                                               bién lo hace Downes (2005) hablando de connective knowledge.27

                                                  b) Mentalidad creativa. En cuanto a los profesores, deben avanzar
                                               de forma innovadora en busca de las nuevas ideas escasas y pensar en
                                               qué será lo más valioso en el campo del conocimiento y sus prácticas
                                               e ir hacia ello. Anderson (2009) afirma que los trabajadores del cono-
                                               cimiento de hoy son los obreros del pasado y los granjeros de hace
                                               un siglo y deben reconfigurarse para no perder protagonismo social.

                                                  c) Mentalidad ética. El buen trabajo encarna la excelencia. Rela-
                                               cionado con estas últimas dos capacidades, Gladwell (2008) habla
126
                                               de la regla de las 10.000 horas. Se necesitan diez años para dominar
                                               un oficio. El autor sugiere que lo que distingue a un buen profesio-
geekonomía




                                               nal de uno excelente es el trabajo duro y el tiempo que le dedica
                                               a su tarea. No hay un componente genético ni generacional que
                                               diferencie a ambos. Para hacer este esfuerzo en tiempo hay que
                                               aprovechar oportunidades y asumir riesgos.

                                                 d) Mentalidad respetuosa. Respetar a quienes piensan diferente a
                                               nosotros y aprender de ellos.

                                                  d) Todo con su síntesis. Debemos saber en qué poner atención
                                               y qué ignorar. Los metadatos son claves en esta era de la abundan-
                                               cia. La información sólo tiene sentido real cuando somos capaces
                                               de entenderla. Yo lo llamaría aprender a olvidar y es la primera de
                                               las capacidades que debe aprender un estudiante universitario.
                                               	
                                                  Vamos entonces a las diez recomendaciones para estudiantes
                                               universitarios en la era postdigital.
1. Aprender a olvidar lo irrelevante. Si lo difícil en la fase analó-
gica era recuperar la información, hoy la universidad debe ense-
ñar a olvidar y a identificar los mejores recursos en línea, a sepa-
rar el ruido de lo relevante, a prevenir la infoxicación. Muchas de
las plataformas que se diseñan se centran en facilitar la recupera-
ción de la información de forma eficiente cuando se la requiere,
sin necesidad de reservarla en la memoria ni almacenarla en un
formato físico. En esta nueva dinámica es necesario reconocer los
recursos valiosos en Internet para su uso en clase y sorprender al
profesor con recursos que quizá desconozca. Mayer-Schönber-
ger (2009) cree que la tecnología invirtió nuestra relación con la
memoria. En la historia, las tecnologías pasadas favorecieron el
olvido, pero la digitalización nos agobia con el volumen de infor-
mación a nuestro alcance y ha eliminado la amnesia, por lo que
recomienda que las personas (como las plataformas en la Red)
deben aprender a olvidar, eliminando la información irrelevante.




                                                                           capítulo 4
   En la relación memoria-olvido también es necesario modificar la
lógica de aprendizaje. A modo de ejemplo, así trabaja el software
SuperMemo28 creado por Piotr Wozniak. Este desarrollo se basó en
                                                                           127
la investigación doctoral de Wozniak, donde concluía que el mejor
momento para reaprender algo es en el instante exacto en que se




                                                                           geekonomía
está a punto de olvidar. Antes de ese período, recordar es improduc-
tivo y posteriormente también, porque ya se ha olvidado y se debe
volver a aprender desde cero. Las dinámicas de SuperMemo son muy
valiosas para ciertas tareas como el aprendizaje de idiomas, las fór-
mulas matemáticas u otros conocimientos en los que sea necesario
memorizar procesos.

   2. Construir un currículum personalizado en la Red. Esto signifi-
ca utilizar todos los instrumentos digitales al alcance para escribir,
crear archivos multimedia con nuestro know how, postear, producir
ensayos, compartir conocimientos relevantes, etc. En un estudio so-
bre la producción académica de la élite universitaria norteamericana,
Lunsford (2008)29 concluye que la escritura que motiva a los mejores
estudiantes es la que hace que algo suceda en el mundo. Los estudian-
tes prefieren escribir fuera del aula para aportar algo al conocimiento
social y ser partícipes de esa gran conversación. Ésa es precisamente
una forma eficiente de construir un perfil personal. Estar preparados
cuando alguien quiera googlearnos en una selección de personal. El
                                               título universitario tiene escaso valor si no va de la mano de la cons-
                                               trucción de un perfil específico personalizado dentro y fuera de las
                                               aulas. La entrevista personal siempre fue la primera instancia en un
                                               proceso de selección. Actualmente, ese primer contacto con el candi-
                                               dato se establece en la Red porque el currículum se construye allí. Tís-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               car Lara (2007)30 considera que las personas se definen a través de las
                                               identidades mosaico. Estas identidades han sido potenciadas a través
                                               de las TIC ya que un perfil digital abarca diferentes facetas de lo que
                                               somos profesionalmente y otorga valor a las personas en función del
                                               valor de la propia red de la que forman parte. A los estudiantes se les
                                               enseña a diseñar un CV analógico, pero pocos prestan atención a la
                                               construcción de un perfil profesional y personal digital y en línea. En
                                               la emergente nube, vamos hacia una identidad única y los ciudadanos
                                               deben hacerse cargo de la administración de sus datos personales y
                                               su perfil digital. Construir eficientemente esa identidad puede llevar
                                               años, pero es una tarea necesaria.

                                                  3. Aprender a contar historias transmediáticas. Esto está directa-
                                               mente relacionado con el punto anterior. Scolari (2009) señala que
128
                                               los contenidos transmediáticos no son sólo una adaptación de un
                                               medio a otro, sino historias narradas en diferentes formatos de for-
geekonomía




                                               ma complementaria. Según Scolari esta dispersión textual es uno
                                               de los recursos complejos más importantes en la cultura popular
                                               contemporánea. Esa construcción transmediática de textos o traba-
                                               jos académicos debería ser una de las virtudes diferenciales de los
                                               mejores estudiantes.

                                                  4. Fomentar la cultura del remix. Los estudiantes deben optar por
                                               el autoaprendizaje guiado y traer al aula el consumo cultural y cog-
                                               nitivo que hacen fuera de ella, mezclando conceptos y prácticas,
                                               potenciando una vez más la serendipia. Ese trabajo de disgregación
                                               y mezcla puede proporcionarles un mayor conocimiento. La clave es
                                               adaptar la filosofía pirata a la que hacía referencia en el capítulo 1,
                                               pero sin hacer trampas y sin confundir la intertextualidad con el
                                               copia y pega. En un excelente estudio sobre el plagio en las universi-
                                               dades norteamericanas,31 Blum (2009) considera que los estudiantes
                                               no prestan atención al lado académico de la producción de textos
                                               y la experiencia universitaria y concentran toda su atención en las
evaluaciones y los resultados, perdiendo de vista el objetivo peda-
gógico. Por eso resulta tan seductor el copia y pega. Parte de ese
objetivo es precisamente mezclar las experiencias externas al aula
con lo que se enseña allí.

   Una observación para docentes. Muchas veces, el foco exclusivo
de los alumnos en la evaluación y los resultados es promovido por
las estrategias didácticas de los profesores cuando hacen ver que la
evaluación final es la instancia crucial del curso. Si se comunica este
mensaje a los alumnos, no debemos esperar que éstos transfieran
su foco de atención al objetivo pedagógico, porque lo que hacen
simplemente es seguir el protocolo que les propone el profesor.

   5. Fomentar la creatividad en el aula es tan o más importante que
la alfabetización digital o analógica. Como en la cultura del remix,
realizar tareas de forma creativa potencia el aprendizaje colateral y




                                                                          capítulo 4
las capacidades de la innovación. Johnson (2005) destaca que cuan-
do los jugadores interactúan en el entorno de un videojuego, ellos
están aprendiendo el procedimiento básico del método científico:
investigar, generar hipótesis y repensar la forma de jugar para tener
                                                                          129
más éxito en los objetivos del juego.




                                                                          geekonomía
   6. Transformar la cultura de la queja en ética del esfuerzo. Existen
alumnos que viven su proceso universitario como una estrategia de
supervivencia bajo el mínimo esfuerzo. Otros alumnos basan su ex-
periencia en el deseo de autoconstruirse y de emprender, más allá
de las evaluaciones rutinarias. Como analiza Blum (2009), los estu-
diantes arrastran como un enorme peso el proceso de la evaluación
y pierden de vista el objetivo de aprender en base al ensayo y error.
Así, su principal meta es aprobar, y limitan al mínimo la interacción
real y extracurricular con los profesores en pos de ese objetivo.
Csikszentmihalyi (1996) señala que para que fluya la creatividad las
personas deben esforzarse en realizar una actividad cognitiva que
esté por encima de sus capacidades en el momento de comenzar.
Los alumnos deben sentirse incómodos y sufrir el proceso. Eso sig-
nifica que están aprendiendo. Si la tarea les resulta muy fácil, quiere
decir que está por debajo de sus capacidades, por lo cual el apren-
dizaje ya ha sido previamente adquirido.
7. No temer el conocimiento volátil, las contradicciones y la con-
                                               fusión de las ideas. En estos tiempos de barbarie digital, los estu-
                                               diantes deben debatir consigo mismos y con el grupo, sin temor a
                                               ser evaluados. Con un aprendizaje autodidacta y sin esperar de for-
                                               ma pasiva que los profesores transmitan conocimientos como quien
                                               pasa un archivo de un disco duro a otro. Como autoridad del Mas-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               sachusetts Institute of Technology (MIT), Rosalind Williams señala
                                               (2004) qué es lo que se espera de un ingeniero licenciado del MIT:
                                               “Los estudiantes deben ser capaces de abordar problemas mal de-
                                               finidos, ejercitarse en la definición de tareas o en el diagnóstico de
                                               funcionamiento defectuoso, de tolerar la ambigüedad y trabajar en
                                               medio de la incertidumbre”. En ese sentido, Bain (2007) afirma: “Ser
                                               clara y explícitamente consciente de las lagunas de información dis-
                                               ponibles. Reconocer que se ha llegado a extraer una conclusión o se
                                               ha tomado una decisión en ausencia de la información completa, y
                                               ser capaz de tolerar la falta de certeza”.

                                                  8. Autoaprendizaje colaborativo, exigiendo al docente el rol de
                                               tutorización más que el de divulgador de contenidos. Si como es de
                                               esperar, los métodos colaborativos de la universidad de la primera
130
                                               parte del siglo xxi reemplazan a las técnicas disciplinarias, el alum-
                                               no debe aprender por cuenta propia habilidades de liderazgo para
geekonomía




                                               poder conducir procesos en este nuevo escenario. Es la base del
                                               Lifelong Learning. Vale probar, fallar, realimentarse y volver a probar,
                                               pero lo que no vale es desentenderse del proceso. Bain (2007) seña-
                                               la que si los estudiantes no pueden aprender a juzgar la calidad de
                                               su propio trabajo, es que no han aprendido.

                                                  9. Aportar valor al texto que difunde el profesor. A tono con la re-
                                               comendación anterior, aporto un dato: Caty Marshall, investigadora
                                               de Microsoft,32 ha descubierto que algunos universitarios en Esta-
                                               dos Unidos buscan cuidadosamente libros usados, porque valoran
                                               las notas que otros estudiantes han hecho en esos libros. Esto de-
                                               muestra que los lectores también se pueden profesionalizar y apor-
                                               tar conocimiento en la dinámica de la sabiduría de las multitudes.

                                                  10. Construirse a uno mismo como nómada. Moravec (2008)33 ha-
                                               bla de nómadas del conocimiento: jóvenes que trabajan en diferen-
                                               tes lugares del mundo, adaptándose fácilmente a su lengua y cultu-
ra y escogiendo las mejores oportunidades. Aunque tú no quieras
ser nómada, compites con ellos ya que se introducen en tu entorno
laboral y están mejor preparados. Ya no se trata de trabajar en un
lugar específico, en una ciudad, en la oficina o en casa: los jóvenes
trabajan en los bares con sus notebooks. Igarza (2009) habla del “ciu-
dadano Wi-Fi”. Viajan y establecen redes sociales débiles con quie-
nes tienen intereses profesionales en común. Castells (2009) señala
que la nueva división del trabajo en la sociedad de la información
es entre trabajadores autoprogramables que se adaptan a las nece-
sidades del mercado desde su capacidad para gestionar la infor-
mación de forma flexible, y trabajadores genéricos, quienes pueden
realizar tareas muy limitadas y muchas veces resultan prescindibles
para la economía. La categoría de trabajadores autoprogramables
de Castells (2009) coincide en su caracterización con la de nóma-
das del conocimiento de Moravec (2008). En la lógica de lo que
he señalado en la introducción con respecto a netócratas y geeks,




                                                                         capítulo 4
los estudiantes universitarios deben comprender que las redes
profesionales más relevantes están conectadas a nivel global, y su
exclusión de ellas significa la exclusión de las principales oportuni-
dades laborales. El nomadismo no es una opción, sino una forma
                                                                         131
de integrarse al mundo laboral con mayor libertad de decisión. Un
mundo laboral donde existe “la inclusión de todo lo valioso en lo




                                                                         geekonomía
global mientras se excluye lo local devaluado” (Castells, 2009).

1.3. Un catálogo de buenas prácticas para profesores
universitarios. Cada año una nueva rutina pedagógica

   A modo de introducción, citaré algunas recomendaciones gene-
rales que hace Bain (2007) en su investigación sobre los mejores
profesores universitarios.34 El autor habla de conceptos clave y pau-
tas para el profesorado: a) conocimiento construido, no recibido;
b) ayudar a los estudiantes a elaborar nuevos modelos mentales. Se
trata de una tarea difícil porque los modelos mentales cambian len-
tamente y los estudiantes se sienten a gusto con sus ideas precon-
cebidas; c) trabajar más con preguntas que con respuestas. Según
Bain, la respuesta del alumno a las preguntas del profesor constitu-
yen “un proceso de indexación que produce una mayor flexibilidad,
un recuerdo más fácil y una comprensión más rica” que le ayuda a
construir su propia explicación de las cosas; d) evitar objetivos o
motivadores que estén ligados a la asignatura de forma arbitraria,
                                               favoreciendo el razonamiento en sincronía con la vida cotidiana.

                                                  Del mismo modo que hice con los alumnos, aquí va una serie de
                                               propuestas generales para profesores, insisto, hechas con enorme
                                               respeto por mis colegas y con el único interés de expandir aún más
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               el debate en torno a estos temas.

                                                  1. Reglas simples en el aula. Motivar a los alumnos asumiendo esti-
                                               los de supervisión heterogéneos en función del grado de su desarro-
                                               llo individual,35 desdramatizando el fracaso que proviene del esfuerzo.
                                               Aprender requiere ensayo, error y repetición, por lo cual es predecible
                                               que al principio de un proceso de aprendizaje se cometan errores.
                                               Promover que todos los alumnos hablen y expresen ideas en clase,
                                               protegiendo el valor de ese aporte ante los ojos de quienes no se im-
                                               plican. Llegar puntualmente y bien preparado. Diseñar redes sociales
                                               débiles significativas, motivar y aconsejar el diálogo individualizado e
                                               informal con los alumnos son roles aún más relevantes que el espacio
                                               formal de la clase. Gran parte del conocimiento que necesita un alum-
                                               no es tácito y difícil de comunicar, por lo cual el aprendizaje no puede
132
                                               limitarse sólo al aula y a una clase magistral. Otra regla simple en el
                                               aula es adoptar el inglés durante todo el curso, promoviendo la lectu-
geekonomía




                                               ra y exposición de ideas en esa lengua, aunque resulte dificultoso.

                                                  2. La innovación como destino profesional. La apuesta por la in-
                                               novación debería ser imprescindible para todos los que trabajamos
                                               en la docencia universitaria. Ya sea desde la investigación, pero
                                               también desde los procedimientos, prototipeando nuevas técnicas
                                               y trabajando en formato beta bajo el método de ensayo y error.
                                               Pero esto normalmente no sucede y menos en las ciencias sociales,
                                               donde el juego de la innovación es prácticamente inexistente, tanto
                                               a nivel de prácticas pedagógicas (donde impera la clase magistral)
                                               como en la investigación en las respectivas áreas de conocimiento.
                                               Por último, enseñar la creatividad no como una variable azarosa
                                               sino como una técnica con estrictos pasos a cumplir basados en un
                                               gran esfuerzo y perseverancia.

                                                 En esta línea, lo primero en lo que se debe innovar es en los mé-
                                               todos de evaluación. No se puede exigir a los alumnos aquello que
el profesor no promueve en la clase. El método con el que se evalúa
a los estudiantes debe ser coherente con el tipo de estrategias di-
dácticas que se desarrollan. Si cuestionamos que los alumnos pien-
san más en la aprobación que en el proceso, no podemos ser los
profesores quienes centremos todo el esfuerzo en un examen final
o una metodología similar. La evaluación continua otorga a los estu-
diantes la sensación de control sobre su propia educación y es el me-
jor método para romper esta dinámica de la medición que persiste
de forma acrítica en la cultura institucional universitaria.

   3. Docentes polialfabetizados. Ya no sólo se trata de las capacida-
des analógicas y digitales. En un novedoso punto de vista, Piscitelli
(2009) afirma que se necesitan docentes expertos en inteligencia
emocional y en persuasión. El autor diferencia la dimensión cogniti-
va (en la que más énfasis se hace y la que se evalúa) y la emocional:
“explicar contenidos debería ser sólo una de las reglas del juego




                                                                          capítulo 4
educativo pero actualmente canibalizó al resto”.

   4. Producir contra la invisibilidad. Nada resulta más frustrante que
producir investigación o textos que luego nadie lee ni indexa. Tam-
                                                                          133
bién podría referirme a los libros que nadie consulta, y mucho peor
aún, que no están disponibles en las librerías. La invisibilidad es una




                                                                          geekonomía
experiencia demasiado habitual en la producción científica y aca-
démica de nuestras universidades y todos la hemos sufrido en car-
ne propia en alguna etapa de nuestra carrera (consultar capítulo 1,
concepto 3: Vivir distribuidos en las me-spheres o morir invisibles).
En la era de la sobreinformación, el prestigio está configurado por
el grado de atención de los otros. Un profesional de la educación
reconocido es aquel que es leído, citado, consultado y cuyos pdfs
se bajan de la Red. La escritura bajo licencias Creative Commons y
disponible en línea puede resultar una ruta atractiva para investiga-
dores y profesores jóvenes. La satisfacción pasa por el proceso de
escritura y su repercusión viral. Como ya dije, lo vital para la mayo-
ría de escritores no es ganar dinero con los derechos de autor, sino
salir de la oscuridad de un modelo de distribución limitado que a
priori los perjudica en beneficio de los autores más vendidos.

  5. Los territorios mentales pueden ser mucho más productivos
que los geográficos o departamentales. Ésta es una idea de Cor-
nella y Flores (2006) en su decálogo de la innovación. Romper los
                                               territorios preconcebidos: a) en cada campo de conocimiento pro-
                                               moviendo la rotación por departamentos y la multidisciplinariedad.
                                               Aprender otras temáticas y con profesores e investigadores de áreas
                                               diferentes facilita los puntos de conexión de la hibridación para ex-
                                               perimentar nuevos terrenos de investigación y modificar las rutinas
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               de experimentación a base de mashups; b) a nivel geográfico. Exis-
                                               te un componente cultural de sedentarismo y muy poca movilidad
                                               en el entorno académico iberoamericano. Cornella y Flores seña-
                                               lan que en el actual mundo del conocimiento, el poder se traslada
                                               desde quienes se han quedado estancados en la lógica local –inca-
                                               pacitados de participar del juego global de la locomoción– a los
                                               miembros de las tribus globales móviles. Por eso el conocimiento
                                               de idiomas y haber trabajado en diferentes universidades y países
                                               es una variable tan relevante, que pocas veces es valorada por el
                                               sistema institucional. Yo mismo me considero un nómada que vivió
                                               en los últimos 10 años en cuatro ciudades (Buenos Aires, Barcelona,
                                               Palo Alto y Vic) de tres países diferentes. Nunca perdí la conexión
                                               con mis nodos internacionales y siempre me consideré un profesio-
                                               nal en tránsito. Considero esta movilidad como un plus de mi vida
134
                                               profesional, aunque el sistema académico no suele recompensar
                                               esta variable en su justa medida.
geekonomía




                                                  6. Hacer autocrítica en las múltiples instancias de revisión entre
                                               pares, propiciando la meritocracia. Los procesos peer review son la
                                               principal variable en el crecimiento del profesorado, tanto para as-
                                               cender en la escala jerárquica, como para publicar, ganar becas o
                                               integrarse a instituciones de élite. A pesar de su importancia, existe
                                               una peligrosa tendencia a favorecer a quienes tienen pocos grados
                                               de separación con los revisores y eso afecta la inclusión de nuevos
                                               actores y fomenta la endogamia. Algunos gatekeepers académicos
                                               definen excelencia como “algo más como yo” o “trabajando en la
                                               misma línea que mi trabajo”. Bajo esta lógica, los nuevos actores o
                                               innovadores son penalizados si avanzan en la frontera de sus cam-
                                               pos de conocimiento o si provienen de otros entornos. Innis (1950)
                                               decía que ciertos catedráticos son la aristocracia que monopoliza
                                               el conocimiento. En la sociedad de la información se puede rede-
                                               finir la idea: estos catedráticos son la aristocracia que monopoliza
                                               el espacio institucional del conocimiento. Y esto agrava la crisis, ya
que –dado el rol de estos gatekeepers– gran parte del conocimiento
científico circula fuera de las universidades. Esto se relaciona direc-
tamente con el siguiente punto.

   7. Evitar la endogamia del profesorado. Es un cáncer del sistema
universitario iberoamericano que afecta la competitividad, el creci-
miento profesional meritocrático y la calidad de las instituciones. Es
imprescindible incluir en la docencia de los centros universitarios a
profesores con postgrados de entidades con perfiles dispares y di-
ferentes culturas académicas. Diferentes visiones de una cuestión
contribuyen luego a tomar decisiones más aptas y a gestionar una
formación holística. Además, demostrar la experiencia en otra orga-
nización es vital para saber cómo está posicionada en el mercado del
conocimiento la institución donde se recibió la formación inicial.

   Para acompañar el análisis, vale mencionar el grave índice de en-




                                                                          capítulo 4
dogamia en las universidades españolas. Según un estudio de 2006
del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC),36 el 93,3%
de aquellos que obtuvieron una plaza en un departamento universi-
tario entre 1997 y 2001 en España ya trabajaban en ese mismo centro
                                                                          135
antes de que se les fuera concedida. El 70% de los profesores titula-
res de universidad se presentaron al concurso como candidato úni-




                                                                          geekonomía
co. El 56% no había tenido ninguna experiencia postdoctoral en el
extranjero en el momento de ganar la oposición, mientras que sólo
un 26,3% contaba con estancias de más de 6 meses en el extranjero.
Un 47,9% de los entrevistados se licencia, doctora y consigue una
plaza en el mismo centro. Esta situación es totalmente inusual en paí-
ses como Estados Unidos, cuyo porcentaje de endogamia es del 10%,
o en el Reino Unido con un 17%. ¿Cómo se puede ser competitivo
a nivel internacional si sólo una cuarta parte de los profesores asig-
nados con plaza permanente han realizado previamente instancias
largas de investigación en el extranjero?

   8. Menos enciclopedismo. Más acción y compromiso con la for-
mación individual del alumno. Esto no es muy original y es uno de
los objetivos del Plan Bolonia en la Unión Europea. Las tutorías son
un espacio de comunicación directa donde el estudiante se siente
más libre de interactuar con el profesor y de manifestarle sus du-
das o problemas académicos. Además, los estudiantes valoran sin-
gularmente el contacto directo con los profesores. Algunas clases
                                               magistrales deberían transformarse en talleres y los profesores en
                                               facilitadores. Esto no significa que deban desaparecer las clases ma-
                                               gistrales. En una educación estudiante-céntrica el rol del profesor
                                               divulgador ha perdido relevancia, pero sigue siendo muy importan-
                                               te. Un experto ha sacrificado años en formarse y su conocimiento
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               es muy valioso. Por otra parte narrar historias ha sido el motor de
                                               nuestra cultura durante siglos y no observo el motivo por el cual esa
                                               dinámica de aprendizaje deba desaparecer.

                                                  9. Buscar y diseñar entornos significativos. Un espacio académico
                                               que sea honestamente crítico con las limitaciones y generoso con las
                                               virtudes del profesorado, pero siempre exigente y competitivo. Un sis-
                                               tema más eficiente de premios y castigos, que no desmotive a los em-
                                               prendedores. El jefe de departamento o el director del grupo de inves-
                                               tigación cumplen un rol vital en esta tarea. Ese manager debería crear
                                               espacios formales e informales de encuentro y dar espacios crecientes
                                               a quienes hacen un esfuerzo mayor, sin temer la competencia.

                                                  Una reflexión muy personal. Suele ser frustrante hacer durante
136
                                               años la misma tarea y rutina académica, enseñar las mismas asigna-
                                               turas y los mismos contenidos, escalar lentamente en la carrera aca-
geekonomía




                                               démica publicando un artículo al año en revistas locales, de escasa
                                               o nula indexación. Los profesores e investigadores necesitan diver-
                                               sión. Funky research, como dirían Ridderstrale y Nordström (1999).

                                                  10. Proponer, cada año, alguna idea nueva en el ejercicio de la
                                               docencia, a nivel metodológico, pero también a nivel de contenidos.
                                               Aunque sean mínimos, dichos cambios constituyen un escenario di-
                                               ferente para el equipo docente de la cátedra y significan un incenti-
                                               vo hacia dentro para promover acciones pedagógicas alternativas.
                                               Luchar contra la entropía, producto de la rutina en la docencia uni-
                                               versitaria, promoviendo nuevas prácticas y acciones.

                                               2. La nueva fase de la open education.
                                               Intérpretes y sintetizadores

                                                  Mientras las marcas blancas universitarias se esfuerzan por sobre-
                                               vivir, las instituciones más innovadoras comienzan a repensar sus
formatos educativos para soportar con mayor eficiencia la tendencia
hacia una nueva fase de la educación abierta. Superada la etapa de
compartir sus contenidos en la red con toda la sociedad, el modelo
open source se reconoce más exitoso a la hora de diseñar formatos
de colaboración, dado su mayor aporte comunitario y su flexibilidad
para integrar módulos sin depender de estrategias empresariales ce-
rradas. El formato distribuido que se analiza en el capítulo 1 también
es parte de su éxito. La clave está en comprender los procesos orga-
nizacionales que envuelven a estas plataformas open source más que
en evaluar los propios contenidos. Cristóbal Cobo profundizó en el
concepto de eLearning 2.0 y expuso una serie de herramientas Web
2.0 y plataformas de aprendizaje colaborativo para usos educativos
(capítulo 5: Cobo Romaní y Pardo Kuklinski, 2007). Mientras, siguen
creándose nuevas plataformas que ganan en sofisticación y eficacia.
En este proceso evolutivo, la superación está en el paso del diseño
de espacios de divulgación a espacios de producción colectiva. Cobo




                                                                           capítulo 4
(2009) los incluye en la categoría de e-competencias.37

   Según Nambisan (2009)38 existen tres tipos de plataformas colabo-
rativas para la innovación social. Si bien el autor no se refiere direc-
                                                                           137
tamente al entorno educativo, su análisis es fácilmente transferible a
éste: a) plataformas de exploración: aquellas que definen los proble-




                                                                           geekonomía
mas centrales y hacen de puente con los nodos o grupos que pueden
resolverlos; b) de experimentación: aquellas que funcionan como
prototipos y testers para la solución de los problemas; c) de ejecución:
aquellos diseños que proponen directamente una solución y ayudan
a quienes los adoptan a transferir la innovación a un grupo amplio
de la sociedad. Esta pequeña guía de recursos de open education se
basa en las taxonomías que diseñó Nambisan (2009), aunque no se
trata de figuras cerradas o exclusivas ya que muchas plataformas son
transicionales o están en plena fase de expansión:

   a) Recursos educativos universitarios cerrados difundidos por Inter-
net bajo el modelo de broadcasting, sin interacción real con los usua-
rios o entre los propios productores (plataformas de exploración).

   b) Recursos educativos universitarios abiertos. Plataformas de expe-
rimentación y ejecución que conforman un ecosistema aún incipiente.
A diferencia de los recursos cerrados, su metaestructura se basa en la
conformación de la red, dando prioridad a la apertura de la platafor-
                                               ma y no a sus contenidos, favoreciendo acciones de educación abierta
                                               más complejas y colaborativas. El rol de sus administradores es so-
                                               portar la interacción y mantener la plataforma sin ruido ni problemas
                                               técnicos para que los nodos se comuniquen. Estos recursos dan mayor
                                               libertad de acción ya que no construyen barreras para la administra-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               ción de los contenidos, como hacen las plataformas OpenCourseWare.
                                               Esta nueva fase de la open education está a tono con lo que en su
                                               momento se denominó open innovation (Chesbrough, 2003).39 La idea
                                               es que la innovación abierta de la mano de una estrategia conjunta
                                               entre universidades y empresas y con plataformas (colaboratorios) a
                                               su servicio resulta mucho más productiva que el paradigma de la in-
                                               novación cerrada que se crea en las empresas. Johnson (1992) consi-
                                               dera que el conocimiento es generado bajo una negociación y no es
                                               eficiente hasta que los intereses de todos los actores del proceso estén
                                               incluidos. En ese sentido, el autor propone cuatro tipologías de apren-
                                               dizaje: 1) aprender haciendo; 2) aprender interactuando; 3) aprender
                                               buscando; 4) aprender compartiendo (Cobo Romaní y Pardo Kuklinski,
                                               2007). Si bien los contenidos educativos mainstream accesibles en la
                                               red son relevantes, los recursos abiertos son los que mejor se adaptan
138
                                               para cumplir este proceso. En esta dirección se dirigen los nuevos me-
                                               gacampus o ecosistemas del conocimiento.40
geekonomía




                                                  Si bien ambas categorías son valiosos recursos de open educa-
                                               tion, ofertas como el MIT OpenCourseWare fueron diseñadas como
                                               canales unidireccionales para transportar los contenidos generados
                                               en sus cursos de forma rápida y económica y a un público masivo.
                                               Los nuevos formatos de la open education van un paso más allá. Su
                                               arquitectura es una constelación de iguales más que grandes nodos
                                               que dirigen la comunicación de uno a muchos. Estas nuevas pla-
                                               taformas proponen romper de forma simultánea dos piezas cons-
                                               titutivas de la cultura organizacional universitaria: a) la exclusivi-
                                               dad para sus alumnos de los contenidos que se producen y ofrecen;
                                               b) la administración y el control centralizado del proceso educativo
                                               y la relación inflexible entre docentes y alumnos según las taxono-
                                               mías que diseña la institución y sus cuerpos académicos.

                                                  La primera característica ya fue quebrada con la oferta de conte-
                                               nidos unidireccionales de la primera fase de la open education. Pero
la incipiente rotura del modelo centralizado de las universidades
no es trivial y democratiza la figura de los intérpretes,41 actores que
cumplen un rol fundamental en el aprendizaje informal como inter-
faz entre el mundo científico y la sociedad. Estos conectores y sin-
tetizadores trabajan correctamente en ambos tipos de plataformas,
pero cumplen un rol esencial en las plataformas de experimenta-
ción y ejecución con recursos educativos abiertos. Estas redes de
intérpretes proporcionan un escenario más amplio de ideas que
las que ofrecen los cuerpos académicos institucionales y atraviesan
su rígida membrana ampliando las fronteras de las organizaciones
abiertas a esta filosofía de trabajo. Además fomentan la merito-
cracia y la competitividad, ya que actores externos a la estructura
institucional utilizan estas plataformas para poder ingresar en el
sistema, lo cual hace que los insiders deban moverse con mayor
agilidad y eficacia.




                                                                          capítulo 4
   Vayamos entonces al breve catálogo de recursos escogidos. Para
una taxonomía más exhaustiva, recomiendo la selección de institucio-
nes privadas y públicas, proyectos de investigación y otros recursos
relacionados que Cristóbal Cobo y un equipo multidisciplinario desa-
                                                                          139
rrollaron en 2009 para el ambicioso proyecto e-competencias.42




                                                                          geekonomía
2.1. Breve catálogo de recursos educativos universitarios cerra-
dos. Plataformas de exploración

MIT OpenCourseWare
http://ocw.mit.edu/OcwWeb/web/home/home/index.htm
Nacido en 2002 en el MIT, fue el primer proyecto institucional que
ofrecía sus propios cursos de forma gratuita y de acceso público
en la Red. Su creación significó un antes y un después en la open
education, funcionando como un superador de las plataformas pre-
existentes de las universidades virtuales.

OpenCourseWare Consortium
www.ocwconsortium.org
El OpenCourseWare del MIT fue el origen de este proyecto que en 2009
agrupaba a 200 instituciones en 32 países. Es una fuente de materiales
educativos organizados como cursos abiertos de acceso gratuito. Espa-
ña es el país con el mayor número de instituciones que colaboran.
iTunesU
                                               www.apple.com/education/guidedtours/itunesu.html
                                               La plataforma de Apple ofrece un canal específico para que las uni-
                                               versidades puedan subir a la nube clases, vídeos educacionales, au-
                                               diobooks o lo que deseen. Accesible también para museos y organiza-
                                               ciones públicas de medios. Aunque es gratuito, se gestiona mediante
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               convenios con Apple. Originalmente se creó sólo para Estados Uni-
                                               dos, Canadá y Reino Unido, y está disponible en España desde junio
                                               de 2009. Aún no disponible para universidades en Latinoamérica.

                                               Open Learning Initiative (OLI)
                                               http://oli.web.cmu.edu/openlearning
                                               Un proyecto de Carnegie Mellon University. Su principal objetivo es
                                               producir cursos y materiales académicos de acceso abierto como so-
                                               porte para profesores. También se proponen crear una comunidad
                                               de uso y desarrollo que sirva como proceso de revisión entre pares
                                               para mejorar y difundir los cursos y sus materiales.

                                               iLabs Project
                                               http://icampus.mit.edu/iLabs
140
                                               Se trata de laboratorios reales creados en el MIT a los cuales se acce-
                                               de a través de Internet. Estos espacios remotos permiten su acceso a
geekonomía




                                               otras universidades en el mundo.

                                               Aspen Ideas Festival
                                               www.aifestival.org/audio-video-library.php
                                               Una especie de TED, pero con un volumen acotado de ponentes y
                                               menor cantidad de contenidos disponibles en la Red.

                                               TED Conferences
                                               www.ted.com
                                               Es el ciclo de conferencias mundiales más famoso sobre tecnología,
                                               ciencia y diseño. Se realizan desde 1999 en California. Después de
                                               años de exclusividad y formato cerrado sin acceso vía Web, en 2006
                                               sus organizadores comenzaron a ofrecer las ponencias gratis en la
                                               Red, con un pequeño desfase entre el momento en que se celebra-
                                               ban y el que se hacían públicas. Hoy las TED se han convertido en un
                                               medio mainstream educativo. El modelo de gratuidad ha supuesto un
                                               gran éxito económico y de popularidad.
Polimedia
http://polimedia.upv.es/catalogo
Un proyecto de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) para
producir materiales en vídeo por áreas de conocimiento, que los pro-
fesores elaboran en estudios de grabación del propio centro. Según
el vicerrector de la UPV Miguel Ferrando: “Participa más del 30% de
la universidad, el 80% de departamentos y más de 200 profesores”.

Flat World Knowledge
www.flatworldknowledge.com
Se trata de una plataforma de materiales educativos gratis en línea,
como libros, audiobooks, documentos, etc. Según sus creadores pre-
servan lo mejor del mundo editorial –la revisión entre pares y la ca-
lidad de sus autores– con la rapidez de la producción y distribución
en la Web.




                                                                         capítulo 4
Academic Earth
http://academicearth.org
Se trata de un hulu.com educativo, con contenidos empaquetados
en vídeo de las universidades más prestigiosas de Estados Unidos,
                                                                         141
junto a materiales adicionales como ejercicios, textos u otros extras.
Ha sido designada por Time.com como una de las mejores aplicacio-




                                                                         geekonomía
nes web de 2009.

Science Commons
http://sciencecommons.org
Creative Commons lo lanzó en 2005 con el objetivo de rediseñar la
infraestructura de los contenidos de comunicación científica y abrir
un espacio de acceso libre en paralelo a las revistas científicas co-
merciales.

Directory of Open Access Journals (DOAJ)
www.doaj.org
Esta plataforma contiene 4.360 revistas científicas publicadas como
open access journals, o sea accesibles de forma gratuita en Internet
y bajo licencia Creative Commons.
Learning Space / OpenLearn
                                               http://oci.open.ac.uk
                                               Una plataforma de contenidos gratuitos producidos por la Open
                                               University del Reino Unido. Nacida en la década de 1960, la Open Uni-
                                               versity fue la primera universidad a distancia que tuvo éxito en im-
                                               plementar dicho modelo en los tiempos preWeb y constituyó un refe-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               rente mundial para otras instituciones de educación a distancia. Otro
                                               producto educativo diseñado por la Open University junto a la BBC es
                                               Open2.net.

                                               University of the People
                                               www.uopeople.org
                                               Se trata de un nuevo modelo de universidad internacional virtual con
                                               un coste de matrícula muy bajo. El proyecto fue fundado por el em-
                                               prendedor Shai Reshef bajo una organización sin fines de lucro con la
                                               misión institucional de democratizar la educación superior y brindar
                                               acceso a quienes no pueden pagarse una carrera. 2009 fue su primer
                                               año académico y por ahora sólo enseña Administración de Empresas
                                               y Ciencias de la Computación. Todos sus cursos son en inglés.

142
                                               Education Sector
                                               www.educationsector.org
geekonomía




                                               Una asociación independiente que trabaja en política educativa en
                                               Estados Unidos, proponiendo caminos de innovación institucional.

                                               Ohloh
                                               www.ohloh.net
                                               Una compañía que mide el peso de la industria open source. En 2008,
                                               listó más de 200.000 personas trabajando en este tipo de proyectos,
                                               gratis en la mayoría de los casos.

                                               2.2. Breve catálogo de recursos educativos universitarios
                                               abiertos. Plataformas de experimentación y ejecución.

                                               PeertoPeerUniversity
                                               http://p2pu.org
                                               En fase de piloto, P2PU ofrece cursos de 6 semanas con horarios pre-
                                               establecidos sobre contenidos universitarios. Cada curso, de no más
                                               de 14 alumnos, es organizado por un voluntario y contiene el progra-
ma, los materiales y la programación. El objetivo es convertirse en
una plataforma para que cualquiera pueda diseñar y ofrecer cursos.

Campusmovil.net
www.campusmovil.net
Como CEO y fundador de esta plataforma me llena de orgullo incor-
porar este proyecto a la lista de recursos. El caso es que 2009 ha sido
el punto de partida de esta red social vía dispositivos móviles para
la comunidad universitaria iberoamericana, con acceso exclusivo y
transparente a través de la cuenta de correo electrónico asignada
por la universidad a sus miembros. Se trata de un campus virtual no-
oficial con eje en el uso en dispositivos móviles. Originada en España,
a partir del segundo semestre de 2010 está prevista su estrategia de
implementación en América Latina, basada en convenios con univer-
sidades latinoamericanas y la captación de socios locales privados.




                                                                          capítulo 4
En septiembre de 2009, CampusMovil.net ha sido premiado en la
categoría EUROPRIX Quality Seal en la edición 2009 del prestigioso
EUROPRIX Multimedia Awards. Dicho sello de calidad fue otorgado
solamente a 69 proyectos entre los 333 participantes de 31 países
                                                                          143
europeos. El EUROPRIX Multimedia Awards es el concurso de multi-
medios para jóvenes diseñadores más importante de Europa y está




                                                                          geekonomía
íntimamente vinculado a proyectos de origen universitario. Este
premio se suma a la selección como terceros (entre 157 proyectos
europeos) en la votación en línea de la Startup 2.0 Competition 2009;
a la designación como finalistas en el Premi Emprenedors 2009 de
Caixa Manresa, España, y a la mención como uno de los 20 mejores
proyectos de I+D en Catalunya en 2008 en el 8è Concurs d’Idees de
Negoci del CIDEM de la Generalitat de Catalunya.

Academia.edu
www.academia.edu
Se trata de una base de datos colaborativa diseñada con estructura
de árbol sobre investigadores, departamentos y áreas de interés. El
objetivo es que los investigadores puedan encontrar personas con
sus mismos intereses científicos y conocer los últimos trabajos en
el campo. Además es posible desarrollar una página propia con el
perfil de investigación, a los efectos de obtener mayor visibilidad en
la comunidad científica.
iCamp
                                               www.icamp.eu
                                               Es un proyecto de I+D financiado por la Unión Europea con el obje-
                                               tivo de crear una infraestructura de colaboración en red en el eco-
                                               sistema europeo de la educación superior. Se basa en el aprendizaje
                                               autoorganizado y el rol mediador de los profesores.
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               Edufire
                                               http://edufire.com
                                               Una plataforma de vídeos educativos en directo que permite a
                                               quien lo desee convertirse en un tutor de una amplia categoría de
                                               áreas de conocimiento. Cada tutor puede construirse un perfil con
                                               su biografía, su área y las horas en las que enseña. Puede cobrar por
                                               sus clases u ofrecerlas gratuitamente. La comunidad puede también
                                               identificar y puntuar a los miembros más calificados.

                                               InnoCentive
                                               www.innocentive.com
                                               Una red privada de más de 150.000 emprendedores alrededor del
                                               mundo que se ha diseñado como una plataforma de intermedia-
144
                                               ción entre aquellos que tienen preguntas que hacer sobre inno-
                                               vación y desarrollo y aquellos que pueden responderlas. Las or-
geekonomía




                                               ganizaciones que tienen problemas específicos pueden plantear
                                               sus problemas en la Web y ofrecer una recompensa a las mejores
                                               soluciones.

                                               Google Académico
                                               http://scholar.google.es
                                               Quizá el proyecto más conocido de todos los mencionados en esta
                                               breve lista. Se trata de una biblioteca virtual que utiliza el motor
                                               de búsqueda de Google centrándose en la producción científica.
                                               Es una plataforma abierta por cuanto, como el propio Google, es
                                               la propia comunidad de Internet la que decide la relevancia de un
                                               documento mediante su indexación.

                                               Public Knowledge Project
                                               http://pkp.sfu.ca
                                               Es un proyecto iniciado por la University of British Columbia hace
                                               más de una década y está destinado a mejorar los canales de distri-
bución de la investigación y buscar formas alternativas de comuni-
cación científica a través de las TIC.

OER Commons
www.oercommons.org
Comunidad de recursos educativos abiertos (para todos los niveles
de la educación formal) creada en 2007 y de un gran crecimiento
en los últimos dos años, en sociedad con más de 120 proveedores
de contenidos y más de 24.000 recursos accesibles. Poseen un pro-
yecto wiki. http://wiki.oercommons.org/mediawiki/index.php/
Projects

Innovations report
www.innovations-report.com
Se autodefinen como un foro para la ciencia, la industria y los ne-
gocios. Un espacio colaborativo a nivel europeo con más de 13.000




                                                                           capítulo 4
informes, investigaciones científicas, conferencias, proyectos com-
petitivos, premios, etc.

ResearchGate
                                                                           145
https://www.researchgate.net
Una red social hecha por científicos para científicos, diseñada bajo




                                                                           geekonomía
el concepto de ciencia 2.0. Fomenta la cooperación entre los profe-
sionales, la industria y el mundo académico.

Public Library of Science / PLOS
www.plos.org
Creada en 2000, se trata de una organización sin fines de lucro de
científicos creada con el objetivo de propiciar la literatura científica
de acceso abierto y gratuito.

SciVee
www.scivee.tv
Un YouTube para investigación científica creado en 2007 por dos in-
vestigadores de la UC San Diego y la UC Davis. La National Science
Fundation de Estados Unidos, la Public Library of Science y el San Die-
go Supercomputer Center también participan en el proyecto. Sus crea-
dores consideran que los contenidos multimedia serán pronto parte
destacada de la comunicación científica y trabajan en ese sentido.
Cinco ideas principales
                                               del capítulo 4

                                               1   Parte del sistema universitario sufre una crisis desde el momento
                                                   que deja de construir escasez, relega la experiencia de pertenecer
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               como foco y pone su eje en ofrecer contenidos y emitir títulos oficiales.
                                               Esta crisis institucional de entornos, interfaces y métodos de aprendi-
                                               zaje está matizada por factores positivos. Pero ¿qué sucedería si en
                                               algún momento se cuestionara su monopolio de la acreditación?



                                               2   Las universidades de élite seguirán trabajando bajo la economía
                                                   de la escasez y la reputación. La dificultad se trasladará a las mar-
                                               cas blancas universitarias, que no han sabido construir prestigio y se
                                               convirtieron en un costoso parking de jóvenes antes de su ingreso al
                                               mercado laboral y en un aún más costoso espacio de profesores sin
                                               redes internacionales, exigencias meritocráticas ni competencia real.



146
                                               3    La innovación debe ser prioritaria en la rutina docente, a través
                                                    de: polialfabetización; producción contra la invisibilidad; diseño
                                               de entornos significativos que enfaticen los territorios mentales sobre
                                               los geográficos o departamentales; autocrítica en las instancias de re-
geekonomía




                                               visión entre pares, meritocracia y lucha contra la endogamia; nuevas
                                               ideas anuales en el ejercicio de la docencia.



                                               4   Los profesores universitarios debemos adaptarnos a los nuevos
                                                   tiempos. Pero ¿cuál es la responsabilidad de los alumnos en todo
                                               este proceso? ¿Cuál es su voluntad de pasar de sujeto pasivo a activo
                                               de su propia educación? Deben cambiar la actitud de frecuentar una
                                               universidad-hotel para formar parte de una universidad-laboratorio.



                                               5    No es correcta una segmentación nítida entre supuestos nativos
                                                    digitales disruptivos y profesores analógicos démodé. Así, toda la
                                               presión del cambio es del profesorado y se quita responsabilidad a
                                               los estudiantes. Es erróneo creer que los jóvenes son más productivos
                                               porque son multitasking. Su capacidad es un signo de su tiempo. En
                                               cada generación existen virtudes y conductas menos dinámicas.
Cinco recursos relacionados
disponibles en Internet

1   De los recursos de open education que mencionamos en el
    punto 2, quisiera destacar:
MIT OpenCourseWare. http://ocw.mit.edu/OcwWeb/web/home/
home/index.htm
iTunesU. www.apple.com/education/guidedtours/itunesu.html
TED Conferences. www.ted.com



2  Bain, Ken (2004). What the best college teachers do. Harvard
   University Press. Boston. Disponible de forma gratuita en
Google Books. http://tinyurl.com/nptmby



3   “How Web-Savvy Edupunks Are Transforming American Higher




                                                                     capítulo 4
    Education”, Anya Kamenetz. Fast Company, 1 de septiembre
de 2009. www.fastcompany.com/magazine/138/who-needs-
harvard.html

                                                                     147

4   VVAA (2008). La generación interactiva en Iberoamérica. Niños
    y adolescentes ante las pantallas. Ariel. Colección Fundación




                                                                     geekonomía
Telefónica. Madrid. http://www.fundacion.telefonica.com/
debateyconocimiento/media/publicaciones/La_Generacion_
Interactiva_en_Iberoamerica.pdf



5  “Platforms for Collaboration”, Satish Nambisan. Stanford Social
   Innovation Review, verano de 2009. www.ssireview.org/
images/articles/2009SU_Feature_Nambisan.pdf
Notas Capítulo 4

                                               1. Como ejemplo vale recordar que la educación secundaria era a comien-
                                               zos del siglo xx un privilegio de las clases altas. En 1910 la tasa de alumnos
                                               en la educación media de Estados Unidos, aun en los estados más ricos, no
                                               superaba el 30% de los adolescentes entre 14 y 17 años. Treinta años más
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               tarde la escolarización secundaria superaba el 70% y llegaba hasta el 90%,
                                               según los estados (Carr, 2008). Como es de imaginar, el acceso a la educa-
                                               ción superior era aún mucho más limitado y las tasas actuales de ingreso
                                               representan un enorme paso hacia delante en la transformación que se
                                               ha dado en los últimos cincuenta años de una universidad de élite a una
                                               universidad masiva.
                                               Un dato de España demuestra la profunda integración de la mujer en la
                                               comunidad universitaria en la segunda mitad del siglo xx. Según el Informe
                                               de la Inclusión Social en España 2009 de la Fundación Caixa Catalunya, el
                                               porcentaje de mujeres con titulación universitaria ha pasado del 4% entre
                                               las nacidas antes de 1931 al 45,4% entre las nacidas entre 1971 y 1980. La
                                               integración de los hombres a las aulas universitarias es menor. Sólo el 35%
                                               entre los nacidos entre 1971 y 1980 poseen título universitario. discovery-
                                               net.es/informe_inclusio/informe2009_castella.pdf
148

                                               2. El Programa Erasmus de la Unión Europea, que fomenta la movilidad y
geekonomía




                                               cooperación de estudiantes y de profesores entre universidades del conti-
                                               nente, propició en el período 2007-2008 el traslado de 162.000 estudiantes
                                               y 27.000 profesores. Desde su creación en 1987, Erasmus ha superado la
                                               barrera de los dos millones de estudiantes de intercambio. http://europa.
                                               eu/rapid/pressReleasesAction.do?reference=IP/09/1204&format=HTML
                                               &aged=0&language=ES&guiLanguage=en


                                               3. En 2009 alcanza más de 2.000 cursos gratuitos accesibles en la Red y
                                               gratuitos. Su homólogo OpenCourseWare Consortium reúne en 2009 a más
                                               de 200 instituciones en 32 países.


                                               4. Observando la bajísima ratio de alumnos aceptados en primer año en las
                                               principales universidades norteamericanas, se tiene una noción más exac-
                                               ta de la idea de escasez del sistema y la pertenencia entre quienes consi-
                                               guen ingresar. Éstos son los porcentajes de ingresos asociados al número
                                               de quienes presentan la solicitud: Harvard University, 7,9%; Princeton Uni-
                                               versity, 9,9%; Yale University, 8,6%; MIT, 11,9%; Stanford University, 9,5%.
Datos de 2008 basados en: http://colleges.usnews.rankingsandreviews.
com/best-colleges/national-universities-rankings


5. Recomiendo el excelente artículo “How Web-Savvy Edupunks Are Trans-
forming American Higher Education”, Anya Kamenetz. Fast Company, 1 de
septiembre de 2009. www.fastcompany.com/magazine/138/who-needs-
harvard.html
Por otra parte, Stephen Downes analiza en su blog la evolución del meme
edupunk: www.downes.ca/cgi-bin/page.cgi?post=44760


6. Cristóbal Cobo aporta documentación sobre esta discusión en su exce-
lente e-rgonomic. Validando el conocimiento informal, 30 de septiembre
2009. http://ergonomic.wordpress.com/2009/09/30/informal-learning-2
Destaca el documento European guidelines for validating non-formal
and informal learning (2009). Office for Official Publications of the Euro-
pean   Communities,     CEDEFOP.     www.cedefop.europa.eu/etv/Informa-




                                                                                  capítulo 4
tion_resources/Bookshop/publication_download.asp?pub_id=553&dl_
id=1752&pub_lang=EN


7. Dos de las universidades más importantes y masivas de la región, la Uni-
                                                                                  149
versidad de Buenos Aires (UBA) y la Universidad Nacional Autónoma de
México (UNAM), son totalmente gratuitas. La gratuidad de las universida-




                                                                                  geekonomía
des públicas iberoamericanas (en España no son gratuitas, pero su coste
de acceso es muy bajo) se enrola en la categoría cross-subsidies del mo-
delo Free que analiza Anderson (2009). Esto significa que para el alumno
es gratis, pero los ciudadanos pagan de forma indirecta a través de sus
impuestos.


8. Refiriéndose a las universidades catalanas Manuel Castells afirmó en una
conferencia en 2008: “les falta flexibilidad y adolecen de una excesiva politi-
zación”. www.lavanguardia.es/lv24h/20081110/53575898742.html


9. Aprobado por la Unión Europea en 1999, el Plan Bolonia ha sido creado
para modificar el plan de estudios de las universidades europeas y adaptar-
las a un formato común en todo el continente. La implementación del Plan
Bolonia ha significado para la universidad española un avance importante
de adaptación al espacio superior europeo, favoreciendo la superación de
su retraso histórico. http://ec.europa.eu/education/higher-education/
doc1290_en.htm
10. http://digitalistas.blogspot.com/2009/01/universidad-empresa-e-
                                               innovacion-entre.html


                                               11. Un concepto acuñado para los más jóvenes es el de Generación Einstein
                                               (quienes tienen entre 12 y 20 años). Se los denomina Generación Einstein por-
                                               que, según el investigador James Flynn, se hace referencia al grupo etario
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               más inteligente que se haya conocido, dado que el cociente de inteligencia
                                               está creciendo hasta 25 puntos por cada generación. La Generación Einstein
                                               fue precedida por los Millennials. Wikipedia recopila adecuadamente todos
                                               los términos. http://en.wikipedia.org/wiki/Generation_Y


                                               12. Prensky, Marc (2009). “Homo Sapiens Digital: From Digital Inmigrants
                                               and Digital Natives to Digital Wisdom”. Innovate. Journal of Online Edu-
                                               cation, vol. 5, nro. 3, febrero-marzo de 2009. http://innovateonline.
                                               info/?view=issue


                                               13. Jones, Sydney; Fox, Susannah (2009). “Generations Online in 2009”. Pew
                                               Internet & American Life Project, 28 de enero de 2009. www.pewinternet.
                                               org/Reports/2009/Generations-Online-in-2009.aspx?r=1

150
                                               14. Rowlands, Ian; Nicholas, David; Williams, Peter; Huntington, Paul; Field-
                                               house, Maggie; Gunter, Barrie; Withey, Richard, Jamali, Hamid; Dobrowolski,
geekonomía




                                               Tom; Tenopir, Carol (2008). “The Google generation: the information be-
                                               haviour of the researcher of the future”. Aslib Proceedings, vol. 60, nro. 4,
                                               pp. 290-310. www.emeraldinsight.com/Insight/viewContentItem.do;jses
                                               sionid=21ACEEABAEB68DEBA9A0A6EEC12AACFA?contentType=Article&c
                                               ontentId=1733495


                                               15. “L’adolescència digital”, Laura Nicolás. Avui, 2 de octubre de 2009.
                                               www.avui.cat/cat/notices/2009/10/l_adolescencia_digital_73515.php


                                               16. VVAA (2008). La generación interactiva en Iberoamérica. Niños y ado-
                                               lescentes ante las pantallas. Ariel. Colección Fundación Telefónica. Madrid.
                                               www.fundacion.telefonica.com/debateyconocimiento/media/publica-
                                               ciones/La_Generacion_Interactiva_en_Iberoamerica.pdf
                                               El informe es muy completo y muestra las desigualdades regionales de ac-
                                               ceso y consumo de los nativos digitales. En relación con los usos educativos
                                               de las TIC, en un fragmento del análisis se señala: “El uso de Internet en la
                                               escuela no implica una preferencia mayor por los contenidos educativos o
culturales; aunque éstos son visitados por un porcentaje mayor de indivi-
duos –que crece con la edad y es mayor entre las chicas–, los contenidos
relacionados con el ocio siguen siendo los preferidos”. La investigación
concluye que la categoría ocio es la dominante en los usos de las TIC: “El
primero lo constituye la búsqueda de experiencias de ocio en el acceso a
Internet. Dicho de otro modo, algunos de los contenidos incluidos en esta
categoría son los que mayores puntuaciones obtienen, destacando la músi-
ca, los juegos, el humor o los deportes”.


17. Fundación Caixa Catalunya. Informe Inclusión Social en España 2009. disco-
verynet.es/informe_inclusio/informe2009_castella.pdf. El estudio de la Fun-
dación Caixa Catalunya concluye que el aislamiento educativo y el riesgo de
fracaso escolar se transmite entre generaciones. La vulnerabilidad educativa
severa es prácticamente inexistente en familias donde el padre o la madre po-
seen educación superior. La estructura productiva de las comunidades autóno-
mas es otro factor de influencia en la deserción escolar. Un mayor porcentaje




                                                                                      capítulo 4
de oferta laboral que requiere menor formación aumenta el índice de deser-
ción escolar. Ambas variables no tienen que ver a priori con la alfabetización
digital de estos jóvenes autoexcluidos del sistema educativo. Sin embargo, di-
cha exclusión los ubica en un rango diferente al rango con el que habitualmen-
                                                                                      151
te se generaliza a los nativos digitales en las economías desarrolladas.




                                                                                      geekonomía
18. “A Talking Head Dreams of a Perfect City”, David Byrne. The Wall Street
Journal, 11 de septiembre de 2009. http://online.wsj.com/article/SB10001
424052970203440104574403293064136098.html


19. Eyal Ophir, Eyal; Nass, Clifford; Wagner, Anthony (2009). “Cogni-
tive control in media multitaskers”. Proceedings of the National Aca-
demy of Sciences, 24 de agosto de 2009. www.pnas.org/content/
early/2009/08/21/0903620106.abstract


20. Rubinstein, Meyer y Evans (2001). “Executive Control of Cognitive
Processes in Task Switching”. Journal of Experimental Psychology: Human per-
ception and performance, vol. 27, nro. 4, 2001. www.umich.edu/~bcalab/
documents/RubinsteinMeyerEvans2001.pdf


21. Bennett, Sue; Maton, Karl; Kervin, Lisa (2008). “The ‘digital natives’ debate:
A critical review of the evidence”. British Journal of Educational Technology, vol.
39, nro. 5, 2008. www.cheeps.com/karlmaton/pdf/bjet.pdf
22. Por provocadora y sutil, esta sentencia de Brey (2009) me parece genial:
                                               “Cualquiera, con independencia de su formación y aun dando muestras evi-
                                               dentes de su falta de cultura y de ánimo de enmienda, puede acceder a lo
                                               más alto de la estructura social. Cualquier observación al respecto emitida
                                               en público sería considerada hoy políticamente incorrecta. La ignorancia
                                               es atrevida, desacomplejada y, como todos en esta sociedad que constante-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               mente reclama, exige también que se respeten sus derechos”.


                                               23. Lorenzo, George; Dziuban, Charles (2006). “Ensuring the Net Genera-
                                               tion is Net savvy”. Educause Learning Initiative Paper 2.
                                               www.educause.edu/ir/library/pdf/ELI3006.pdf


                                               24. Se trata de propiciar la emergencia: el movimiento desde reglas de mí-
                                               nima complejidad hacia niveles de gran sofisticación. Interacciones locales
                                               que resulten en algún tipo de macrocomportamiento discernible (Johnson,
                                               2001). Mitchell (2009) iguala emergencia a complejidad y define que un
                                               sistema complejo es aquel en el cual grandes redes de componentes sin un
                                               control central y simples reglas operativas dan lugar a un comportamien-
                                               to colectivo complejo, sofisticado y muy evolucionado. http://digitalistas.
                                               blogspot.com/2009/10/una-lectura-sobre-la-complejidad-y-la.html
152

                                               25. “The use of ICT to support innovation and lifelong learning for all”.
geekonomía




                                               A report on progress European Commission, 9 de octubre de 2008.
                                               http://ec.europa.eu/education/lifelong-learning-programme/doc/
                                               sec2629.pdf


                                               26. Smith, Sarah; Potoczniak, Anthony (2005). “Five Points of Connectivity”.
                                               EDUCAUSE Review, vol. 40, nro. 5, septiembre-octubre de 2005.
                                               www.educause.edu/EDUCAUSE+Review/EDUCAUSEReviewMagazineVo-
                                               lume40/FivePointsofConnectivity/158001


                                               27. “An Introduction to Connective Knowledge”, Stephen Downes.
                                               www.downes.ca/cgi-bin/page.cgi?post=33034


                                               28. Wired Magazine publicó un excelente artículo sobre SuperMemo en su nú-
                                               mero de mayo de 2008. www.wired.com/medtech/health/magazine/16-
                                               05/ff_wozniak
                                               Más información en Wikipedia: http://en.wikipedia.org/wiki/SuperMemo
29. Lunsford, Andrea (2008). The Stanford Study of Writing.
http://ssw.stanford.edu


30. “El currículum posmoderno en la cultura digital”. Tíscar Lara. ZEMOS98.
1 de marzo de 2007.
www.zemos98.org/spip.php?page=imprimir_articulo&id_article=370


31. Según Blum (2009), el 68% de los estudiantes norteamericanos admite
haber copiado y pegado de Internet sin citar, en lo que la autora considera
hacer trampa en proporciones epidémicas.


32. Véase “The future of reading”. Clive Thompson. Wired Magazine, junio de
2009. www.wired.com/techbiz/people/magazine/17-06/st_thompson


33. “Knowmads in Society 3.0”. John Moravec. Education Futures, 20 de no-
viembre de 2008. www.educationfutures.com/2008/11/20/knowmads-




                                                                                  capítulo 4
in-society-30/


34. Existe una versión en castellano editada por la Universitat de València.
Bain, Ken. 2007. Lo que hacen los mejores profesores universitarios. Universi-
                                                                                  153
tat de València. Valencia. La versión original del libro What the best college
teachers do (Harvard University Press, 2004) está disponible en forma gra-




                                                                                  geekonomía
tuita en Google Books. http://tinyurl.com/nptmby


35. Esos estilos heterogéneos tienen que ver con las tres categorías
de alumnos que describe Bain (2007) según su actitud hacia el apren-
dizaje: a) aprendices profundos y críticos; b) aprendices estratégicos:
aquellos que se centran en tener un buen desempeño en la universi-
dad, sin desarrollar una comprensión en profundidad de los temas; c)
aprendices superficiales: aquellos que evitan equivocarse, recurrien-
do a la memorización e intentando reproducir lo que han oído en cla-
se, abocándose a la tarea bajo los parámetros mínimos de exigencia.
Bain (2007) también categoriza la relación de los alumnos con el conocimien-
to de menor a mayor compromiso: sabedores de lo aceptado; sabedores sub-
jetivos (todo es materia opinable, entonces si les va mal es porque el profesor
no coincide con su pensamiento), sabedores del procedimiento (aprendices
estratégicos); sabedores separados (se distancian de una idea, permanecen
objetivos o escépticos y siempre dispuestos a discutirla) y sabedores conecta-
dos (pensadores independientes, críticos y creativos). El autor considera que
un mismo estudiante puede trabajar en uno o más niveles de esta jerarquía.
                                               En una conversación informal en 2009 sobre el tema con el profesor y psi-
                                               cólogo argentino Marcelo Bentancour tomé nota de algunas observaciones
                                               que me hizo a las que refiero aquí. Bentancour cree que el estilo de supervi-
                                               sión en el aula depende del grado de autonomía preexistente de cada alum-
                                               no. En algunos casos asumir una actitud directiva puede impulsar al alumno
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               a desarrollar los objetivos del curso; pero en otros casos –alumnos con ma-
                                               yores niveles de autonomía– la “presión” o supervisión estricta puede tener
                                               como consecuencia la inhibición de la conducta y un mal desempeño.


                                               36. Cruz Castro, Laura; Sanz Menéndez, Luis; Aja Valle, Jaime (2006). “Las
                                               trayectorias profesionales y académicas de los profesores de universidad y
                                               los investigadores del CSIC”. Consejo Superior de Investigaciones Científi-
                                               cas (CSIC) España. Junio de 2006. http://digital.csic.es/handle/10261/1667
                                               El estudio parte de una encuesta por correo realizada entre noviembre de
                                               2004 y junio de 2005 a un total de 2.588 investigadores funcionarios del
                                               sistema universitario español, de los cuales 2.350 eran profesores titulares
                                               de universidad.
                                               Un artículo provocador sobre el problema de la endogamia en la universi-
                                               dad española es: “Uno de los nuestros...”. Miguel Delibes de Castro. El País,
154
                                               30 de octubre de 2006. Delibes de Castro afirma: “Por desgracia, en nuestro
                                               país los profesores universitarios se seleccionan con demasiada frecuencia
geekonomía




                                               por procedimientos poco transparentes, donde amiguismo y enchufe pesan
                                               sustancialmente más que la investigación y la docencia”.www.elpais.com/
                                               articulo/educacion/elpedupor/20061030elpepiedu_3/Tes


                                               37. Para profundizar en el concepto de competencias digitales o e-skills re-
                                               comiendo consultar en el portal del seminario E-competencias: “Creación
                                               de capital humano para los siglos 21 y 22”, 31 de octubre de 2008. Ciudad
                                               de México. Esta actividad estuvo coordinada por Cristóbal Cobo Romaní y está
                                               basada en el trabajo colaborativo de académicos de Flacso-México, la Univer-
                                               sidad de Minnesota y la Universidad de Toronto. http://e-competencies.org
                                               También es muy útil el mapa de e-competencias realizado por Cristóbal
                                               Cobo en Mindmeister. www.mindmeister.com/10614530


                                               38. “Platforms for Collaboration”. Satish Nambisan. Stanford Social Innova-
                                               tion Review, verano de 2009. www.ssireview.org/images/articles/2009SU_
                                               Feature_Nambisan.pdf
39. Chesbrough, Henry William (2003). Open innovation: the new imperative
for creating and profiting from technology. Harvard Business School Press.
Boston. http://tinyurl.com/yd95vlg
Center for Open Innovation. Haas School of Business. UCBerkeley.
http://openinnovation.haas.berkeley.edu


40. www.elpais.com/articulo/sociedad/Megacampus/crisis/elpepisoc
/20080714elpepisoc_2/Tes


41. Sobre los intérpretes, véase Seed Magazine. http://revminds.seedma-
gazine.com/revminds/members/group/the_interpreters


42. www.flacso.edu.mx/competencias/index.php?option=com_
bookmarks&Itemid=9




                                                                             capítulo 4
                                                                             155




                                                                             geekonomía
geekonomía         Un radar para producir en el postdigitalismo




             156
capítulo 5
Capítulo 5
                          157

El dulce discurso


                          geekonomía
de la I+D+I.
Entornos significativos
o voluntarismo
Según Davenport y Prusak (2001) los componentes
                                               centrales del conocimiento son: experiencia, ver-
                                               dad práctica, complejidad, valores éticos, creen-
                                               cias, reglas empíricas (heurística), criterio e intui-
                                               ción. La investigación más desarrollo más innovación tecnológica
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               (I+D+I) es la puesta en marcha de procesos asociativos de conoci-
                                               miento utilizando estos componentes, siempre vinculados a condi-
                                               ciones económicas adecuadas y a un entorno influyente, como veía-
                                               mos en el análisis de los smart spots en el capítulo 4.

                                                  La investigación requiere de inversión pública y privada, institu-
                                               ciones de calidad e infraestructuras con recursos humanos capaci-
                                               tados y funcionando bajo un mecanismo meritocrático. El desarro-
                                               llo requiere de lo mismo más cultura empresarial que convierta la
                                               investigación en productos. El rol de la financiación no es secun-
                                               dario. Debe existir apoyo económico para los nuevos actores, por-
                                               que muchas veces los líderes del mercado no innovan y fomentan
                                               el statu quo por miedo a perder ese liderazgo. Muchos referentes
                                               industriales del siglo xx están en crisis por falta de innovación en
158
                                               sus productos. Como agravante, perjudican al usuario con estra-
                                               tegias monopólicas y combaten la integración de nuevos actores
geekonomía




                                               industriales que buscan hacerse un lugar con ideas innovadoras.
                                               Por último, se concentran en sus productos exitosos y recortan in-
                                               versión en investigación. A veces, lo que es bueno para ajustar los
                                               balances de una compañía, es malo para la economía a largo pla-
                                               zo, porque son precisamente las empresas líderes las que deberían
                                               innovar en base a la I+D+I, ya que poseen más capital para desti-
                                               nar a la investigación básica y llevar la innovación hacia delante.

                                                  La innovación es según Castells (2009) “la capacidad para recom-
                                               binar factores de producción de una forma más eficiente y/o obtener
                                               un valor añadido mayor en el proceso o el producto”. La innovación
                                               requiere de un ecosistema social con tolerancia al riesgo y al fracaso
                                               y baja resistencia cultural para absorber las transformaciones. Con
                                               respecto a la tolerancia al riesgo, Brey (2009) cree que existe una
                                               parte del discurso de la emprendeduría que habitualmente no se
                                               analiza en los medios. La mayoría de las veces que se emprende
                                               algo, las cosas no salen bien. Sólo se conocen los casos de éxito,
pero muchos buenos proyectos acaban en fracaso por múltiples
motivos. Fracaso y éxito son dos caras de la misma moneda y par-
te del proceso de aprendizaje en la rutina de los emprendedores.
La cultura en la que se desarrolla la innovación también es deter-
minante. Csikszentmihalyi (1996) considera que la creatividad (y la
innovación es producto de ella) es el resultado de la interacción de
un sistema compuesto por tres elementos: una cultura que contiene
reglas simbólicas, una persona que aporta novedad al campo sim-
bólico y un ámbito de expertos que reconocen y validan la innova-
ción. Para uno de los principales analistas mundiales en creatividad,
las ideas o productos que merecen el calificativo de creativos surgen
de la sinergia de muchas fuentes y no sólo de la mente de una per-
sona aislada.

   La I+D+I es uno de los memes de la clase política de todo el mun-
do, aunque pocas veces se transfiere a la economía real, dada la




                                                                        capítulo 5
falta de uno o más de los requerimientos antes señalados. En Ibero-
américa la referencia al tema es constante, y se ve potenciado por
la crisis económica de este último trienio. Pero su puesta en marcha
de forma masiva requiere de décadas de políticas coherentes, con
                                                                        159
un esfuerzo conjunto del Estado, las universidades, la banca priva-
da y los grupos de inversión, como demuestra el modélico caso de




                                                                        geekonomía
Finlandia1 y el apoyo del sector público y privado norteamericanos
a la innovación en ciencia y tecnología en sus diferentes fases eco-
nómicas durante el siglo xx. Como ejemplo de esto último, se pue-
de mencionar la inversión en investigación básica y la puesta en
marcha del exitoso proyecto público ARPANET a mediados de 1960,
un determinante clave en el crecimiento de la economía de las TIC
norteamericana dos décadas después. Los resultados de ARPANET
promovieron el incremento de la productividad general, crearon
nuevos mercados, generaron puestos de trabajo calificados y afian-
zaron el rol de liderazgo tecnológico mundial de los Estados Unidos.
Esa filosofía se repite en el actual cambio de ciclo producido por la
crisis global. Del mismo modo que la economía de la sociedad de
la información ha sido el motor central del crecimiento del conjun-
to de la economía norteamericana en los últimos treinta años, la
Administración Obama trabaja actualmente para crear las precondi-
ciones de la nueva fase de crecimiento, financiando la investigación
básica en energías renovables y creando la ARPA-E (Advances Re-
search Project Agency-Energy), un centro de investigación a imagen
                                               y semejanza de su antecesor.

                                                   Pero a la innovación se le suma una variable que ha ganado fuer-
                                               za teórica en los últimos años y que coloca a los ciudadanos como
                                               filtros responsables de las transformaciones industriales. Con un ar-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               gumento similar a Csikszentmihalyi, Ilkka Tuomi (2002) estudia el
                                               tema a fondo y cree que la innovación se produce a través de la
                                               interacción entre los usuarios y no puede ser localizada exclusiva-
                                               mente en una sola firma o inventor. Lo cual convierte las prácticas
                                               de consumo en esenciales. El concepto más significativo de la última
                                               década en este campo es el de user-driven innovation, innovación di-
                                               rigida por los usuarios. El fenómeno de la innovación conducida por
                                               el usuario merece una mención especial. Se relaciona directamente
                                               con los capítulos 1 y 3 de este libro y es una variable que debe ser
                                               tomada muy en cuenta cuando se enseña innovación en las univer-
                                               sidades o se escribe sobre ella. Consciente de su relevancia para
                                               enfrentarse a la crisis económica, el Gobierno Obama ha creado la
                                               White House Office of Social Innovation and Civic Participation, 2 con
                                               eje en el soporte a organizaciones sin fines de lucro que trabajan
160
                                               en innovación social colaborativa. Otros emprendimientos en red
                                               van en el mismo sentido. Instituciones clásicas como la Rockefeller
geekonomía




                                               Fundation financian procesos de innovación basados en recursos
                                               abiertos.3 El Berkeley’s Center for Open Innovation4 impulsa a los
                                               changemakers. La empresa privada IDEO5 es mundialmente famosa
                                               por su filosofía de innovaciones conducidas por el usuario. Positive
                                               Deviance Initiative6 trabaja con los líderes comunitarios y los outliers
                                               sociales (Gladwell, 2008) identificando los procesos que giran alre-
                                               dedor de su liderazgo y analizando sus prácticas para convertirlas
                                               en conocimiento tácito. Un caso de innovación social fascinante es
                                               el de mPedigree,7 una red que trabaja en África para facilitar que
                                               las personas puedan detectar fármacos falsos mediante una simple
                                               consulta vía SMS en sus teléfonos móviles.

                                                  A continuación se analizan dos ecosistemas de I+D+I específicos
                                               de economías desarrolladas: Silicon Valley y España. A partir de sus
                                               características el lector puede encontrar la explicación a sus enor-
                                               mes diferencias de productividad. El primero, un entorno significa-
                                               tivo y referencial; el otro, uno voluntarista y poco eficiente.
1. Silicon Valley: un entorno irreplicable e impaciente

    Muchas de las condiciones preexistentes para la innovación están
arraigadas en la historia del sueño americano de la mano de próceres
emprendedores como Cornelius Vanderbilt8 o J.P. Morgan. Como ya
señalé, varios autores (Csikszentmihalyi, 1996; Florida, 2005 y 2008;
Castells, 2009; Byrne, 2009) consideran que existen lugares privilegia-
dos en el mundo para desarrollar la innovación. Todas las variables
que convierten un sitio físico en un smart point industrial están conte-
nidas en la geografía de Silicon Valley, California. Según Tuomi (2002),
Silicon Valley se ha vuelto un portal del sistema de la innovación glo-
bal, dada su capacidad para recombinar rápidamente recursos y tec-
nologías. Como alguna vez dijo el físico Bernardo Huberman,9 Silicon
Valley es un entorno impaciente que se reinventa cada cinco años. El
famosísimo discurso de Steve Jobs Mantente hambriento, mantente
alocado10 representa el alma del Valle del Silicio. Pero estos lugares




                                                                            capítulo 5
simbólicos no nacen por generación espontánea sino que son fruto
de años de focalizada estrategia. Esa filosofía es la que hace que la
región, a pesar de ser muy pequeña en tamaño, signifique tanto en
la economía de la información mundial. Aunque muchos políticos y
                                                                            161
diseñadores institucionales pretendan replicarla en sus propias eco-
nomías, esto es sencillamente imposible debido a las variables que se




                                                                            geekonomía
analizarán más adelante, siendo las más significativas la cultura del
riesgo empresarial y el capital riesgo que aporta una masa de recur-
sos financieros única al servicio de los emprendedores.

   Hay decenas de cronologías sobre la historia de Silicon Valley.11 Haré
una breve síntesis. Su denominación es una invención periodística de
la década de 1970 y se trata de un espacio geográfico de un enorme
dinamismo empresarial que abarca la parte sur de la Bahía de San
Francisco, más concretamente el Valle de Santa Clara. La ciudad más
importante en densidad de población es San José, pero Silicon Valley
está muy asociada a las ciudades de Palo Alto, Menlo Park, Mountain
View, Sunnyvale, Milpitas y Cupertino, entre otras. Zona agrícola por
excelencia hasta que la familia Stanford creó Stanford University en
1891, llamada realmente Leland Stanford Jr. University en homenaje a
uno de los hijos del clan familiar, muerto de fiebre tifoidea en 1884.
Los historiadores de la región coinciden en que sin las sinergias de
Stanford U, Silicon Valley no hubiera existido, o por lo menos no hu-
biera nacido allí. Aunque toda la red universitaria pública de Califor-
                                               nia (especialmente las más cercanas UC Berkeley, UC San Francisco,
                                               UC Santa Cruz y UC Davis) y otras universidades del país contribuyen
                                               con su masa crítica de recursos humanos al desarrollo de la región,
                                               la privada Stanford U es su motor y se sitúa entre las 5 universida-
                                               des más importantes del mundo y entre las 3 más prestigiosas en
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               cuanto a investigación tecnológica, conformando un territorio físico
                                               único para las empresas.12 La universidad promueve una filosofía de
                                               trabajo que da orientación empresarial a la investigación científica,
                                               transformando ideas en oportunidades de negocios. La innovación
                                               funciona como una sensible membrana de conexión con el mercado.
                                               La historia de la simbiosis de investigación tecnológica entre el Valle
                                               y Stanford U es muy larga. Veamos algunos hitos.

                                                  Con el apoyo de la universidad, en 1909 Charles Herrold hizo la
                                               primera transmisión comercial de radio del mundo. En 1911, Cyril
                                               Elwell fundó en Palo Alto la Federal Telegraph Company. En los años
                                               treinta, William Hewlett y David Packard abrieron su empresa fa-
                                               bricando osciladores de audio. Ya en esa década el Valle de Santa
                                               Clara se posicionaba como el lugar de las innovaciones electrónicas
162
                                               de la Costa Oeste norteamericana. Con la Segunda Guerra Mun-
                                               dial, el trabajo de investigación en Stanford U creció en prestigio y
geekonomía




                                               contribuyó a muchos emprendimientos tecnológicos militares, con
                                               el padrinazgo del Departamento de Defensa. En 1946, se fundó el
                                               Stanford Research Institute, de donde surgieron decenas de innova-
                                               ciones, entre ellas el módem y el ratón para uso en ordenadores.13
                                               En 1950, IBM (con su sede corporativa en Nueva York) se instala en
                                               la región, contribuyendo aún más al fortalecimiento de la investiga-
                                               ción y de los negocios en la parte sur de la Bahía de San Francisco.
                                               Ya en 1960 más de 60 firmas de la industria electrónica estaban ins-
                                               taladas en el Valle. Pero las olas de innovación fueron cambiando.
                                               Los circuitos integrados en la década de 1960. Las computadoras
                                               personales entre 1970 y 1980. A continuación el software derivado
                                               de esa invención, y por último Internet, con las aplicaciones 1.0 y
                                               luego, ya a comienzos del siglo xxi con la Web 2.0. Esta constante
                                               evolución ha convertido Silicon Valley en una referencia empresa-
                                               rial de industrias high-tech de orden mundial, afectando a la trans-
                                               formación de la economía de la sociedad de la información en todo
                                               el planeta. Cuando la Web nació a comienzos de la década de 1990,
la industria tecnológica del Valle de Santa Clara estaba más que pre-
parada para absorber toda la innovación que ese nuevo entorno
precisaba. En la lógica de reinventarse cada cierto tiempo, el futuro
mediato de Silicon Valley es la biotecnología y la nanotecnología.
Hasta existen emprendimientos en la industria automotriz, con em-
presas innovadoras como Tesla Motors. Según Anderson (2009)14
el futuro en el Valle será más start-ups, pocos gigantes e infinitas
oportunidades basadas en la desagregación con empresas grandes
divididas en pequeños nichos.

  Silicon Valley posee algunas propiedades que lo hacen único en el
mundo. Pocas regiones poseen una incidencia económica global tan
decisiva. Es una de las últimas verdaderas meritocracias. Una idea inno-
vadora junto a una incansable ética del esfuerzo e inversores sostenien-
do dicho trabajo pueden transformar a unos jóvenes desconocidos en
millonarios en menos de una década, como ha sucedido en el paradig-




                                                                           capítulo 5
mático caso de Google. Veamos esas propiedades particulares:

   • La valoración del fracaso como experiencia empresarial. La
idea es que quienes fracasan una vez lo intentan nuevamente. Lo
                                                                           163
más interesante es que quienes aciertan se ponen a prueba creando
nuevas empresas, para saber si la primera ha sido un éxito fortuito o




                                                                           geekonomía
fruto de su capacidad, como señala Lacy (2008) en Once you’re lucky.
Twice you’re good. Producto de un entorno propicio, los emprende-
dores en Silicon Valley son personas normales que pueden hacer
cosas sorprendentes, con concentración, esfuerzo, perseverancia y
sin temor al fracaso.

   • Cuarenta años de acumulación de buenas y malas prácticas,
competencia y experiencia en recursos humanos. El punto crítico
es el acceso masivo a ingenieros de primer nivel, emprendedores e
inversores, que vienen de todo el mundo atraídos por las cualida-
des del ecosistema. Y esto sigue creciendo de forma exponencial
desde la década de 1970. El prestigio de sus redes profesionales y
académicas es el principal factor de incidencia en la masiva y cuali-
ficada inmigración estudiantil de postgrado a las universidades de
la región, promoviendo investigación de élite y resultados que se
transfieren al entorno industrial.
• Siempre reconstruir, siempre rediseñar, siempre en beta. Nunca
                                               creer que un proyecto está terminado, porque la inacción puede re-
                                               trasar un emprendimiento con respecto a la competencia y al deseo
                                               de los usuarios.

                                                  • La estrategia fundacional de spin-offs y start-ups se basa en
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               una particular relación societaria entre los trabajadores fundado-
                                               res, extraordinariamente motivados al compartir la propiedad de la
                                               compañía y obtener –si el proyecto tiene éxito– grandes incentivos
                                               financieros más allá del salarial.

                                                  • Generación de nuevos emprendimientos e industrias tecnológi-
                                               cas, dada la existencia de un gran volumen de capital riesgo y una
                                               masa crítica universitaria dispuesta a hacer el esfuerzo de iniciar
                                               empresas. El venture capital hace que el sistema funcione. La impor-
                                               tante inyección de capital hacia los emprendedores resulta indis-
                                               pensable para alimentar la innovación y el desarrollo en la región.

                                                  • Comenzar un proyecto sin temer a las dificultades y analizar las
                                               oportunidades existentes para competir con el statu quo son actitu-
164
                                               des vitales para emprender. Vale un ejemplo. La escasa visión de las
                                               corporaciones de medios tradicionales originaria de la Costa Este
geekonomía




                                               norteamericana –cerrada y sin estrategias de incorporación de ter-
                                               ceros desarrolladores para crear innovación–15 se contrapone con la
                                               de los jóvenes emprendedores del Valle. Estos rompedores provie-
                                               nen de fuera de la industria tradicional, sin intereses preconcebidos
                                               y con deseo de destacar a partir de sus propias ideas. La segunda ola
                                               de la emprendeduría Web, además, es ayudada por la experiencia
                                               de los veteranos que vivieron en carne propia la burbuja de 2001.

                                               2. Una breve reflexión sobre la I+D+I en España

                                                  El semanario de negocios Business Week lanzó en 2008 el
                                               BusinessWeek’s Annual European Young Entrepreneur Contest16 para
                                               escoger al joven emprendedor europeo menor de treinta años. Sor-
                                               prende la edad de los participantes y la ambición de sus empren-
                                               dimientos. Con veintitrés años, la sueca Therese Albrechtson ya ha
                                               creado tres compañías en diferentes industrias. Otro caso es el del
                                               holandés P.J. Dorst, con sólo diecinueve años. Se trata de ejemplos
admirables y todos sin excepción provienen del norte de Europa, de
Holanda, Suecia, Noruega, Dinamarca, Reino Unido y Alemania, así
como de Israel. No existe ningún candidato de entre los países me-
diterráneos. Este dato no es trivial y tiene que ver con condiciones
previas que legitiman estos resultados. En el caso de España, existen
ejemplos de emprendeduría muy significativos como el modélico
caso de Amancio Ortega y otros cientos de emprendedores posicio-
nados a nivel mundial,17 pero se trata más de hombres hechos a sí
mismos que no provienen del mundo universitario y no son el fruto
de una política institucional coherente con base en la investigación
científica. El gobierno Zapatero tomó nota en medio de la crisis de
2008 de la relevancia de la I+D+I como camino a seguir para un
crecimiento económico sostenido, con empleo de calidad, y donde
la explotación del conocimiento sea el eje del desarrollo nacional.
Hasta se creó un Plan Nacional.18 Pero más allá del discurso político,
hay datos contundentes que demuestran que se trata sólo de bue-




                                                                         capítulo 5
nas intenciones. No se puede dejar de mencionar que la evolución
en I+D+I en España desde el inicio de la transición democrática en
1975 ha sido espectacular: de pasar a ser una economía inexistente
en la materia, se ha convertido en una de las diez potencias mundia-
                                                                         165
les en producción científica. Sin embargo, la realidad actual es que
cuando en España se habla de modificar el modelo de desarrollo




                                                                         geekonomía
con eje en la construcción y el turismo a uno de base tecnológica,
no ha habido políticas activas amplias en este sentido en el último
trienio. Se requiere un enorme esfuerzo estratégico y financiero gu-
bernamental y privado a fin de diseñar condiciones para la innova-
ción disruptiva. Veamos algunas cifras que ubican a España siempre
por debajo de la media de la Unión Europea y muy lejos de los índi-
ces de Estados Unidos:

   • Inversión educativa europea. España se encuentra cuarta a la
cola con el gasto educativo en el 4,23% de su PIB, sólo mayor que
Grecia, Luxemburgo y Rumania, según Eurostat (2008).19 El gasto pú-
blico español en educación en 2005 era de un 4,2% del PIB, mientras
que la media de la UE-19 era del 5,3% y de la OCDE era del 5,4%. Paí-
ses como Noruega y Finlandia invierten un 7% de su PIB, Francia un
5,7% y Estados Unidos un 5,1%,20 con el agravante de los términos
diferenciales del PIB en las economías mencionadas.
• Índices de innovación. España está en los últimos puestos en la
                                               mayoría de índices de innovación europeos, junto a Italia, Estonia,
                                               Croacia, Hungría y Eslovaquia (Eurostat, 2008). Según el EIS 2008
                                               (indicadores de innovación),21 España cuenta con un índice del 0,37
                                               mientras la media de la UE-27 es de 0,48. España está por detrás de
                                               países como Suiza (0,68), Alemania (0,58), Irlanda (0,53) o Luxembur-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               go (0,52); aunque está por delante de otros países mediterráneos
                                               como Italia (0,35), Grecia (0,36) o Turquía (0,20). Según el Innovation
                                               Scoreboard 200822 España se ubica entre los países de moderada
                                               innovación en Europa (3, en un índice de 1 a 4 siendo 4 el dato más
                                               bajo), y entre el puesto 25 y el 37 a nivel mundial. El agravante es
                                               que España (junto a Italia) está disminuyendo su posición relativa en
                                               Europa con respecto a años anteriores y está catalogada entre los
                                               países de muy bajo crecimiento.

                                                  • Inversión en I+D+I. Según la Fundación Cotec,23 el gasto estatal
                                               en la materia aumentó el 50% entre 1995 y 2006, alcanzando el 1,2%
                                               del PIB. Éste es un dato alentador, aunque se debe tener en cuenta
                                               el retraso histórico en el punto de partida de esta cifra reflejado en
                                               la comparación con otros países de la zona euro. Según el informe,
166
                                               “en 2006 se gastaba por habitante menos de la mitad que en otros
                                               países europeos como Francia o Alemania”. Como agravante y a pe-
geekonomía




                                               sar del discurso del gobierno a favor del cambio de modelo produc-
                                               tivo a través del fomento de la investigación, el presupuesto 201024
                                               del área de Ciencia e Innovación se redujo un 15% con respecto al
                                               año anterior, siendo el ministerio más afectado en toda la estructu-
                                               ra del gobierno central. En una editorial de Nature de noviembre de
                                               200925 la prestigiosa publicación científica sienta posición en contra
                                               de esta reducción presupuestaria. Allí se señala que en los últimos
                                               veinte años España se ha convertido en un prestigioso jugador en el
                                               mapa de la ciencia internacional a fuerza de inversión estatal. Gran
                                               parte de ese mérito se lo llevó la primera gestión del presidente
                                               Zapatero entre 2004 y 2008, duplicando el presupuesto en el área
                                               y creando un ministerio específico para la ciencia y la innovación,
                                               fuera de la órbita educativa. Sin embargo, el artículo cuestiona las
                                               recientes medidas y pone como ejemplo a Alemania, donde, en res-
                                               puesta a la crisis, el gobierno redujo el gasto público para 2010 en
                                               todas sus áreas, excepto en educación y ciencia, donde se han dado
                                               fuertes incrementos. Además, según Nature, el gobierno sigue sin
tomar medidas para mejorar las condiciones de contratación de in-
vestigadores, un proceso lento y carente de competitividad inter-
nacional, dado los bajos salarios y los escasos recursos disponibles
para proyectos de investigación.

    • Participación de la banca privada en inversiones de capital
riesgo. Más allá del rol del Estado, las empresas y la banca priva-
da cumplen una función vital en el ecosistema de la I+D+I. España
debe reconfigurar el motor de la ciencia. Como sucede en Estados
Unidos, el capital riesgo atrae las ideas y a los emprendedores al
mercado. Castells (2009)26 señala que toda innovación implica ries-
go por definición y que los actores privados (la banca es uno de los
principales) tienen que diferenciar el riesgo ligado a la especula-
ción financiera que debe ser eliminado de la nueva economía, del
riesgo ligado a la innovación, que debe ser protegido. Por ejemplo,
la infraestructura para que se desenvuelva la investigación básica




                                                                         capítulo 5
en Estados Unidos es un conglomerado público-privado27 y una po-
lítica de contratación que atrae y recompensa a los mejores inves-
tigadores. Esta simbiosis público-privada en la investigación básica
es clave en el éxito de la economía americana, porque de esa gran
                                                                         167
inversión inicial en centros de investigación surgen paradigmas tec-
nológicos que se convierten en nuevas industrias y en creación de




                                                                         geekonomía
trabajo de calidad. Sólo un dato. Dos de los mayores fondos de pen-
siones californianos colocan más de un 10% de sus activos en ca-
pital riesgo para las nuevas empresas, generadas en el entramado
universitario. ¿Se imaginan a los bancos españoles haciendo algo
similar? Según Martín Varsavsky (2007),28 más de un 60% de los
operadores privados de capital riesgo en España son profesionales
independientes, mientras que el resto están controlados por enti-
dades financieras. Según la ASCRI (Asociación Española de Capital
Riesgo),29 el volumen de inversión de capital riesgo en el país ha
pasado de los 972 millones de euros en el año 2002 a 4.329,6 millo-
nes en el 2007. Con la crisis, la inversión total de capital riesgo en
el año 2008 alcanzó los 3.026,3 millones de euros, un 32% menos
que el año anterior. Según ese informe, el volumen de inversión
que se dedica en España al segmento de capital riesgo sigue siendo
inferior a la media europea: siendo del 4,5% y en Europa del 6,4%
sobre el volumen total del sector. Varsavsky (2007) señala: “Estados
Unidos continúa siendo con diferencia el mayor mercado de capital
riesgo del mundo, captando el 61% de los nuevos recursos apor-
                                               tados y el 62% del volumen mundial de operaciones de buyout. La
                                               cuantía invertida en capital riesgo clásico (etapas iniciales + expan-
                                               sión) fue en 2005 de 18.600 millones de euros frente a los 12.700
                                               de toda Europa”.
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                                  El problema se agrava si se analiza el rol de la banca privada en
                                               el acceso al crédito de las pequeñas y medianas empresas españo-
                                               las. Según el Consejo Superior de Cámaras de Comercio,30 entre ju-
                                               lio y septiembre de 2009 el 84,3% de las Pymes que solicitaron un
                                               crédito en una entidad financiera tuvieron dificultades de acceso.
                                               Un 13% de las empresas presentadas no han obtenido finalmente
                                               créditos. Por último y a pesar de la crisis, el tipo de interés de los
                                               créditos otorgados así como las comisiones y gastos operativos de
                                               los bancos fueron mayores que en el período anterior para el 61,8%
                                               de las empresas con créditos otorgados.

                                                  Esta escasa participación del capital privado en la inversión a
                                               la emprendeduría tiene un efecto secundario también negativo.
                                               El capital riesgo funciona como un eficiente filtro que beneficia a
168
                                               las mejores ideas y, además, colabora con su puesta en marcha. Lo
                                               que busca el inversor es el éxito del emprendedor para obtener los
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                                               mayores beneficios financieros en el menor plazo de tiempo, sin
                                               condicionantes políticos de por medio ni valoraciones extraeconó-
                                               micas. Cuando este capital privado es escaso o está ausente, es la
                                               burocracia estatal la que controla el mayor volumen de ayudas a los
                                               emprendedores. Pero su escala de valores es muy diferente y habi-
                                               tualmente se priorizan variables particulares como el interés políti-
                                               co-partidario, el localismo, el beneficio a los empresarios con ma-
                                               yor contacto con dicho funcionariado, etc. Como bien señala Roig
                                               (2008), ¿por qué dejar que funcionarios sin experiencia empresarial
                                               ni valor añadido curricular sean quienes controlen un enorme volu-
                                               men de capital público y decidan dónde invertir y dónde no, escu-
                                               dándose en el supuesto interés común? Roig afirma con gran atino
                                               que los empresarios y empleados del sector privado viven adaptán-
                                               dose a un mundo competitivo que cambia constantemente y exige
                                               una formación permanente, viviendo en carne propia el éxito y el
                                               fracaso o ambos a la vez. El funcionariado público no sigue esas
                                               exigentes reglas de mercado y es inmune a las crisis, los cambios y a
la competencia. Sin embargo es el que decide a quién se financia y a
quién no, administrando el dinero de todos los ciudadanos.

   • Validación de la investigación dentro de las universidades. Si
no se pertenece a un centro de investigación con dedicación full-
time, el trabajo de investigación de calidad en las universidades
tampoco garantiza un crecimiento profesional, dadas las precarias
recompensas institucionales31 y el desinterés de la industria por el
trabajo de los investigadores doctores, como se analiza en el próxi-
mo punto. Al problema de la escasa recompensa a la investigación,
pueden agregarse el exceso de formalidades burocráticas del siste-
ma, la escasez de recursos y la falta de tiempo para el ocio creativo
necesario para la investigación y el juego de la serendipia. En las
ciencias sociales, además, existe un ambiente muy poco propenso a
pensar en términos de innovación, desarrollo y mercado.




                                                                        capítulo 5
   • Porcentaje de investigadores doctores trabajando en el tejido
empresarial. Según la Fundación COTEC,32 por cada mil ocupados en
España, 5,6 son investigadores mientras que en Estados Unidos son
9,3, en Japón 10,4 y en Finlandia 17,7. Sólo el 10% de los doctores
                                                                        169
españoles trabaja en empresas. Del total de investigadores doctores
en España el 29,8% trabaja en el sector privado mientras que este




                                                                        geekonomía
porcentaje llega al 80,5% en Estados Unidos, un 67,9% en Japón o
un 48,4% en la UE-25.

   Otra investigación similar33 sobre la escasa incidencia de inves-
tigadores doctores en las empresas españolas indica que el 44,4%
de los doctorados entre 1990 y 2006 tenía empleo en el sector de
la enseñanza superior y el 35,8% en la administración pública. En
tanto, las empresas empleaban al 15,7% de dicho colectivo.

  • Asignaturas troncales de emprendeduría en los planes de es-
tudio de las universidades. Aunque no existen cifras oficiales, mi
experiencia me indica que la mayoría de universidades españolas
no enseñan emprendeduría ni estrategias de innovación de forma
sostenida e integrada en sus planes de estudio. Vale la excepción
de las internacionalmente prestigiosas escuelas de negocios IESE,
ESADE e Instituto de Empresa (IE).
A modo de conclusión, se puede señalar que las precondiciones
                                               para desarrollar I+D+I en Silicon Valley y en España demuestran
                                               claramente que no hay un componente azaroso en la base de una
                                               economía emprendedora, sino políticas consecuentes a largo plazo
                                               y otras variables que determinan los resultados. Si bien España no
                                               está ni de lejos entre los peores índices a nivel mundial, si está por
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               debajo de la mayoría de economías desarrolladas del mundo y a la
                                               cola de Europa. La crisis golpea fuerte en todo el mundo y Estados
                                               Unidos no se libra de ella. Esta crisis también llegó a los centros de
                                               investigación y a las universidades de élite, que deben tirar de la in-
                                               novación y las patentes de sus grupos de investigación para captar
                                               nuevos fondos,34 lo cual hace que el desafío se renueve. En España
                                               el movimiento para salir de la crisis resulta lento e ineficiente y no se
                                               centra en la I+D+I, como demuestra la alarmante desatención presu-
                                               puestaria para 2010. Si no se revierten estas precondiciones, la falta
                                               de políticas activas pasará factura en la década que comienza. La
                                               misma responsabilidad poseen las empresas. Los investigadores de-
                                               berían estar mejor integrados en el tejido empresarial 35 y las gran-
                                               des empresas deben asumir su responsabilidad de inversión hacia
                                               la investigación básica abierta y bajo formatos de colaboratorios, si
170
                                               no quieren perder protagonismo industrial en los próximos veinte
                                               años. El debate está abierto.
geekonomía
Cinco ideas principales
del capítulo 5

1    La investigación requiere de inversión pública y privada, institu-
     ciones de calidad y meritocráticas. El desarrollo exige lo mismo
más cultura empresarial que convierta la investigación en produc-
tos. La innovación requiere de un ecosistema social con tolerancia
al riesgo y al fracaso y baja resistencia cultural para absorber las
transformaciones.



2   En Iberoamérica la referencia al I+D+I es constante, y se ve po-
    tenciado por la crisis económica de este último trienio. Pero su
puesta en marcha de forma masiva requiere de décadas de políticas
coherentes, con un esfuerzo conjunto del Estado, las universidades,
la banca privada y los grupos de inversión. Y esto no sucede.




                                                                          capítulo 5
3   Todas las variables que convierten a un sitio físico en un smart
    point industrial están contenidas en Silicon Valley, un portal del
sistema de la innovación global, dada su capacidad para recombinar
                                                                          171
rápidamente recursos y tecnologías. Un entorno impaciente que se
reinventa cada cinco años. Su futuro mediato es la biotecnología y la




                                                                          geekonomía
nanotecnología.



4   Silicon Valley: valoración del fracaso empresarial; cuarenta años
    de acumulación de buenas y malas prácticas; siempre reconstruir,
siempre rediseñar, siempre en beta; un gran volumen de capital ries-
go y una masa crítica universitaria dispuesta a hacer el esfuerzo de
iniciar empresas; comenzar un proyecto sin temer a las dificultades;
competencia con el statu quo industrial.



5    España: los datos del I+D+I están siempre por debajo de la media
     europea y muy lejos de los índices de Estados Unidos. Esos datos
son: inversión educativa y en I+D+I; índices de innovación; participa-
ción de la banca privada en capital riesgo; validación de la investiga-
ción dentro de las universidades; porcentaje de investigadores docto-
res trabajando en el tejido empresarial.
Cinco recursos relacionados
                                               disponibles en Internet

                                               1
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                                   Benkler, Yochai (2006). The wealth of networks. How social
                                                   production transforms markets and freedom. Yale University
                                               Press. New Haven. Versión gratuita disponible en
                                               www.benkler.org/Benkler_Wealth_Of_Networks.pdf



                                               2   “The New New Economy: More Startups, Fewer Giants, Infinite
                                                   Opportunity”. Chris Anderson. Wired Magazine, junio de 2009.
                                               www.wired.com/culture/culturereviews/magazine/17-06/nep_
                                               essay



                                               3  Science, Technology and Innovation in Europe, Eurostat,
                                                  2008. epp.eurostat.ec.europa.eu/cache/ITY_OFFPUB/KS-
                                               EM-08-001/EN/KS-EM-08-001-EN.PDF

172

                                               4  Tuomi, Ilkka (2002). Networks of innovation. Change and
                                                  Meaning in the Age of the Internet. Oxford University Press.
geekonomía




                                               Nueva York. http://tinyurl.com/yh9rsjj



                                               5   Emprendedores TV. www.emprendedorestv.com 	
                                                   Infonomia.com. www.infonomia.com
Notas Capítulo 5

1. Copio textualmente una cita propia de Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva
o medios fast food (2007) y que es pertinente repetir aquí: “El Foro Económico
Mundial en su informe de Ginebra (2004) sitúa a Finlandia a la cabeza de la
Sociedad de la Información. Manuel Castells y Pekka Himanen, en el libro El Es-
tado del bienestar y la sociedad de la información (2002), lo muestran como uno
de los tres grandes modelos de la economía de la información junto a Silicon
Valley (California) y Singapur, cada uno de ellos con concepciones diferentes.
Según Castells (2002), Silicon Valley es sociedad de mercado más democracia,
Singapur es sociedad de mercado más autoritarismo y Finlandia es sociedad
de mercado más democracia más Estado social. Analizando el caso de Finlan-
dia se valora una inversión en investigación de manera conjunta con un eleva-
do nivel de desarrollo en relación con su PIB. Los autores ubican su liderazgo
en la cultura de la innovación, como motor de su desarrollo económico actual,
ligado a la producción tecnológica de vanguardia”. www.planetaweb2.net




                                                                                   capítulo 5
2. www.whitehouse.gov/the_press_office/President-Obama-to-
Request-50-Million-to-Identify-and-Expand-Effective-Innovative-Non-
Profits
                                                                                   173

3. Entrevista a Judith Rodin, por Eric Nee. Stanford Social Innovation Review,




                                                                                   geekonomía
verano de 2009. www.ssireview.org/site/printer/q_a_judith_rodin


4. http://openinnovation.haas.berkeley.edu


5. www.ideo.com


6. Me atrae especialmente el trabajo que Positive Deviance Initiative realiza
para disminuir la corrupción en los países del Tercer Mundo. Su estrategia
es valorar y hacer públicas las buenas prácticas, otorgando relevancia a sus
impulsores y valorando su esfuerzo de cara a quienes se corrompen o no se
implican a nivel comunitario.
www.positivedeviance.org


7. http://mpedigree.net


8. Una excelente biografía de Vanderbilt es The first tycoon. The epic life of
Cornelius Vanderbilt, de T.J. Stiles (Alfred A. Knopf. 2009). Constructor de la
Grand Central Terminal de Nueva York, un modelo de emprendedor y uno
                                               de los orígenes de lo que luego pasó a llamarse el sueño americano. Consul-
                                               tor de Abraham Lincoln en la Guerra Civil, lanzó la revolución del transpor-
                                               te en el país, reconfiguró Manhattan e inventó la corporación americana
                                               moderna. Pocos americanos del siglo xix se asemejaron a Vanderbilt. The
                                               New York Times (15 de julio de 2007) mencionó a Cornelius Vanderbilt como
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               el segundo hombre más rico de la historia de Estados Unidos. Vanderbilt
                                               fue uno de los creadores de la cultura de la emprendeduría americana,
                                               donde la competencia, la meritocracia y la cultura de la oportunidad son
                                               prácticas individuales, sociales y políticas que llegan hasta nuestros días y
                                               que permiten comprender el éxito del país y también cierta insensibilidad
                                               hacia la desigualdad crónica.


                                               Vale hacer énfasis en esta desigualdad crónica y en unos hechos que no se
                                               reflejan en el discurso de la meritocracia. El origen de muchos casos de fra-
                                               caso social ha sido la imposibilidad de acceso a la escalera social y la falta de
                                               oportunidades dada la discriminación que algunas minorías de la sociedad
                                               norteamericana han sufrido de forma crónica a lo largo de la historia del
                                               país. Muchos emprendedores exitosos deben parte de su éxito al conjunto
                                               social, en vista de los bienes generales compartidos que ofrece la sociedad
174
                                               norteamericana. Creer que el status adquirido es resultado exclusivo del
                                               mérito individual es ignorar o hacer caso omiso de los esfuerzos colectivos
geekonomía




                                               de la sociedad a través de escuelas y universidades de calidad financiadas
                                               por el Estado. Estas instituciones públicas y privadas que funcionan con
                                               fondos sociales y donaciones han permitido crear las condiciones para que
                                               los emprendedores concretaran su potencial. En este sentido recomiendo
                                               leer “La rebelión de los meritócratas”, Jean-Paul Fitoussi. La Vanguardia,
                                               13 de octubre de 2009. www.almendron.com/tribuna/27339/la-rebelion-
                                               de-los-meritocratas


                                               9. En diciembre de 2007 le hice una entrevista a Bernardo Huberman en
                                               Stanford University. Huberman es director del Information Dynamics Lab de
                                               Hewlett-Packard y Consulting Professor en Stanford U. http://digitalistas.
                                               blogspot.com/2007/12/entrevista-bernardo-huberman.html


                                               10. Stay Hungry, Stay Foolish, Steve Jobs. Stanford University, Ceremonia
                                               de Graduación de 2005. http://news-service.stanford.edu/news/2005/
                                               june15/jobs-061505.html. Disponible en castellano en www.dailymotion.
                                               com/video/x18tsi_steve-jobs_school
La frase Stay hungry, Stay Foolish no pertenece a Steve Jobs sino que fue
extraída del mítico Whole Earth Catalog y pertenece a Stewart Brand.
www.wholeearth.com/index.php


11. Recomiendo el artículo de Wikipedia http://en.wikipedia.org/wiki/Sili-
con_Valley. Así como el capítulo 2 de Tecnópolis del mundo (1994) de Manuel
Castells y Peter Hall. También la investigación histórica de Christophe Lécuyer
(2006), Making Silicon Valley. Innovation and the growth of high tech, 1930-1970.
Otra recomendación es Designing Interactions (2006), un libro de entrevis-
tas del fundador de IDEO, Bill Moggridge. El trabajo es una observación
sobre las innovaciones tecnológicas surgidas en Silicon Valley y posee una
imprescindible versión en línea gratuita con las entrevistas disponibles en
formato vídeo. www.designinginteractions.com


Otro libro que nos ayuda a comprender el momento actual de Silicon Valley
es Revolution in the Valley (2004), de Andy Hertzfeld. Es, sin duda, la mejor




                                                                                    capítulo 5
historia que se ha escrito sobre el nacimiento del ya mítico Macintosh de
Apple a principios de la década de 1980. Una historia narrada desde dentro
por uno de sus ingenieros estrella. El origen del libro es www.folklore.org,
un sitio web diseñado por el autor con más de cien historias sobre esta revo-
                                                                                    175
lución tecnológica con base en Cupertino y que abarca desde la concepción
de la idea en el verano de 1979 hasta su lanzamiento en 1984 y la salida de




                                                                                    geekonomía
Steve Jobs de la empresa en mayo de 1985.


12. Trabajé como Visiting Professor en el Computer Science Department de
Stanford University en dos períodos entre junio-diciembre de 2007 y junio-
septiembre de 2009 y puedo dar fe de lo que señalo aquí. Emprender es
parte del día a día en la universidad. De mi primer período en 2007, retorné
a España con la idea del proyecto de CampusMovil.net. Del segundo perío-
do en 2009 nació este libro y la consolidación empresarial de Funky Mobile
Ideas SL, la spin-off detrás de CampusMovil.net.


13. El Stanford Research Institute (SRI) fue originariamente creado en el
seno de Stanford University y hoy es una organización independiente sin fi-
nes de lucro. En el SRI se encontraba uno de los primeros cuatro servidores
de la original Arpanet, en 1969, junto a otros ubicados en UC Los Angeles,
UC Santa Barbara y University of Utah.
14. “The New New Economy: More Startups, Fewer Giants, Infinite Oppor-
                                               tunity”, Chris Anderson. Wired Magazine, junio de 2009.
                                               www.wired.com/culture/culturereviews/magazine/17-06/nep_essay


                                               15. De manera similar, la industria automotriz americana fue durante décadas
                                               olvidada por el capital riesgo. Los fabricantes de Detroit siempre fueron hosti-
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               les a desarrolladores de fuera de la industria y éste es uno de los motivos de su
                                               actual y profunda crisis. Algunos analistas creen que ninguno de los grandes
                                               fabricantes de coches americanos existirá de aquí a una década. Según Mann
                                               (2009), para sobrevivir deberán hacer una rápida transición del histórico mo-
                                               delo vertical, jerárquico y propietario, a uno modular, colaborativo y abierto
                                               a nuevos emprendedores (Charles C. Mann. Wired Magazine, junio de 2009).
                                               www.wired.com/culture/culturereviews/magazine/17-06/nep_auto


                                               16. www.businessweek.com/globalbiz/europe/special_reports/
                                               20081126europesyoun.htm
                                               Otro premio muy similar pero en el mercado americano es el Young Inno-
                                               vators Under 35 que organiza Technology Review. En Silicon Valley la in-
                                               novación en manos de veinteañeros es moneda corriente desde siempre,
                                               especialmente en la industria de las TIC a partir de la década de 1980.
176

                                               17. No es que en España falten emprendedores. Podríamos nombrar cientos
geekonomía




                                               de ellos y algunos de fama mundial: Ferrán Adriá, Custo Dalmau, Martín
                                               Varsavsky, Ignacio Pérez Dolset, Koldo Aiestaran, Lorenzo Fluxa, Leopoldo
                                               Fernández Pujals, etc. El caso es que falta una política sistemática de em-
                                               prendeduría a nivel estatal y con base en los laboratorios. Esto es lo que se
                                               analiza en el capítulo. Para conocer el trabajo de los emprendedores espa-
                                               ñoles, recomiendo el nuevo canal web Emprendedores TV.
                                               www.emprendedorestv.com
                                               También aconsejo consultar Infonomia.com. www.infonomia.com


                                               18. www.plannacionalidi.es/plan-idi-public


                                               19. Informe Science, Technology and Innovation in Europe, Eurostat, 2008.
                                               epp.eurostat.ec.europa.eu/cache/ITY_OFFPUB/KS-EM-08-001/EN/KS-
                                               EM-08-001-EN.PDF


                                               20. Panorama de la Educación 2008. Informe español. Indicadores de la
                                               Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
www.educacion.es/dctm/mepsyd/horizontales/prensa/notas/2008/09/
informe-ocde.pdf?documentId=0901e72b80027bb7


21. www.eustat.es/elementos/ele9999900/ti_/tbl9999902_c.html


22. European Innovation Scoreboard 2008. Comparative Analysis of Inno-
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23. “La inversión en I+D en España crece casi un 50% en nueve años”. El País,
17 de junio de 2008. www.elpais.com/articulo/sociedad/inversion/I/D/
Espana/crece/anos/elpepusoc/20080617elpepusoc_8/Tes


24. “El Gobierno recortará el presupuesto en I+D, pero la mitad de lo
previsto”. El País, 24 de septiembre de 2009. www.elpais.com/articu-
lo/sociedad/Gobierno/recortara/presupuesto/I/D/mitad/previsto/




                                                                                  capítulo 5
elpepisoc/20090924elpepisoc_6/Tes


25. “No turning back. Spain should not use the recession as an excuse to
stall plans to boost its scientific enterprise”. Nature 462, 137-138, 12 de no-
                                                                                  177
viembre de 2009.
www.nature.com/nature/journal/v462/n7270/full/462137b.html




                                                                                  geekonomía
26. Recomiendo la entrevista a Manuel Castells, realizada por el CitiLab, de
Cornellà, Barcelona. http://es.citilab.eu. En un fragmento de ella (parte IV)
Castells afirma que “se debe premiar el riesgo que viene de las empresas y
sancionar el riesgo que viene de los bancos (…) Lo que se ha quebrado con
la crisis es la vieja economía, no la nueva economía”.
www.youtube.com/watch?v=tYUm7e2Jxrk&feature=related


27. “The radical future of R&D. It’s a new world of collaboration across cor-
porate and national bondaries”. Business Week, 7 de septiembre de 2009.
www.businessweek.com/mediacenter/podcasts/cover_stories/cover-
cast_08_26_09.htm


28. “El capital riesgo en España”, Martín Varsavsky, en su blog, 29 de marzo
de 2007. http://spanish.martinvarsavsky.net/general/el-capital-de-ries-
go-en-espaaa-.html
29. SCRI (Asociación Española de Capital Riesgo). Informe 2008.
                                               www.ascri.org:8080/info/pdf/INFORME_29042008.pdf


                                               30. “El 84,3% de las pymes tienen problemas para acceder al crédito”. El Perió-
                                               dico de Catalunya, 11 de octubre de 2009. http://elperiodico.com/default.
                                               asp?idpublicacio_PK=46&idioma=CAS&idnoticia_PK=652114&idseccio_
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               PK=1009


                                               31. Es justo señalar el crecimiento en competitividad regional de la investi-
                                               gación originada en las universidades en España, dada la construcción de
                                               mecanismos de ayudas a investigadores como el Programa Marco Europeo.
                                               http://cordis.europa.eu/fp7/home_es.html


                                               Otras ayudas premian especialmente a los investigadores jóvenes que se
                                               mueven fuera de los grupos consolidados (como el programa José Castille-
                                               jo del Ministerio de Educación y Ciencia), así como a propuestas innovado-
                                               ras y no convencionales con el objetivo de generar nuevos paradigmas de
                                               investigación.


                                               32. Valor de los doctores en las empresas (2004). COTEC. Colección Innova-
178
                                               ción Práctica. Perspectivas de futuro. www.oei.es/salactsi/doctores.pdf
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                                               33. Instituto Nacional de Estadística. Encuesta sobre Recursos Humanos en
                                               Ciencia y Tecnología 2006. www.ine.es/prensa/np509.pdf


                                               34. Stanford University tiene previsto en el período 2009/2010 la pérdida
                                               del 30% del endowment, las donaciones que reciben las universidades de
                                               empresas privadas o de particulares y que representan un alto porcentaje
                                               de sus ingresos anuales para obras estructurales o proyectos a largo plazo.
                                               Anteriormente una baja similar fue del 8% en 1974 (datos de The Stanford
                                               Daily, 29 de junio de 2009), lo cual demuestra la gravedad de la actual crisis
                                               de financiación. Algo similar sucede con Harvard University, MIT y otras
                                               universidades de élite.


                                               35. Fundada en 1998, Google es un modelo de integración de los investiga-
                                               dores en el mundo empresarial. En su expansión interna, no contrató MBA’s
                                               sino que hizo énfasis en la investigación en ingeniería de sistemas, mate-
                                               mática y data mining. En su sede corporativa en Mountain View trabajan
                                               cientos de doctorados que provienen del mundo de la investigación y están
mejor preparados para innovar. Su principal valor es la habilidad analítica
para procesar los datos que generan los usuarios. Y eso no lo sabe un MBA,
sino un matemático especialista en el comportamiento de los números.


	




                                                                              capítulo 5
                                                                              179




                                                                              geekonomía
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                                               •	Orihuela, José Luis (2009). Qué son los blogs y cómo dejar de con-
                                                 fundirlos con otra cosa, en Cambronero, Antonio (ed.). BlogGuest
                                                 2, 8 años. Bubok.

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                                               •	Pardo Kuklinski, Hugo (2006). “La producción científica iberoame-
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                                               •	Pisani, Francis; Piotet, Dominique (2009). La alquimia de las mul-
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                                                 de la Comunicación. Felafacs, nro. 74, mayo-agosto de 2007. Lima,
                                                 Perú. www.dialogosfelafacs.net/especial_74ScolariPardo.php

                                               •	Searls, David (2006). “The Intention Economy”. Linux Journal, 8 de
                                                 marzo de 2006. www.linuxjournal.com/node/1000035
Un radar para producir en el postdigitalismo




                                               •	Seidensticker, Bob (2006). Future hype. The myths of technology
                                                 change. Berret-Koehler Publishers. San Francisco.

                                               •	Simone, Raffaele (2001). La tercera fase. Formas de saber que esta-
                                                 mos perdiendo. Taurus. Madrid.

                                               •	Soderqvist, Jan; Bard, Alexander (2003). La netocracia. El nuevo po-
                                                 der en la red y la vida después del capitalismo. Prentice Hall. Madrid.

                                               •	Stiles, T.J. (2009). The first tycoon. The epic life of Cornelius Vander-
                                                 bilt. Alfred A. Knopf. Nueva York.

                                               •	Stone, Biz (2004). Who Let the Blogs Out?: A Hyperconnected Peek
188
                                                 at the World of Weblogs. St. Martin’s Griffin. Nueva York.
geekonomía




                                               •	Suber, Peter (2009). Timeline of the Open Access Movement. Open
                                                 Access Project. www.earlham.edu/~peters/fos/timeline.htm

                                               •	Sunstein, Cass (2003). República.com Internet, democracia y liber-
                                                 tad. Paidós. Barcelona.

                                               •	Sunstein, Cass (2006). Infotopia. How many minds produce knowled-
                                                 ge. Oxford University Press. Nueva York.

                                               •	Tapscott, Don (1999). Growing Up Digital: The Rise of the Net Gene-
                                                 ration. Mc Graw-Hill. Nueva York.

                                               •	Tapscott, Don (2009). Grown Up Digital. How the net generation is
                                                 changing your world. Mc Graw-Hill. Nueva York.

                                               •	Terceiro, José; Matías, Gustavo (2001). Digitalismo, el nuevo hori-
                                                 zonte sociocultural. Santillana. Madrid.
•	Tuomi, Ilkka (2002). Networks of innovation. Change and Meaning
  in the Age of the Internet. Oxford University Press. Nueva York.

•	Ugarte, David (2007). El poder de las redes. Manual ilustrado para
  personas, colectivos y empresas abocados al ciberactivismo. El Co-
  bre. Barcelona.

•	Valverde, LLorenç (2009). Amorrats al teclat. El Gall Editor. Mallorca.

•	VVAA (2008). La generación interactiva en Iberoamérica. Niños y
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  nica. Madrid.

•	Von Hippel, Eric (2005). Democratizing Innovation. The MIT Press.
  Cambridge (MA).




                                                                            bibliografía
•	Weinberger, David (2007). Everything is miscellaneous. The power
  of the new digital disorder. Times Books. Nueva York.

•	Wilbanks, John; Boyle, James (2006). An Introduction to Science
                                                                            189
  Commons. Creative Commons. http://sciencecommons.org/wp-
  content/uploads/ScienceCommons_Concept_Paper.pdf




                                                                            geekonomía
•	Williams, Rosalind (2004). Cultura y cambio tecnológico: el MIT.
  Alianza. Madrid.

•	Williams, Rosalind (2008). Notes on the Underground. An Essay on
  Technology, Society, and the Imagination. The MIT Press. Cambridge
  (MA).

•	Winner, Langdon (1978). Autonomous Technology: technics-out-of-
  control as a theme in political thought. The MIT Press. Cambridge
  (MA).
eBook de acceso gratuito bajo un sistema de donaciones.
Versión 0.1 / Enero 2010
ISBN de la edición electrónica: 978-84-475-3424-1

CC 2010 Hugo Pardo Kuklinski / Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona.
Este libro se publica bajo Licencia Reconocimiento 3.0 España de Creative Commons.
Usted es libre de: copiar, distribuir y comunicar públicamente la obra; hacer obras
derivadas. http://creativecommons.org/licenses/by/3.0/es
Geekonomia _ Hugo Pardo Kuklinski _ UBe.
Geekonomia _ Hugo Pardo Kuklinski _ UBe.
Geekonomia _ Hugo Pardo Kuklinski _ UBe.
GEEKONOMÍA
UN RADAR PARA PRODUCIR EN EL POSTDIGITALISMO
Son los geeks quienes a su modo rediseñan la economía
convirtiéndola en geekonomía. Desde la irrupción de Internet y la
computación personal, son los nuevos escribas del mundo, capaces
de crear los instrumentos que utilizan, o apropiarse de los ya creados.
Ellos configuran y la sociedad consume. Como un early observant, la
principal vocación de este libro es dar pistas e incitar al lector a
realizar nuevas lecturas o repensar algunas nociones de la economía
de Internet en esta década que comienza.

www.geekonomia.net




                      HUGO PARDO KUKLINSKI (PhD)
                      CEO y Fundador de CampusMovil.net | Miembro del
                      Laboratori de Mitjans Interactius (LMI), Universitat de
                      Barcelona | Profesor del Dep. de Comunicación Digital
                      de la Universitat de Vic | Autor de Planeta Web 2.0. Inteligencia
                      colectiva o medios fast food (2007) | Produce digitalismo.com

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Geekonomia _ Hugo Pardo Kuklinski _ UBe.

  • 1. Hugo Pardo Kuklinski GEEKONOMÍA Un radar para producir en el postdigitalismo COL.LECCIÓ TRANSMEDIA XXI
  • 2. 2 geekonomía Un radar para producir en el postdigitalismo
  • 3. GEEKONOMÍA Un radar para producir en el postdigitalismo Hugo Pardo Kuklinski
  • 4. GEEKONOMÍA Un radar para producir en el postdigitalismo Un radar para producir en el postdigitalismo Se debe citar: Pardo Kuklinski, Hugo (2010). Geekonomía. Un radar para producir en el postdigitalismo. Col·lecció Transmedia XXI. Laboratori de Mitjans Interactius / Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona. Barcelona eBook de acceso gratuito bajo un sistema de donaciones. Versión 0.1 / Enero 2010. ISBN de la edición electrónica: 978-84-475-3424-1 Depósito legal: B-4.010-2010 2 Primera edición en papel limitada a 1000 ejemplares. Enero 2010. geekonomía ISBN de la edición en papel: 978-84-475-3425-8 Impreso en España. Parte de los ejemplares impresos estarán destinados a universidades, bibliotecas y centros de investigación. Pueden solicitarlo al Laboratori de Mitjans Interactius (LMI). Universitat de Barcelona. info@lmi.ub.es CC 2010 Hugo Pardo Kuklinski / Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona. Este libro se publica bajo Licencia Reconocimiento 3.0 España de Creative Commons. Usted es libre de: copiar, distribuir y comunicar públicamente la obra; hacer obras derivadas. http://creativecommons.org/licenses/by/3.0/es Diseño gráfico y maquetación: BesadaCukar. www.besadacukar.com Foto de contraportada: Francesc Macià. SAV-UVic. Se accede a esta edición electrónica desde: www.geekonomia.net hugo.pardo@lmi.ub.es CV disponible en: www.lmi.ub.es/lmi/CV_Hugo_Pardo_Kuklinski_English.pdf Nota: Este libro es de acceso gratuito vía Web. Sin embargo, hemos creado un sistema de donaciones con tres valores alternativos (2, 5 y 10 euros) para quien desee contribuir al crecimiento de la Col·lecció Transmedia XXI y a la impresión de una mayor cantidad de ejemplares para su distribución gratuita en instituciones educativas. Puede contribuir en www.geekonomia.net
  • 5. COL.LECCIÓ TRANSMEDIA XX I Sobre la Col·lecció Transmedia XXI Laboratori de Mitjans Interactius / Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona. Un radar para producir en el postdigitalismo Coordinación editorial Hugo Pardo Kuklinski Comité editorial Antonio Bartolomé Pina | Antonio Mercader | Mariona Grané Oró | Cilia Willem | Joan Frigola Reig | Jordi Sancho Salido | Rafael Suárez Gómez | Fabiane Pianowski El Laboratori de Mitjans Interactius (LMI) es un centro de I+D+i de la Universitat de Barcelona especializado en la investigación en el ámbito de la educación y los medios de comunicación. Nuestras líneas de investigación son: • comunicación audiovisual digital • (meta)narrativas y sintaxis audiovisual y multimedia • formulaciones artísticas de participación • entornos formativos potenciados por la tecnología • alfabetización digital • diversidad e inclusión social en contextos mediáticos • evaluación de los aprendizajes con TIC • infancia y pantallas Laboratori de Mitjans Interactius (LMI) 3 UNIVERSITAT DE BARCELONA geekonomía Pg. de la Vall d’Hebron 171 | Edifici Llevant 005 | CP 08035 Barcelona | Catalunya, España tel. +34 93 403 50 65 | info@lmi.ub.es Próximo trabajo de la Col·lecció Transmedia XXI Bridge-IT. Hacia la inclusión digital de las minorías (título provisional) Fecha prevista de edición: junio 2010. Bridge-IT es un proyecto de red temática financiado por la Comisión Europea a través del programa de soporte a las políticas de fomento del uso de las TIC (PSP ICT). Sus principales objetivos son la identificación, el intercambio y la aplicación de buenas prácticas dentro del ámbito de las TIC y de la diversidad cultural y la integración social del colectivo inmigrante en Europa. En el proyecto participan 35 entidades entre instituciones públicas, universidades, sindicatos y ONG. Los distintos productos del proyecto se preparan en pequeños grupos de trabajo, para luego ser validados por el resto de los socios. Se trata de procesos participativos y abiertos. Este segundo libro de la Col·lecció Transmedia XXI será el primer resultado del trabajo colectivo sobre las prácticas en marcha para responder a las necesidades de mejorar la inclusión digital de colectivos en riesgo, como el de los inmigrantes. Este trabajo de divulgación fortalecerá nuestro objetivo de estudiar y encontrar formas eficientes de potenciar la inclusión digital y social de este colectivo. El libro identificará las ayudas, proyectos y cursos que fomentan la participación de los inmigrantes en la vida cotidiana: cómo se organizan, se forman y se integran utilizando las TIC (ordenadores, Internet, teléfonos móviles, etc.) para llevar a cabo trámites administrativos, responder a requisitos laborales o disfrutar de sus aficiones.
  • 6. Agradecimientos A Antonio Bartolomé Pina y a todos los miembros del Laboratori de Mitjans Interactius (LMI) de la Universitat de Barcelona, por darme cabida en su grupo de investigación y brindarme la responsabilidad de dirigir esta nueva Col·lecció Transmedia XXI. A la Universitat de Vic, por financiar mi segunda estadía de investigación en Stanford Un radar para producir en el postdigitalismo University, donde escribí gran parte de este libro. Al Servei d’Audiovisuals de la UVic (Francesc Macià y Ricard Parra) por sus fotos y sus vídeos. A Cristóbal Cobo, Marcelo Bentancour y Elizabeth Martínez por revisar los manuscritos exhaustivamente y ayudarme a mejorar el trabajo. A Jordi del Río, por producir el lanzamiento mediático en Barcelona. A Carlos Scolari, por su constancia en digitalismo.com y por el prólogo. To the Stanford Green Library’s staff, for their generosity and their bibliographical advice. To Joann and Glenn MacDonell for those fun evenings drinking cocktails in Redwood City. To them for taking me into their home and treating me as an older son. 4 geekonomía
  • 7. Índice Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI Producir contra la invisibilidad Por Antonio Bartolomé Pina 07 Un radar para producir en el postdigitalismo Prólogo. Pensando lo “post”, en espera del “pre” Por Carlos A. Scolari 15 Capítulo 0 Bienvenidos al postdigitalismo 19 Capítulo 1 Sobre buzzwords y conceptos marco de la geekonomía 37 Capítulo 2 Un estudio de caso de nuevas formas de intermediación: los open access journals 61 Capítulo 3 La geografía cambiante del planeta Web 2.0: transformación narcisista e identidad única 73 5 Capítulo 4 geekonomía La crisis de la universidad iberoamericana en el postdigitalismo: liderazgo social o marca blanca 109 Capítulo 5 El dulce discurso de la I+D+I. Entornos significativos o voluntarismo 157 Bibliografía 180
  • 8. 6 geekonomía Un radar para producir en el postdigitalismo
  • 9. Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI 7 Producir contra geekonomía la invisibilidad Antonio Bartolomé Pina
  • 10. Gabriel García Márquez comenzaba Cien años de soledad remitiéndonos al futuro del coronel Aure- liano Buendía. Así también, esta introducción comienza remi- tiendo a la nueva década. Años después, los académicos que han participado en el lanzamiento de esta colección recordaremos el momento en que el autor nos propuso ir más allá de las reglas del Un radar para producir en el postdigitalismo juego en el mundo de las publicaciones académicas en Iberoamé- rica, diseñar una nueva colección (ya no sólo un libro) y publicarla bajo descarga gratuita vía Web. Dicho sistema ya está consolidado en el mundo anglosajón (William Mitchell fue el precursor publican- do su City of Bits en 1996), pero aún es incipiente en nuestro entorno universitario. Este texto es una introducción por partida doble. Lo es del trabajo de Hugo Pardo Kuklinski, miembro de nuestro grupo de investigación consolidado, el Laboratori de Mitjans Interactius (LMI). Y lo es también de la colección que lanzan conjuntamente el LMI y Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona.1 Por qué Transmedia XXI La historia de la producción de nuestro LMI es transmediática, 8 mucho antes de que Henry Jenkins popularizara el concepto en su Convergence Culture (2006). El LMI comenzó su camino producien- geekonomía do los primeros y casi únicos programas multimedia educativos en soporte videodisco Laservisión (1998, NTF, RIE). Posteriormente in- trodujo los hipertextos en soporte CD-ROM (1992, Hypermedia for Teaching). Llevó el multimedia al mundo de los niños menores de seis años desafiando a quienes pensaban que utilizar ordenadores en el aula “mataría la afectividad” del niño (1994, Proyecto Grimm). Diseñó y desarrolló espacios de creación colectiva del conocimien- to para niños cuando todavía no existía el término Web 2.0 (1998, Mediakids: how we were). Montó una de las primeras maestrías audiovisuales a distancia en la Web con una fuerte presencia de vídeo (1998, ANTE). Lanzó la que probablemente fue la primera te- levisión educativa infantil en Internet en España (2000, GrimmTV). Atrás quedan una veintena de proyectos europeos, más de la mitad presentados y coordinados por el LMI. Siempre hemos sido un gru- 1. Esta colección se ha puesto en marcha con el apoyo de varias instituciones. Específicamente con una ayuda de la Agrupació de Recerca en Ciències de l’Educació para grupos de investigación correspondiente al año 2008.
  • 11. po de investigación y producción transmediática y en estos tiempos y con esta nueva colección pretendemos fortalecer aún más nuestra seña de identidad científica. En tanto, Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona re- coge las actividades relacionadas con la producción en todo tipo de soportes dentro de la Universitat de Barcelona (UB). Esto incluye desde Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI libros, manuales, revistas, hasta DVD y CD-ROM pasando por eBooks y otros formatos. Sus 113 colecciones incluyen casi todas las áreas de conocimiento de la UB, y su volumen de edición la hace comparable a algunas de las editoriales científicas más reputadas del mundo. Cuando el LMI y Publicacions i Edicions de la Universitat de Barce- lona lanzan una nueva colección con el formato de descarga gratui- ta vía Web bajo una licencia Creative Commons, no se está ante un ejercicio de ingenuidad o inexperiencia, sino ante la consecuencia de un análisis en profundidad de la realidad editorial del siglo en que vivimos. Bien, ya tenemos aquí el segundo término del título de la colección: xxi. Pero esta referencia al siglo actual no proviene únicamente de las características del proceso de distribución de la 9 colección: mixto a través de entornos digitales e impresos, abiertos y comerciales.2 También hace referencia al contenido de sus textos. geekonomía Se pretende ofrecer lo más reciente, en la línea de trabajo habitual del LMI, pero en textos rigurosos, suficientemente extensos para abordar en profundidad los temas que preocupan a quienes trabaja- mos en entornos audiovisuales a comienzos del siglo xxi. El término transmedia fue necesario para poder identificar las lí- neas en las que se mueve el LMI, un grupo que recoge aproximacio- nes a la comunicación, el arte y la educación en el marco de los me- dios. No podíamos limitarnos a los sistemas multimedia, expresión que ya en sus comienzos fue discutida. ¿Y qué decir de la digitaliza- ción en un mundo postdigital? La transversalidad a los medios era el elemento común, el corazón, el common core de la colección. 2. La distribución se comercializa a través de Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona, tanto en librerías tradicionales en papel, como a través de Amazon.com y otros sistemas de venta por Internet. El acceso a la edición electrónica puede realizarse desde la web del LMI y las direcciones propias de cada texto. Este texto está disponible en: http://www.geekonomia.net
  • 12. Dicho lo anterior, la Col·lecció Transmedia xxi es un nuevo empren- dimiento conjunto del Laboratori de Mitjans Interactius (LMI) y de Pu- blicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona, la editorial de pu- blicaciones científicas de la Universitat de Barcelona. Esta colección se crea en 2010 con el objetivo de promover el trabajo de nuestros inves- tigadores en formato libro y, como ya señalamos, bajo dos sistemas Un radar para producir en el postdigitalismo en paralelo de distribución: 1) el tradicional, con precio de portada y venta en librerías y en Internet; 2) un e-book con un diseño diferencia- do y contenidos extras para aprovechar todas las virtudes de la Web 2.0, editado bajo licencia copyleft y de acceso gratuito en la Red. La misión de la Col·lecció Transmedia xxi es publicar los resultados de las investigaciones del conjunto del LMI, así como el trabajo individual de nuestros investigadores y el de invitados externos, siempre dentro de la temática general que engloba nuestra área de conocimiento. La Col·lecció Transmedia xxi se crea bajo la consigna de “producir con- tra la invisibilidad” y responde a la comprensión de los miembros del LMI de que parte del prestigio de los investigadores viene dado por el grado de atención de la comunidad científica y académica a la que pertenece. Como señala el autor en el capítulo 4: “Nada resulta más frustrante que producir investigación o textos que luego nadie lee ni 10 indexa. También podría referirme a los libros que nadie consulta, y mucho peor aún, que no están disponibles en las librerías. La invisibi- geekonomía lidad es una experiencia demasiado habitual en la producción cientí- fica y académica de nuestras universidades y todos la hemos sufrido en carne propia en alguna etapa de nuestra carrera. En la era de la sobreinformación, el prestigio está configurado por el grado de aten- ción de los otros. Un profesional de la educación reconocido es aquel que es leído, citado, consultado y cuyos pdfs se bajan de la Red”. La escritura bajo licencias Creative Commons y de acceso gratuito, pero avalada por una editorial con prestigio como Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona, resulta un canal atractivo para dar a co- nocer nuestro trabajo de forma masiva, más allá del habitual recorrido editorial o de las revistas científicas. Para conocer mejor los ámbitos en que se mueve el LMI se puede acceder a su web.3 Pero esta relación de líneas de investigación pue- de dar una idea clara de nuestros intereses: 3. http://www.lmi.ub.es
  • 13. • comunicación audiovisual digital • (meta)narrativas y sintaxis audiovisual y multimedia • formulaciones artísticas de participación • entornos formativos potenciados por la tecnología • alfabetización digital • diversidad e inclusión social en contextos mediáticos • evaluación de los aprendizajes con TIC Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI • infancia y pantallas Por lo tanto Transmedia xxi no pretende competir con otros es- fuerzos editoriales presentes en el mercado ni con el dinamismo y actualidad de los blogs y páginas personales de tantos profesores y expertos en tecnología educativa, que constituyen una riqueza infrecuente en otros campos. La colección busca la reflexión y la solidez al fijarse en lo que recién nace. Es una colección en caste- llano que pretende liderar los textos relacionados con los medios, la comunicación, el arte y la educación. Es por tanto un espacio de encuentro para Iberoamérica y en especial para los académicos y profesores interesados que deseen tener alternativas a los textos en inglés y otras lenguas. 11 Geekonomía. Un radar para producir geekonomía en el postdigitalismo Y llegamos al primer texto de la colección, es decir, a la segunda parte de esta introducción. Junto a Cristóbal Cobo Romaní, Hugo Par- do Kuklinski publicó en 2007 un libro que se ha consolidado como uno de los referentes de la literatura en Web 2.0 en castellano: Plane- ta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food. Con casi 150.000 descargas (a enero de 2010), el trabajo publicado por Flacso México y la Universitat de Vic, también estuvo disponible en papel y para su descarga gratuita. El profesor Pardo también coordina el proyecto CampusMovil.net, y a través de su digitalismo.com es posible acce- der a algunas de las noticias más relevantes en el campo. El autor es un experto en el análisis comunicativo de la Web y como tal no ha dudado en generar un nuevo término que él define como provisorio: geekonomía. Pero ¿qué quiere decir este término? Un nuevo modo de comprender el digitalismo y el postdigitalismo
  • 14. desde un análisis económico de las relaciones en la Red. ¿Y quién mueve esta economía del mundo digital? Los geeks, estos creadores y adoptadores tempranos de tecnología, testeadores de programas, precursores de lo que los mortales comunes consumiremos en la próxima década. Un radar para producir en el postdigitalismo Para ser un texto en castellano, parece que nos trae muchos tér- minos en inglés. Efectivamente, explicados en detalle, no siempre es prudente traducir términos en lo que quizás sería más una trai- ción que un signo de respeto.4 Así encontraremos términos como buzzwords, me-spheres, empowernment, cloud computing, open ac- cess journals, groundswell, gatekeepers, Googlejuice, e-magazines, blended learning y tantos otros que aparecen a lo largo del texto. Estos términos nos permiten también realizar un nuevo análisis de conceptos tan controvertidos como el copyright, la acreditación uni- versitaria, el modelo de I+D+I, las universidades marcas blancas, la crisis de la intermediación cultural, etc. La lectura de Geekonomía es un soplo de aire fresco frente a los tópicos y falsedades que pode- mos escuchar en ciertos medios tradicionales, espoleados por los viejos detentadores de un poder que hoy ven amenazado por una 12 nueva economía, creada desde la sociedad digital que ellos creían controlar. Un texto social, económico y político, pero también cul- geekonomía tural y que afecta profundamente a los educadores. Un texto ideal para iniciar esta colección. Y los próximos libros No todos los libros seguirán exactamente la misma tónica. Al- gunos recogerán experiencias en aspectos relevantes como la e-In- clusión o el aprendizaje ampliado. Otros preferirán las aportaciones de varios autores. Es posible que quien lea estas líneas piense que puede aportar algo a la colección. Pues bien, es también una colec- ción abierta. No es un espacio para publicar entre amigos, sino una interfaz meritocrática y abierta al mundo académico de la comuni- 4. Véase al respecto la peculiar traducción como “bloc” de lo que fue una divertida evolución de web-log (registro de la web) hacia la forma verbal We blog.
  • 15. cación iberoamericana.5 Aunque a diferencia del Macondo de Ga- briel García Márquez, se trata de un mundo real. ¿O quizás también es un mundo mágico? Dr. Antonio Bartolomé Pina Director Laboratori de Mitjans Interactius (LMI) Introducción a la Col·lecció Transmedia XXI Universitat de Barcelona 13 geekonomía 5. Puede ponerse en contacto con cualquiera de los miembros del Comité Editorial, del grupo LMI o directamente escribiendo a info@lmi.ub.es
  • 16. 14 geekonomía Un radar para producir en el postdigitalismo
  • 17. Prólogo prólogo 15 Pensando lo “post”, geekonomía en espera del “pre” Carlos A. Scolari
  • 18. A comienzos del siglo xx la combinación de una serie de tecnologías –desde el coche tirado por caballos hasta el motor de cuatro tiempos inven- tado por Nikolaus A. Otto en 1876, pasando por los neumáticos que John Boyd Dunlop creó en 1887 para la bicicleta de su hijo– generó una nue- Un radar para producir en el postdigitalismo va interfaz: el automóvil con motor a explosión. En esa época de pioneros todavía no estaba claro que precisamente ésa sería la tecnología dominante en el mundo del transporte. En 1900 había en los Estados Unidos 4.192 automóviles: 1.681 funcio- naban a vapor, 1.575 eran eléctricos y sólo 936 se movían con motor a gasolina. Los vehículos con motor eléctrico o a vapor también se disputaban el futuro, mientras que los carros con tracción animal no se resignaban a abandonar el lugar que les correspondía como medio de transporte milenario. Pero, como sabemos, en pocos años las máquinas mecánicas creadas por Henry Ford y Giovanni Agnelli le ganaron la pulseada a los caballos y el “automóvil con motor a explosión” pasó a ser simplemente “automóvil”, a secas. 16 A comienzos del siglo xxi empezaron a circular por las calles de algunas metrópolis “automóviles eléctricos”. Como esto es un pró- geekonomía logo y conviene ser breve, el resto de la historia se lo pueden imagi- nar: si algún día todos los automóviles terminan siendo eléctricos, a nadie se le ocurrirá decir “Mira, un automóvil eléctrico”. Todos serán “automóviles”, a secas. Algo parecido está pasando con lo “digital”. A finales del siglo xx la tecnología digital abandonó los laboratorios y se derramó por el mundo. En pocos años nos vimos rodeados de “máquinas digi- tales”, “comunicación digital”, “diseño digital” y hasta de una “eco- nomía digital”. Hoy estamos atravesando el momento de transición, el pasaje de una tecnología que era new (y por lo tanto muy visible) en las décadas de 1980-1990 y que por ello requería un adjetivo específico. Cada día que pasa esa misma tecnología se vuelve más invisible. Estamos asistiendo a la rápida muerte del adjetivo “digi- tal”. Podría decirse que Geekonomía. Un radar para producir en el postdigitalismo habla precisamente de esto: de la lenta disolución del adjetivo “digital”.
  • 19. Hugo Pardo Kuklinski apuesta por el concepto de postdigital. Lo entiendo: no es fácil hablar de lo nuevo. Cada vez que tenemos que nombrar algo nuevo no nos queda otra alternativa que recurrir a las palabras que ya conocemos. Cuando a finales del siglo xix unas extrañas y ruidosas criaturas con ruedas comenzaron a verse en las calles de las grandes metrópolis, los asustados peatones no tuvie- ron más remedio que recurrir a las palabras que ya conocían: “un coche sin caballo”. Tampoco descartemos que algún alucinado pea- tón haya dicho en una esquina de Londres o París: “Cuidado, deja pasar a ese coche post-tracción animal”. En eso estamos. Viviendo un momento de cambios donde, como escribía Karl Marx, todo lo que creíamos sólido se disuelve en el aire. Una economía de la información se deshace mientras otra comienza a nacer (véase capítulo 1). Otro Marx, Groucho, dijo que nunca en- traría en una institución que lo aceptara como miembro. El autor del libro y el autor de este prólogo nos movemos cotidianamente en una prólogo de esas instituciones sospechosas que a duras penas logran mante- nerse a flote en medio del flujo postdigital: la universidad. Al igual que el periodismo, la escuela primaria, los mercados financieros o la 17 industria cultural, la universidad está viviendo (¿o debo escribir “su- friendo”?) las consecuencias de un cambio de paradigma. Lo viejo geekonomía no termina de irse y lo nuevo llega marcado por la constitución de redes ubicuas, la crisis de las intermediaciones y la pérdida general de orientación institucional. La universidad, al igual que la escue- la primaria o los bachilleratos, se pregunta: ¿hacia dónde vamos?, ¿sirve a los alumnos lo que estamos enseñando?, ¿qué deberíamos enseñar?, ¿cómo deberíamos enseñarlo? (véase capítulo 4). Pero la universidad no sólo transmite conocimiento a las nue- vas generaciones: también lo genera. El cambio de paradigma que mencioné anteriormente también afecta a las formas tradicionales de generar, distribuir y consumir el conocimiento científico. El con- solidado modelo de negocio de los journals hace agua por todos lados, mientras en el horizonte los open access journals marcan un camino (véase capítulo 2). La web colaborativa se introduce en el mundo científico y corroe desde sus entrañas un sistema lento, cos- toso y a veces poco transparente de circulación del conocimiento. Y mientras los investigadores tratamos de posicionarnos en la nueva
  • 20. economía del conocimiento científico, nuestros alumnos construyen sus relaciones en Facebook, Twitter y Tuenti, las redes sociales que hoy, a finales de 2009, están de moda pero cuyo status institucional podría cambiar cuando este libro llegue a las librerías (véase capítu- lo 3). En la geekonomía el concepto de new media o new technology nace condenado a la obsolescencia. Un radar para producir en el postdigitalismo El postdigitalismo se derrama por el mundo de diferente manera. No es lo mismo el nicho californiano que el latinoamericano o el es- pañol (véase capítulo 5). Los actores, las instituciones y los procesos son interpretados y asumen un perfil diferente en cada uno de estos barrios de la nueva ecología de la información. Si algo nos enseña la historia es que los modelos de desarrollo no son automáticamente exportables. Lo que funciona en Cupertino no necesariamente es reproducible en L’Hospitalet o Rosario: cada nicho socio-tecnoló- gico debe construir su propio camino de crecimiento, integrando a sus mejores actores y potenciando lo que mejor sabe hacer. Éste es un libro que flota en la fluidez de una transición. Sabemos lo que estamos dejando atrás (la fascinación por lo digital) pero no 18 terminamos de tener claro lo que vendrá. Flotamos en el postdigi- talismo. En otras palabras, el lector está a punto de leer un libro geekonomía “postdigital” que en el futuro podrá adjetivarse de otra manera, quizás anteponiendo el prefijo “pre”, pero por ahora es demasiado temprano para saberlo.
  • 21. capítulo 0 Capítulo 0 19 Bienvenidos al geekonomía postdigitalismo
  • 22. “Anything that is in the world when you’re born is normal and ordinary and is just a natural part of the way the world works. Anything that’s invented between when you’re fifteen and thirty-five is new and exciting and revolutionary and you can probably get a career in it. Anything invented after you’re Un radar para producir en el postdigitalismo thirty-five is against the natural order of things.” adams, Douglas (2002). The Salmon of Doubt: Hitchhiking the Galaxy One Last Time Se le atribuye a Alan Key la cita “technology is technology only for people who are born before it was invented”. Castells (1996) decía que “la tecnología es sociedad y ésta no puede ser comprendida o representada sin sus herramientas técnicas”. En este sentido, todos los avances tecnológicos de la historia fueron relevantes a nivel de evolución social. Sin embargo, hablar de una revolución tecnológica cuando se hace referencia a las TIC suena presuntuoso y ubica injus- tamente el aludido ecosistema industrial en el centro del universo 20 de las innovaciones. Dicho guión no sorprende, porque el progreso ha devenido siempre de la mano de un discurso presente-céntrico geekonomía y utópico sobre el futuro. Pero desde la edad de piedra se podrían mencionar decenas de tecnologías significativas en cada siglo y to- das fueron relevantes para el desarrollo humano. La agricultura en Asia, la civilización hidráulica, el hierro, la ingeniería civil en China y Roma antes de Cristo, la invención de los tipos móviles, la arqui- tectura medieval, la revolución industrial, etc. Y qué decir de las transformaciones de los siglos xix y xx, empezando por la aviación civil y la electricidad. Seidensticker (2006) afirma que el ser humano sobreestima la importancia de los nuevos inventos y desestima los inventos con los que vivió toda la vida. Nos comportamos como ni- ños ante el nuevo juguete y olvidamos el que nos seducía un año an- tes. Siempre estamos fascinados con el nuevo artilugio tecnológico. Por esto, las personas que nacieron antes de que una tecnología se torne popular y ubicua, la consideran realmente como tal y obser- van su faceta transformadora. Pero quienes nacen a posteriori de que una tecnología se convierta en masiva y social, la ven como un fruto del orden natural de las cosas. Se trata de una forma distorsio-
  • 23. nada de ver la relevancia de la innovación. En ese sentido, Headrick (2009) hace una cronología precisa de la evolución tecnológica y su repercusión social, reafirmando la importancia de todas y cada una de ellas. Veamos un ejemplo. La ramificación social y económica de la democratización de la electricidad a fines del siglo xix ha sido totalmente disruptiva. Alteró el ritmo de vida de las personas y de las comunicaciones humanas y afectó decisivamente la economía industrial. Según Carr (2008) la electricidad creó el confort del ho- gar, propició el crecimiento de la clase media, la expansión de la educación pública y la cultura de masas, así como el movimiento de la población desde las ciudades a los suburbios. ¿Qué tecnología fue más relevante en términos de influencia social: la electricidad o las TIC? No tiene valor discutirlo en términos dicotómicos y absolu- tos. ¿Por qué entonces creer que el digitalismo de la segunda mitad del siglo xx es la más revolucionaria de las transformaciones? ¿Por qué pensar que, como Terceiro y Matías (2001) definieron con opti- capítulo 0 mismo, se trata de una fase diferente al capitalismo? Piscitelli (2009) provoca diciendo que el capitalismo es creativo, inteligente, estético y relacional y se demuestra con la evolución de las TIC. Además de estas cualidades, también es adaptativo. Y son precisamente las em- 21 presas e instituciones capitalistas las que redefinieron el digitalismo haciéndolo omnipresente. En consecuencia, es hora de empezar a geekonomía reconsiderar la economía digital como economía a secas y dar un paso terminológico hacia el futuro. La visión de McLuhan hace cuarenta y seis años en Understanding Media era precisa. Todas las tecnologías son extensiones del hom- bre. Y las TIC son una extensión de nuestro acotado universo físico que nos limita a estar en un lugar y en un solo momento. McLuhan afirmaba que los medios crean nuevos patrones sociales que rees- tructuran las percepciones. Más allá de los contenidos del medio, éstos tienen sus propios efectos en la percepción humana y la re- configuran. Ése es el principal mensaje del medio. Bajo esta lógica, McLuhan demandaba una equidistancia entre el análisis del medio y el de los contenidos del medio. Esa demanda recorre todo este libro haciendo foco en la reconversión mediática más que en sus contenidos, y entendiendo los medios como sinónimo de mediado- res. En ese contexto, la universidad es un medio. Y por eso dedicaré un capítulo a ella. La innovación también funciona como mediadora
  • 24. entre el mercado y los consumidores. El digitalismo ha creado patro- nes sociales de acceso a la información que han reconfigurando la gestión del conocimiento afectando a: las instituciones educativas; el rol de los distribuidores e intermediarios en la economía, espe- cialmente en la industria cultural; la comunicación de uno a muchos en los medios masivos; una Internet que pasó de ser un portal de in- Un radar para producir en el postdigitalismo formación a un medio de comunicación bottom-up, la investigación y comunicación científica; etc. Estos patrones ya se han integrado definitivamente en una sociedad que avanza hacia otra nueva evo- lución tecnológica que denomino provisoriamente postdigitalismo. A través de este trabajo, intento escapar al lugar común del dis- curso de la revolución tecnológica y sus generalizaciones y centrar- me en las fases evolutivas cada vez más cortas y focalizadas y en el nuevo argot que busca su espacio en el ecosistema semántico. En este sentido el principal término que se ve afectado por esta constante evolución es precisamente el digitalismo. Aunque se trate de un concepto inexistente en el mundo científico anglosajón, ha resultado más útil en la economía, en la sociología y en la pren- sa. Se puede rastrear su origen en 1948, con la publicación de un 22 trabajo esencial en el desarrollo de las ciencias de la información: el artículo “A Mathematical Theory of Communication”, de Claude geekonomía Shannon. Ese nuevo enfoque sobre los flujos de información como un valor objetivo y medible de una serie de bits (dígitos binarios), creó una clara diferenciación entre la información analógica y la digital. El trabajo de Shannon mostraba que la información se podía medir como un flujo a través de su digitalización. Esto suponía un paso adelante en la medición de la comunicación humana y de la información generada en la naturaleza. La codificación digital hizo más eficiente el procesamiento de la información, suprimiendo el ruido. La teoría de Shannon fue el punto de partida de gran parte de la transformación tecnológica de la segunda mitad del siglo xx. En el mismo año, el libro de Norbert Wiener Cybernetics: or Control and Communication in the Animal and the Machine (1948), también contribuyó a ampliar las fronteras de lo digital hacia campos de co- nocimiento que el trabajo de Shannon no incluía. Los conceptos de información y de cibernética englobaron nuevas y amplias discipli- nas como las ciencias de la información, la computación, la sistémi- ca y nuestras ciencias de la comunicación, entre otras influencias.
  • 25. Por defecto memético, el concepto de digital se hizo sinónimo de electrónico, pero la teoría de Shannon no hacía ese paralelismo. En su trabajo, digital era sinónimo de discreto o entero. En tanto, analógico se igualaba a continuo. Por ejemplo, el alfabeto es digital del mismo modo que lo era el telégrafo de Gauss y Weber creado en 1833. La medida de información de un libro impreso con sus cien páginas es un producto discreto y sin ambigüedades, o sea, digital. Algo similar sucede con un periódico impreso. Entonces, ¿a qué nos referimos cuando hablamos de la digitalización de la prensa? En ese caso, no se hace referencia al flujo de información medible que existe en las páginas de un periódico, sino a parte del proceso téc- nico de elaboración del hardware, o sea el proceso de impresión en rotativa. Actualmente, la palabra digital se ha tornado muy confusa porque quienes la utilizan no acostumbran a hacer diferencia entre los flujos de información y las tecnologías utilizadas. Muchas veces se abusa de ella o se utiliza incorrectamente. El proceso tradicional capítulo 0 de impresión a tinta es analógico, pero la información de un libro impreso es digital. El mundo real es analógico. Pero la economía de la información está totalmente digitalizada. Es evidente que el término digital ha perdido capacidad de categorización. Cultura di- 23 gital, sociedad digital, brecha digital son ideas que todos compren- demos pero que irradian imprecisión desde dos aspectos: a) por de- geekonomía masiado genéricas e inclusivas; b) porque priorizan la inclusión de las TIC en el proceso productivo y se olvidan del origen del término y su referencia directa a los flujos de Shannon. ¿Qué significa hablar de economía digital en 2010? El adjetivo digital ha funcionado en los últimos veinte años como un sinónimo de TIC, como una metáfora de superación tecnológica y con un sig- nificado cultural que todos entienden pero que no es muy preciso. Con ánimo de ordenar la confusión, Luca Mari (2000) propone que se acote el término analógico al campo de las leyes de la física y el término digital al campo de las leyes de la información. Así, el pano- rama se aclara un poco más, pero en cualquier caso no nos libera de la responsabilidad de hablar de un nuevo ciclo postdigital. Piscitelli (2009) afirma que hasta la irrupción de las TIC e Inter- net vivíamos en un tiempo cíclico hiperlento que era sinónimo de seguridad. Para Piscitelli, este comienzo de siglo es un momento
  • 26. tecnológico que conduce a la indeterminación, a la contingencia radical y a la inseguridad crónica. Considero que esa turbulencia hace fascinante el análisis del presente y muy compleja su captura en conceptos e ideas fuerza perdurables. Mientras todos los que trabajábamos en el entorno de las TIC nos sentíamos cómodos ha- blando de la dicotomía analógico-digital, lo digital se convirtió en la Un radar para producir en el postdigitalismo norma y el digitalismo abarcó todo el discurso tecnológico. Capriotti (2009) distingue entre dos velocidades en el fenómeno de Internet. Por un lado, los avances tecnológicos, que van introduciendo nove- dades y herramientas con un ritmo muy alto. Por otro, los cambios sociológicos de aceptación y utilización de esos avances y nuevas herramientas por parte de las personas, que es gradual y mucho más lento. En los últimos años, se ha impuesto la categoría de co- municación digital, como artilugio diferenciador para enfatizar lo nuevo. La sociedad está aún aprendiendo a utilizar las infraestruc- turas digitales. La academia analiza y enseña el digitalismo. Pero como ya he señalado, los procesos industriales de la economía de la información son ahora exclusivamente digitales y el término irra- dia ambigüedad. Si todos los flujos de información generados en el espacio de las TIC son digitales, ¿por qué aún se hace énfasis en tal 24 condición? geekonomía Con vocación de meme pero a sabiendas de cierta precariedad conceptual, quizá sea hora de inaugurar la segunda década del siglo xxi dando la bienvenida al postdigitalismo. La economía postdigital se define por la ubicuidad de los flujos digitales en las transacciones informacionales. Pero antes de ser objeto de cuestión por apresu- rarme a definir una nueva fase de la sociedad red que con precisión analizó Manuel Castells (1996), enfatizo en la observación de Csiks- zentmihalyi (1996) cuando decía que “en las ciencias sociales las afirmaciones no suelen ser ni verdaderas ni falsas; tan sólo declaran superioridad estadística de una hipótesis sobre otra”. Somos acto- res exclusivos de nuestro tiempo y debemos ser precisos en definir- lo, sin pesadas herencias conceptuales del pasado. En 1881 Thomas Edison viajó a París para mostrar su red eléctrica a la International Exposition of Electricity. ¿Se imaginan una exposición sobre la elec- tricidad en la segunda mitad del siglo xx? De la misma manera que los congresos sobre Internet se multiplicaron en los últimos quince años desde la invención de la World Wide Web, hoy pierden fuerza
  • 27. por inconsistentes y demasiado vagos temáticamente hablando. En la economía de la información del siglo xxi todos los flujos son digi- tales y suceden en Internet. En consecuencia, no habrá una cultura digital, ni tecnologías digitales. Que este texto sirva para alertar al lector sobre este cambio. Todas las conversaciones que se divulgan desde estas páginas ponen énfasis en describir parte de las precon- diciones que son punto de partida de esta nueva fase que, reitero, provisionalmente denomino postdigitalismo. Vivir en la geekonomía. Los mediadores del siglo xxi El rol de los geeks en la economía no es nuevo. Su actuación más espectacular fue a partir de la década de 1980 en Estados Unidos reconfigurando su macroeconomía de la mano de las TIC. Los geeks fueron los actores principales en la construcción de la sociedad digi- capítulo 0 tal y continuarán brillando en el postdigitalismo. Aptos técnicamen- te, se trata de una élite que está rediseñando nuestra percepción del mundo desde hace cuatro décadas. Suelen ser también los más relevantes early adopters de la mayoría de tecnologías y sus princi- 25 pales beta testers. Ellos configuran el mundo en el que viven según sus necesidades. Como se explicó en la definición de postdigitalis- geekonomía mo, hasta la irrupción de la Teoría Matemática de la Información, estos actores sociales estaban condenados al ostracismo, porque su conocimiento no era relevante para la vida de la mayoría de los mortales. A posteriori, cuando la computación evolucionó hacia su masificación, los geeks comenzaron a adoptar un decisivo rol tecno- social. Hace cuarenta años, era muy difícil volverse un programador porque no había suficiente hardware disponible y el que había era muy costoso de utilizar y no estaba accesible a cualquier estudiante para practicar el método de ensayo y error. Su uso estaba limitado a muy pocos científicos e ingenieros. Pero hoy, son los geeks quienes a su modo rediseñan la economía convirtiéndola en geekonomía. A su vez son ellos quienes configuran los formatos de nuestras rela- ciones personales. Desde la irrupción de Internet y la computación personal, los geeks son los nuevos escribas del mundo, capaces de crear los instrumentos que utilizan, o apropiarse de manera espe- cial de los ya creados. Ellos configuran y la sociedad consume. Al comienzo del nuevo siglo, son los geeks quienes están al frente del
  • 28. capitalismo. La geekonomía se hace fuerte en la construcción de las redes, y su clase social dominante, la netocracia, ocupa los lugares más relevantes en la economía globalizada, desplazando a políticos y burócratas. En tanto el poder es diseñado desde la construcción de signi- Un radar para producir en el postdigitalismo ficado en la opinión pública, el rol de la netocracia es central en la sociedad de la información. En su excelente tratado sociológico sobre la comunicación y el poder, Castells (2009) considera que el poder no es un atributo, sino una relación que se construye en los procesos comunicacionales y en la mente de los individuos. Por eso es tan importante el rol de mediación de geeks y netócratas como influenciadores. Castells afirma: “el poder se basa en el control de la comunicación y la información. Ya sea el macropoder del Estado y de los grupos de comunicación o el micropoder de todo tipo de or- ganizaciones. (...) El poder depende del control de la comunicación. El contrapoder de romper dicho control”. Para Castells, el Estado es sólo un nodo más –uno importante– de la red social. Pero este nodo se solapa con otros de igual o mayor relevancia para la cons- trucción de las relaciones de poder dentro del imaginario social. 26 En ese sentido, el nodo institucional ha perdido jerarquía en detri- mento de las múltiples redes ciudadanas, muchas de ellas globales, geekonomía conformadas por los netócratas en función de sus intereses. Lo más relevante es la capacidad de reconfiguración de estas redes, en fun- ción de las necesidades de sus constructores. Según Castells: “las redes están programadas y pueden autoconfigurarse en una bús- queda interminable de disposiciones de red más eficientes”. Lo más relevante del trabajo de Castells sobre la comunicación y el poder es su explicación de por qué las redes institucionales eran las do- minantes hasta la irrupción de las TIC. Otras redes eran ineficaces y lentas para crear nuevos nodos. El surgimiento de las TIC expandió todas las potencialidades de las redes no burocráticas y modificó el panorama del poder, sobre todo a partir de la década de 1990 con la masificación de Internet: “La superioridad histórica de las organi- zaciones verticales jerárquicas sobre las redes horizontales se debe a que las organizaciones sociales en red tenían límites materiales que vencer, fundamentalmente en relación con la tecnología dispo- nible. La fuerza de las redes radica en su flexibilidad, adaptabilidad y capacidad de autorreconfiguración. (…) Las estructuras verticales
  • 29. pequeñas eran más eficientes como red en la era preelectrónica de comunicación.” En su famoso artículo “Spacewar” (Rolling Stone Magazine, di- ciembre de 1972), el ultra-geek Stewart Brand vaticinaba que las personas utilizarían sus computadoras para escapar del control de los planificadores de la sociedad y liberarlos de sus roles predeter- minados y de la rutina. En la línea tecnoutópica del posterior y míti- co anuncio del lanzamiento del Macintosh en 1984, Brand daba un enorme valor al rol social de los ordenadores y las TIC en la libera- ción de los ciudadanos del aparato del Estado. Y algo de esto suce- dió, aunque con matices y una mayor complejidad que el discurso optimista de la era pre-Internet. Una nueva clase socioeconómica comenzaría a ocupar su espacio modificando la relación del acceso y la distribución de la información entre los ciudadanos y sus insti- tuciones. Esta clase fue la netocracia. capítulo 0 La netocracia tiene a su servicio redes de eficiencias muy dis- pares. Como programadores de las redes, no tienen en cuenta la configuración institucional ni las fronteras de los Estados-naciones, 27 afectando aún más el poder de las burocracias y la política. Geeks y netócratas (muchas veces son lo mismo) constituyen la élite tec- geekonomía nocognitiva que ocupa los espacios de poder digital (Soderqvist y Bard, 2003), que el sistema democrático (políticos y administrado- res) no alcanza por una cuestión de incapacidad y de una pobre formación técnica. En este sentido, Xavier Roig (2008) se pregunta cuántos empleados de las administraciones públicas se dedican a velar por el bienestar y la libertad de los ciudadanos y no por sus intereses corporativos o por el de los partidos políticos que les han colocado en esa función. Roig cuestiona el excesivo protagonismo que la administración pública está adquiriendo en las democracias del Estado de bienestar. Además, ni el sistema de premios y castigos ni las inclemencias del mercado afectan a dicha burocracia, mien- tras sí lo hacen con los emprendedores y los trabajadores del sector privado. La consecuencia de esta incompetencia que describe Roig hace que sean los netócratas quienes construyen el verdadero dis- curso público y presionan a los representantes de la democracia, otorgándoles o quitándoles espacio conforme a sus intereses. Son los dueños de las redes y las grandes empresas de tecnología y co-
  • 30. municación. Mayoritariamente los nuevos intermediarios y no todas las corporaciones mediáticas del siglo xx: gatekeepers, propietarios de medios e intermediarios de la cultura digital, dueños de empre- sas tecnológicas, creadores y administradores de redes privadas y públicas, emprendedores de compañías 2.0, etc. Los mediadores del siglo xxi. Según Benkler (2006), la transformación viene dada por el Un radar para producir en el postdigitalismo paso de una esfera pública dominada por los medios masivos a una esfera pública en red arbitrada por los ciudadanos. La netocracia es una clase pragmática y sus partidarios no pretenden involucrarse en estructuras políticas, porque no necesitan de esta lógica para cons- truir poder. Como ya señalé, ellos diseñan plataformas a su medida y adaptadas a sus fines. Los netócratas trabajan en la geekonomía contribuyendo con sus redes a la creación de un caos espontáneo emergente que infravalora aún más a la democracia representativa y a sus burócratas. En esa lucha de poder “las burocracias son reticen- tes a utilizar tecnología en red que suponga compartir sus prácticas y pueda poner en peligro su capacidad para conservar el control sobre sus atribuciones” (Castells, 2009). Pero en la geekonomía, el poder no lo tiene quien gobierna las instituciones o los países, sino quien domina la relación entre las redes y tiene mayor capacidad 28 para reconfigurar una red dada y adaptarla con flexibilidad a sus intereses. Por último, un rasgo de poder esencial de la netocracia geekonomía es el control de los nodos más grandes o hubs y la capacidad de no depender de otros nodos más pequeños. Al margen del sistema político tradicional, estas redes netocrá- ticas poseen estrategias muy variadas. Una de ellas es el formato de la arquitectura y administración de las redes, que condicionan su funcionamiento. Otra es el diseño de la Web social que gestio- na la conversación social al margen de los canales institucionales. Una tercera estrategia es el ciberactivismo. Ugarte (2008) lo define como una acción “que persigue el cambio de la agenda pública, la inclusión de un nuevo tema en el orden del día de la gran discusión social, mediante la difusión de un determinado mensaje y su pro- pagación a través del boca a boca y multiplicado por los medios de comunicación y la publicación electrónica personal”. Es una acción más de lo que Rheingold (2002) denominó multitudes inteligentes. Lo más relevante de los netócratas es que se han infiltrado definiti- vamente en las estructuras creadas por la burocracia para gestionar
  • 31. el aparato del Estado. Ugarte (2008) agrega que “todos somos po- tencialmente ciberactivistas (…) estamos tan acostumbrados a vivir en redes de poder descentralizadas, que confundimos la organiza- ción de la representación con la organización de la acción colectiva. La perversión de la descentralización ha llegado a tal punto que la democracia se ha convertido en un sinónimo de elección de repre- sentantes, es decir de nodos filtro”. La diferencia de productividad y eficiencia entre las redes neto- cráticas en la geekonomía y las redes democráticas de la economía industrial es hoy transparente, pero no siempre fue así. Después de décadas de promesas, el e-government ha resultado en un estado poco evolucionado de las redes tecnológicas. Por su altísimo coste y la necesidad de ser utilizadas con la mayor productividad posible, las computadoras de la fase mainstream eran institucionales y per- tenecían a los gobiernos. Por eso, mediante sus recursos financieros capítulo 0 públicos, las instituciones del Estado han tenido la oportunidad de actuar haciendo frente al poder de los primeros netócratas. Sin em- bargo, la administración electrónica ha resultado en costosas pla- taformas de comunicación vertical, de escaso valor social y poco 29 orientadas a la participación ciudadana. Pero los comienzos del e- government fueron más alentadores. En 1989 en Santa Mónica, Ca- geekonomía lifornia, se creó PEN, el primer boletín electrónico con sala de chat de una administración pública local en el mundo (Losh, 2009), un temprano intento de construir una ciudad digital, anterior incluso a la famosa experiencia de Amsterdam. Veinte años después, desde 1989 al Team Obama (FastCompany designó así a la campaña presi- dencial de Barack Obama en la Web social; según la revista, el Team Obama fue la empresa más innovadora de 2008), la conversación de la esfera pública gubernamental ha sido transformada, pero no por vocación de la propia administración, sino por cuenta y obra de los emprendedores web, los diseñadores de interfaces y los programa- dores, o sea por parte de la netocracia. Estos actores transversales y ajenos a la lógica del gobierno de turno, aportaron un carácter me- nos burocrático a dicha reconfiguración y, una vez más, trasladaron parte del poder público a la sociedad civil y a las empresas. Se trató de una señal de las profundas limitaciones que las administraciones públicas tuvieron para adaptarse a la sociedad de la información y la incapacidad de sus recursos humanos para crear valor comunita-
  • 32. rio en la gestión de la información pública. Si bien es cierto que en los tiempos pre-Netscape investigadores y universidades compar- tían la Red con los gestores públicos, estos últimos se han quedado rezagados como desarrolladores y han cedido el protagonismo a la iniciativa privada, conformando la geekonomía. Una de las mayores virtudes de Internet es el empowerment y la posibilidad de ofrecer Un radar para producir en el postdigitalismo una coordinación pública descentralizada. Sin embargo, la pseudo- interactividad de las plataformas web gubernamentales dificulta la innovación de prácticas sociales de carácter público, como veremos en el capítulo 5 con los modélicos ejemplos de innovación social colaborativa dirigida por entidades privadas en Estados Unidos. Me atrae la idea de un sistema operativo cultural que mejore tan- to la participación ciudadana como la de los grupos creados con fines específicos. Este sistema ha logrado influir notoriamente en la retórica del discurso tecnológico cotidiano a través del rol de la netocracia, pero ha tenido escasa influencia en las instituciones del Estado. El caso es que fue la netocracia de la mano de los geeks, y no las instituciones, la que definió la retórica digital y las conven- ciones de sus géneros, como el uso de las redes distribuidas o el 30 hipertexto. Esta organización de la cosa pública no es un asunto menor. Desde siempre, gobiernos y medios organizaron la informa- geekonomía ción de manera centralizada y la distribuyeron acorde con sus inte- reses. Pero uno de los grandes cambios que aporta Internet es la descentralización de la información pública. La propia constitución técnica de la Red facilita que los ciudadanos se organicen sin tutelas políticas. Cada vez más la innovación social requiere de redes bien diseñadas y neutrales que favorezcan la solución de problemas de forma más eficiente que la que proponen las instituciones verticales tradicionales. Los costes decrecientes del alojamiento en la nube, el acceso a Internet ubicuo, el abaratamiento de los dispositivos y la masificación del consumo de las redes sociales harán posible un total recall system en las instituciones. Aún no se puede precisar si este sistema de reconfiguración permanente contribuirá a quebrar la espiral de ineficiencia a la que nos tienen acostumbradas ciertas organizaciones. Este debate se presenta en varios pasajes del libro a través de los mediadores que iré analizando de forma diferenciada en cada capítulo.
  • 33. Al interior de “Geekonomía. Un radar para producir en el postdigitalismo” Una vez definidos geekonomía y postdigitalismo, los dos térmi- nos que de forma transversal recorren todo este trabajo, puedo in- troducirlos en los contenidos del libro. En el capítulo 1 se trabaja sobre un componente común de la economía de Internet: la reconfiguración de viejos formatos, la apa- rición de nuevas lógicas narrativas, industriales y legales, así como la existencia de nuevos paradigmas relacionales. En esta primera parte, el guión gira sobre tres ejes: 1) profundiza en términos como copyleft y piratería y en sus teorías complementarias. En estos pá- rrafos se cuestiona el discurso oficial de los intermediarios y los dis- tribuidores culturales del siglo xx que se empeñan en criminalizar a una gran parte de los usuarios de la Red sólo para mantener el control de una industria que solía operar bajo la filosofía de la esca- capítulo 0 sez; 2) enfatiza sobre la creciente relevancia del cloud computing, el espacio virtual remoto donde se alojan los datos en la Red y cómo su trascendencia modificará las prácticas industriales de gestión de la información y el consumo y acceso a los datos de los ciudadanos; 31 3) convoca a la construcción de esferas personales de identidad en la Red bajo una comunicación distribuida, para evitar el riesgo de geekonomía caer en la invisibilidad. Las ideas clave del primer eje son: Creative Commons, crisis de los gatekeepers, criminalización de los usuarios, innovación en la intermediación, peer to peer ilegal versus streaming legal, gratuidad y pago como modelos de negocio complementarios, filosofía del remix, cultura DIY, ética hacker, empowerment, socialismo digital y transmedia storytelling. Los conceptos clave alrededor del texto so- bre el cloud computing son: memoria digital, megaservidores, ex- ternalización de las TIC, ahorro de costes en infraestructuras, foco en el negocio central y economía de las intenciones. Finalmente, las palabras clave en torno a las me-spheres son: egocasting, mercado como conversaciones, invisibilidad, falsa escasez, estrategia distri- buida y conectividad a través de nichos. El capítulo 2 es un estudio de caso que hace un zoom en el pre- sente de las revistas científicas y cuestiona el statu quo papirocén-
  • 34. trico de las editoriales profesionales. El panorama diferente en la geekonomía es que journals científicos más desintermediación de- rivan en open access journals, un nuevo formato de la comunicación científica que, sin afectar la imprescindible revisión entre pares, no daña de forma tan pronunciada a los recursos financieros de las uni- versidades y permite privilegiar la calidad de los textos y los autores Un radar para producir en el postdigitalismo sobre el prestigio de las publicaciones. Este breve capítulo funciona como un conector entre la crisis del rol de la intermediación mediá- tica tradicional del capítulo 1 y el presente de la Web social y sus plataformas colaborativas analizados en el capítulo 3. También se puede enlazar directamente con el capítulo 4, donde se observa la situación de la universidad y sus actores en esta primera década del siglo xxi. Los conceptos clave del capítulo 2 son: Science Commons, reputación del texto y no de la revista, gratuidad de acceso y diver- sidad nacional de los investigadores. En el capítulo 3 se analiza la cambiante geografía del planeta Web 2.0 haciendo foco en el presente de la escritura colaborativa en Internet, su faceta identitaria y sus nuevas potencialidades de negocio. También se deconstruyen algunas aplicaciones exitosas. 32 Por último, me sumo a la polémica sobre la crisis del formato blog. La Web social está en constante evolución y sus características no geekonomía son las mismas que las descritas junto a Cristóbal Cobo a finales de 2007. Por eso, este capítulo se puede leer como un bonus track a la lectura de Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food. Las nociones del capítulo 3 se dividen según sus secciones. En la introducción, los conceptos centrales son: arquitectura de plata- formas distribuidas, open source, mobile web 2.0, narcisismo en la Web, atención/reciprocidad y groundswell. En el fragmento sobre Google las ideas clave son: Googlejuice, era post-desktop, monopolio meritocrático y colonización de la nube. Cuando se habla de Face- book y Twitter, los ejes argumentales son: consumo snack, identi- dades reales, comunidades de intereses, medio dominante de so- cialización, anonimato/transparencia, digitalización de la identidad, lazos sociales débiles, ciberencuentro glocal y tecnologías invisibles. Las ideas fuerza en torno al fenómeno de Craigslist son: filosofía ácrata, ilusión comunitaria posthippie y pragmatismo. Por último, en el análisis de la crisis de los blogs, los conceptos centrales son:
  • 35. e-magazines, saturación y penetración en el mainstream, adjunción preferencial, splogs, dinámica de charlatanería, redes sociales gene- ralistas y microblogging. El capítulo 4 es el más extenso del libro y el que más conforme me ha dejado. Escribir sobre la universidad iberoamericana y sus prota- gonistas era una tarea pendiente que me debía hace mucho tiempo y me tomé el gusto de hacerlo de forma metódica y ordenada en este trabajo. La decisiva influencia de las TIC en la gestión del conoci- miento universitario y en todas sus prácticas ubica a estas institucio- nes en el postdigitalismo y las obliga a adoptar una posición hacia el liderazgo social o a permanecer intactas como marcas blancas distri- buidoras de títulos oficiales. Profesores, alumnos y administradores tienen el mismo peso de la responsabilidad en esa transformación. No se trata de creer que son los estudiantes de esta primera década del siglo xxi un sector tecnológicamente avanzado al que hay que capítulo 0 seguir a ciegas y al cual los demás actores deberíamos adaptarnos. Las nociones clave en la introducción sobre las universidades del siglo xxi son: marcas blancas, crisis de interfaces y métodos de apren- 33 dizaje, perpetuación del poder preconcebido, proletarización de la docencia, fin del monopolio de la acreditación, rotura del vínculo geekonomía entre los usuarios y la institución, OpenCourseWare, equilibrio entre gratuidad y escasez, edupunk, desintermediación, aprendizaje pro- fundo y universidad-hotel versus universidad-laboratorio. En el párra- fo sobre los nativos digitales, las palabras clave son: millennials, mito de la productividad, signos de un tiempo, smart spots, dispersión a través del multitasking, comunitarismo autista e information literacy. En el texto en el que se analiza el rol de los estudiantes, las ideas centrales son: connective knowledge, aprender a olvidar, currículum en la Red, identidades mosaico, intertextualidad, aprendizaje auto- didacta, colateral y durante toda la vida, blended learning, combate a la cultura de la queja, conocimiento volátil, tolerancia a la ambigüe- dad y nomadismo. En cuanto a los profesores, los conceptos clave son: tutorización frente a divulgación de contenidos, conocimiento construido y no recibido, nuevos modelos mentales, evitar los moti- vadores arbitrarios, trabajo en beta, lucha contra la entropía, polial- fabetización, producción contra la invisibilidad, rotura de territorios preconcebidos, meritocracia sin endogamia, educación estudiante-
  • 36. céntrica y funky research. Por último, en el subcapítulo dedicado a las aplicaciones de educación abierta, las palabras clave son: intérpretes y sintetizadores, e-competencias, apertura de plataformas, megacam- pus y colaboratorios. El capítulo 5 conecta con el anterior y profundiza en el discurso Un radar para producir en el postdigitalismo público de la investigación más desarrollo más innovación tecno- lógica (I+D+I) y compara dos ecosistemas disímiles, Silicon Valley como un entorno significativo que sirve de referencia mundial, y Es- paña como un entorno voluntarista, que –a pesar de no poseer una posición degradada a nivel mundial en cuanto a la I+D+I– requiere de un esfuerzo mayor de sus actores estratégicos para no perder competitividad. Los ejes para analizar Silicon Valley son: innovación dirigida por los usuarios, changemakers, cultura del riesgo empresarial, olas de innovación, desagregación de empresas, valoración del fraca- so, investigación de élite, captación mundial de recursos humanos, trabajadores fundadores, reconstrucción y rediseño permanente e inyección de capital riesgo. Las ideas clave para analizar la I+D+I en 34 España son: voluntarismo, escaso esfuerzo financiero público-priva- do, ausencia de la banca privada en el capital riesgo, baja inversión geekonomía educativa, especulación financiera, pocos doctores en el tejido em- presarial y precarias recompensas institucionales. Para simplificar su lectura y hacerla más amena, la producción textual de este libro estará acompañada con contenidos multime- dia, infografías, una oferta de lecturas básicas accesible en forma gratuita en la red, las nociones centrales de cada capítulo, un deli- cious.com/geekonomia con los principales enlaces externos, entre otros complementos. Todos estos contenidos extras se producen con el objetivo de que los lectores y la comunidad docente puedan utilizar este trabajo con fines pedagógicos. El uso docente es uno de los objetivos principales de Transmedia XXI, la nueva colección que lanza Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona junto al Laboratori de Mitjans Interactius (LMI). El trabajo introductorio de esta nueva colección es precisamente este Geekonomía.
  • 37. Me gusta reseñar libros. Lo hago habitualmente en digitalismo.com, el blog que hacemos con Carlos Scolari desde 2005. Si tuviera que re- señar mi propio trabajo diría que este libro no se preocupa demasia- do por las definiciones hegemónicas. En Geekonomía me inclino por un pensamiento divergente, paradójico, flexible. No existe un único argumento. Es como un libro de breves ensayos de diferentes auto- res, pero con una historia central que permite recorrerlo en forma hipertextual. Su principal vocación es dar pistas e incitar al lector a realizar nuevas lecturas y aprender o repensar algunas nociones de la economía de Internet. Como un early observant, quiero compartir una gran cantidad de lecturas que hice en el último semestre y dar pistas para que cada uno de vosotros pueda ampliar estas lecturas en función de sus intereses. Espero poder cumplir con ese objetivo. ¡Gracias por estar inmerso en estas páginas! capítulo 0 Hugo Pardo Kuklinski 35 Entre Palo Alto y Barcelona Agosto a diciembre de 2009 geekonomía
  • 38. Recursos extras El uso docente es uno de los objetivos principales de este libro y de la Col·lecció Transmedia XXI. Por esto se han creado varios recursos, enlaces útiles y resúmenes de capítulos para que el lector pueda Un radar para producir en el postdigitalismo interactuar con las líneas argumentales que se proponen. Marcadores de Geekonomía en línea: http://delicious.com/geekonomia Canal Geekonomía en YouTube: www.youtube.com/user/Geekonomia Ideas principales y recursos en la Web al final de cada capítulo. blog: www.digitalismo.com Hugo Pardo Kuklinski en Twitter: 36 http://twitter.com/Hugo_pardo geekonomía Hugo Pardo Kuklinski en Facebook: www.facebook.com/people/Hugo-Pardo-Kuklinski/622651888 Skype: callto:hugo.pardo e-mail: hugo.pardo@lmi.ub.es
  • 39. capítulo 1 Capítulo 1 37 Sobre buzzwords geekonomía y conceptos marco de la geekonomía
  • 40. En este capítulo se verán tres de las principales transformaciones que está sufriendo de forma irreversible la economía de la información. Se tra- ta de cambios que afectan al ecosistema postdigital de la industria cultural, a las relaciones laborales y personales y a la gestión del conocimiento social en la Red. Estos cambios tienen una matriz co- Un radar para producir en el postdigitalismo mún: la reconfiguración de viejos formatos, la aparición de nuevas lógicas narrativas e industriales y la existencia de nuevos paradig- mas relacionales. No se trata de una foto fija, pero, como señalo en la introducción, tampoco hablaré de fenómenos revolucionarios para darme aires generacionales de exclusividad. Simplemente es un análisis de cambios que seguirán sucediendo, para fortuna de aquellos a los que nos seduce observar y analizar las transformacio- nes sociales producidas por la constante irrupción de nuevas tecno- logías. Divido el capítulo en tres grandes ejes: Concepto 1. La caducidad del copyright y el dilema pirata. Concepto 2. El cloud computing como la memoria ubicua de la sociedad. 38 Concepto 3. Vivir distribuidos en las me-spheres o morir invisibles. geekonomía Ya que resulta muy arriesgado hacer predicciones relacionadas con la evolución de las TIC más allá del corto plazo, en este capítulo me refiero indistintamente a buzzwords o conceptos marco. Hago esta aclaración ya que las palabras de moda pueden perder presen- cia o bien terminar transformándose en memes, y posteriormente en tendencias profundas de la geekonomía. Esto ya no es mi res- ponsabilidad y será resuelto por la superioridad estadística de las hipótesis a la que hice referencia en la introducción. 1. La caducidad del copyright y el dilema pirata ¿Tiene el modelo de copyright fecha de caducidad? Es difícil saber- lo, pero existen claros indicios de que la presión de sectores civiles en favor de leyes de la propiedad intelectual y los derechos de autor más flexibles y permisivos hacia el consumidor se ha convertido en una batalla política, especialmente en Europa y Estados Unidos.1 El debate está abierto y seguramente desembocará en la transforma-
  • 41. ción de una legislación que se inició hace trescientos años con la primera ley de copyright en 1709.2 El beneficio de un cambio legal sería notable para los principales protagonistas del acto cultural de compartir conocimiento: los creadores y los usuarios. Los primeros se verían beneficiados por un sistema de distribución mucho más visible, eficiente y económico. En tanto los usuarios tendrían acceso a una mayor libertad de elección a menor coste, sin los condiciona- mientos de gatekeepers y distribuidores. Los principales perjudica- dos por una posible transformación legal del copyright son los in- termediarios culturales del siglo xx, la industria que ha sido la más afectada desde la masificación de Internet en la década de 1990. En un entorno donde los costes de producir, distribuir y autopromo- cionarse tienden a cero, ya no existen grandes motivos para que un creador ceda a los distribuidores los derechos de su obra y la mayor parte de sus futuras ganancias.3 capítulo 1 Vale decir que esta posible transformación legal no sería un ata- que a la filosofía original del copyright. Como bien señala Bollier (2008), la primera justificación de la creación del copyright no fue proteger el dinero de los autores y mucho menos el de los distribui- 39 dores, sino promover la recompensa económica de la creatividad ar- tística y la innovación. El problema comienza con la política abusiva geekonomía de las corporaciones intermediarias de medios que han desfigurado dicha filosofía utilizando su poder económico para ejercer presión en los estamentos políticos de Estados Unidos. Así, extendieron sus privilegios más allá de los términos originales, afectando con ello al interés general. Según Bollier, los términos del copyright fueron am- pliados once veces desde 1961 y hoy representan un beneficio mo- nopólico para las corporaciones (y la economía norteamericana)4 de noventa y cinco años de derechos desde la muerte del autor. Bollier señala: “A limited monopoly granted by the U.S. Constitution has morphed into an expansive, near-perpetual monopoly, enforced by intrusive technologies and draconian penalties”. Sin embargo, los orígenes del copyright no fueron tan conflictivos. Los problemas co- menzaron con la revisión de la ley de 1976 en Estados Unidos y posteriormente con la digitalización del proceso productivo y el sur- gimiento de la Web. La digitalización e Internet se convirtieron en grandes dinamizadores de la creación y distribución de contenidos. Antes de 1978, toda obra era por defecto de dominio público. Pero a
  • 42. partir de ese momento se invirtió la lógica y una obra artística, cul- tural o científica, poseería derechos de copyright desde el momento de su creación. Las licencias Creative Commons y la creación del co- pyleft, introducidas a fines de 2002 en Estados Unidos, otorgaron un marco jurídico más apropiado al uso y distribución de las obras. A partir de entonces, cientos de colaboradores en Creative Commons Un radar para producir en el postdigitalismo International adaptaron esas licencias a más de cincuenta países. Y el proceso continúa. Comienzo redefiniendo la piratería. Normalmente se denomina piratas a aquellos consumidores que violan las leyes de copyright propagando masivamente o copiando a otra persona un documen- to con propiedad intelectual, sin pagar por ello o sin obtener permi- so del autor de la obra. Esta definición no da margen a matices. La piratería cultural se ha ganado su desprestigio a fuerza de presión mediática y política e inversión publicitaria de la industria de la in- termediación. Compartir es una forma más precisa de denominar a una actividad que millones de usuarios realizan sin fines de lucro. En tanto, una minoría que se lucra con la propiedad intelectual (el negocio del top manta, por ejemplo) desprestigia a la mayoría de 40 consumidores que sólo descargan contenidos en plataformas ilega- les para disfrute personal. La industria de la intermediación es la geekonomía que impulsa el modelo del copyright con mayor presión, diseñando barreras legales y técnicas para dificultar el acceso a la información digital. Todo ello con el propósito de que compartir un archivo no resulte atractivo ni sencillo. Pero la batalla está perdida de antema- no porque se les hace muy difícil controlar el enorme mercado de la distribución que significa Internet. Además, constantemente surgen nuevos actores que a través de tecnologías disruptivas logran trans- formar y posibilitar el acceso de los consumidores a una infinidad de productos culturales. Cuantas más barreras diseñan los distribuido- res tradicionales, más facilidades ofrecen estos actores emergentes. La productividad del software BitTorrent es un ejemplo de ello. Tal como la experiencia de Napster nos enseñó, mientras la justicia se demora en penalizar a un desarrollador peer to peer, se crean otras plataformas con un servicio más eficiente y capaces de aprender de los errores y resquicios legales del pasado. La Recording Industry Association of America (RIAA) atacó a Napster en sus escasos dos años de existencia (1999-2001) y consiguió popularizarlo aún más
  • 43. y luego sólo matar al mensajero. En el período que duró la primera fase del litigio contra Napster, la publicidad resultante en los medios duplicó el número de usuarios y la cantidad de archivos descargados de la aplicación.5 Además provocó una mayor popularidad para los canales peer to peer, así como la aparición de una decena de nuevos actores con innovadoras y diversificadas estrategias para evitar ser llevados a los tribunales. Hubo un paso hacia delante. Gnutella, Ka- zaa y otros post-Napster fueron plataformas diseñadas en forma de redes dispersas. Dada su estructura descentralizada no pudieron ser desconectadas y sobrevivieron hasta hoy al ataque de la industria de la música (Bunz, 2007). Aunque no se trataba de un servicio des- centralizado ni peer to peer, uno de los ganadores de esta contienda fue Apple con su iTunes, comprendiendo el tipo de consumo que realizaban los usuarios y moviéndose en esa dirección aportando legalidad. Tuomi (2002) habla de innovación usuario-céntrica y no objeto-céntrica. Según Tuomi, son los usuarios quienes reinventan y capítulo 1 se apropian de los productos a través de sus prácticas. Así, las inno- vaciones se vuelven tales cuando comienzan a jugar un rol de senti- do en la práctica social. Esto es lo que ha sucedido profundamente con el mercado de la música y en toda la industria cultural. 41 Precisamente son las prácticas de los usuarios las que definen que geekonomía copyright y copyleft no compitan entre sí sino que se complementen,6 del mismo modo que copyright y piratería no son competencia di- recta (O’Reilly, 2002; Anderson, 2009). En su estrategia publicitaria, la industria de la intermediación se pregunta por qué un usuario va a pagar por un producto que se puede descargar de Internet de forma gratuita. Pero intencionalmente se pasa por alto que la ex- periencia de usuario es vital para decidir una práctica de consumo. Muchos consumidores compran libros que podrían solicitar gratis en la biblioteca pública, o van al cine en vez de alquilar un DVD o descargarlo de la Red. Se trata de diferentes experiencias de usua- rios adaptadas al tipo de consumidor. Si el tiempo del usuario es muy valioso y no tiene problemas de dinero, su opción es comprarse un contenido en un formato tradicional y disfrutar de su calidad. Pero si la ecuación tiempo-dinero de un usuario es inversa (o sea mucho tiempo y poco dinero), es probable que su preferencia sea bajarse una canción o una película de Internet. Nadie garantiza que, si no pudiera ser descargado de la Red, el segundo perfil de consumi-
  • 44. dor compraría ese producto cultural por la vía tradicional. Son dos mercados autónomos que merecen un tratamiento diferenciado, sin que ello implique criminalizar a un grupo de usuarios. Por esto la gratuidad y el pago se complementan. Ruppel Shell (2009) habla de economía bipolar: una gran parte de los consumidores buscan re- bajas, marcas blancas o gratuidad, pero hay un tipo de consumidor Un radar para producir en el postdigitalismo capaz de pagar lo que sea necesario para que su experiencia sea óptima.7 Según Anderson (2009) ciertos usuarios piratean porque consideran que los precios de mercado no los decide el artista, sino el intermediario, y en general son excesivos para el valor real que, según estos consumidores, debería tener el producto. Al no haber alternativas de precio diferenciado, se opta por las descargas gra- tuitas e ilegales en sitios peer to peer. En la economía basada en bits el problema que tienen los distribuidores tradicionales no se resuelve con juicios a los usuarios, sino con estrategias innovadoras en las prácticas de distribución e intermediación. Para Anderson, esta nueva forma de gratuidad del siglo xxi8 se basa en la habilidad de reducir los costes a casi cero. El problema es que la economía de los átomos es inflacionaria, ya que mover los productos al punto de venta es cada vez más costoso. En cambio la distribución de los 42 bits es deflacionaria y tiende a valer cero con la reducción de costes de hardware y software. De hecho, el comienzo de la segunda dé- geekonomía cada del siglo xxi presenta un panorama novedoso que muestra la movilidad y constante transformación del mercado de la industria cultural: el consumo ilegal de música y vídeos vía plataformas peer to peer pierde terreno de forma considerable frente a las platafor- mas legales vía streaming, como Spotify o Hulu, entre otras. En este nuevo cambio de actitud de consumo ganan los usuarios y también la industria. Doctorow (2008) considera que debatir sobre los derechos de autor no es exclusivamente hablar de copyright o copyleft, sino que es poner en juego el derecho constitucional de la libertad de expre- sión. Por otra parte, las corporaciones intermediarias introducen en el escenario el supuesto daño causado a los creadores presionando sobre la legislación del copyright y manipulando el debate. Pero en realidad lo que les preocupa es perder los márgenes de ganancia obtenidos de un modelo que se sabe anacrónico e ineficiente. La inquietud de los intermediarios tradicionales no responde necesa-
  • 45. riamente a los intereses de los autores a quienes dicen defender y –peor aún– no responde al interés público. Bunz (2007) señala que para la industria de la intermediación “la juventud dejó de ser una promesa para convertirse en una amenaza”. En un documento referencial sobre la piratería,9 O’Reilly (2002) elabora lecciones asociadas con este debate. Destaco cuatro de ellas. 1) La falta de visibilidad de una obra es para los autores un problema mucho mayor que la piratería. O’Reilly da un ejemplo: aproximadamente se publican cien mil libros al año sólo en Estados Unidos. Un 10% de ellos tienen ventas significativas (y un 1% está disponible en las grandes librerías). Para el 90% de autores restan- tes que no logran la visibilidad de su trabajo, lo importante no es ganar dinero con los derechos de autor, sino ser leídos y salir de la oscuridad en la que se encuentran, producto de un modelo de distribución que a priori los margina y los perjudica. Su esfuerzo capítulo 1 lo miden en visibilidad. Una situación similar se da en la industria del cine, donde existen miles de directores y productores a nivel mundial que no tienen una distribución aceptable de sus obras en cartelera ni llegan a las principales salas, afectados por un modelo 43 de distribución dominado por la producción de Hollywood. 2) La piratería es un impuesto progresivo. A cambio de afectar a un mí- geekonomía nimo porcentaje de las ganancias en los autores más vendidos, fa- vorece la visibilidad de la mayoría de autores que en muchos casos ni siquiera tienen la suerte de llegar a las tiendas, ni pueden inver- tir en marketing y publicidad para lograr atención y trascendencia mediática. 3) Como norma, y si se dan las condiciones adecuadas, los consumidores quieren hacer las cosas correctamente. La mejor forma de reducir la piratería es darles opciones alternativas a pre- cios razonables. 4) Las redes peer to peer no afectan a las obras de los artistas, sino a los distribuidores e intermediarios de las obras de los artistas, como bien ya señalé. A pesar de que la industria de la intermediación denuncia constantemente que la piratería daña al creador, seguirán existiendo múltiples soportes de intermediación rentables puesto que representan la única forma de que millones de usuarios se interrelacionen con millones de creadores. A lo que verdaderamente está afectando es al statu quo de la industria cul- tural hegemónica del siglo xx que operaba bajo la filosofía de la escasez: discográficas, editores, prensa tradicional, canales de te-
  • 46. levisión, distribuidoras cinematográficas, agencias de publicidad, grandes superficies, etc. Se están creando innovadoras formas de intermediación que ocupan un lugar preponderante en la econo- mía postdgital. Como se verá en el capítulo 3, Google ha creado un modelo de negocio gratuito basado en administrar y gestionar la abundancia de información. Ello, entre otras cosas, le ha permitido Un radar para producir en el postdigitalismo convertirse en el intermediario líder. Dedicaré el próximo capítulo a analizar la industria de los journals científicos como un estudio de caso de nuevos modelos de intermediación. Más allá de la defensa de la libertad de expresión y de los intere- ses de los autores, existe un fenómeno que impulsa la distribución gratuita de contenidos y en muchos casos la piratería: la cultura DIY (do it yourself) de la mano de la inteligencia colectiva. El fenómeno está bien documentado y con teorías complementarias. Himanen (2002) se refiere a la ética hacker. Mason (2008) analiza el dilema pirata. Lessig (2008) estudia la filosofía del remix. Kelly (2009) habla del nuevo socialismo. Sunstein (2003 y 2006) teoriza sobre el pensa- miento republicano y las infotopías. Scolari (2009) trabaja el concep- to de transmedia storytelling.10 Revisaré dichas teorías. 44 El texto de Himanen (2002) iguala el hermetismo y la política de geekonomía patentes de la empresa capitalista del siglo xx al silencio monaste- rial del medioevo. O la catedral y el bazar, según Raymond (2001). La falta de voluntad para distribuir las ideas colectivamente y su consecuente monopolio del conocimiento acrecentaba el poder de la Iglesia, pero afectaba al conjunto social. Himanen plantea que In- ternet no sería lo que hoy es si sus creadores hubieran fomentado la propiedad cerrada con derechos de copyright en lugar del desarrollo open source y la ética hacker. Según Himanen esta ética fomenta la apertura, el libre acceso y el reconocimiento entre pares y tiene su antecedente en el trabajo de la comunidad científica, donde cada investigación es inclusiva, parcial y se sustenta en el conocimiento previamente generado. La tarea de un investigador está destinada a ser ignorada, cuestionada, ampliada o rediseñada y es la comunidad científica la que legitima su validez y le otorga prestigio y visibili- dad. Con esta lógica se ha desarrollado Internet. Y aún continúa sustentada bajo los mismos principios.
  • 47. La noción de dilema pirata de Mason (2008) va un paso adelan- te en la ética de compartir e involucra tanto a los nativos digitales como a otras generaciones. Mason señala que compartir los pro- ductos culturales sin pagar licencias abusivas es un debate que no se reduce a la última década sino que tiene un largo recorrido.11 El autor se pregunta: ¿cómo deberíamos reaccionar ante las condicio- nes cambiantes de nuestro entorno digital? ¿Están los denomina- dos piratas para robarnos o para salvarnos? ¿Son un grupo al que se debe combatir o innovadores con quienes se debería competir con inteligencia aprendiendo de sus desarrollos y prácticas? Mason cree que la industria cultural debería comprender las prácticas de piratería en los jóvenes y adaptarse a su lógica de consumo. Estos jóvenes son líderes de opinión y crean nuevos espacios de difusión e intercambio afines a sus intereses y no tiene sentido competir con esa práctica cultural criminalizándolos. Es empowerment que resulta en desarrollo socioeconómico, creando nuevas empresas y capítulo 1 modelos industriales. Mason argumenta que la cultura DIY afecta a los monopolios de facto, propiciando industrias independientes y descentralizadas con menos privilegios. Esto revaloriza la economía ya que no sólo participan las grandes corporaciones, sino actores 45 más pequeños, como hace tiempo sucede en el negocio de la mú- sica. El modelo de distribución vía Red se está tornando ubicuo y geekonomía se mueve bajo nuevos mecanismos que ya se empiezan a percibir como dominantes y que son completamente diferentes a los que existieron en el siglo xx. Vale recordar experiencias de transforma- ción de modelos de negocios originados en la cultura joven que han surgido en la periferia, y que han sido marginales a los canales de distribución de la época, rompiendo reglas e ignorando tradi- ciones y viejas jerarquías comerciales, combinando altruismo con autointerés. Movimientos como las radios piratas, la música rock, el rhythm & blues, el jazz y el punk se originaron en esa transgresión de los valores culturales establecidos, generando atención y nuevos mercados para unos contenidos a priori fuera del circuito masivo de la época. Cuando un producto cultural se vuelve cool, es absorbido y digerido rápidamente por el mainstream y el círculo de la destruc- ción creativa y distributiva vuelve a comenzar. Algo nuevo nacido en un pequeño entorno se convierte en objeto de codicia de los cool- hunters, quienes valiéndose de las técnicas del marketing lo tornan popular, vaciándolo de transgresión.12 Mason cree que la industria
  • 48. cultural es un negocio que aún no ha encontrado el equilibrio en- tre la regulación, el respeto a la propiedad intelectual y la libertad creativa para mezclar. A la filosofía del remix se refiere Lessig (2008). El fundador de Creative Commons considera que el copyright es importante para Un radar para producir en el postdigitalismo una cultura saludable, aunque el problema es que bajo estos princi- pios se desarrolla un viejo régimen que lucha contra la innovación, la creatividad y la libertad y que en alguna ocasión hasta impidió el nacimiento de nuevas industrias. El problema se agrava cuando en pos de sus beneficios económicos, las corporaciones construyen un discurso donde se califica de delincuente a toda una generación. Lessig cree que es tiempo de dejar de gastar recursos federales, po- liciales e institucionales para sancionar a unas redes de conectivi- dad extraordinariamente eficientes. Sobre todo teniendo en cuenta que ya no existe un control perfecto sobre la distribución de copias como en el siglo pasado y que en el futuro el control será aún más difícil, por no decir imposible. Una anécdota paradójica al respecto es que la mayoría de contenidos ilegales subidos a las plataformas peer to peer no proviene de compradores originales sino de actores 46 del interior de la industria sin motivación extra para proteger el co- pyright de la obra durante el proceso de produccion y distribución geekonomía de las copias. Me refiero a trabajadores de empresas de grabación en formato DVD, de productoras, de distribuidoras, etc. El argu- mento central del trabajo de Lessig es el beneficio del híbrido legal copyright/copyleft. La cultura del remix requiere de un marco legal donde se quite presión y se fomente la creatividad amateur en base a la limitación de los alcances de los derechos de autor. Kelly (2009) traduce la cultura DIY y los productos derivados de la inteligencia colectiva y habla de un nuevo socialismo digital,13 donde la propiedad de los bienes está en manos de los trabajadores, quie- nes en este caso son los propios creadores y accionistas de las em- presas. Un provocador texto de Kevin Kelly que se atreve a reflotar la filosofía socialista y utilizarla para explicar el funcionamiento de Silicon Valley, uno de los motores del capitalismo norteamericano. Según el autor de Out of Control, el socialismo digital es un socialis- mo sin planes quinquenales ni propiedad del Estado, ni politburós, ni racionamiento y representa la más novedosa innovación, basada
  • 49. en la libertad de crear, la meritocracia y el acceso libre a los produc- tos. Kelly afirma que las aplicaciones Web 2.0 son la vanguardia de este colectivismo social global y que la lógica comunal del consumo en línea está siendo reconfigurado con cada nueva participación en las redes sociales. Se podría agregar que las licencias Creative Com- mons son el marco constitucional de este nuevo socialismo. Sunstein (2003 y 2006) también teoriza sobre la cultura DIY re- firiéndose a los temores de los fundadores de la república a que los ciudadanos observaran directamente el hecho social y pudie- ran transgredirlo. Estos fundadores aspiraban a crear instituciones que “filtraran” los deseos populares y garantizaran una política que fomentara el bien público. El problema de las barreras a la circula- ción cultural es que, cuando la información no está disponible y en consecuencia la capacidad de decisión y las oportunidades se ven limitadas, se corre el riesgo de que los individuos puedan acabar re- capítulo 1 nunciando a ellas por completo (Sunstein, 2003). Una sociedad con productos culturales circulando libremente crea ámbitos públicos democráticos y por ende ideológicamente diversos. Por otra parte, también cuestiona el abusivo ciclo del copyright y el sistema de pa- 47 tentes. Sunstein (2006) cree que el mecanismo de las patentes es útil porque motiva a las empresas a invertir en investigación pensando geekonomía en futuros dividendos. Pero a veces resulta abusivo, porque su her- metismo y los largos plazos afectan a la innovación y al beneficio social, propiciando que el conocimiento científico e industrial que- de en manos de unos pocos. Por último, el trabajo sobre Transmedia Storytelling de Scolari (2009) tiene aristas comunes con la cultura DIY y la filosofía del re- mix. Para Scolari, el usuario construye su propia interpretación de un texto complejo con multicapas y lo resignifica desde las plataformas colaborativas o mezclando esas historias con otras que integra a su universo cognitivo. Así, la producción de historias transmediáticas no sólo afecta al propio contenido sino que incorpora transformaciones en la producción y el proceso de consumo, brindando nuevas opor- tunidades para el mercado de medios y para un tipo de consumidor acostumbrado a un flujo multilineal de las historias. Es decir, el usua- rio convertido en un experto cazador de información proveniente de diversas plataformas. Scolari cree que con este tipo de estructuras se
  • 50. construye un texto multicapas que necesita de una capacidad dife- rente de los usuarios para ser comprendido con nitidez. 2. El cloud computing como la memoria ubicua de la sociedad14 Un radar para producir en el postdigitalismo La memoria institucional y social está siendo digitalizada en di- ferentes soportes desde hace más de dos décadas y su destino en bits no tiene punto de retorno. El componente novedoso de esta di- gitalización es el cloud computing. La nube15 permitirá hacer interco- nexiones mucho más complejas bajo una tecnología conocida como virtualización, una forma de utilizar el software que simula algunas de las atribuciones del hardware.16 Unificando dos definiciones,17 el cloud computing es “un conjunto de infraestructuras de computa- ción que utilizan la tecnología de Internet en forma masivamente escalable y administrada por terceros para alojar aplicaciones o data de usuarios finales”. Es un servicio que proveen (en orden de im- portancia en 2008)18 empresas como Google (App Engine), Microsoft (Windows Azure), IBM, Amazon (AWS), SalesForce.com y otras. Ama- zon Web Services (AWS) fue el pionero en 2006 cuando comenzó a 48 comercializar el espacio disponible de servidores de Amazon.com y es, por ejemplo, el responsable de alojar toda la información que geekonomía genera The New York Times, inclusive sus once millones de artículos producidos entre 1851 y 1989 actualmente disponibles en su por- tal web (Lasica, 2009). Vale destacar los proyectos Google/IBM Cloud Computing University Initiative, destinados a la investigación open source en entornos universitarios y el Open Cloud Manifesto, un docu- mento que propone la apertura de la nube, aprovechando su estado temprano de desarrollo.19 El cloud computing va en la dirección de las ideas de la computadora universal de Kelly.20 Carr (2009) llama a esto la World Wide Computer. Si, como señala Logan (2000), cada lenguaje emerge en respuesta al caos de la sobrecarga de información que el lenguaje previo no pudo gestionar, se puede decir que el cloud computing se crea como una solución al enorme volumen de datos alojados en servidores propios de empresas y gestionados en forma ineficiente y antieco- nómica desde sus propios departamentos TIC. La nube capacita a las empresas para trabajar con economía de escala y sin riesgos, evi-
  • 51. tando así un excesivo gasto en infraestructura de almacenamiento propia. Externalizar la administración de los datos digitalizados en megaservidores economiza costes en software, hardware y recursos humanos, evita riesgos técnicos y reduce la complejidad de la ges- tión. No existen sobrecostes, ya que las empresas pagan por lo que utilizan y por el tiempo que lo requieran, sin tener que montar in- fraestructuras que suelen ser infrautilizadas. Además, si la empresa basa su negocio o parte de él en la gestión de datos en la Red, gana en eficiencia y reputación. La ventaja es notoria, porque hasta ahora todas las empresas con plataformas en red debían dedicarse a su ne- gocio principal, pero también al almacenamiento y gestión de datos, aunque su misión institucional no tuviera nada que ver con esto. El cloud computing comenzó siendo una solución a un proble- ma técnico y hoy es una alternativa a múltiples problemas de ruido de interconexión. Lasica (2009) cree que el pasaje de los datos a capítulo 1 la nube significa mejorar la accesibilidad a estos datos y mayores niveles de productividad en red a bajo coste. Tres datos reveladores. Ya en 2006, Gartner21 preveía que las ventas del software como ser- vicio pasarían del 5% en 2005 al 25% en 2011. En sólo dos años, su 49 crecimiento se observa en distintas investigaciones. Según Forres- ter Research (2008),22 el 25% de las compañías norteamericanas ya geekonomía poseen o planean almacenar sus datos en servidores ajenos, o sea externalizando la administración de sus datos en la Red. Según un informe de Pew Internet & American Life Project (2008),23 el 69% de los consumidores de Internet en Estados Unidos utiliza aplicaciones que gestionan la información en la nube. Es decir, los usuarios pa- san más tiempo conectados a la Red gestionando o consumiendo datos alojados en la nube que utilizando los datos o el software almacenados en su propio ordenador. La aplicación más popular es el correo electrónico web, seguido por las plataformas de ges- tión y almacenamiento de fotos. Según dicho estudio, las tres razo- nes mayoritarias de los usuarios para utilizar plataformas de cloud computing son facilidad y conveniencia, posibilidad de acceso des- de cualquier ordenador conectado a Internet, y deseo de compartir con los demás los contenidos propios. Por otra parte, hay un antes y un después en el diseño de los sistemas operativos a partir de la consolidación del cloud computing. Un límite que estableció Mi- crosoft con el desarrollo de su Windows 7, pensado para funcionar
  • 52. enteramente en la nube. Según The Economist (2009),24 el desarrollo del cloud computing hace que las diferencias entre el hardware y el software de los ordenadores ya no sean tan determinantes para el consumidor estándar. Si toda la información está en la nube y sólo necesitamos una conexión a Internet para trabajar, para la mayoría de usuarios da igual si poseen una netbook de quinientos euros o un Un radar para producir en el postdigitalismo ordenador con mayores prestaciones. Microsoft y fabricantes como Apple o HP son muy conscientes de esa nueva regla de mercado y trabajan con rapidez para adaptarse. Esto explica en parte el gran crecimiento de la venta de netbooks en los últimos dos años. Es importante considerar que también existen críticas a nivel de seguridad y acceso. En el primer caso, las empresas o los individuos no sabrían quiénes acceden a su información una vez que se coloca en la nube, puesto que se pierde el control de los datos. A nivel de acceso, estos datos sólo están disponibles cuando los usuarios están en línea. Aunque se supone que el acceso a Internet será ubicuo en menos de una década, esa situación no es aún la dominante en los países emergentes. Según Castells (2009), la penetración de Internet en 2008 era de una quinta parte de la población mundial, y menos 50 del 10% de estos usuarios poseían conexión de banda ancha, lo cual demuestra que la brecha digital es aún pronunciada y queda mucho geekonomía espacio por recorrer a nivel de conectividad. Por otra parte, dada la falta de estándares de software, también se cuestiona la dependen- cia que se puede tener de la empresa proveedora del servicio, ha- ciendo compleja la interoperabilidad y el traspaso a otros servidores. Para finalizar, uno de los aspectos que menos se trabaja cuando se habla del cloud computing es lo que Searls (2006)25 define como la economía de las intenciones. Un escenario futuro en la nube es la identidad abierta única, parcelada por el propio usuario según sus intereses. Searls cree que las operaciones en la nube podrían su- plantar a la industria de la publicidad y el marketing en línea, por su capacidad de cruzar datos de forma eficiente a nivel de identidad personal y potenciar así el valor de la atención. Un incipiente ejem- plo es MobileMe, una aplicación de Apple que permite interconectar todos los dispositivos propios del fabricante pudiendo compartir datos desde un servidor central.
  • 53. 3. Vivir distribuidos en las me-spheres o morir invisibles Los mercados son conversaciones y éstas se producen aunque se las quiera ignorar. Por ello las empresas deben escuchar a sus usuarios en todo momento. Las redes potencian al máximo la dis- tribución de la información así como sus conversaciones derivadas. La apertura es el mejor mecanismo para sobrevivir en la geekono- mía. Los intercambios y las conversaciones son una oportunidad de adaptación. El mercado de masas ha perdido protagonismo para dar lugar al creciente mercado de nichos. Esto lo explica Anderson (2006) con su teoría de la larga cola. En ese mercado, la clave está en conseguir atención para nuestros productos. El problema es que la atención cada vez se logra menos con publicidad o marketing y más con una innovadora estrategia de desarrollo del propio produc- to y de sus modelos de distribución. Vuelvo a Tuomi (2002) y Von Hippel (2005)26 con la idea de la innovación centrada en el usuario. capítulo 1 Esta estrategia plantea dos opciones: 1) cerrar los circuitos a la in- novación dentro de la empresa y darle un marco legal que permita actuar en soledad en un mercado cautivo pero por un tiempo re- ducido; 2) abrir la innovación al mercado bajo una lógica de open 51 source y promover aportes externos a la empresa sin costes extras mediante la inclusión de terceros desarrolladores y aportes de los geekonomía usuarios. Ambas opciones son válidas, aunque la segunda se está transformando en dominante, incluso en empresas con una filosofía cerrada como Apple o Microsoft. Jarvis (2009) estudia a fondo la estrategia distribuida de Google y sus exitosos resultados. Según el autor, empresas como Yahoo! y AOL pensaron que –como eran propietarios de los contenidos y los canales de distribución– podían controlar el consumo de los clien- tes, las relaciones entre ellos y sobre todo su atención. Google se posicionó alrededor del algoritmo de búsqueda –su producto es- trella– sin diseñar un portal, sino una plataforma distribuida en la Red a través de sus aplicaciones complementarias y con su Google AdSense y Adwords a la cabeza de los beneficios económicos. La ex- periencia de Google demuestra que las empresas pueden crear más valor operando como redes abiertas que favorecen la generación de más conexiones, en vez de orientarse a crear núcleos cerrados por temer a la competencia. El hermetismo tenía su lógica en un
  • 54. mercado donde la información era escasa y se distribuía lentamen- te, pero ¿cuánto tiempo puede durar un secreto industrial antes de que explote por algún canal de la Red y se transforme en un commodity? Jarvis (2009) reflexiona sobre el hecho de que Yahoo! y otros portales se pensaron como un punto final de acceso. En cam- bio, Google se concibió como un canal. El error estratégico es co- Un radar para producir en el postdigitalismo locar a las compañías en el centro de la escena. Así no es como los clientes o consumidores piensan sus propios universos. Las personas construyen sus me-spheres con ellas como centro, y todos los demás actores –sobre todo los que quieren obtener dinero en transaccio- nes comerciales– son alojados fuera de esta esfera. Las redes socia- les de la Web 2.0 no crearon las comunidades. Las comunidades ya existían previamente, pero estaban mal comunicadas. Las start-ups Web construyeron puntos de reunión que contribuyen a que los usuarios dibujen sus esferas personales. La clave es contribuir a que las personas puedan satisfacer su instinto básico de comunicación de manera simple, atractiva, eficiente y no intrusiva. Algo similar sucede con las empresas. Necesitan ser encontra- das y agregadas para construir su espacio de mercado y volverse 52 públicas. Cuanto más pública sea una empresa (un autor o artista también funcionan como una empresa), más fácilmente será encon- geekonomía trada y mayores oportunidades tendrá de hacerse un lugar en el mercado. La publicidad y el marketing se han vuelto muy ruidosos y son los últimos mensajes que alguien quiere consumir. Para esto se debe pensar en forma distribuida ocupando todos los espacios posibles que ayuden a construir las esferas de los clientes. Jarvin (2009) afirma que la economía de Internet requiere aper- tura, descentralización y conectividad a través de nichos. Como ya señalé, muchas industrias –especialmente las del mercado de la intermediación– han construido su valor basándose en la escasez. Administrar la escasez significaba control, porque se regulaba el precio y las condiciones transaccionales. El negocio de los monopo- lios es controlar el mercado y explotar la demanda y la escasez bajo las condiciones que resulten más provechosas para ellos mismos, no para los usuarios. Está visto que las mejores tecnologías para el bien público no son necesariamente las mejores para el beneficio privado (Cobo Romaní y Pardo Kuklinski, 2007). También es común
  • 55. observar que los estándares tecnológicos son a menudo impuestos por grupos de la industria para asegurarse su propio provecho, más que para establecer la mejor opción para el público. Ejemplos de es- casez en la industria de la intermediación del siglo xx fueron: líneas telefónicas de un solo operador, campañas publicitarias contrata- das a una agencia porque obtiene mejores condiciones tarifarias en los medios, una decena (o menos) de canales de TV de trans- misión abierta que regulaban los precios de la tanda publicitaria, touroperadores que controlaban en exclusiva el acceso a las tarifas aéreas, pocos editores o compañías discográficas con capacidad de imprimir y distribuir libros o música en forma masiva, unos cuantos periódicos de distribución nacional o un periódico local como único medio para anunciarse o para promocionar una plaza laboral. En el mercado publicitario de la escasez creado en Madison Avenue, las empresas pagaban por toda la audiencia de los medios masivos y no por su público objetivo. Aún lo siguen haciendo, pero no por capítulo 1 mucho tiempo. Google ha creado un modelo de negocio basado en la administración y gestión de la abundancia. En AdSense las empre- sas pagan por click. Y Google Wave está destinado a convertirse en el formato superador de las redes sociales, unificando el aspecto 53 lúdico con el profesional. geekonomía Para beneficio de los consumidores, la ficticia economía de la es- casez está quedando atrás. Según Anderson (2009) vivimos en una época de abundancia, aunque se nos haga creer que faltan recur- sos. El autor explica que el ser humano lleva en sus genes el miedo a la escasez, pero ese miedo no se corresponde con la realidad de la mayoría del mundo, más allá de las economías empobrecidas. Anderson analiza el efecto de sustitución: el ingenio humano y la curva de aprendizaje de la ciencia y la tecnología tienden a encon- trar recursos naturales mucho más rápido que el uso real que pueda hacerse de ellos. Esto produce un efecto de aumento de la oferta más rápido que la demanda, bajan los precios y se genera abundan- cia. Sucede con los alimentos, la ropa, los bienes materiales y, por supuesto, la tecnología en la geekonomía.
  • 56. Cinco ideas principales del capítulo 1 1 Operando bajo la filosofía de la escasez, la industria de la inter- mediación del siglo xx es la más afectada por la masificación de Un radar para producir en el postdigitalismo Internet. Si los costes de producir, distribuir y autopromocionarse tienden a cero, ya no hay motivos para que un creador ceda los derechos de su obra. Esta industria impulsa el modelo del copyright con mayor presión, diseñando barreras legales y técnicas con el fin de dificultar el acceso a la información digital y de que compartir no resulte atractivo para el usuario. 2 En la geekonomía el problema que tienen los distribuidores his- tóricos no se resuelve con juicios a los usuarios, sino median- te la innovación de las prácticas de distribución e intermediación. Cuantas más barreras se diseñan, más facilidades ofrecen los actores emergentes. Nada puede evitar que el modelo de intermediación cambie radicalmente en la próxima década. 54 3 El cloud computing emerge como una solución externa a la admi- nistración de los datos digitalizados de las empresas e institucio- geekonomía nes, gestionados en forma ineficiente y antieconómica desde sus de- partamentos TIC. La nube hace realidad la noción de la computadora universal o la World Wide Computer. Es un paso decisivo hacia la iden- tidad abierta única y el fomento de la economía de las intenciones. 4 El marketing y la publicidad se tornan cada vez más irrelevantes para captar atención. La innovación centrada en el usuario y ba- sada en nuevos modelos de distribución e innovadoras estrategias de desarrollo de producto contribuyen a sintonizar con las me-spheres de los consumidores. 5 Si los mercados son conversaciones y éstas se producen aunque se las quiera ignorar, las redes están para potenciar al máximo la distribución de la información así como las conversaciones que se derivan de ellas. La apertura es el mejor mecanismo empresarial para sobrevivir en la geekonomía.
  • 57. Cinco recursos relacionados disponibles en Internet 1 Lessig, Lawrence (2008). Remix. Making Art and Commerce Thrive in the Hybrid Economy. Bloomsbury. Londres. www.bloomsburyacademic.com/remix.htm 2 Bollier, David (2008). Viral spiral. How the Commoners Built a Digital Republic of Their Own. The New Press. Nueva York. www.viralspiral.cc/download-book 3 Gaylor, Brett (2009). Rip! A Remix Manifesto (documental). www.ripremix.com 4 VVAA (2008). Los piratas son los padres. Historias en los albores capítulo 1 de la era digital. Exgae. Barcelona. http://exgae.net/docs/Los_piratas_son_los_padres.pdf 5 Lasica, Joseph Daniel (2009). Identity in the Age of Cloud Computing: The next-generation Internet’s impact on business, governance and social interaction. The Aspen Institute. Washington, DC. 55 geekonomía www.aspeninstitute.org/sites/default/files/content/docs/pubs/ Identity_in_the_Age_of_Cloud_Computing.pdf
  • 58. Notas Capítulo 1 1. La actuación electoral del Partido Pirata sueco en las elecciones parlamen- tarias europeas de 2009 le permitió colocar un legislador en dicho Parlamen- to. Según Wikipedia, en 2009 el PiratPartiet representaba la tercera fuerza política sueca en número de afiliados. www.piratpartiet.se/international/ espanol. Por otra parte, un ejemplo de asociación sin fines de lucro es EXGAE, Un radar para producir en el postdigitalismo una asesoría legal con sede en Barcelona, especializada en tratar los abusos de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) española. http://exgae.net La EXGAE publicó en octubre de 2008 Los piratas son los padres. Historias en los albores de la era digital, un libro recopilatorio de buenas prácticas y argumentos en defensa del copyleft, el peer to peer y los nuevos formatos co- laborativos. El libro de la EXGAE se puede descargar gratis en http://exgae. net/docs/Los_piratas_son_los_padres.pdf. Entre textos de cuarenta y tres autores, Cristóbal Cobo y yo publicamos un pequeño artículo sobre nuestra experiencia con Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food. Existen otras asociaciones similares en todo el mapa europeo. Una de las más reconocidas es la británica Open Rights Group. En tanto, en Estados Uni- dos personalidades como Richard Stallman, Lawrence Lessig o la comunidad Creative Commons son una referencia mundial. 56 2. The Statute of Anne, 1710. http://avalon.law.yale.edu/18th_century/anne_1710.asp geekonomía 3. En su número de enero de 2008, Wired Magazine publicó un artículo de investigación sobre las nuevas variables que rodean al negocio de la distribu- ción de contenidos. El músico y productor David Byrne presenta seis modelos alternativos y cuestiona claramente el modelo tradicional de los artistas tra- bajando bajo la contención de una multinacional. En la monografía de Byrne aparecen algunos datos esclarecedores: 1) bajo el modelo tradicional, más de la mitad del dinero de la venta de un CD se destina a cubrir los costes de mar- keting y distribución. Los royalties de los artistas son sólo el 10% por cada CD vendido; 2) el artista pierde el copyright de su obra para siempre, incluso para futuros posibles modelos de negocio o formatos que aún no existen; 3) hasta hace muy poco no se otorgaba ningún ingreso extra a los artistas por la venta en formato mp3 bajo el modelo iTunes o similares; 4) en la venta en iTunes el artista recibe el 14% de las ganancias, pero generalmente es menos dinero que bajo el modelo tradicional, ya que la compra del producto es más económica para el consumidor; 5) el modelo de autodistribución llevado a la práctica por Radiohead en In Rainbows es el que mayor libertad otorga
  • 59. a los artistas y el que en general resulta más lucrativo, sobre todo pensando en que el artista se queda con las ganancias de licenciamiento de su obra en todos los formatos existentes (cine, videojuegos, iTunes, contenidos para móviles, etc) o futuros formatos. www.wired.com/entertainment/music/magazine/16-01/ff_byrne 4. Según Bollier (2008), las leyes de copyright en Estados Unidos y el cobro de licencias de uso en todo el mundo han contribuido enormemente a la economía local y han sido útiles para equilibrar la balanza de pagos nor- teamericana. 5. Según Wired Magazine (enero de 2001) de los 20 millones de usuarios que Napster tenía antes de la orden judicial en su contra en julio de 2000, pasó a 38 millones en octubre de 2000, luego de iniciado el proceso de apelación. Algo similar sucedió con el número de archivos descargados. De 50 millones en julio de 2000, pasó a 98 millones en octubre del mismo año. capítulo 1 Todo esto sin contar los clones de Napster que aparecieron en ese período. Más allá del caso Napster y los que le sucedieron, es notoria la lentitud de la industria de la intermediación cultural para crear infraestructuras que le permitan disputar espacios a los sitios de descargas ilegales. Planificada la 57 puesta en marcha para el primer trimestre de 2010, la industria americana anunció el lanzamiento de una plataforma de descarga legal de películas geekonomía y música, que también estaría disponible en España. El modelo a seguir es FindAnyFilm.com, una plataforma diseñada por la industria británica lanza- da a comienzos de 2009 y con más de tres millones de títulos disponibles. 6. Veáse el vídeo de la organización Creative Commons donde se explica dicha complementación: http://cyber.law.harvard.edu/blogs/gems/ion/secreativo.swf 7. La situación del mercado no está muy clara. Ruppel Shell (2009) cree que si se hace un análisis más profundo de la relación calidad/precio, muchas veces no existe concordancia entre ambos y el precio está determinado por una estrategia de marketing asociada a la idea de que calidad es sinónimo de precios altos. Según Ruppel Shell, en la era de lo barato todos somos ig- norantes del verdadero coste de los productos y creyentes de la bondad de nuestras decisiones de compra. Bajo este sistema de ignorancia, los fabri- cantes más honestos, que se preocupan por la verdadera relación calidad/ precio, salen perjudicados porque sus costes son mayores y sus márgenes
  • 60. menores, dada la desleal competencia del mercado. Muchas veces se com- pra más caro un producto de menor calidad, solamente porque se cree que el precio es la principal variable a tener en cuenta con respecto a la calidad. 8. En “Is free the future?” (The New Yorker, 6 de julio de 2009), Malcolm Gladwell hace una revisión crítica de la idea de gratuidad y habla de uto- Un radar para producir en el postdigitalismo pismo tecnológico. Gladwell afirma que la gratuidad es sólo otro precio y no la norma como señala Anderson (2009) y que son los consumidores y el mercado los que deciden entre múltiples opciones. Cuestiona que Ander- son eleve a la categoría de principio filosófico los intereses de las compa- ñías de Internet y cita como ejemplo el caso de YouTube. Según Gladwell, el almacenamiento de un vídeo en YouTube cuesta “casi cero”, pero “casi cero” multiplicado por miles de millones al mes sigue siendo un coste muy importante para Google, el propietario de la plataforma. Se estima que el coste del ancho de banda de YouTube será a finales de 2009 de 360 millo- nes de dólares y YouTube perderá 500 millones de dólares en ese año. Para Gladwell la era digital está cambiando la forma de vender los productos y especialmente la información, pero no hay reglas cerradas, como las que Anderson predica. Para el autor, el modelo de gratuidad no es la totalidad, sino sólo un mercado y “otro precio” es otro mercado. www.newyorker. 58 com/arts/critics/books/2009/07/06/090706crbo_books_gladwell geekonomía 9. Piracy is Progressive Taxation, and Other Thoughts on the Evolution of On- line Distribution, por Tim O’Reilly. 12 de noviembre de 2002. http://tim.oreilly.com/pub/a/p2p/2002/12/11/piracy.html 10. Scolari, Carlos (2009). Transmedia Storytelling: Implicit Consumers, Narra- tive Worlds, and Branding in Contemporary Media Production. International Journal of Communication, vol. 3, 2009. http://ijoc.org/ojs/index.php/ijoc/article/view/477 11. Recomiendo ver el documental Rip! A Remix Manifesto (2009), dirigido por Brett Gaylor. www.ripremix.com 12. Un ejemplo que observé en persona en el verano de 2009. La firma exclusiva James Perse vende en su tienda de Malibu, California, camisetas rotas estilo surf, mientras en la tienda suena la música de los años duros de David Bowie y el salón está ambientado con tablas de surf y una moto Harley Davinson. ¡Las camisetas cuestan 80 euros!
  • 61. 13. “The new socialism. Global Collectivist Society Is Coming Online”, Kevin Kelly. Wired Magazine, junio de 2009. www.wired.com/culture/culturere- views/magazine/17-06/nep_newsocialism?currentPage=all 14. Debo reconocer que no fui consciente de la relevancia y el crecimiento del cloud computing hasta que compartí escenario en marzo de 2009 en el TEC de Monterrey con Mike Culver, uno de los responsables de Amazon Web Services. Allí aprendí acerca de las cifras del volumen de negocio que representaba para su compañía y cómo pasó de ser un negocio residual a ser una de sus principales fuentes de ingresos. Crónica de la conferencia en http://digitalistas.blogspot.com/2009/03/ resena-final-sobre-el-siscti-2009-en-el.html 15. Prefiero utilizar el concepto de cloud computing que el de nube, ya que me parece define mejor su aspecto técnico. capítulo 1 16. El proceso de virtualización se explica claramente en “Conjuring Clouds. How engineers are making on-demand computing a reality”, Erica Naone. Technology Review, agosto de 2009. www.technologyreview.com/computing/22606 59 17. He tomado dos definiciones del término para elaborar una tercera pro- geekonomía pia. Plummer, Daryl (et al). “Cloud Computing: Defining and Describing an Emerging Phenomenon”. Gartner, 17 de junio de 2008. www.star.net. uk/resources/star/home/misc/email_images/gartner%20cloud_compu- ting_defining_and_156220.pdf Staten, James. “Is Cloud Computing Ready For The Enterprise?” Forrester Research, 7 de marzo de 2008. www.forrester.com/Research/Document/ Excerpt/0,7211,44229,00.html Para comprender de forma sencilla qué es el cloud computing, recomiendo el vídeo explicativo en castellano de SalesForce.com, una de las principales empresas del sector. www.salesforce.com/es/cloudcomputing 18. www.forrester.com/rb/search/results.jsp?N=133001&Ntk=MainSearc h&Ntx=mode+MatchAllPartial&Ntt=cloud+computing 19. Google and IBM Announce University Initiative to Address Internet-Scale Com- puting Challenges. www-03.ibm.com/press/us/en/pressrelease/22414.wss Open Cloud Manifesto:www.opencloudmanifesto.org
  • 62. 20. Entrevista de Carlos Scolari a Kevin Kelly en digitalismo.com, noviembre de 2007. http://digitalistas.blogspot.com/2007/11/entrevista-kevin-kelly.html 21. “SaaS delivery challenges on-premise sofware”, Robert P. Desisto, Ben Un radar para producir en el postdigitalismo Pring, Benoit J. Lheureux y Frances Karamouzis. Gartner Research Report. 26 de septiembre de 2006. www.gartner.com/DisplayDocument?id=496811 22. Sin datos disponibles en la Red. 23. Use of Cloud Computing Applications and Services, John Horrigan. Pew Internet & American Life Project, 12 de septiembre de 2008. www.pewinternet.org/Reports/2008/Use-of-Cloud-Computing-Applica- tions-and-Services.aspx?r=1 24. “Battle of the clouds”. The Economist. 15 de octubre de 2009. www.economist.com/opinion/displaystory.cfm?story_id=14644393 60 25. “The Intention Economy”, David Searls. Linux Journal, 8 de marzo de 2006. www.linuxjournal.com/node/1000035 geekonomía 26. Von Hippel, Eric (2005). Democratizing Innovation. MIT Press. Disponible en forma gratuita en: http://web.mit.edu/evhippel/www/democ1.htm
  • 63. capítulo 2 Capítulo 2 61 Un estudio de caso geekonomía de nuevas formas de intermediación: los open access journals
  • 64. La industria de las revistas científicas1 es una de las que más está sufriendo el fenómeno de la desin- termediación en detrimento de los actores tradi- cionales. Un pequeño grupo de editoriales ha concentrado un negocio multimillonario haciendo un limitado esfuerzo para adap- tarse a la economía de la información y aún menos a los nuevos Un radar para producir en el postdigitalismo tiempos postdigitales. Estas empresas han profesionalizado el di- seño de plataformas impresas para que la comunidad científica pu- blique los reportes de sus investigaciones bajo el histórico método de revisión entre pares. El sistema existía hace más de un siglo y era previamente administrado con cierta precariedad por las pro- pias asociaciones de investigadores. El salto cualitativo lo dieron las editoriales masificando el The Science Citation Index, un índice de impacto mundial creado por Eugene Garfield en la década de 1960 y vendido a Thomson Reuters en 1992. En 1997 Thomson Reuters colocó dicho índice de impacto en Internet y el ranking ISI se trans- formó definitivamente en el referente mundial en la valoración de la comunicación científica. Hoy día la industria está distorsionada y focalizada en el flujo de ganancia más que en el interés por la divul- 62 gación y distribución del conocimiento que se genera en los labora- torios de investigación y en la academia. Según Casati, Giunchiglia y geekonomía Marchese (2007),2 el modelo actual se basa en tres componentes: di- seminar ideas y ganar visibilidad; obtener reconocimiento; generar intercambios y redes. Pero el sistema tradicional de los journals de pago es ineficiente para cumplir estos tres objetivos (Scolari y Pardo Kuklinski, 2007). Dave Gray (2009) describe de forma ilustrada el negocio de las revistas científicas a través de una breve producción en Flickr titulada “Free the Facts”.3 Señala que aunque gran parte del conocimiento científico ha sido financiado por fondos públicos, y en consecuencia debería ser accesible a toda la comunidad, la industria de la comunicación científica impide esa atribución ciudadana, exi- giendo una suscripción para acceder a estos reportes. Según Gray, el coste promedio por artículo es de treinta y dos dólares. Pero el diseño de open access journals y la masiva distribución de la investigación en la Red está afectando al negocio editorial, que inicialmente se había visto muy beneficiado con el uso de Internet. Se definen los open access journals como revistas periódicas de pro-
  • 65. ducción científica y con revisión entre pares cuyo acceso es gratuito, tanto para los particulares como para las instituciones. El cambio hacia un modelo abierto será gradual, ya que existen intereses muy arraigados dentro de la comunidad científica para mantener el statu quo papirocéntrico4 (Harnad, 1999) y porque los investigadores aún prefieren priorizar las publicaciones tradicionales, dado su presti- gio acumulado y mayor valor de indexación. Las universidades son las instituciones más perjudicadas por esta dinámica ya que tienen que pagar dos veces a las editoriales: la primera de forma indirecta con el salario a los investigadores para que produzcan y publiquen reportes que luego éstos ofrecen gratis a las editoriales; la segunda de forma directa pagando las suscripciones a las propias editoriales. En este caso se trata de una cifra muy importante al año para que sus investigadores y estudiantes estén al día de lo que sucede en el mundo de la ciencia. The ISI Web of Knowledge5 es una red de más de 23.000 revistas. Cuanto más grande es la universidad y más áreas de capítulo 2 conocimiento e investigación posee, más suscripciones requiere. Las universidades deberían ser las instituciones más beneficiadas por la circulación de los reportes científicos que se generan en sus laboratorios. Pero, paradójicamente, el negocio editorial de los 63 journals afecta a su economía. Sólo pueden acceder quienes pagan y en el Tercer Mundo son muchas las universidades que no pue- geekonomía den contar con estos trabajos para el beneficio de su comunidad científica. Este mercado no sólo perjudica a las instituciones, sino a los propios investigadores transfiriendo los derechos de autor a las editoriales y limitando la distribución de su trabajo más allá de las condiciones impuestas por las editoriales. El problema no es exclusivamente económico, sino también metodológico. El sistema de revistas científicas fue valioso con los métodos de distribución analógicos pre-Internet y era el canal más eficiente para compartir los resultados de las investigaciones. Lo que en su momento fue virtud hoy representa un modelo de distri- bución anacrónico por su lentitud e ineficacia. Pero la crítica viene de muy lejos. En un texto referencial de 19456 Vannevar Bush ya cuestionaba como anticuada la lenta forma de transmitir conoci- miento en la comunidad científica: “Professionally our methods of transmitting and reviewing the results of research are generations old and by now are totally inadequate for their purpose”. Bush urgía a
  • 66. esta comunidad a elaborar herramientas para hacer más accesible el cuerpo de conocimiento existente. Su propuesta fue Memex, el antecedente teórico de Arpanet. Sesenta y cinco años después de Memex y con la creación de Internet de por medio, la distribución de la comunicación científica sigue el mismo modelo. Un radar para producir en el postdigitalismo Pero los open access journals se están abriendo espacio con rapi- dez. Aunque existe desde hace décadas, el movimiento open access7 se ha consolidado en los últimos años con decenas de iniciativas en todo el mundo. El horizonte mediato no es la desaparición de las revistas tradicionales, sino la convivencia entre ambos modelos, y la reducción o eventualmente eliminación del coste anual de sus- cripción o las licencias per view a las universidades. En definitiva, la construcción de modelos de negocio menos dañinos para las ins- tituciones. Una de las plataformas más reconocidas es el Directory of Open Access Journals (DOAJ),8 con cinco mil revistas accesibles en su base de datos. En 2007 SPARC Europe y el DOAJ anunciaron un proyecto a fin de desarrollar estándares para journals de acceso li- bre y proveer ayuda a los editores que se quisieran adherir a dicho formato. Por otra parte, la organización sin fines de lucro Creative 64 Commons lanzó en 2005 Science Commons,9 con el objetivo de llevar sus licencias al campo científico, creando un marco legal para que geekonomía los papers sean de acceso abierto. Otro proyecto de calidad es el Pu- blic Knowledge Project,10 iniciado en 1998 por la University of British Columbia y dedicado a mejorar los canales de distribución de la in- vestigación y buscar formas alternativas de comunicación científica a través de las TIC. También existen repositorios públicos de divul- gación como Google Scholar; innovations-report.com, un espacio con cientos de informes e investigaciones científicas a nivel europeo; ResearchGate.net, una red social diseñada por investigadores que fomenta la cooperación entre los profesionales del mundo científi- co y tecnológico; SciVee, un YouTube para investigación académica creada por la National Science Fundation de Estados Unidos; la pla- taforma de ACM en ciencias de la computación;11 la Public Library of Science (PLOS); o aplicaciones de las propias universidades (otro interesante modelo para el futuro) como el de California Institute of Technology.12 Salvo excepciones como el DOAJ, muchas de estas plataformas no poseen aún un exigente sistema de revisión y filtro, lo cual afecta su calidad y pertinencia.
  • 67. En el campo de las ciencias de la comunicación existen dos exce- lentes open journals en línea (multimedia y sin versión impresa) con una estricta revisión entre pares. Por su juventud, aún no tienen un alto índice de impacto en el The Social Science Citation Index. Me refiero a The International Journal of Communication, editado por Manuel Castells, Larry Gross y la USC Annenberg School for Commu- nication, y First Monday, focalizado en estudios de Internet. Más allá de los casos puntuales existentes, lo más relevante de este breve capítulo es analizar el cambio que podría representar el fenóme- no de la desintermediación de las editoriales científicas con la aparición de los open access journals y otras plataformas abiertas de comunica- ción científica. Imagino un cambio de paradigma en cuatro aspectos: 1. Evitar a los intermediarios significaría un gran ahorro de costes para las universidades y una posible derivación de recursos a la cons- capítulo 2 trucción de plataformas propias de publicación bajo parámetros in- ternacionales estandarizados como el DOAJ. Ese ahorro de costes de suscripción permitiría el pago de revisores externos para la selección de los artículos, bajo una escala tarifaria preconfigurada. Con esta 65 derivación de recursos, también es posible centrarse más en la pro- ducción multimedia y en el diseño gráfico de las revistas científicas, geekonomía para hacerlos más atractivos a la comunidad, especialmente a los estudiantes. Si bien no se trata de revistas con revisión entre pares, ejemplos como Seed Magazine o Wired Science en la televisión pública norteamericana PBS son referentes en la comunicación de la ciencia. 2. Una nueva forma de ver la indexación es cuantificar la reputa- ción del texto del autor, no el de la revista. El valor de un artículo está condicionado por el dígito de indexación de la revista donde se publica. Las nuevas redes científicas distribuidas vía Web comienzan a consolidar la idea de que cada vez importa menos dónde se publi- ca y más qué se publica. La clave es medir cuántos investigadores ci- tan el artículo posteriormente. Para cumplir con este requisito vital existen diferentes parámetros.13 Pero la clasificación de los journals menciona el éxito de la indexación pasada, no la del futuro. 3. Las condiciones de publicación deberían obligar a autores y editores a hacer accesibles a la comunidad científica los reportes
  • 68. de las investigaciones de manera gratuita. Vale considerar que no hablo de acceso libre a las investigaciones (que en muchos casos poseen propiedad intelectual o industrial) sino a los reportes, que en definitiva es lo que se publica. 4. Las publicaciones jóvenes y open source atienden mejor la di- Un radar para producir en el postdigitalismo versidad nacional de los investigadores (Lauf, 2005).14 Más allá del indiscutido liderazgo del sistema de investigación anglosajón, este nuevo tipo de valoración según el autor y no la revista puede atacar de lleno el problema del liderazgo casi monopólico de la ciencia anglosajona. Un liderazgo que se da tanto en la cantidad de journals editados como en el número de artículos publicados por sus inves- tigadores. Veamos un ejemplo en mi campo de conocimiento, las ciencias de la comunicación. La mayoría de revistas prestigiosas en este campo están editadas en Estados Unidos y todas sin excepción son en inglés. Insistiendo en el liderazgo del ecosistema de inves- tigación anglosajón, existe en el campo de las ciencias de la comu- nicación una sobredimensionada representación de investigadores de habla inglesa, y esto contribuye a una menor internacionaliza- ción de las revistas. Según Lauf, los autodenominados journals inter- 66 nacionales no cumplen estrictamente con esa propiedad, habiendo sólo 16 publicaciones que superan el 50% en el índice de diversi- geekonomía dad (más de la mitad de autores no-norteamericanos). Lauf calcula que el 80% de los journals de comunicación tienen un 80% o más de editores y autores norteamericanos. En este sentido, el 66,2% de los artículos están escritos por autores norteamericanos, o sea que dos de cada tres trabajan en ese país. El 13,2% son investigadores del Reino Unido, el tercer y cuarto lugar es para Canadá y Australia respectivamente. Es decir que el 86% de los trabajos son de países de habla inglesa. España es el único país iberoamericano presente, posicionado con el 0,6% de los trabajos, 31 trabajos de entre 4875. El interesante trabajo de Lauf coincide con una investigación mía aún inédita (Pardo Kuklinski, 2006),15 donde se observan los artículos de investigadores iberoamericanos publicados entre 2000 y 2005 en los principales 13 journals de comunicación a nivel mundial16 (exclui- dos artículos reeditados y reseñas de libros). Los resultados (véase detalle)17 fueron los siguientes:
  • 69. • Artículos publicados en el período 2000-2005: 2.632 • Autores de dichos artículos: 6.694 • Autores que trabajan en universidades iberoamericanas: 50 • Autores iberoamericanos que trabajan en universidades no-ibero- americanas: 31 Las conclusiones de este estudio señalan que entre 2000 y 2005, el porcentaje de autores que publicaron en las principales revistas científicas de comunicación internacionales y trabajan en universi- dades iberoamericanas es menor al 0,8% con respecto a todos los autores que publicaron. En tanto, el porcentaje de autores iberoame- ricanos que publicaron en los principales journals de comunicación internacionales y que trabajan en universidades no-iberoamericanas es menor al 0,5% con respecto a todos los autores que publicaron. Estos bajísimos porcentajes de participación no se pueden atribuir solamente a un problema estructural de monopolio lingüístico o capítulo 2 por países, sino también a la escasa producción internacional y de calidad de nuestros investigadores en comunicación. Estos datos in- dican dos cosas: falta de apertura a nuevos mercados e incapacidad de publicar dentro de los journals más prestigiosos del mundo por 67 parte de los investigadores iberoamericanos o de los investigadores que trabajan en universidades iberoamericanas. El inglés de calidad geekonomía es una barrera, pero para aumentar el promedio de internacionali- dad, ISI debería considerar incluir las principales revistas nacionales o regionales en sus índices. Quizá ese trabajo lo hagan mejor los formatos de open access journals.
  • 70. Cinco ideas principales del capítulo 2 1 Un pequeño grupo de editoriales ha concentrado el gran nego- cio de las revistas científicas, profesionalizando su estructura Un radar para producir en el postdigitalismo bajo el histórico método de revisión entre pares. En 1997 Thomson Reuters colocó el ranking ISI en la Web y dicho índice de impacto se transformó en el referente mundial en valoración de la comunica- ción científica en journals. 2 Proyectos de open access journals como DOAJ, Science Commons o Public Knowledge Project están transformando el negocio de la comunicación científica. El horizonte de la industria es la reducción o eliminación del coste anual de suscripción de las universidades a las revistas, así como las licencias per view y la construcción de mo- delos comerciales menos dañinos para las instituciones. 68 3 La posible pérdida de protagonismo de los intermediarios tra- dicionales supondrá un gran ahorre de costes para las univer- sidades. Esto permitiría la derivación de recursos a la construcción de plataformas propias abiertas de publicación de sus autores bajo geekonomía parámetros internacionales estandarizados. También se podrían desviar recursos al pago de revisores internacionales bajo una esca- la tarifaria preconfigurada. 4 Las redes científicas distribuidas vía Web comienzan a consolidar la idea de que cada vez importa menos dónde se publica y más qué se publica. Una nueva forma de ver la indexación es priorizar y cuantificar la reputación del texto del autor, no el de la revista. 5 Este nuevo tipo de valoración –según el autor y no la revista– puede atacar de lleno al problema del liderazgo casi monopóli- co de la ciencia anglosajona en la cantidad de journals editados así como en el número de artículos publicados por sus investigadores.
  • 71. Cinco recursos relacionados disponibles en Internet 1 Suber, Peter (2009). “Timeline of the Open Access Movement”. Open Access Project. www.earlham.edu/~peters/fos/timeline.htm 2 Wilbanks, John; Boyle, James (2006). “An Introduction to Science Commons”. Creative Commons, agosto de 2006. http://sciencecommons.org/wp-content/uploads/ ScienceCommons_Concept_Paper.pdf Science Commons. http://sciencecommons.org/about 3 Scolari, Carlos; Pardo Kuklinski, Hugo (2007). “El diseño de Diálogos de la Comunicación en línea. Hacia una nueva gestión capítulo 2 del Conocimiento Científico en la era del Software Social”. Diálogos de la Comunicación. Felafacs, mayo-agosto de 2007. nro. 74. Lima, Perú. www.dialogosfelafacs.net/especial_74ScolariPardo.php Vídeo explicativo en: 69 www.dialogosfelafacs.net/index74.php geekonomía 4 Acerca de The ISI Web of Knowledge. Thomson Reuters. 2009 http://isiwebofknowledge.com/about/whatitis 5 Directory of Open Access Journals (DOAJ). 2009. SPARC Europe. Lund University Libraries. www.doaj.org
  • 72. Notas 1. Éste es un tema por el que estoy especialmente interesado hace tiempo. Junto a Carlos Scolari, en 2007 diseñamos la versión en línea de Diálogos de la Comunicación, la revista académica de la Federación Latinoamericana de Facultades de Comunicación Social (FELAFACS). www.dialogosfelafacs.net/78 Un radar para producir en el postdigitalismo Para dicho relanzamiento hemos escrito un artículo explicando el proceso y hemos producido un vídeo con las principales ideas. Artículo en: www.dialogosfelafacs.net/especial_74ScolariPardo.php Vídeo en: www.dialogosfelafacs.net/index74.php 2. Casati, Fabio; Giunchiglia, Fausto; Marchese, Maurizio (2007). Publish and perish: why the current publication and review model is killing research and wasting your money. Ubiquity. www.acm.org/ubiquity/views/v8i03_fabio.html 3. http://flickr.com/photos/davegray/sets/72157612691100488/show 4. Harnad, Stevan (1999). “Free at Last: The Future of Peer-Reviewed Journals”. D-Lib Magazine, vol. 5, nro. 12. Diciembre de 1999. 70 www.dlib.org/dlib/december99/12harnad.html geekonomía 5. http://isiwebofknowledge.com/about/whatitis 6. Bush, Vannevar (1945). “As We May Think”. The Atlantic Monthly, julio de 1945. www.theatlantic.com/doc/194507/bush 7. En un excelente trabajo, Peter Suber recopiló todas las acciones del mo- vimiento open access en el ecosistema de la comunicación científica. Aquí se han catalogado decenas de propuestas desde mediados de la década de 1960, aunque el proceso se profundiza a partir de 1990 con la masificación de Internet. www.earlham.edu/~peters/fos/timeline.htm 8. www.doaj.org 9. http://sciencecommons.org/about 10. Actualmente opera a través de una sociedad entre la Facultad de Edu- cación de la University of British Columbia, Simon Fraser University Library,
  • 73. School of Education at Stanford University, y Canadian Centre for Studies in Publishing at Simon Fraser University. http://pkp.sfu.ca/?q=ojs 11. www.acm.org/corr 12. http://library.caltech.edu 13. “The Genius Index: One Scientist’s Crusade to Rewrite Reputation Ru- les”, Guy Gugliotta. Wired Magazine. 17 de junio de 2009. www.wired.com/ culture/geekipedia/magazine/17-06/mf_impactfactor?currentPage=2 14. En base a un estudio que abarca todos los artículos publicados entre 1998 y 2002 en las 43 revistas de estudios de comunicación mejor posicio- nadas por ISI. Los resultados de la investigación están publicados en “Natio- nal diversity of major international journals in the field of Communication”, Edmund Lauf. Journal of Communication, marzo de 2005. capítulo 2 http://www3.interscience.wiley.com/journal/118645436/abstract (Nota: para acceder a esta página web, se deben aceptar las cookies de Wiley InterScience.) 71 15. Pardo Kuklinski, Hugo (2006). “La producción científica iberoamericana en comunicación y su impacto en los journals internacionales”. Inédito, en geekonomía fase de revisión. 16. A los efectos de esta investigación, se consideran investigadores ibe- roamericanos a todos aquellos que hayan finalizado sus estudios de gra- do en universidades iberoamericanas, sin importar la nacionalidad de los investigadores. En cualquier caso, lo relevante es el lugar de trabajo y no la nacionalidad de los investigadores: a) investigadores que traba- jen en universidades iberoamericanas en el momento de la publicación del artículo; b) investigadores iberoamericanos que trabajan en universi- dades no-iberoamericanas en el momento de la publicación del artículo. Publicaciones aparecidas en la categoría Comunicación de la base de da- tos Social Sciences Citation Index, producida por ISI. Se seleccionaron los 11 principales journals internacionales de comunicación, según las valoracio- nes de factor de impacto del DURSI (visitada el 12 de febrero de 2006), más dos con tradición e influencia en el espacio europeo de investigación como European Journal of Communication y Discourse and Society. Las principales
  • 74. 11 revistas son: Journal of Communication; Public Opinion Quarterly; Social Problems; Journal of Popular Culture; Semiotica; Human Relations; Theory, Culture & Society; Science, Technology & Human values; Cultural Studies; Jour- nal of Strategic Information Systems; The Information Society. www10.gencat.net/dursi/ca/re/aval_rec_sist_siar_llistes.htm Un radar para producir en el postdigitalismo 17. Lista de los 13 journals seleccionados con los datos observados en cada categoría: A: Artículos publicados en el período 2000-2005. B: Investigadores autores de dichos artículos. C: Autores que trabajan en universidades iberoamericanas. D: Autores iberoamericanos que trabajan en universidades no-iberoame- ricanas. Journal of Communication A: 199 / B: 442 / C: 1 / D: 4 Public Opinion Quarterly A: 138 / B: 328 / C: 0 / D: 2 Social Problems A: 182 / B: 309 / C: 1 / D: 2 Journal of Popular Culture A: 243 / B: 257 / C: 3 / D: 2 Semiotica A: 405 / B: 496 / C: 17 / D: 7 Human Relations A: 342 / B: 656 / C: 2 / D: 1 Theory, Culture and Society A: 249 / B: 280 / C: 3 / D: 2 72 Science, Technology and Human Values A: 125 / B: 204 / C: 2 / D: 2 Cultural Studies A: 200 / B: 223 / C: 4 / D: 1 geekonomía Journal of Strategic Information Systems A: 104 / B: 219 / C: 0 / D: 1 The Information Society A: 165 / B: 258 / C: 6 / D: 3 European Journal of Communication A: 98 / B: 143 / C: 0 / D: 1 Discourse and Society A: 182 / B: 247 / C: 11 / D: 3
  • 75. capítulo 3 Capítulo 3 73 La geografía cambiante geekonomía del planeta Web 2.0: transformación narcisista e identidad única
  • 76. Desde la publicación en septiembre de 2007 de Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food, algunas tendencias mencionadas en ese tra- bajo se han profundizado, principalmente la econo- mía de las intenciones de la mano de una identidad única y narcisista del usuario. Por esto consideré apropiado Un radar para producir en el postdigitalismo dedicar un capítulo complementario –con más de dos años de dis- tancia– a modo de bonus track, con la voluntad de escribir sobre as- pectos de la Web social que no hemos mencionado en su momento. Recomiendo la lectura hipertextual junto al capítulo 1. Veamos una versión 2010 de las tendencias de la Web colaborativa en el marco del postdigitalismo. 1. El horizonte mediato de la Web social se construirá bajo una ar- quitectura de plataformas distribuidas, open source, generalistas, gratuitas, pero también de target y pensadas para dispositivos móvi- les. Lo que se consolida como tendencia es el fenómeno open source (desaparecen definitivamente los portales y se afirman las plata- formas abiertas y distribuidas) y su movimiento hacia interfaces de 74 dispositivos móviles. Ya dedicamos un capítulo en Planeta Web 2.0 a la mobile Web 2.0, y a posteriori realicé una investigación1 y una geekonomía infografía2 que pueden resultar útiles para describir ese fenómeno de convergencia de formatos y dispositivos. A pesar de ser una ten- dencia muy evidente que me llevó hasta la creación de una spin-off,3 no haré referencia al tema mobile en este libro para no repetir ideas ya escritas en otros trabajos recientes. 2. Información fácilmente organizada y accesible, utilidad, gestión en tiempo real y gran poder de procesamiento. Nos alcanza con saber qué está haciendo Google en ese sentido para comprender hacia dónde va la Web social. Es demasiado prematuro señalarlo con contundencia, pero puede que Google Wave se convierta en el modelo de una nueva etapa de la escritura colaborativa. Según Marisa Mayer (agosto de 2009),4 Google gestiona quince veces más datos (Googlejuice) que en 2002 y la clave es hacer que esos datos trabajen para el usuario y no que el usuario trabaje para obtener los datos. Google se mueve hacia delante en tres niveles: a) para que los datos sean fácilmente organizados, accesibles y útiles; b) para
  • 77. darle mayor velocidad a la gestión de datos en tiempo real; c) para escalar el poder de procesamiento de la información a un nivel sin precedentes, con el componente agregado de intentar desbloquear y hacer accesible la información que todavía no existe en la Red. 3. La transformación narcisista de la Web no es una variable lúdica sino una evolución y un componente vital en el cual cada usuario se convierte en un nodo que vive en la Red y transfiere su experiencia (profesional, social o afectiva) a la comunidad. Lo cierto es que gran parte de la Web ha sido absorbida por las plataformas colaborati- vas y el ecosistema de Internet ha sufrido una gran influencia del egocasting y la sabiduría de las multitudes donde las redes sociales trabajan mejor. Pero no es un cambio anecdótico y pasajero, sino una reafirmación de un comportamiento social de los usuarios de la Red. Li y Bernoff (2009) dan una dimensión aún más amplia a este fenómeno bajo la denominación groundswell. Traducido como capítulo 3 oleada de opinión, se trata de una tendencia de movimiento espon- táneo en la cual las personas utilizan las aplicaciones en línea para conectarse según sus propios intereses, tomando de los demás las cosas que necesitan e ignorando a las corporaciones tradicionales. 75 Según Li y Bernoff, una tecnología es evaluada positivamente por sus usuarios si: a) favorece la comunicación entre las personas de geekonomía un modo sencillo y productivo; b) transfiere el poder desde las insti- tuciones a los ciudadanos con eje en la validación social; c) invita a las sinergias con otros emprendedores o grupos de interés a través de plataformas abiertas. En la transformación narcisista de la Web las empresas tienen que comprender que las comunidades en la Red –propias o ajenas– no están para influenciar a los clientes sino para escucharlos. 4. Las estructuras enlazadas de las redes sociales no revelan la ver- dadera interacción entre las personas. A mayor atención, mayor reciprocidad. Una densa red de amigos o seguidores en las aplica- ciones de la Web social no significa una mayor conectividad y una conversación más rica. En una reciente investigación sobre Twitter vinculada al funcionamiento de los nodos de amistad, Huberman, Romero y Wu (2009)5 concluyen que, de forma similar al comporta- miento de los hubs en la vida social (Barabási, 2002), un enlace en- tre dos personas no promueve necesariamente una interacción real
  • 78. entre ellos. La prioridad de relación es con aquellos pocos que son recíprocos, más allá de la densa red de followers o amigos que se pueda tener, en muchos casos insignificante a nivel de interacción. 5. La economía de la sociedad de la información requiere más que nunca apertura, descentralización, conectividad y agregación a tra- Un radar para producir en el postdigitalismo vés de nichos y en ese camino están trabajando todos los actores. Según Jarvis (2009), los tres recursos de creación de valor de los medios 2.0 son: revelación (encontrar el contenido correcto), agre- gación (distribución por la mayor cantidad de canales posibles) y plasticidad (la capacidad de que los contenidos sean extendidos a través de mashups). Quien más debe tomar en cuenta esta tendencia es la industria periodística. Una sociedad democrática necesita periodismo, pero esto no es sinónimo de periódicos impresos. El problema está en el hardware, no en la producción de contenidos. Si sumamos sus versio- nes impresas y digitales, el número de lectores de periódicos crece año tras año, lo cual anula el argumento de la muerte de la prensa escrita. Desde la masificación de la banda ancha, las noticias en Inter- 76 net son para muchos usuarios la principal fuente de información. El caso es que la prensa debe adaptarse a un nuevo tipo de lector que geekonomía no consume diarios impresos. Un dato relevante: en 1964, el 81% de los norteamericanos adultos leía periódicos. En 2007 lo hacía sólo el 50%. Esta disminución del consumo de prensa en papel en el refe- rencial mercado norteamericano es mucho más grave en los jóvenes de entre 18 a 24 años. En 1970 era el 73% de este grupo etario y en 2007 el 36%.6 A pesar de que nadie duda de la crisis del ecosistema periodístico y de su necesidad de adaptación a la creación de valor mencionada por Jarvis (2009), son las empresas tradicionales (en su formato web) las que lideran ese cambio de actitud de consumo.7 Según el Departamento de Trabajo de Estados Unidos, entre 2001 y 2007 el empleo en la industria de la prensa y los medios masivos cayó un 13%. Pero la crisis afecta mucho más al formato tradicional y al empleo que a los contenidos generados en las redacciones, que sigue aumentando en volumen y en cantidad de lectores.8 Junto a las tendencias descritas, en este capítulo se propone un breve análisis de la economía de la Web, y posteriormente un re-
  • 79. paso rápido por sus productos y empresas más relevantes. El texto que sigue está atravesado por una idea central: los medios se recon- figuran con la convergencia, el mestizaje y la evolución orgánica, proponiendo una renovada conversación, que va más allá de blogs, redes sociales, wikis y otro tipo de formatos colaborativos. El cono- cimiento social nace desde el pensamiento público y la conversación derivada suele adaptarse a las prácticas de interacción dominantes, intentando evitar el ruido. Por eso no se trata de comprometerse con los productos o formatos, sino de analizar su evolución en pers- pectiva y en contraposición a lo efímero de las modas de consumo. Dado que su dinámica de consumo, lógica económica y perspecti- vas de futuro se pueden transpolar a toda la Web social, observaré brevemente algunos aspectos de cinco plataformas paradigmáticas: Google, Facebook, Twitter, Craigslist y Amazon. Por último analizaré el debate sobre la muerte de los blogs. capítulo 3 1. 2010 no es 2001. La economía de la participación evitará una nueva burbuja Desde la irrupción de Napster en 1999 la idea de los portales 77 web con contenidos propietarios, centralizados y unidireccionales comenzó a perder fuerza. Como señalé en el capítulo 1, la primera geekonomía aproximación masiva al fenómeno peer to peer y a los contenidos generados por el usuario significó el comienzo del cambio de pa- radigma de un siglo de administración centralizada de la industria cultural, con sus empresas intermediarias decidiendo qué publicar. Es clave comprender que la segunda ola de empresas de Internet, la ola Web 2.0, es muy diferente a la primera: millones de personas participan hoy en la Red con una calidad de conexión notoriamente mejor y en una comunidad mucho más interactiva que la de 2001. Ya no se trata de consumir sitios construidos up-down con informa- ción empaquetada en formato broadcasting, sino que el consumo dominante es bottom-up, con contenidos generados por los usua- rios para la propia red. Urstadt (2008)9 señala que a fines de esta primera década del siglo xxi existen algunas variables de burbuja financiera similares a las que precedieron a la gran crisis de 2001. Describe las nuevas empresas basadas en Internet como financieramente ineficientes,
  • 80. con una política de crecimiento rápido y desproporcionado a su ca- pacidad y volumen y con una inestable estrategia central basada en construir la masa crítica de usuarios y esperar que el dinero lle- gue en algún momento (con una IPO, con la integración de capital riesgo, con venta de anuncios o de acciones u otros mecanismos). Urstadt considera que los usuarios de las redes sociales están con- Un radar para producir en el postdigitalismo centrados en las conversaciones y no pendientes del marketing. Esto quita eficiencia al entorno publicitario de estas plataformas. Para más datos véase el estudio de caso de Facebook.10 La red social más utilizada y de mayor crecimiento del último trienio posee más de 300 millones de usuarios activos en todo el mundo (datos de no- viembre de 2009 de la propia compañía)11. Facebook se convirtió en la segunda gran puerta de entrada a la Web, después de Google.12 Microsoft compró en octubre de 2007 el 1,6% de la empresa en 240 millones de dólares, lo que le daba una valuación estimada en el momento de la transacción de 15.000 millones de dólares. Dado su enorme crecimiento desde 2007 hasta hoy, su valor es un misterio, pero multiplica varias veces esa cifra. Su relevancia en la Internet ubicua de la segunda década del siglo xxi es incalculable. Sin em- bargo, lejos de dar ganancias,13 ha perdido 150 millones en 2008 y 78 vive de la constante financiación que recibe. Aún le cuesta conso- lidar su modelo financiero y diseñar un revenue atractivo. Cada vez geekonomía que quiere capitalizar la información de los usuarios, éstos se que- jan y obligan a la empresa a dar un paso atrás (su aplicación Beacon y la modificación de los términos de uso en 2009 fueron dos gran- des frustraciones). Los usuarios ven Facebook como un espacio para conversar con sus amigos, sin distracciones. Vogelstein (2009)14 cree que el éxito de Facebook depende de su habilidad para comprender el arte del comportamiento de los públicos objetivos. Pero el análisis es parcial si no se analizan tres variables consoli- dadas desde la explosión de la burbuja de Internet en 2001: a) A diferencia del período 1994-2001, la Web es el medio domi- nante de socialización para los jóvenes, lo cual dibuja un escenario y un tipo de interacción inexistente hace una década. Este escenario facilita y amplifica las posibilidades de aproximación al público ob- jetivo por parte de las empresas. Las redes sociales son la actividad en la Web de más rápido crecimiento a nivel de usuarios. Además,
  • 81. las redes sociales móviles toman impulso para fortalecer el mercado de la inteligencia colectiva, incorporando ubicuidad a la práctica so- cial. Así, la Web social se torna disponible en todos los dispositivos, con un ancho de banda con escasas limitaciones técnicas y varias generaciones de consumidores implicadas full-time. Esta consolida- ción definitiva de la participación hace que las nuevas empresas de Internet no se preocupen tanto por sus modelos de negocio como por la transformación de sus aplicaciones en plataformas socia- les colaborativas y de uso masivo. Parecen repetir la lógica de fun- cionamiento de la primera era de la Web, pero el mercado es muy diferente. El foco está centrado en el crecimiento viral. Después de la crisis de 2001, las nuevas ideas en la segunda generación Web no eran bienvenidas si no existía un claro modelo de negocio, pero no es así como funciona la economía de la Red. No fue así como se con- solidaron Google, Facebook, YouTube, Wikipedia, Twitter, Blogger o Craigslist, por nombrar sólo algunas de las plataformas más exitosas. capítulo 3 La prioridad siempre fue crear un buen producto. Si consiguen sobre- vivir financieramente, pensar en cómo hacer dinero es considerado una distracción porque sin usuarios no podrán crecer en el corto plazo y en la Web el dinero sigue a los consumidores. 79 b) Según Lacy (2008), en el primer ciclo Web el éxito no era evalua- geekonomía do en revenue, sino que el objetivo principal era cotizar en la Bolsa. Por esto la crisis surgió en el Nasdaq, con cientos de empresas coti- zadas sin haber podido generar ganancias y sin un claro modelo de negocio. Antes de la explosión de la burbuja, más de 1.000 empre- sas tecnológicas se habían vuelto públicas. Como ejemplo: en 1999, 270 se hicieron públicas con inversión de capital riesgo; en 2006, solamente 57. Según Lacy (2008), la economía americana opera ha- ciendo limpieza cada cierto tiempo.15 Pero de las cenizas del primer ciclo Web surgieron las empresas más rentables y las que transfor- maron el horizonte industrial de la geekonomía. En la segunda ola, la estrategia cambió desde el aprendizaje. Éste es un gap entre ge- neraciones de emprendedores basado en la mala experiencia y que consolida la actual economía de la Web y la aleja de una burbuja similar a la de 2001. El momento de hacerse público se retrasa el mayor tiempo posible hasta que la empresa sea sólida, tenga una masa crítica de usuarios muy potente y haya construido su modelo de negocio. De hecho Facebook aún no cotiza en el Nasdaq.16 Una
  • 82. vez lograda su consolidación, es la empresa –y no Wall Street– la que pone las condiciones para su apertura al mercado financiero. El ejemplo más claro fue la exitosa IPO17 de Google en 2004, que diseñó su propia estrategia, rompió las normas del mercado bursátil y has- ta provocó un pequeño boicot de algunas instituciones financieras. Un radar para producir en el postdigitalismo c) Los costes de crear una aplicación y sostener una startup web son mucho menores de lo que eran antes de 2001.18 La reducción de gastos por consumo de ancho de banda, almacenamiento de datos en la nube y derechos de uso de software ha sido enorme, lo cual disminuye el riesgo de iniciar un proyecto y la dependencia de los emprendedores con los fondos de capital riesgo. Durante el ciclo de las puntocom, una de las primeras inversiones que debían realizar las empresas era en servidores, para poder sostener la calidad y escalabilidad de sus plataformas. Esos costes eran fijos y muy altos para empresas con presupuestos acotados, lo cual significaba que un alto porcentaje de los recursos financieros que ingresaban los emprendedores se destinaba a mantener dicha infraestructura. En 2010 esto ha cambiado radicalmente con la consolidación del cloud computing. También se ha reducido el coste de recursos humanos. 80 Emprendedores y programadores trabajan gratis con el afán de arriesgarse por su propio proyecto. Esta práctica ya era habitual en geekonomía la primera ola, pero se ha consolidado en la segunda. Por otra par- te, como en el caso de la salida a Bolsa mencionado en b), algo simi- lar sucede en la estrategia de acercamiento de los emprendedores con el capital riesgo: dada la falta de necesidad de recursos finan- cieros para la primera etapa de los proyectos, las empresas retrasan al máximo la entrada de inversores hasta que sea imprescindible y, entonces, tengan mayor capacidad de negociación. 2. Deconstruyendo el altruismo de Google: ¿un nuevo monopolio en la era post-desktop? Google es la empresa de referencia de la geekonomía postdigital. Desde sus comienzos la estrategia motriz fue actuar distribuidos en la Red. En el capítulo 1 se analizaba el rol creciente del cloud compu- ting en la nueva economía de Internet. A diferencia de otros gigan- tes tecnológicos, Google ha estado en la nube desde sus comienzos en 1998. En 2005, Adrian Holovaty, una rara y valiosa mezcla de
  • 83. periodista y programador, rastreó el crimen en Chicago con Google Maps y creó el mashup chicagocrime.org. Luego le agregó informa- ción y se transformó en everyblock.com, uno de los ejemplos más interesantes de periodismo de proximidad en Internet, trabajando en quince ciudades norteamericanas. Lo que en cierta forma Ho- lovaty estaba haciendo era trabajar para el sistema distribuido de Google, atrayendo tráfico a sus productos. Sin embargo, y a pesar del modelo de gratuidad y de las dece- nas de aplicaciones productivas que ofrece, el credo fundacional de Google Don’t be evil comienza a ser cuestionado. Su tamaño y am- bición generan desconfianza sobre su reputación de altruismo. El efecto de red de la empresa crea productos interrelacionados cada vez más útiles para el usuario y destruye la competencia, fomentan- do un tipo de monopolio meritocrático.19 Quienes no ven la faceta del mérito en su posición privilegiada, acusan a Google de utilizar capítulo 3 su algoritmo de búsqueda para posicionar mejor sus propios pro- ductos. Esta percepción llega hasta la oficina antimonopolio del Go- bierno Obama, que sigue atenta los pasos del gigante de Mountain View. Antes de que fuera designada jefa antitrust del Departamen- 81 to de Justicia, Christine Varney señaló en una conferencia en 2008: “Google está repitiendo la política expansionista de Microsoft en la geekonomía década de 1990. Comienza a colonizar la emergente nube de Internet abrazando un enorme poder de mercado y potencialmente creando un ecosistema del que los usuarios no podrán escapar”.20 Pero los monopolios suelen ser impuestos política y económicamente, y éste no es el caso de Google, que sigue siendo el mejor espacio en la Red donde encontrar información. Algunos periódicos cuestionan que Google hace mal uso de sus noticias. Mi lectura es que Google les hace el favor de compartir su audiencia. El caso es que las críticas no son ingenuas. Su ambiciosa misión corporativa de “organizar la información mundial y hacerla útil y universalmente accesible” está afectando a muchos intereses. Algunos cuestionamientos son ge- nuinos y basados en una no-deliberada pero peligrosa colonización cultural. Como ex-presidente de la Biblioteca Nacional de Francia, Jean-Noël Jeanneney (2007) plantea sus dudas sobre el proyecto Google Library.21 El cuestionamiento de voluntad hegemónica se puede trasladar a otros proyectos de la empresa. Dado que uno de los valores más preciados de Google es construir una eficiente
  • 84. jerarquía basada en su algoritmo de búsqueda, Jeanneney se pre- gunta cómo diseñará esta biblioteca universal, cómo organizará su jerarquía y si se le dará prioridad a la cultura anglosajona y a los li- bros publicados en inglés. Según Jeanneney, sólo el 3% de los libros publicados en Estados Unidos son traducidos a otras lenguas. Sin embargo, dado los convenios que Google hizo con universidades Un radar para producir en el postdigitalismo norteamericanas para digitalizar sus bibliotecas, la mayoría de estos textos serán en inglés. Pero Google es una empresa norteamericana y no tiene por qué actuar de forma equitativa con otras lenguas o consultar a otros estados soberanos para cumplir con su misión corporativa. Por otra parte, la debilidad del argumento de Jeanne- ney se demuestra en el radical cambio de posición de la propia Bi- blioteca Nacional francesa al anunciar en 2009 un acuerdo con la empresa para digitalizar su fondo.22 Otros cuestionamientos están basados en luchas por cuotas de mercado. El lobby industrial está actuando con empeño. Google tiene un creciente poder que afecta a grandes actores de la intermediación, especialmente a la industria de medios tradicionales y, con su lucha por la neutralidad de la Red, a los operadores de Internet. También afecta a los intereses de otras empresas líderes como Microsoft o Yahoo! 82 Microsoft intenta seguir el ritmo de Google, pero le resulta difícil. geekonomía Su vocación es reconstruirse para la era post-desktop que Google lidera con nitidez. En un mercado donde el ganador se lo lleva todo, al recién llegado Bing le falta un largo recorrido para poder compe- tir en el terreno de la búsqueda. Por si esto fuera poco, en julio de 2009 Google decidió emprender un ataque directo a la compañía de Redmond anunciando el lanzamiento de Chrome OS, un sistema operativo abierto que espera competir abiertamente con el recién lanzado Windows 7. Además, Google abrió una nueva área de nego- cios que ofrece servicios en la Red a las empresas, como hace años posee Microsoft o IBM. La confrontación no puede ser más evidente. A sabiendas de la posición dominante que está adquiriendo Google más allá de su plataforma principal, Microsoft y Yahoo! anunciaron en julio de 2009 un preacuerdo de diez años de sociedad. A falta de una aprobación de los reguladores antitrust,23 esta sociedad podría beneficiar a los usuarios alentando una mayor competencia a nivel de productos en la nube. Es interesante comprender qué está pasan- do a nivel empresarial y cómo evolucionará este juego de ajedrez,
  • 85. porque cada movimiento de piezas de los grandes actores afecta a todo el ecosistema. Por ejemplo, las erróneas tácticas empresariales de Yahoo! y su ex-director ejecutivo Terry Semel dieron mayor rele- vancia a Google. El dato más impresionante es que en 2002 Yahoo! ofreció 3.000 millones de dólares por la adquisición de Google. Los de Mountain View querían 5.000 millones. Esta cifra le pareció exa- gerada a Terry Semel y su equipo directivo y la operación no se con- cretó. Siete años después, Google es mucho más poderosa que su competidor y su valor de mercado la ubica entre las empresas más grandes de Estados Unidos. 3. Plataformas de Web social: el poder de la viralidad Es secundario ponerle nombre y apellido a la evolución de la Web social. El ecosistema de las redes sociales generalistas se ha conver- tido en una multiplataforma contenedora muy atractiva para las di- capítulo 3 ferentes generaciones de nativos y migrantes digitales, dispuestos a adoptar y popularizar en el período de meses nuevos desarrollos si se les ofrece una mejor interacción. En base al principio de el gana- dor se lo lleva todo, cuanto más crece una red social, su comunidad 83 se fideliza con mayor rapidez, ya que todas las personas con quienes se desea interactuar están allí. Esto es lo que ha sucedido con los geekonomía ejemplos que analizaré a continuación. 3.1. Facebook: un sistema operativo social. Twitter: la nueva joya de la cultura snack Facebook y Twitter están de moda. En el último año he leído más de una decena de artículos24 que hablaban sobre la transformación radical que estas plataformas suponen. En 2007 me vi envuelto en una pequeña polémica25 en torno a la productividad de Twitter. Más allá del valioso espacio conversacional y productivo que ofrecen, vale hacer matices sobre ambas. ¿Significan algo importante en tér- minos de transformación de prácticas de alfabetización digital y consumo en la Web? Sí y no. Sí. En el caso de Facebook, la construcción de identidades reales y comunidades de acceso limitado a nivel de intereses o entornos fue un cambio significativo. Hace pocos años la comunicación do-
  • 86. minante vía red (excepto en el correo electrónico) era impersonal, anónima y con un alto porcentaje de identidades ficticias. Ese tipo de interacción está en vías de extinción con la aparición de redes sociales como Facebook. Se trata del paso del anonimato a la trans- parencia. La definitiva digitalización de la identidad. En ese sentido, MySpace perdió fuerza por problemas de perfiles falsos, adolescen- Un radar para producir en el postdigitalismo tes que no lo son y falta de transparencia a nivel de interacción. Diseñado en 5 idiomas y más de 60 en desarrollo, Facebook se está convirtiendo en el hub de la vida en línea de muchas personas, un sistema operativo social y un gran contenedor de aplicaciones que se utiliza hasta como nueva cuenta de correo electrónico. Según el ranking de Alexa de noviembre de 2009, ya ocupa el segundo lugar entre las plataformas más visitadas del mundo, por detrás de Google y por delante de Yahoo!. Open Stream API y Connect han sido pasos relevantes para compartir la filosofía dominante en la Red: actuar distribuido. Facebook Search es el próximo paso en esta estrategia para ganarle espacio al gigante Google, que ha respon- dido en el segundo semestre de 2009 con la aparición de Google Wave. Esta competencia es muy beneficiosa para los usuarios ya que ofrece más innovación y mejores condiciones de uso. En la línea de 84 la necesidad y el deseo de las personas por comunicarse fácilmente, quizá el próximo paso de la empresa de Palo Alto sea más profundo: geekonomía transformar Facebook en una plataforma que promueva la trans- parencia radical, acumulando tanta información de los miembros de la comunidad que permita tener un perfil bien acabado de ellas y gestionarlo de manera más eficiente y productiva como vidriera social (la economía de las intenciones; Searls, 2006). No. El caso de Twitter es menos relevante en la transformación narrativa de la Red, aunque puede que evolucione hacia algo ma- yor. Es una aplicación pequeña comparada con la gran plataforma que se construyó alrededor de Facebook y, originalmente, la inno- vación consistió en trasladar gratis a la Red el ecosistema existente del text messaging de los dispositivos móviles. La información en Twitter circula a una mayor velocidad que en otros canales como la blogosfera y con menor esfuerzo de producción: sólo 140 caracteres de producción y consumo snack. Aunque podrían parecer una limi- tación a la hora de expresarse con solvencia, el snack-o-tainment26 tiene una gran influencia en esta dinámica expresiva, ya que los
  • 87. usuarios disfrutan más del consumo de pequeñas dosis de informa- ción. Igarza (2009) se refiere a este consumo cultural de retazos de información como “burbujas de ocio”. Es interesante analizar cómo influye en Twitter la innovación basada en el aporte de los usuarios (Tuomi, 2002). Twitter es algo diferente a lo que fue en sus orígenes en 2006. El usuario final se ha apropiado del producto, introduce nuevos usos y modifica su estructura. Lo mismo sucede con los ter- ceros desarrolladores, que han aportado innovación al diseño de la plataforma. Unas veces Twitter se utiliza como fuente de informa- ción primaria (alguien twittea un hecho informativo en tiempo real y es en esta plataforma donde somos informados del mismo). Otras veces se utiliza como seguimiento de un evento en vivo a través de los #hashtags. También funciona como correo electrónico a través de las menciones o los mensajes privados. Se trata de una práctica social más similar al mundo real que Facebook, porque habitual- mente uno no dialoga exclusivamente con amigos, sino que se in- capítulo 3 volucra en múltiples conversaciones con lazos sociales débiles, con pequeñas comunidades de interés y hasta con desconocidos. Dicho esto, Facebook y Twitter no representan un cambio tan sus- 85 tancial, como en su momento representaron el correo electrónico, la Web y más recientemente Napster o Google. Ambas plataformas, geekonomía por ahora, significan solamente un paso en el proceso evolutivo de la Red y es conveniente relativizar sus logros. Si se comparan am- bas construcciones de producto, no existe investigación detrás que soporte a nivel de laboratorio una profunda transformación o inge- niería social compleja, un algoritmo poderoso como el de Google ni nada similar. La historia de la creación de TheFacebook (Mezrick, 2009) de la mano de Mark Zuckerberg y Eduardo Severin como es- tudiantes de Harvard sigue el típico método de ensayo y error que hacen todas las startups web, donde las ideas son simples y existen cientos de pequeñas decisiones empresariales acertadas y trabajo duro a nivel de programación, diseño y construcción de equipo para hacerlas realidad exitosamente. Desde que TheFacebook nació en exclusiva para la comunidad universitaria de Harvard en noviembre de 2004, los tiempos se aceleraron. En pocos meses el 85% de los estudiantes de grado de esta universidad se habían registrado en la aplicación. A nivel de construcción de empresa, Facebook sigue el modelo Googleplex y allí observamos una transformación del dise-
  • 88. ño de empresa industrial del siglo xx digno de estudio en cualquier MBA. Con el añadido de que todo esto sucede en una empresa diri- gida por un joven de venticinco años, donde el promedio de edad de sus trabajadores es también de venticinco años. Sus nuevas ofici- nas son un pequeño college a pasos del campus de Stanford Univer- sity. Un alto porcentaje de sus trabajadores viven a poca distancia Un radar para producir en el postdigitalismo a pie de sus oficinas y se alimentan, juegan y hacen vida social en la propia empresa, como en un college. En el caso de Twitter, Jack Dorsey tenía en mente un sistema tipo SMS vía Internet antes de 2000, pero en ese momento los dispositivos móviles no ofrecían co- nectividad a la Red. Lo más parecido a un smartphone era Blackberry y no funcionaba bien para este tipo de aplicaciones. El método de ensayo y error, perseverancia, y mejores capacidades técnicas de los dispositivos hicieron que Twitter comenzara a crecer en 2007 y que compañías como Comcast y Dell empezaran a utilizarlo para su comunicación institucional, o la Cruz Roja lo utilizara como un sis- tema de mensajería para emergencias. Pero, como ya ha sucedido con Second Life y otras modas, puede que Facebook y Twitter sean eclipsadas por nuevas redes sociales que –en el momento que el lector lee este libro– están siendo creadas por un grupo de geeks en 86 las universidades norteamericanas. geekonomía A pesar de ello, Facebook tiene todas las de ganar para consolidar- se como red social generalista marco. En ese entorno, uno puede ha- cer todo lo que desea a la vez, inclusive postear para un público más fiel o, como en el caso de MySpace, convertir la interfaz en un símil de la habitación de un adolescente: caótica, con un diseño casual e invadida de carteles de sus ídolos (Boyd, 2008).27 Es el ideal de red so- cial: un espacio íntimo convertido en sala de ciberencuentros glocal. 3.2. El fenómeno Craigslist o cómo burlar todas las normas de desarrollo web y ser líder El caso de Craigslist28 es un tanto atípico y representa el paradigma del nuevo socialismo KevinKellyano que se analiza en el capítulo 1. Kelly (2009) afirma que Craigslist comenzó teniendo una pequeña audiencia regional en San Francisco en 1995 y pronto se convirtió en un tesoro nacional, operando con escaso control, muy pocos tra- bajadores y sin fondos públicos. Craigslist.org no son tan sólo unas
  • 89. populares páginas amarillas gratuitas. Aunque Craig Newmark, su creador, la autodefina como una comunidad de servicios, es un fe- nómeno de red social sin precedentes. Líder absoluto en Estados Unidos en las transacciones face-to-face de todo tipo vía Web, con más de 47 millones de usuarios únicos cada mes (una quinta parte de la población adulta de ese país). Según datos de Alexa de no- viembre de 2009,29 ocupa el puesto 33 en la lista de sitios más visita- dos a nivel mundial y el puesto 8 en Estados Unidos, lo cual significa que en su país posee más tráfico que eBay y Amazon, con la diferen- cia de que estas empresas tienen juntas más de 36.000 empleados (Wolf, 2009) y Craigslist solamente 30 personas en plantilla, lo que demuestra una vez más el poder de la inteligencia colectiva.30 Juan Pablo Puerta, ingeniero de la empresa y uno de sus exclusivos de- sarrolladores afirma en un comment de un artículo31 de digitalismo. com: “Dirigir una empresa de Internet o (que para el caso es casi lo mismo) ser el arquitecto de un software social es muy similar capítulo 3 a dirigir una campaña política: tienes que darle al usuario lo que pide porque el exceso de oferta hará que simplemente se vaya si no encuentra la forma de interactuar contigo y de modelar el servicio a sus necesidades. Lo que me atrajo de Craigslist al principio no 87 es tanto su filosofía ácrata y casi no comercial, sino el hecho que era la primera empresa que he conocido en tres lustros en Internet geekonomía que incorporaba al usuario en el proceso productivo. La ausencia de product managers, middle managers o directores se suple por el simple hecho de que se abren la mayor cantidad de puentes con los usuarios, con los que se discute cualquier aspecto del sitio que vaya a afectarles, desde lo que se cobra por categorías (para lo cual re- querimos de su consentimiento) hasta las estrategias de expansión internacional.” Craigslist es el portal más popular de Estados Unidos en la bús- queda de empleo, alquiler de pisos, oferta de roommates, o cual- quier cosa que se quiera comprar o vender con rapidez. En este sen- tido, es uno de los principales culpables de la crisis del centenario modelo empresarial de anuncios en la prensa escrita en su país de origen. Una investigación sobre clasificados en línea de Pew Inter- net & American Life Project (2009),32 revela que el 49% de usuarios de Internet en Estados Unidos han utilizado sitios de anuncios como Craigslist, comparado con el 22% de 2002 y en detrimento de la pu-
  • 90. blicidad en la prensa tradicional. Por si fuera poco, se trata de una plataforma particular en el universo Web 2.0 ya que mantiene sin cambios desde 1999 su controvertido diseño33 de interfaz y no per- mite tagging, ni relaciones entre usuarios, ni se puede navegar fácil- mente entre las imágenes. Además la búsqueda no es eficiente y la información es efímera ya que es eliminada en pocos días. Craigslist Un radar para producir en el postdigitalismo fue portada de Wired Magazine en septiembre de 200934 con un po- lémico artículo donde Gary Wolf critica la estrategia empresarial del proyecto, más allá de su contrastado éxito. Para Wolf, la empresa se muestra displicente con el ingreso de nuevos inversores, y hasta con la innovación de la interacción y el diseño de la interfaz. Wolf considera que la plataforma es contraria a todos los principios de usabilidad web y sentido común, mostrando “un absoluto desdén por los usuarios y por las reglas del negocio”. Sin embargo Craigslist es cada día más líder en su segmento y no tiene competencia. Pue- de que este modelo caótico sea la base de sus buenos resultados económicos con unas poquísimas categorías de anuncios pagos en algunas ciudades de Estados Unidos y más del 90% de anuncios pu- blicados por los usuarios de forma gratuita. Según cifras extraofi- ciales35 (la compañía no ofrece sus números a la prensa), Craigslist 88 podría ganar en 2009 unos 300 millones de dólares. Por otra parte, la percepción de la empresa es que los usuarios no están pidiendo geekonomía cambios. Para Wolf la plataforma está pasada de moda en muchos aspectos y cree que su público objetivo demanda cambios. El artículo de Wired también profundiza en la personalidad de su creador Craig Newmark, que se define a sí mismo como el Forrest Gump de Inter- net, por su aislamiento y su movimiento a contracorriente de las tendencias empresariales de las redes sociales. Según el artículo, Newmark procura mantenerse al margen de cualquier responsabili- dad ejecutiva en la empresa y su mayor dedicación es hacia la aten- ción al cliente. Pero la principal virtud de Craigslist es que nació y se mantuvo respetando a rajatabla algunos principios clave en el diseño de las redes sociales: sobre todo, escuchar a los usuarios. Pero también contar una historia, definir lo que no es el producto, empezar lo más rápido posible sin optimizar prematuramente, hacer un proyec- to con el número justo de personas y no pretender crecer de forma vertiginosa porque, sin inversión, se puede morir de éxito. Como
  • 91. señala Pisani (2009): “Craigslist tiene dos ingredientes que siempre triunfan en California: pragmatismo e ilusión comunitaria posthip- pie”. Lo más atractivo de su modelo empresarial es precisamente la carencia de un modelo y la reafirmación de que no existen patrones únicos de desarrollo. Aunque parezca que haya reglas precisas para el éxito, no las hay, y existen decenas de estrategias diferentes de empresas que llegaron a ser populares entre sus audiencias y otras que, siguiendo el mismo camino, han fallado. El usuario siempre es el que tiene la última palabra y en el caso de Craigslist ha sido su principal motor de aceptación. User-driven innovation nuevamente. Si el producto funciona tan bien y a tan bajo coste, ¿por qué cam- biar? Mientras, todos seguimos disfrutando a coste cero de la enor- me productividad de la lista de Craig. 3.3. Amazon. Acceso a la biblioteca universal en 60 segundos capítulo 3 Desde sus orígenes en 1995, Amazon.com ha estado creciendo de forma progresiva y se ha ido diversificando sin verse afectada por la burbuja de 2001 ni por otras crisis que se sucedieron en paralelo. Como bien señala James Marcus (2004) en su trabajo sobre los pri- 89 meros años de la empresa de Seattle, su objetivo inicial era conver- tirse en un destino para los lectores más que en una tienda de libros geekonomía en línea. Y aunque fueron sus propios empleados quienes hicieron las reseñas iniciales de su catálogo de libros, Amazon ha crecido tanto que se ha convertido en el referente editorial más importan- te, así como en el principal retailer vía Internet en Estados Unidos. En 2008 vendió cerca del 15% de todos los libros comprados en ese país y posee el 80% del mercado mundial de librerías virtuales. Actualmente Amazon extiende su dominio a Amazon Web Services y Kindle. De vender libros pasó a ofrecer todo tipo de productos y luego a vender espacio en la nube con un desarrollo comercial que sirve de referencia al mercado. Desde 2007 produce hardware para utilizar con su tienda virtual. Es inevitable trazar un paralelismo en- tre iTunes-iPod/iPhone y Amazon.com-Kindle. Como se analiza en el capítulo 1 en la transformación de los distribuidores e intermedia- rios, los editores deben encontrar modos innovadores de distribuir la palabra escrita. En eso está Amazon. Su Kindle se introdujo de forma significativa en el mercado36 con la misión de tener todo libro editado disponible en Kindle en 60 segundos. En junio de 2009 la
  • 92. empresa anunció acuerdos con universidades y periódicos,37 lo cual prueba su estrategia de expansión. No se puede descartar que en el futuro Amazon trabaje como editor, o mejor dicho que suprima la figura del editor, ya que puede ser a la vez comprador y vendedor de un libro, sin otra intermediación que la negociación directa con el autor. Un radar para producir en el postdigitalismo 4. La crisis del formato blog. La dispersión de la atención de los usuarios38 Si tuviera que trabajar de consultor o diseñador de blogs39 diría que el éxito en su construcción radica en cuatro componentes bá- sicos: foco, relevancia, autenticidad (no escribir como lo harían en un departamento de marketing) y frecuencia o persistencia. Ésa es la fórmula que utilizamos con Carlos Scolari para construir digita- lismo.com40 y nos sentimos muy gratificados con dicho esfuerzo. La Web social facilita el copia y pega, lo cual significa que se leen y replican las mismas cosas en múltiples canales. Entonces, quien aporta foco, relevancia y persistencia destaca sobre el resto. Existen pocas técnicas para ser un buen blogger: escribir opiniones origi- 90 nales con un punto de vista claro; enlazar con los recursos origi- nales dando crédito al autor; postear con gran frecuencia, usar los geekonomía enlaces permanentes para hacer las entradas más accesibles a los motores de búsqueda y enlazar con otros blogs. Pero esta tarea es muy difícil y lleva tiempo. En esta dificultad radica la crisis del for- mato, como bien señala Charles Arthur (2009) por su propia expe- riencia como editor de tecnología en The Guardian.41 Aún haciendo uso de sindicadores RSS, no hay tiempo de leer tantas bitácoras. Hay demasiadas. La saturación conduce a los usuarios y al mercado hacia nuevos horizontes. Entre 1997 y 2005 la cultura blog fue una marca pronunciada de acné en la cara de un adolescente llamado World Wide Web. Y sobre todo, la primer tecnología invisible en la Web. De forma progresiva, sus autores penetraron en los medios mainstream norteamericanos y comenzaron a hacerse un hueco en las convenciones políticas, en los debates presidenciales y en las redacciones.42 Pero la evolución continúa: las redes generalistas son un paso más allá en los blogs textuales y Flickr es un paso más allá del fotoblog. No es necesario eliminar ningún formato. Mejor es estar en todos los sitios posibles esmerándose por conseguir visi-
  • 93. bilidad y atención. Todos los formatos de la escritura colaborativa cumplen con la premisa de que el mercado son conversaciones. En cualquier caso, serán herramientas exitosas las que logren atender con eficiencia las necesidades de comunicación de los usuarios, po- tenciando la creación colectiva, la cultura del remix y la producción y el consumo desde abajo hacia arriba. Uno de los principales autores y expertos de la blogosfera de ha- bla hispana, José Luis Orihuela (2009), propone un decálogo43 sobre lo que es (y no es) un blog. Se trata de un punto de partida para debatir la crisis del formato. Me quedo con 4 ideas centrales de su decálogo. Según Orihuela: 1) los blogs no son un género, sino un medio, y es el propio medio el que define el lenguaje y el formato; 2) la capacidad de influencia de los blogs está mediatizada por la blogosfera en la que se inscriben. Aunque existen excepciones, no se puede exigir a los autores una influencia similar a la que ofrecen capítulo 3 los medios masivos; 3) las referencias cruzadas hipertextuales cons- tituyen uno de los ejes articuladores de la conversación en la blo- gosfera y de la cultura de los blogs. O sea que no se puede medir la participación en la blogosfera en función de los comentarios de un 91 blog, sino que la interrelación es más compleja; 4) la relación entre viejos y nuevos medios se rige por una dinámica de acumulación y geekonomía complementariedad, y no por una de sustitución. Como bien señala Scolari (2009) en su análisis de las narrativas transmediáticas, los medios se influyen mutuamente y en esa influencia se transforman en algo distinto. Asociado al punto 4 que señala Orihuela, los blogs están mutan- do rápidamente, y con esa mutación algunos creemos que se con- vertirán en otra cosa (¿e-magazines?) y dejarán de ser cuadernos de bitácora personales con enlaces externos, como en sus orígenes comerciales en 1999. El “fin de los blogs” representa una llamada de atención para un formato que puede perder el ritmo de cambio que proponen los diseñadores de las nuevas arquitecturas de las redes sociales a gran escala. Es evidente que el tipo de escritura en posts sigue siendo una herramienta valiosa y productiva: en mu- chos casos borradores y versiones inacabadas del pensamiento de sus autores. Pero algo ha cambiado. En el período 1999-2005 los blogs eran el gestor de contenidos por excelencia; sin embargo,
  • 94. en 2010 se hace difícil comenzar uno desde cero si se carece de un perfil previo atractivo que permita ganar una mínima masa crítica de usuarios.44 Rosemberg (2009) cree que cuando un autor impor- tante deja de postear y anuncia la muerte de los blogs, solamente transmite su experiencia personal y el ciclo de vida de su blog. Pero cada blogger relevante que desiste de escribir es un nodo menos Un radar para producir en el postdigitalismo en la blogosfera y un comportamiento emergente que no se puede pasar por alto. El ruido existente en Internet como consecuencia de la multiplica- ción de contenidos generados por el usuario y del preferential attach- ment (dada la elección entre dos nodos, se elegirá el nodo más conec- tado; Barabási, 2002) convierte la mayoría de blogs en casi invisibles, y por tanto irrelevantes a la hora de crear opinión pública, con lo que el crecimiento y la visibilidad se decantan hacia los hubs.45 Vale tener en cuenta dos tipos de fenómenos orgánicos que se configuran en paralelo pero poseen diferentes dimensiones. Por un lado, la evolución de la escritura y el desarrollo de las redes tecnoló- gicas. Por otro, los productos coyunturales y las modas de consumo. 92 Como afirmo al comienzo del capítulo, ya no existe retroceso posi- ble en la producción de contenidos generados por los usuarios y en geekonomía el egocasting. En cuanto a las modas de consumo mediático, todo es posible. Sufrirán los entornos que ofrezcan prácticas comunica- cionales que no consigan adaptarse con celeridad a las nuevas de- mandas de consumo. Hablo de la reorganización de la conversación social y la noción de amigos bajo las redes sociales débiles. Si la transparencia y la autenticidad en las redes sociales se con- solidaron con los blogs y se transmitieron a otras redes sociales para convertirse en la norma, Facebook aceleró el proceso. Pero he ob- servado un comportamiento emergente que no es trivial desde que tengo mi cuenta en Facebook: posteo en mi blog, copio y pego en Facebook el contenido y recibo más comentarios en mi cuenta de Facebook que en el blog de donde proviene el texto original. La conversación en Facebook es más informal, y por ende, se presta a un mayor diálogo que en los comments de los blogs. Otra conducta relevante es la que se refiere a la conformación de las redes de amis- tad. En las redes pre-Internet los lazos tenían un componente físico
  • 95. y el entorno era totalmente condicionante. Por eso, emigrar resul- taba traumático, ya que se rompían todos los nodos constituidos y no había plataformas disponibles a distancia para reconstituirlas. El correo postal era lento y trabajoso. En cambio, las redes sociales en Internet nos unen y se convierten en un depositario de nuestra historia personal. Las personas siempre fueron conscientes de sus amigos, pero ahora saben mucho de los amigos de sus amigos y eso genera un proceso social complejo. Y en esa práctica, los blogs tie- nen escaso recorrido porque son herramientas de producción indi- vidual, donde la participación colectiva se limita a los comentarios. Más allá de la facilidad de publicación que tienen los autores, el funcionamiento de los blogs no es muy diferente al de las cartas de lectores de un medio gráfico tradicional, sólo que sin edición. Aquí está la clave del análisis sobre el futuro de los blogs: su incapacidad para crear redes en condición de igualdad sin la obligación de ges- tionarse desde un nodo dominante. capítulo 3 Boutin (2008)46 anuncia malas noticias para los aspirantes a blo- gueros: “You’re too late”. Boutin interpreta que escribir un blog ya no es la idea brillante de unos años atrás y que si bien la blogosfera 93 alguna vez fue un espacio de frescura, autoexpresión y pensamiento independiente, hoy se ha visto inundada por un mar de contenidos geekonomía de pago, marketing semioculto y amateurismo sin vocación de cali- dad. Por otra parte, y como ya se dijo haciendo mención al decálogo de Orihuela (2009), las referencias cruzadas entre blogs (y no los comments) son el eje articulador de la conversación en la blogosfera. Sin embargo estos comentarios siempre han sido una herramienta valiosa de interacción entre el autor y sus lectores. El problema es que en 2010 los comments han perdido la batalla del spam, promue- ven un espacio autista alejado de la línea argumental que el autor propone en su post, se han mudado a otras plataformas (como seña- lé en el caso de Facebook) o son simplemente irrelevantes. Los blogs individuales se están convirtiendo en un tipo de plata- forma ruidosa. La sencillez de creación a través de tecnologías in- visibles para el autor fueron esenciales en su éxito inmediato. Para diseñar un blog ni siquiera era preciso conocer HTML, el código estaba oculto y el permalink constituía una página web individual, una unidad de consulta permanente. Pero a diferencia del período
  • 96. temprano de la Web 2.0, las variables tecnología invisible y facilidad de publicación hoy son comunes a todas las plataformas colabora- tivas. O sea que no existe el componente técnico diferencial de sus primeros años. En la lista de los principales blogs de Technorati o Google Blog Un radar para producir en el postdigitalismo Search, los líderes son el resultado de un esfuerzo colectivo, redes de blogs escritos por profesionales o e-magazines que lo único que mantienen de la filosofía blog es su formato y metaestructura. Más allá de estos casos particulares de producción profesional o semi- profesional, los blogs están perdiendo fuerza por varios motivos, entre los que destacan: a) Cierta saturación del formato por carencia de actualización y muerte súbita de muchos de ellos. b) El esfuerzo de calidad o creatividad que requiere lograr la atención diaria de los lectores frente a la competencia que propo- nen formatos de interactividad menos trabajosos como Facebook o Twitter. En este sentido, la arquitectura de los blogs fomenta que su consumo se base exclusivamente en la lectura de los últimos posts, convirtiendo los archivos en un espacio inexplorado para los nue- 94 vos lectores. c) La creación desmesurada de splogs (blogs falsos que en reali- geekonomía dad son aplicaciones de spam), creados de forma automática para obtener rédito de los servicios de Google AdSense o Adwords a tra- vés del ascenso en las posiciones de los motores de búsqueda y/o de una exagerada política de enlaces hacia otros splogs. También es justo señalar que este fenómeno está perdiendo fuerza debido al esfuerzo de desarrollo de las propias plataformas de blogs. d) La pérdida de jerarquía de los blogs en el algoritmo PageRank de Google, que debe atender un creciente volumen de contenidos generados por el usuario, lo que promueve una mayor invisibilidad hacia estos contenidos. e) Ciertos blogs promueven una dinámica de charlatanería que re- sulta perjudicial para su transformación de nodo en hub. Cada blo- guero tiene derecho a decir lo que se le ocurre; sin embargo, la intras- cendencia de los contenidos y la cita abusiva a otros blogs afecta su lectura, ya que no aportan valor añadido a la conversación social. f) Sunstein (2006) analiza los problemas de la deliberación políti- ca en la blogosfera señalando que se propagan fácilmente errores
  • 97. sin constatarlos, existen múltiples perfiles escondidos y se polarizan los grupos y las opiniones a través de una cámara de eco donde sólo se escuchan quienes tienen pensamiento afín. Si en el debate políti- co comunitario la deliberación es muchas veces una parodia debido a que los opuestos no se escuchan mutuamente, en la blogosfera esta parodia se acentúa. Un estudio basado en la campaña presiden- cial americana de 2004 47 comprueba que la mayoría de blogs no en- lazan con bitácoras de ideas opuestas, desperdiciando la posibilidad de propiciar un verdadero debate público. Analizados 1.000 blogs, el 91% sólo enlazaba con otros de pensamientos similares. En estos últimos diez años, las redes sociales generalistas han evolucionado mucho más a nivel técnico y social. Blogs que se han hecho virales a partir del esfuerzo individual como TechCrunch o Daily Kos 48 son en 2010 exitosas editoriales que poco mantienen del formato original. La mayoría de versiones en línea de los periódicos capítulo 3 tradicionales poseen blogs de sus periodistas estrella. Una de las páginas más visitadas de la versión digital de The New York Times es el blog del crítico tecnológico David Pogue.49 Esto demuestra que la discusión entre medios masivos tradicionales y blogosfera alterna- 95 tiva es una falsa dicotomía. El formato ya se ha estandarizado. Por otra parte, y dado que las generaciones de nativos digitales han geekonomía vivido en Internet con un decreciente consumo de los formatos tra- dicionales de los medios, el truco del marketing de estos medios es proponer productos surgidos desde espacios alternativos de la Web social para poder ganar audiencias en la Web que le son esquivas en sus plataformas históricas. Por último, los blogs han dejado de ser una moda, y en esta di- námica de obsolescencia planificada de aplicaciones de la Web so- cial esto tampoco es una buena noticia para dicho formato. ¿Qué sucederá cuando la construcción de plataformas para el blogging deje de ser un modelo de negocio rentable? Nuevos actores y for- matos producen valor y además permiten la innovación a través de los mashups. El darwinismo digital se encarga de la supervivencia de los más aptos. Evan Williams, creador de Pyra Labs (Blogger.com) en 1999 e inventor del meme blogger, dejó la empresa veinte meses después de que fuera adquirida por Google en 2003 y creó Twitter en 2007. Paradójicamente, hoy Twitter es una de las mayores ame-
  • 98. nazas al formato blog. Es irónico leer a Evan Williams, ex CEO de Blogger y actual CEO de Twitter, decir en 2004 que los blogs “se con- vertirán en el formato por defecto de los websites personales, los cuales serán centrales en las vidas de las personas” (Stone, 2004). La cultura DIY también condiciona la evolución de la escritura Un radar para producir en el postdigitalismo colaborativa. Cuando los usuarios más avanzados no encuentran la herramienta apropiada para desarrollar cierta tarea de comunica- ción, se la inventan o modifican aplicaciones pensadas para fines diferentes. Esto provoca la creación constante de nuevos medios. A mayor velocidad de transmisión de la información vía Internet, mayor capacidad de diseñar formatos multimedia en detrimento de los formatos textuales. Esta variable no es anecdótica en el creci- miento de redes sociales más complejas y con una experiencia de usuario más atractiva. Por otra parte, se debe tener en cuenta el efecto de la Red. El resultado es mayor que la suma de sus partes. Wikis, redes sociales (generalistas o de nicho) y microblogging dan mayores facilidades para la construcción de inteligencia colectiva en tiempo real. 96 El nacimiento de Blogger en 1999 fue una representación más del consumo snack. Pero ha pasado una década. Mejor que una agenda geekonomía en papel es 43things o Google Calendar. Ya no necesitamos escuchar todo el vinilo, en iTunes se puede comprar sólo una canción por 0,99 dólares. Y mejor aún, en Spotify se puede escuchar gratis y sin violar la legalidad. Innovar y reinventarse es la fórmula mágica en la geekonomía. Los primeros usuarios que adoptaron y promovieron la cultura blog también están cambiando su dinámica de consumo hacia un modelo siempre conectados. En este sentido, y como señalé al comienzo del subcapítulo, postear de forma periódica representa un esfuerzo excesivo para ciertos autores, que lo pueden suplir con aplicaciones más sencillas a través de dispositivos móviles que ofre- cen movilidad física más conectividad. En esa filosofía innovadora ya citamos los ejemplos de blogs individuales convertidos en edito- riales con modelos de negocio consolidados con la publicidad. Otro ejemplo de transformación a la inversa es el semanario The Printed Blog, que si bien por problemas financieros tan sólo ha durado un año,50 significó un preaviso de cómo se pueden reconfigurar una y mil veces los modelos de distribución de noticias.
  • 99. Los medios masivos deciden qué exponer y qué ignorar, otorgan- do relevancia a unos contenidos sobre otros, con el fin de conquis- tar la atención de los usuarios y en algunos casos de imponer sus ideas políticas. Con este destacado rol, las empresas que se dedican a crear o distribuir contenidos ganan dinero y poder decidiendo cómo organizar la información a nivel de interfaz. El éxito de los blogs en sus inicios radicaba en romper esa dinámica bajo el poder del nuevo desorden digital (Weinberger, 2007). La idea es dejar de percibir la sobrecarga de información como un problema y tomar de ese inmenso flujo lo que interesa en el momento que interesa, como quien abre el grifo para beber agua cuando tiene sed en vez de guardar el agua previamente en botellas RSS. La idea central del texto de Weinberger (2007)51 es que las limita- ciones físicas organizan la vida de las personas, su acceso al conoci- miento, su forma de hacer negocios y sus creencias. Esas restriccio- capítulo 3 nes físicas de la información analógica no sólo limitan la percepción del mundo, sino que también dan más poder a las personas que controlan las organizaciones responsables de editar la información. La paradoja es que en esa organización los editores tienen aún más 97 poder que quienes producen los contenidos. Según Weinberger, los editores deciden qué exponer y qué ignorar, organizando la in- geekonomía formación de una manera que la desorganiza de otra. Se trata de una construcción de sentido, de una configuración de poder legi- timando unos elementos sobre otros que quedan relegados. Si se cataloga un libro por orden alfabético, no se puede organizar por año de edición, ni tamaño, ni éxito de ventas, ni color. Ése es el histórico papel poderoso del director de un medio o del editor de una colección de libros. En tanto la información miscelánea rompe esa dinámica de poder, permitiendo la edición en la salida y no en la entrada. El análisis del autor es apasionante, porque nos hace entender que la organización de la información (en definitiva de nuestro conocimiento) no se deriva de la organización “natural” del mundo, sino que refleja nuestros intereses y necesidades, constru- yendo creencias y poder. Esas limitaciones físicas de la organización de la información no sólo afectan nuestra percepción del mundo, sino que además dan mayor poder a las instituciones responsables de editar la información.
  • 100. En definitiva, todo lo que sea escritura colaborativa y desinterme- diación mediante etiquetas y múltiples sistemas organizativos es un valor positivo para desbaratar el orden analógico preconfigurado. El postdigitalismo profundiza esa tendencia. La Web social contribuye en esa nueva construcción de poder. Los blogs promovían una se- lección y toma de sentido a gusto del usuario y no exclusivamente Un radar para producir en el postdigitalismo del editor. La organización digital les facilitaba un metaorden que prescindía del papel y su lógica unidimensional. El control cambiaba de manos y pasaba a ser del usuario. Pero todo esto pierde sentido cuando los blogs pasan a formar parte de la estructura mediática tradicional, comparten su filosofía de edición en la entrada y anulan los comentarios, como han hecho muchos periódicos. Así, ciertos blogs retroceden hasta convertirse en un formato tradicional con características particulares (artículos cortos con enlaces externos y organizados en orden decreciente de publicación), pero atendien- do a la misma lógica up-down de la escritura profesional. El debate continuará... 98 geekonomía
  • 101. Cinco ideas principales del capítulo 3 1 Los medios se reconfiguran con la convergencia, el mestizaje y la evolución orgánica, proponiendo una conversación renova- da, que va más allá de la especificidad de blogs, redes sociales, wikis y otro tipo de formatos colaborativos. 2 La transformación narcisista de la Web no es una variable lúdica sino una evolución y un componente vital en el cual cada usua- rio se convierte en un nodo que vive y se autogestiona en la Red transfiriendo su experiencia a la comunidad. 3 El horizonte mediato de la Web social se construirá mediante una arquitectura de plataformas distribuidas, open source, ge- capítulo 3 neralistas, gratuitas pero también de target y pensadas para dispo- sitivos móviles. Información fácilmente organizada y accesible, utili- dad, gestión en tiempo real y gran poder de procesamiento. 99 4 No hay riesgo de crisis como en 2001. La Web es el medio domi- nante de socialización para los jóvenes, lo cual dibuja un esce- geekonomía nario y un tipo de interacción inexistente hace una década. Por otra parte, los costes de crear una aplicación y sostener una startup web son mucho menores de lo que eran antes de 2001. 5 Sufrirán los entornos que ofrezcan prácticas comunicacionales que no se adapten con celeridad a las demandas de consumo. Hablo de la reorganización de la conversación social y de la no- ción de amigos bajo las redes sociales débiles. La blogosfera fue un espacio de frescura, autoexpresión y pensamiento independiente, pero hoy se ve afectada por contenidos de pago, marketing semi- oculto, amateurismo sin vocación de calidad y splogs. En el caso de su adopción por parte de la prensa tradicional, se ha retrocedido a una lógica de edición tradicional que sólo respeta su lenguaje y metaestructura, pero no su filosofía original de conversación y es- critura colaborativa.
  • 102. Cinco recursos relacionados disponibles en Internet 1 Cobo Romaní, Cristóbal; Pardo Kuklinski, Hugo (2007). Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food. Grup de Un radar para producir en el postdigitalismo Recerca d’Interaccions Digitals, Universitat de Vic. Flacso México. Barcelona / México DF. www.planetaweb2.net 2 Vogelstein, Fred. “Keyword: Monopoly”, Wired Magazine, agosto de 2009. www.wired.com/techbiz/it/magazine/17-08/mf_googlopoly 3 Urstadt, Bryan. “Social Networking Is Not a Business”. Technology Review, agosto de 2008. www.technologyreview.com/Biztech/20922/ 100 4 Podcast reseña de Everything is miscellaneous. The power of the new digital disorder, David Weinberger (Times Books. Nueva York. 2007), y The cult of the amateur. How today’s internet is killing our culture, Andrew Keen. Máster de Comunicación Digital geekonomía Interactiva. Universitat de Vic. www.campusmovil.net/podcast/podcastwkeen.m4a 5 Auletta, Ken. “The Search Party. Google squares off with its Capitol Hill critics”. The New Yorker, 14 de febrero de 2008. www.newyorker.com/reporting/2008/01/14/080114fa_fact_ auletta?currentPage=all
  • 103. Notas Capítulo 3 1. Pardo Kuklinski, Hugo; Brandt, Joel y Puerta, Juan Pablo (2008). “Mobile Web 2.0.Theoretical-technical framework and developing trends”. Interna- tional Journal of Interactive Mobile Technologies (iJIM), vol. 2, nro. 4. http://online-journals.org/i-jim/article/viewArticle/535 2. Infografía disponible en: http://hci.stanford.edu/jbrandt/hugo/info- graphic/MobileWeb2_English.pdf Versión en castellano en: http://hci.stanford.edu/jbrandt/hugo/infogra- phic/MobileWeb2_Spanish.pdf 3. Funky Mobile Ideas SL es la spin-off española que dirijo desde 2009 en Barcelona. Su principal producto es CampusMovil.net. Su lanzamien- to definitivo en España fue en septiembre de 2009, y está previsto ha- cerlo en Latinoamérica para el segundo semestre de 2010. El proyecto capítulo 3 CampusMovil.net consiste en una red social gratuita vía dispositivos móvi- les para la comunidad universitaria iberoamericana, con acceso exclusivo y transparente a través de la cuenta de correo electrónico asignada por la universidad a sus miembros. Se trata de un campus virtual no oficial con eje 101 en el uso en dispositivos móviles. Más información sobre la empresa en: www.campusmovil.net/info-empresa.php geekonomía 4. Mayer, Marissa, Innovation at Google: The physics of data. Xerox Parc, Palo Alto. 14 de agosto de 2009. www.parc.com/event/936/innovation-at-google.html 5. Huberman, Bernardo; Romero, Daniel; Wu, Fang. “Social networks that matter: Twitter under the microscope”. First Monday, vol. 14, nro. 1, 5 de ene- ro 2009. http://firstmonday.org/htbin/cgiwrap/bin/ojs/index.php/fm/ article/viewArticle/2317/2063 6. Online news. For many broadband users, the Internet is a primary news source, John B. Horrigan. Pew Internet & American Life Project. 22 de marzo de 2006. www.pewinternet.org/Reports/2006/Online-News-For-many-home- broadband-users-the-internet-is-a-primary-news-source.aspx?r=1 7. Estadística de número de lectores 2008 de la Newspaper Association of America (NAA). www.naa.org/TrendsandNumbers/Readership.aspx
  • 104. 8. “Confundiendo el negocio de los medios con el de la impresión”, digita- lismo.com, 5 de junio de 2009. http://digitalistas.blogspot.com/2009/06/ confundiendo-el-negocio-de-los-medios.html 9. “Social Networking Is Not a Business”, Bryan Urstadt. Technology Review, agosto de 2008. www.technologyreview.com/Biztech/20922/ Un radar para producir en el postdigitalismo 10. “How Facebook Works. The social network’s technology manages a vast and rapidly expanding web of connections for its millions of users”, Alan Zeichick. Technology Review, agosto de 2008. www.technologyreview.com/communications/20921 11. www.facebook.com/press/info.php?statistics 12. Datos de noviembre de 2009. Ranking mundial de Alexa: www.alexa. com/topsites/global;1. 13. Según datos de la propia compañía y divulgados por la agencia Reuters, en septiembre de 2009 Facebook comenzó a dar un saldo de caja positivo. www.elpais.com/articulo/economia/Facebook/logra/ingresar/gasta/ 102 previsto/elpeputec/20090916elpepueco_3/Tes geekonomía 14. “Great Wall of Facebook: The Social Network’s Plan to Dominate the Internet — and Keep Google Out”, Fred Vogelstein. Wired Magazine, julio de 2009. www.wired.com/techbiz/it/magazine/17-07/ff_facebookwall 15. Lacy (2008) señala que con la explosión de la burbuja de Internet en 2001, en Silicon Valley se perdieron unos 450.000 empleos: “Gente que creía que estaba cambiando el mundo y se demostró que nadie es indis- pensable en la corporación USA”. Lacy (2008) revela una anécdota esclare- cedora de la industria automotriz que también vivió un período de burbu- ja. Entre 1896 y 1930, había más de 1.800 fabricantes norteamericanos de coches. Sobrevivieron tres empresas que lideraron el mercado durante más de setenta años. En 2009 estas tres empresas sufren otra gran crisis que seguramente provocará una nueva ola de innovación. Excelente artículo sobre el tema en Wired Magazine, Junio 2009. www.wired.com/culture/culturereviews/magazine/17-06/nep_auto
  • 105. 16. Se podría afirmar irónicamente que la “IPO” de Facebook fue la entrada de Microsoft en la empresa en 2007. 17. Google lanzó su IPO en agosto de 2004. El precio de apertura por ac- ción fue 85 dólares y cerró la jornada con 600 dólares la acción, con lo que colocó el valor de mercado de la empresa en su primer día en Bolsa en 28.000 millones de dólares. 18. La excelente conferencia de Guy Kawasaki de diciembre de 2007 en Xerox Parc By the Numbers: How I built a Web 2.0, User-Generated Content, Citizen Journalism, Long-Tail, Social Media Site for $12,107.09 explica a fondo la reducción de costes asociados a la creación de una plataforma de la Web social. www.parc.com/event/608/by-the-numbers.html 19. Invito a leer el excelente artículo “The Search Party. Google squares off with its Capitol Hill critics”, Ken Auletta. The New Yorker, 14 de febrero 2008. capítulo 3 www.newyorker.com/reporting/2008/01/14/080114fa_fact_auletta? currentPage=all 20. “Keyword: Monopoly” es el artículo sobre Google de Fred Vogelstein en 103 la edición de agosto de 2009 de Wired Magazine. El texto es imprescindible y plantea muchas dudas sobre la misión corporativa de Google de “hacer el geekonomía bien”. www.wired.com/techbiz/it/magazine/17-08/mf_googlopoly 21. Desde 2004 Google puso en marcha el proyecto Google Library, que con- siste en digitalizar los libros publicados de manera progresiva. El comienzo fue un acuerdo con Stanford University y University of Michigan para dispo- ner de sus bibliotecas en dicho proceso. 22. www.elpais.com/articulo/sociedad/Biblioteca/Nacional/Francia/pacta/ Google/digitalizacion/fondos/elpeputec/20090820elpepusoc_8/Tes 23. No resuelta cuando este libro fue publicado en enero de 2010. 24. Destaco dos: “The most fascinating thing about Twitter is not what it’s doing to us. It’s what we’re doing to it”, Steven Johnson. Time Magazine, 5 de junio de 2009. www.time.com/time/business/article/0,8599,1902604,00.html
  • 106. “The Message of Twitter: ‘Here It Is’ and ‘Here I Am’”, Henry Jenkins. henry- jenkins.org, 23 de agosto de 2009. http://henryjenkins.org/2009/08/the_message_of_twitter.html 25. Creo que el tiempo y el desarrollo de los #hashtags reafirmaron mi postu- ra sobre el valor de la relevancia en Twitter, que mejoró notablemente con la Un radar para producir en el postdigitalismo adquisición e integración de Summize en julio de 2008, al permitir rastrear conversaciones sin ser un follower y otorgándole mayor visibilidad a la con- versación global. Con respecto a la minipolémica véase “Hugo Pardo sobre Twitter”: www.ecuaderno.com/2007/09/24/hugo-pardo-sobre-twitter 26. Se define al snack-o-tainment como la industria del entretenimiento ba- sada en pequeños retazos de información. Wired Magazine utilizó el térmi- no en un artículo de Nancy Miller en marzo de 2007. www.wired.com/wired/archive/15.03/snackminifesto.html La cultura snack está reflejada con minuciosa precisión y múltiples ejemplos en: Igarza, Roberto (2009). Burbujas de Ocio. Nuevas formas de consumo cultural. La Crujía. Buenos Aires. 27. Taken Out of Context: American Teen Sociality in Networked Publics (2008). 104 Danah Boyd. Disertación doctoral. University of California-Berkeley, School of Information. Abstract disponible en www.danah.org/papers/TOC-Abs- geekonomía tract-English.pdf 28. Más información sobre la empresa en su propia web: www.craigslist.org/about/factsheet Para conocer la filosofía de Craigslist escuchar podcast de Craig Newmark y el CEO Jim Buckmaster en la Web 2.0 Conference de 2004. http://itc.conversationsnetwork.org/shows/detail330.html Para conocer la repercusión cotidiana que tiene Craigslist en Estados Uni- dos, recomiendo el documental 24 hours on Craigslist. http://24hoursoncraigslist.com/subs/trailer.html 29. Datos de noviembre de 2009. Ranking mundial de Alexa: www.alexa.com/topsites/global;1. Ranking de Estados Unidos: www.alexa.com/topsites/countries/US 30. No es el único ejemplo. En el momento de ser comprada por Google en 2006, YouTube tenía solamente 60 trabajadores. Para la época de su explo-
  • 107. sión como canal VoiP el equipo de Skype estaba formado por 200 personas que cubrían 53 millones de suscriptores al servicio. El ejemplo extremo es de PlentyOfFish.com, un sitio para hacer contactos que en el momento de convertirse en líder en Canadá tenía sólo 1 trabajador, su creador Markus Frind. www.plentyoffish.com/about_team.aspx 31. http://digitalistas.blogspot.com/2009/08/el-exito-de-craigslistorg-o- como-burlar.html 32. Datos de Mayo de 2009. http://pewinternet.org/Reports/2009/7--Online-Classifieds.aspx 33. Basados en el cuestionamiento al diseño de la interfaz, varios diseña- dores independientes han realizado propuestas para modernizar Craigslist. Aquí un ejemplo: http://craigslist.thebignoob.com capítulo 3 34. “The tragedy of Craigslist”, Gary Wolf. Portada de Wired Magazine, sep- tiembre de 2009. 35. www.wired.com/epicenter/2009/06/craigslist-revenues-100-million- 105 %E2%80%94-or-300-million geekonomía 36. Medio millón de dispositivos en 2008 según Mark Mahaney (Citigroup Research) con su plus de conexión 3G y 1.500 libros en el dispositivo. Ade- más, los e-books representan para Amazon.com un 25% de sus ventas en Estados Unidos. 37. Recomiendo “The evolution of Amazon”, el artículo de Adam Penenberg en Fast Company, julio de 2009. www.fastcompany.com/magazine/137/ the-evolution-of-amazon.html 38. Una versión anterior de este artículo fue publicada en Scolari, Carlos; Carlón, Mario (eds) (2009). El fin de los medios masivos. El comienzo de un debate. La Crujía Colección Inclusiones. Buenos Aires. 39. Hay empresas que ofrecen este servicio a precios exageradamente altos a pesar de que el coste de hacer un blog –o sea un gestor de contenidos gratuito y de escritura personal– es casi cero. Dos ejemplos en Catalunya. La Presidencia de la Generalitat de Catalunya pagó 21.000 euros en 2006
  • 108. por el diseño de un blog de Pasqual Maragall, su presidente, realizado en WordPress. En junio de 2006 posteé en digitalismo: “El Blog está on-line desde el 15 de febrero de 2006 y sólo tiene 15 posts escritos. O sea que es carísimo e ineficiente”. En otro incidente muy similar, el concejal de Barce- lona Jaume Ciurana (CiU) denunció en 2009 que el blog de Jordi Hereu, el alcalde de Barcelona (PSC), costaba 315.000 euros anuales. Un radar para producir en el postdigitalismo http://mas-ediciones.e-noticies.es/barcelones/el-blog-del-alcalde-lo- hacen-seis-personas-30626.html 40. Digitalismo.com existe desde enero de 2005 y, en el momento de termi- nar este libro, se acercaba a los 1.000 posts escritos. Fuimos seleccionados entre los 10 mejores blogs de habla hispana de todo el mundo en la edición 2007 de The BOBs Best of the Blogs, concurso realizado por el prestigioso multimedios alemán Deutsche Welle. Destaco un artículo sobre digitalis- mo.com en la prensa española: “Internacional digitalista”, en El País: www.elpais.com/articulo/semana/Internacional/Digitalista/elpeputecci b/20080529elpciblse_9/Tes 41. “The long tail of blogging is dying”, Charles Arthur, The Guardian, 24 de junio de 2009. www.guardian.co.uk/technology/2009/jun/24/charles- 106 arthur-blogging-twitter geekonomía 42. Como ejemplo, en julio de 2008, los blogs de Gawker Media doblaban el consumo de la versión en línea de Los Angeles Times. Es muy conocido y valorado el rol de los bloggers en las últimas campañas políticas en Estados Unidos influenciando en la opinión pública. Sin embargo su peso mediático fue mucho menor en otros países e irrelevante en Iberoamérica, donde el negocio de la prensa está más concentrado y el rol de los bloggers fue me- nos activo políticamente. 43. Orihuela, José Luis (2009). “Qué son los blogs y cómo dejar de confun- dirlos con otra cosa”, en Cambronero, Antonio (ed.). BlogGuest 2, 8 años. Bubok. www.blogpocket.com/blogguest 44. Vale una excepción, como bien señala Gabriela Jardim en un post so- bre el tema en octubre de 2009. La masa crítica de usuarios es necesaria si hablamos de un blog abierto (la mayoría), pero éste no es un requisi- to indispensable si se trata de un blog cerrado a una audiencia específi- ca, como los blogs internos de las empresas. También es interesante la
  • 109. observación que hace Jardim con respecto a los intereses pre-existentes en la apertura de un blog. En muchos casos, puede que el objetivo del autor no sea una gran audiencia y puede también que comenzando con una audiencia escasa, su propio mérito le dé visibilidad al trabajo. Pero en este último caso, vuelvo al argumento del texto principal: cada vez se hace más difícil obtener visibilidad en una Web social con decenas de for- matos compitiendo. Sin embargo, la visibilidad era mucho más fácil en el origen de los blogs en 1999. De hecho, los blogs más populares en di- ferentes rubros son los que han comenzado en los primeros años y han tenido constancia suficiente para seguir posteando diez años después. http://mediatizandonos.blogspot.com/2009/09/o-futuro-dos-blogs-on- de-estamos.html 45. Sobre Linked. The new science of networks. How everything is connected to everything else and what it means for sciencie, business and everyday life, de Albert-László Barabási en: http://digitalistas.blogspot.com/2005/06/ capítulo 3 sobre-el-linked-de-barabasi-4.html 46. “Twitter, Flickr, Facebook Make Blogs Look So 2004”, Paul Boutin. Wi- red Magazine, octubre de 2008. www.wired.com/entertainment/theweb/ 107 magazine/16-11/st_essay geekonomía 47. “The political blogosphere and the 2004 Election: divided they blog”, Lada Adamic y Natalie Glance. 4 de marzo de 2005. blogpulse.com/ papers/2005/AdamicGlanceBlogWWW.pdf 48. TechCrunch nació en 2005 y era originalmente el blog de Michael Arrington. Hoy, junto a un equipo de colaboradores, se dedica a mapear y analizar las nuevas aplicaciones de la Web social surgidas en Estados Uni- dos (también existe una versión para el Reino Unido). En dos años se ha convertido en uno de los blogs de negocios más influyentes en la blogos- fera americana, y punto de referencia obligada de los fondos de inversión. Según las estadísticas de Technorati de 2008, era el cuarto blog más enlaza- do del mundo. Según Alexa, en noviembre de 2009 era el sitio web 208 en Estados Unidos, en cuanto al tráfico. DailyKos.com es uno de los medios po- líticos estadounidenses en línea más influyentes. Se trata de un blog creado en 2002 por Markos Moulitsas Zúniga, que atrae a más de medio millón de lectores al día y que, en las elecciones primarias de 2007, convocó a los cinco candidatos presidenciales demócratas. Véase “Blogger fest a magnet
  • 110. for liberal políticos”. San Francisco Chronicle, julio de 2007. www.sfgate.com/cgi-bin/article.cgi?f=/c/a/2007/07/29/MNGRVR91RU1. DTL&feed=rss.news 49. http://pogue.blogs.nytimes.com Un radar para producir en el postdigitalismo 50. Con distribución en Chicago y San Francisco, publicó desde 2008 en papel contenidos generados en la blogosfera local. Resultó una fórmula de- masiado optimista en medio de la profunda crisis de la prensa tradicional con reducción de costes al máximo o quiebras como en el caso de la editora de The Chicago Tribune, o la desaparición en España del diario gratuito Me- tro y de la versión digital del también gratuito ADN. El anuncio del cese del servicio en http://blog.theprintedblog.com 51. Los invito a escuchar el podcast que produje para el Máster de Comu- nicación Digital Interactiva de la Universitat de Vic. Es una reseña conjunta de Everything is miscellaneous. The power of the new digital disorder, David Weinberger (Times Books. Nueva York. 2007) y de The cult of the amateur. How today’s internet is killing our culture, Andrew Keen (Double Day/Curren- cy. Nueva York. 2007). Ambos autores exponen ideas opuestas. Weinberger 108 analiza la escritura colaborativa y su lógica miscelánea en el contexto de un nuevo orden digital que tiene un efecto de contrapoder y Keen cuestio- geekonomía na desde múltiples puntos de vista la dinámica de escritura colaborativa y amateur de la Web social. www.campusmovil.net/podcast/podcastwkeen.m4a
  • 111. capítulo 4 Capítulo 4 109 La crisis de la universidad geekonomía iberoamericana en el postdigitalismo: liderazgo social o marca blanca
  • 112. Observo una pieza gráfica de American Airlines, “You just can’t download this”, en la que aparecen dos jóvenes mirando un cuadro de Carle Vernet en un museo. El mensaje es evidente. La compañía aérea vende la experiencia de estar en vivo mirando una obra de arte, a diferencia de verla por Internet. Una experiencia que enfatiza en el concepto Un radar para producir en el postdigitalismo de la escasez al que me referí en el capítulo 1. Este anuncio publici- tario me dispara una analogía con la situación de las universidades en la sociedad de la información. Parte del sistema universitario sufre una nueva crisis desde el momento en que deja de explotar su principal valor: la escasez. Así, se deja a un lado la experiencia de pertenecer y se centra principalmente en la oferta de títulos y conte- nidos que se podrían obtener gratuitamente en la Red. Bain (2007) cree que la universidad debe poseer “una tradición educativa am- plia que valore el pensamiento crítico, la resolución de problemas, la creatividad, la curiosidad, el compromiso con los asuntos éticos, y la amplitud y profundidad tanto en el conocimiento específico como en las distintas metodologías”. La sociedad demanda a las instituciones universitarias cambios de formato hacia el liderazgo 110 en excelencia e innovación, una batalla que a veces ha perdido con las empresas de élite que se constituyen como referencia a múlti- geekonomía ples prácticas sociales. Vale una salvedad antes de continuar con la crítica. La actual cri- sis universitaria está matizada por factores que la posicionan mejor que nunca en toda su historia. Esta institución siempre ha sido cues- tionada. En cada período ha tenido que adaptarse a los cambios socioeconómicos y es bien sabido que su capacidad de movimiento no ha sido particularmente ágil. Es probable que la actual crisis de entornos, interfaces y métodos de aprendizaje sea menor que otras anteriores, puesto que la universidad del siglo xxi está mejor inte- grada en el cuerpo social: con el mayor porcentaje de ciudadanos en sus aulas1, minorías inclusive; con las mujeres ocupando un lugar preponderante; con una movilidad de estudiantes cada vez mayor;2 con la formación de postgrado pasando a ser una instancia masiva impulsada por la dinámica de aprender toda la vida; con la innova- ción naciendo de sus laboratorios; con la investigación propagán- dose con rapidez y contribuyendo al crecimiento económico y a una mejor calidad de vida.
  • 113. Pero la crisis existe y vamos a analizarla. Desde el proyecto pio- nero OpenCourseWare3 del Massachusetts Institute of Technology (MIT) en 2002, muchas universidades de élite han subido sus con- tenidos curriculares a la Red en formato broadcasting. ¿Cuál es la estrategia de estas instituciones que regalan sus contenidos y por otra parte cobran una costosa matrícula de 50.000 dólares al año? Más allá de sus contenidos, estas universidades ofrecen la expe- riencia en vivo y planifican un entorno para interactuar con sus miembros y construir redes sociales a medida. Bien administradas, estas redes pueden durar toda la vida profesional de un licenciado. Ruppel Shell (2009) considera que en un mercado de productos si- milares, la experiencia y el precio terminan marcando la diferencia en la decisión de consumo, porque los consumidores no razonan sobre el coste de elaboración de un producto (y sin lugar a dudas la educación universitaria lo es), sino que asocian el precio a una experiencia de usuario o a su gratificación. En esto radica el prin- capítulo 4 cipal y escasísimo valor de las universidades de élite norteamerica- nas: pertenecer. En el caso de Estados Unidos, un selecto grupo de 170.000 estudiantes son alumnos de universidades con un riguroso nivel de selectividad.4 Esa cifra representa el 10% de toda la matrí- 111 cula de los casi 1.400 colleges norteamericanos acreditados (Blum, 2009). Los cursos en línea del MIT son gratuitos y universalmente geekonomía accesibles, pero obtener una titulación de grado allí es una inver- sión familiar de 200.000 dólares. El juego por el que apuesta el MIT a través del OCW, por ejemplo, es doble y está basado en el fino equilibrio entre Free (Anderson, 2009) y la economía de la escasez. Los contenidos son abundantes y se comparten, pero la experien- cia de hacer una carrera en el MIT es única y muy escasa. Por esto los costes de matrícula son cada vez más elevados. Por un lado, sus contenidos de calidad disponibles gratis en la Red son marketing institucional. Por otra parte, en términos de Anderson (2009), estas universidades se benefician con la escasez artificial que crean a tra- vés de su restrictivo ingreso. Este desequilibrio entre gratuidad y elevados costes de matrícu- la puede generar problemas a largo plazo a las universidades. Si la experiencia en línea se asemeja a la experiencia del curso pre- sencial, ¿por qué no pensar que las universidades pudieran tener dificultades de desintermediación por parte de sus públicos, como
  • 114. ya sufrieron otros actores de la industria cultural? ¿Qué pasaría si la educación fuera masivamente una cultura DIY y la filosofía edupunk5 se impusiera? El problema no lo tendrían las universidades de élite, que seguirían explotando la economía de la escasez y seguirán sien- do muy valoradas por su reputación. La dificultad se trasladaría a las que denomino marcas blancas universitarias. Es decir, instituciones Un radar para producir en el postdigitalismo que no han sabido o no han podido construir prestigio a su alrede- dor y que se han convertido en un costoso parking de jóvenes antes de su ingreso en el mercado laboral y en un gremio de profesores carente de redes internacionales, exigencias meritocráticas y com- petencia real. En el caso de las universidades públicas, las marcas blancas se agravan por su rol funcionarial y la cultura endogámica que les ofrece el sistema, generando un proceso de proletarización de la docencia que ha impactado seriamente en su profesionaliza- ción (Díaz Barriga, 2009). El problema puede ser mayor. Las universi- dades han sido beneficiadas durante siglos al poseer la potestad de la titulación de los ciudadanos. ¿Qué sucedería si en algún momen- to se pusiera en cuestión su monopolio de la acreditación? Existe un debate muy activo en la Unión Europea sobre la validación del aprendizaje informal y el diseño de nuevos métodos de acreditación 112 más allá de los que otorgan las instituciones de educación formal.6 geekonomía Las universidades marcas blancas en Estados Unidos tienen ma- trículas más accesibles pero igualmente costosas. En cambio, en Ibe- roamérica el modelo es totalmente diferente, con menores costes de acceso y en algunos casos gratuidad.7 Las universidades de élite comparten sus contenidos porque sabiéndose un bien escaso, no creen que pueda afectarles. Pero su creciente modelo de recursos abiertos puede afectar decisivamente a sus pares marcas blancas, si los alumnos y sus familias comienzan a pensar que la experiencia de formar parte de una comunidad universitaria puede ser reem- plazada por el consumo de contenidos académicos en línea prescin- diendo del espacio formal institucional (y del coste de la matrícula). Por todo esto, las universidades deben innovar sus estrategias de enseñanza, su diseño curricular y hasta el diseño físico de los espa- cios, para facilitar un nuevo tipo de interrelación con sus públicos objetivos que privilegie la pertenencia, potenciando el trabajo en equipo, la autoformación y la formación continua. Las que más de- ben innovar son las mayoritarias marcas blancas. Ésta es la forma de
  • 115. escapar a la desintermediación y al fantasma de la rotura del vínculo usuarios/institución (o clientes/producto a ojos de algunos). Existe un falso argumento: si las universidades marcas blancas resultan afectadas, pierde la educación superior. Como en otras in- dustrias de la intermediación, es un error igualar los intereses de las universidades marcas blancas con los del ecosistema educativo. La justificación de la existencia de algunas universidades marcas blancas sólo responde a intereses políticos locales8 y para perpe- tuar espacios de poder social preconcebidos. A pesar de la crisis de financiamiento y de productividad social de las marcas blancas universitarias, el consumo de contenidos de origen universitario es mayor que nunca, trasciende a los actores del sistema y favorece la formación continua de la sociedad. En Iberoamérica la crisis se percibe con mayor nitidez, aunque las capítulo 4 universidades españolas han recuperado terreno competitivo con rela- ción a Europa con instrumentos como el Plan Bolonia.9 Por otra parte, los profesores de las universidades de élite privilegian la investigación y las publicaciones sobre la docencia porque el sistema que los evalúa 113 establece esas prioridades. En tanto, las marcas blancas no cumplen efi- cientemente ninguna de las funciones de investigación y docencia ya geekonomía que: a) contratan a investigadores recién doctorados y con poca expe- riencia para liderar proyectos ambiciosos y, por falta de competitividad, los dejan marchar a otras instituciones cuando adquieren experiencia y construyen su prestigio personal; b) trabajan a tiempo parcial profesio- nales de segunda línea que no aportan un gran valor añadido al plan de estudios, más allá de transmitir su experiencia personal; c) en Latino- américa la situación es más grave porque la tasa de doctores es mucho más baja que en España y además existe la rutina consolidada hace dé- cadas de que alumnos del último año del grado ejerzan como docentes sin cobrar y sean ellos quienes tengan la interacción más directa con sus pares alumnos, afectando la calidad de la enseñanza. 1. ¿Pistas? para la educación universitaria de la próxima década Antes que nada, quiero aclarar que no soy un pedagogo ni un ex- perto en diseño de currículos educativos y quizá pecaré de algunas
  • 116. falencias conceptuales. Tómese este texto como un boceto de ideas basadas en mi experiencia profesional como docente e investigador en Europa, América Latina y Estados Unidos. Mi principal foco de atención estará en los aspectos vinculados a la innovación de los procesos dada la irrupción definitiva de las TIC en el aula. Innovar no es una actividad eficiente y lleva tiempo. Se trata de un proceso Un radar para producir en el postdigitalismo lento pero persistente. Esto se hace más complejo si se comprende que estamos educando a los universitarios de hoy para vivir en un mundo que los profesores aún desconocemos. Podemos enseñarles técnicas, brindarles recursos y ayudarles a entender el actual merca- do laboral y de ideas, pero no lo que sucederá dentro de una o dos décadas, cuando sea el apogeo de su vida profesional. Nuevas va- riables tecnocientíficas y sociales se introducen constantemente en industrias consolidadas para rediseñarlas y convertirlas en otra cosa. Aunque la universidad siempre ha sido útil para la integración profe- sional de sus estudiantes, no es una escuela de formación profesio- nal, sino un espacio donde se debe fomentar el pensamiento crítico, la duda y el aprendizaje profundo (Bain, 2007). Con la crisis y los altos índices de desempleo a los que se enfrenta la sociedad mundial a fi- nes de esta primera década del siglo xxi, la esfera pública (el espacio 114 comunicativo entre el mercado y el Estado que describía Habermas) debate si las universidades deben ser espacios de reflexión y acceso geekonomía al conocimiento para la vida, un lugar de aprendizaje de herramien- tas para salir al mercado laboral con mayor capacidad de inserción, o ambas facetas integradas en una planificación equilibrada. Estas diferentes visiones, tanto la humanista como la instrumental, condi- cionan la forma de actuar de las instituciones y a veces generan es- trategias contradictorias. Scolari (2009)10 propone evitar el modelo de la universidad-hotel, donde las instituciones se transforman en un espacio pasajero y una buena parte de sus estudiantes y profesores participan creyéndose clientes de la institución y no miembros, afec- tando al interés común de los procesos de aprendizaje. El abordaje crítico de Piscitelli (2009) hacia los formatos educa- tivos tradicionales llega hasta el cuestionamiento del libro como vehículo central del aprendizaje. Según Piscitelli “estamos en- señando teorías y conceptos que no son significativos para una época que ya fue, y con modalidades anacrónicas, que cada vez interesan menos a los jóvenes. (…) nos escandalizamos cuando
  • 117. nos hacemos eco de sus prácticas mediáticas, de su exhibicionis- mo impúdico, de su mentalidad gregaria y de su escala de valo- res tan poco compatible con la tradicional” (2009: 22). Piscitelli afirma que “la educación debe convertirse en industria del deseo si quiere ser industria del conocimiento”. Considera que las TIC no servirán para recuperar el interés del alumnado y hace énfasis en las limitaciones docentes para adaptarse a los nuevos tiempos. Tres son las variables a cuestionar: el desprecio de los contenidos audiovisuales como forma de conocimiento formal dentro de la dieta cognitiva; la pobre integración de las prácticas mediáticas de los jóvenes en el aula; y la desmitificación del rol del libro como vehículo central del aprendizaje. Más allá de esta correcta descrip- ción, no parece adecuado establecer una segmentación tan nítida entre supuestos nativos digitales disruptivos y profesores analógi- cos démodé. Es cierto que existen profesores con escasa capacidad de adaptación en un sistema que pocas veces sanciona la incom- capítulo 4 petencia, pero ése es un problema histórico que no tiene que ver con el desarrollo de las TIC. La crisis educativa afecta a todos sus actores por igual, geren- 115 tes, diseñadores curriculares, profesores y alumnos. La ineficacia de las marcas blancas está perjudicando la integración del alumnado geekonomía al circuito productivo y a las estructuras de I+D+I. Los profesores universitarios debemos adaptarnos a los nuevos tiempos y, como veremos más adelante, la mayoría de propuestas pedagógicas van en ese sentido. Pero, ¿cuál es la responsabilidad de los alumnos en todo este proceso? ¿Cuál es su voluntad de pasar de sujeto pasivo a activo de su propia educación transformando en sus mentes la universidad-hotel en universidad-laboratorio? 1.1. Sobre la Net Generation/Millennials/nativos digitales y el mito de la generación disruptiva Hay un discurso recurrente que quisiera desmantelar en esta sección. Es el que señala que las instituciones educativas se volve- rán irrelevantes y quedarán desfasadas si no cambian sus prácticas educativas y se adaptan a las necesidades de la Net Generation o nativos digitales (Tapscott, 1999 y 2009; Prensky, 2001). Este argu- mento sitúa toda la presión del cambio en las viejas metodologías
  • 118. de las instituciones y el profesorado y quita responsabilidad a los estudiantes. El argumento sobre una nueva generación de alumnos con habilidades sofisticadas para las cuales los profesores no están preparados es falso y carece de un cuerpo teórico profundo y de una consecuente investigación empírica. Además, como señala Tís- car Lara (en Grané y Willem, 2009), este guión reduce la alfabetiza- Un radar para producir en el postdigitalismo ción digital al aprendizaje instrumental del software, las interfaces y los dispositivos, quitándole complejidad a todo el proceso en su conjunto. Vayamos por partes. Antes de analizar el comportamiento de los jóvenes universitarios, acotaré las definiciones generacionales y ordenaré un poco el caos terminológico, para sistematizar los conceptos clave que mencionaré de aquí en adelante. El tema ya está muy trabajado a nivel bibliográfi- co pero considero útil hacer una breve recopilación. El colectivo que mejor contiene a la actual generación de estudiantes universitarios es la Net Generation (Tapscott, 1999 y 2009), que define a los naci- dos entre 1977 y 2007. Existen otras categorías sociológicas para ese grupo de tres décadas. William Strauss y Neil Howe (2000) los defi- nen como Millennials, aunque acotan su alcance a los nacidos entre 116 1982 y 2001 (doce años menos que la categoría de Tapscott). Pero básicamente Net Generation y Millenials, son el mismo grupo etario. geekonomía Otras definiciones similares son Generación Y, Generación Next (los nacidos entre 1984 y 1993) y algunas más.11 Todas estas descripcio- nes generacionales se enrolan en lo que Prensky (2001) definió como nativos digitales, por haber nacido luego del advenimiento masivo de las TIC, especialmente del ordenador personal, Internet y los disposi- tivos móviles. Nativos digitales es el concepto que más se utiliza para analizar a la Net Generation y también resulta el más polémico. Cuatro son las referencias bibliográficas más importantes que definen a esta amplia generación: el breve artículo original “Digital Natives, Digi- tal Immigrants” (2001) de Marc Prensky; Millennials Rising: The Next Great Generation (2000) de Neil Howe y William Strauss; Born Digital: Understanding the First Generation of Digital Natives (2008) de John Pal- frey y Urs Gasser; y la más reciente investigación Grown Up Digital. How the Net Generation is changing your world (2009) de Don Tapscott. Veamos algunos aspectos generales de estos trabajos. Prensky (2001) afirma que con los nativos digitales ha tenido lugar una dis-
  • 119. continuidad del proceso cognitivo que el sistema educativo no ha valorado en su justa medida. Para el autor, esa singularidad es la llegada de las tecnologías digitales y su utilización ubicua por par- te de una generación que ha nacido con ellas, lo que significa un cambio mucho más profundo del que suponen los educadores y las instituciones. Según Prensky los estudiantes piensan y procesan la información de forma diferente a sus predecesores, los inmigrantes digitales, o quienes siquiera han podido migrar hacia la digitaliza- ción. Analiza que los nativos digitales aprenden a gran velocidad, en forma visual y haciendo conexiones aleatorias. Ante el gap cognitivo, Prensky se pregunta quién debería aprender de quién en las institu- ciones educativas: los nativos digitales de los viejos métodos o los in- migrantes de lo nuevo. Se inclina por la segunda opción, proponien- do una reconsideración profunda de metodologías y contenidos o, mejor dicho, llevar los contenidos al entorno de los nativos digitales: los videojuegos, los ordenadores personales y las redes sociales. capítulo 4 Neil Howe y William Strauss se refieren a los Millenials en los mis- mos términos que Prensky. Ellos son quienes configuraron la Web social desde su profunda alfabetización digital, su mejor educación 117 y su mayor capacidad para trabajar en equipo. Según los autores y en franca crítica a la Generación X, la sociedad norteamericana es- geekonomía taba esperando durante décadas una generación proactiva, que “se dejara de hablar y se pusiera a hacer”. Además, consideran que los Millenials son racial y étnicamente más diversos, augurando para esta generación la conducción de una “nueva revolución social”. Palfrey y Gasser (2008) y Tapscott (1999 y 2009) comparten con los anteriores autores la línea argumental elogiosa hacia los nativos digitales. Palfrey y Gasser los definen como extraordinariamente ca- paces y creativos con las tecnologías. Según su punto de vista, viven, trabajan, estudian y se relacionan de una manera muy diferente a las generaciones anteriores y esto los hace mejores. Tapscott consi- dera que la Net Generation es el grupo más inteligente de la historia norteamericana y que su influencia cambiará el mundo. Les atribuye pautas transformadoras como la libertad de elección y de expresión en todo lo que hacen, personalización de los productos que consu- men, exigencia de integridad corporativa y apertura a las empresas, velocidad y espíritu de colaboración. Tapscott cree que, si se los
  • 120. compara con las generaciones anteriores –los Baby Boomers (1946 a 1964) y la Generación X (1965 a 1976)–, se trata de un grupo so- cial que vive en y con Internet, pero también en todas las pantallas digitales existentes: videoconsolas, móviles, y un poco menos tele- visión. Multifacética, puede participar en varias conversaciones a la vez e interactuar con diferentes interfaces. Son prosumers y facilitan Un radar para producir en el postdigitalismo la innovación basada en el usuario. A pesar de ser conceptos utilizados a nivel mundial, estos tra- bajos resultan de un trazo tan grueso que transmiten imprecisión, escasa especificidad y ruido conceptual. El propio Prensky (2009)12 liquida su invención terminológica de nativos/inmigrantes digitales tildándola de irrelevante para los nuevos tiempos y habla de sabi- duría digital, definiéndola como un concepto de doble entrada que alude a las capacidades cognitivas de los individuos para utilizar las tecnologías, pero también a la prudencia y pertinencia de su uso. Como una obviedad darwinista, la nueva versión teórica de Prensky (2009) afirma que esta sabiduría no se enmarca en un tiempo preci- so y evoluciona constantemente. Estas definiciones no contribuyen a comprender profundamente a esta generación, y mucho menos 118 permiten hacer una radiografía a nivel mundial que sea útil para planificar nuevas políticas educativas universitarias. Las respuestas geekonomía a la crisis educativa deben sustentarse en investigación y no en in- tuiciones o simplificaciones causa-efecto. Veamos algunas limita- ciones de estos análisis: • La Net Generation es un grupo etario que abarca tres décadas. Es demasiado amplio y heterogéneo para atribuirle categóricamente el liderazgo de la vida digital. Veamos un claro ejemplo en Estados Unidos que contradice la idea de que la Net Generation domina me- jor todos los sectores de la vida digital. Según un trabajo sobre ge- neraciones en línea de Pew Internet & American Life Project (2009),13 las llamadas Generación X y Baby Boomers utilizan más la Web que la Net Generation para buscar noticias, reservar viajes, realizar transac- ciones bancarias, consultar sitios gubernamentales, utilizar los bus- cadores o hacer investigación. También son quienes mejor utilizan el correo electrónico o realizan mayor volumen de compras en línea. En tanto los más jóvenes se decantan por el uso lúdico y la sociali- zación. Otras actividades como descargar contenidos multimedia o
  • 121. participar en subastas alcanzan los mismos porcentajes en todas las generaciones menores de 70 años. En el mismo sentido profundiza Rowland (2008) y su estudio sobre la Google Generation.14 El trabajo concluye que no hay evidencia seria de que los jóvenes sean ma- yores expertos en la búsqueda en la Red ni que las capacidades de búsqueda de esta generación hayan mejorado en los últimos años. Un estudio en curso de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC)15 realizado con adolescentes de 12 a 18 años en Catalunya revela que este colectivo no explota adecuadamente todo el potencial que tie- nen las TIC. Según sus autores “el mito de nativos digitales de alta productividad es la visión de los analfabetos digitales (…) El hecho de que más de la mitad de estos adolescentes no utilicen habitual- mente videojuegos o que un tercio de ellos no utilicen la Web social indica que hacen un uso muy precario y básico de la cultura digital”. Estos y otros estudios similares confirman las contradicciones en el discurso del liderazgo digital de la Net Generation. capítulo 4 • Aunque estas categorizaciones habitualmente se aplican a todo el mundo, los análisis originales mencionados remiten exclusiva- mente a la sociedad norteamericana. Si ya resulta difícil analizar 119 una misma generación dentro de la geografía de Estados Unidos según variables de origen socioeconómico, transpolar esas limita- geekonomía ciones al mapa mundial es metodológicamente inadecuado. Si se hace un zoom sobre los nativos digitales, se encuentra una gran complejidad de resultados y contradicciones que confirman que no todos poseen la misma experiencia con las TIC. Aun en una región tan acotada como América Latina, una investigación de la Funda- ción Telefónica (2008) sobre la generación interactiva en Iberoamé- rica16 demuestra dicha complejidad e insiste en las grandes diferen- cias según países así como por entorno urbano o rural. A modo de ejemplo, el informe señala que el acceso a Internet en los hogares de adolescentes de 10 a 18 años es muy desigual. “Brasil (58%), Ar- gentina (57%) y Chile (51%) son los más avanzados, mientras que Colombia se queda rezagado (27%) en este indicador.” Cuestio- nando los usos productivos de las TIC en la educación formal se afirma: “La búsqueda del entretenimiento a través del consumo de contenidos relacionados con el ocio se contrapone con fuerza a la posibilidad de encontrar en Internet una fuente de conocimientos educativos o culturales. En términos medios, sólo dos de cada diez
  • 122. menores declaran visitar habitualmente recursos educativos o cul- turales”. Como ya se observará con el multitasking en los nativos digitales, una práctica de consumo interesante de analizar es el rol distractivo de las TIC en la educación formal. Según el informe de la Fundación Telefónica, el caso de Argentina es el más alarmante del continente: “la actividad más desplazada (por el uso de los dis- Un radar para producir en el postdigitalismo positivos electrónicos e Internet) es el estudio y el tiempo dedicado a las tareas escolares (39%), junto a la televisión (32%) y la lectura (27%)”. España también presenta profundas diferencias de forma- ción entre el colectivo de nativos digitales, con grandes sectores excluidos a pesar de la evolución del sistema educativo nacional en los últimos treinta años. Según el Informe de la Inclusión Social en España 2009,17 un 7,3% de la población española entre 18 y 24 años no posee el título de educación secundaria obligatoria y no sigue ningún tipo de formación reglada, sufriendo un serio aislamiento educativo y una vulnerabilidad formativa severa. Las cifras son más graves entre los jóvenes sin titulación secundaria post-obligatoria. Un 31% de la población de entre 18 y 24 años en 2007 no posee este tipo de estudios. A pesar de pertenecer a una economía desarro- llada, este colectivo de excluidos de la educación formal es el que 120 menor alfabetización digital posee y está lejos de poseer las virtu- des de cultura digital que describen Howe y Strauss (2000), Prensky geekonomía (2001), Palfrey y Gasser (2008) y Tapscott (2009), entre otros autores. • Otro índice que no se tiene en cuenta cuando se habla de la Net Generation es el ámbito geográfico de pertenencia, no en el sen- tido socioeconómico sino en el cultural o de entorno creativo. Flo- rida (2005 y 2008) teoriza que las ciudades abiertas, cosmopolitas, multiculturales, tolerantes y con una infraestructura tecnológica apta fomentan el factor dónde y propician una clase creativa que es vital para el crecimiento individual de las personas y la innovación indus- trial. El factor creatividad es exponencial, cuanta más gente de ese tipo vive allí, más gente querrá vivir y habrá una mayor concentración de talentos y calidad de recursos humanos en determinadas áreas. Florida (2008) habla de clustering force. Las personas reciben mejo- res inputs, crecen profesionalmente y son más productivas si se or- ganizan en entornos creativos en los cuales se sientan identificados y realizados. Según Florida (2008), sólo un par de docenas de regio- nes del mundo concentran la innovación de la economía mundial.
  • 123. Florida (2005) menciona a la clase creativa como dinamizadora de la innovación en las ciudades. La ubicación de universidades de cali- dad también influye en la ecuación smart spots o sitios inteligentes. Csikszentmihalyi (1996) hace referencia a los entornos creativos desde tres perspectivas; 1) hay que estar en situación de acceder al campo en el que se propone trabajar; 2) la estimulación novedosa no está homogéneamente distribuida ya que existen lugares con mayor den- sidad de interacción y efervescencia de ideas; 3) las posibilidades de acceso están relacionadas con el ámbito donde uno se encuentre, o sea que la mejor estrategia personal es estar donde existen las opor- tunidades. Con el mismo énfasis hacia los smart spots, Castells (2009) considera que el éxito en el diseño de los entornos es la unificación del espacio de los flujos (culturales, económicos, comunicacionales) con el espacio de los sitios físicos. Las ciudades que tienen el liderazgo del espacio común global lo tienen en beneficio de sus ciudadanos locales, que son los primeros beneficiados de ese liderazgo. En ese capítulo 4 sentido David Byrne (2009)18 considera que las virtudes de una ciudad perfecta deben ser el equilibrio en: tamaño (una ciudad demasiado pequeña no tolera el ensayo y error porque estigmatiza el fracaso), densidad (los espacios sociales con distancias a pie fomentan las inte- 121 racciones), sensibilidad y actitud positiva, seguridad (donde los ciuda- danos confían en sus pares y no se sienten amenazados en el espacio geekonomía público), una pequeña dosis de caos para fomentar la creatividad, es- cala humana, parques y espacios públicos, y sobre todo capacidad de transformación y movilidad. Según Byrne una ciudad perfecta no está nunca inmóvil. Este factor dónde también afecta a la Net Generation, aunque no se contemple en las teorías sobre los nativos digitales. No es lo mismo ser un nativo digital en San Francisco o Boston que en una ciudad periférica española, como se verá en el capítulo 5 cuando se analice Silicon Valley. Volviendo al entorno norteamericano: no es el mismo un joven de la Net Generation criado en Palo Alto, Califor- nia –en medio de las principales empresas de la industria tecnológica mundial, con unos recursos humanos muy competitivos y con la in- fluencia de Stanford University como núcleo de innovación y ciencia– que uno criado en Nueva Orleans, con mayores índices de pobreza y exclusión social y sin cultura emprendedora ni tecnológica. • El análisis de la Net Generation y de los nativos digitales igno- ra que el ecosistema digital del que se habla fue creado mayori-
  • 124. tariamente por las generaciones precedentes, Generación X y Baby Boomers. Como bien señala Gladwell (2008), los Boomers fueron los inventores de Internet y la mayoría de referentes de la industria tec- nológica pertenece a esa generación, no a la Net Generation. • Por último, se ignora el mito de la trascendencia generacional. Un radar para producir en el postdigitalismo Como se dijo en la introducción del libro, cada generación cree vi- vir el mayor período de cambios de la historia de la humanidad, sobreestimando la importancia de su tiempo y subestimando las transformaciones previas. Las virtudes de los nativos digitales son simplemente signos de su tiempo, y en cada época se pueden en- contrar condiciones transformadoras del ecosistema social y otras conductas menos dinámicas. Esta generación no es la excepción. Vistos los déficits de análisis de la Net Generation, pasaré a las críticas. Se puede afirmar que las TIC están reviviendo la capaci- dad de escritura de los Millenials, desde textos para su educación formal, mensajes en las redes sociales hasta correos electrónicos y chats, lo cual los hace polialfabetizados (Lunsford, 2008). También es evidente que los Millenials han transformado el consumo mediá- 122 tico y que se decantan por Internet y la Web social en detrimento de los formatos tradicionales. En vez de consumir la televisión pa- geekonomía sivamente acceden a YouTube mientras realizan otras tareas. Pero esto no se puede asociar a una mayor inteligencia generacional. Para los nativos digitales, el pensamiento lateral (Bono, 1986) se transformó en multitasking cotidiano, y el desafío cognitivo y social es cómo convertir estas prácticas en innovación y riqueza social. Según Ophir, Nass y Wagner (2009),19 el crónico multitasking de esta generación provoca dispersión, dificulta la atención y el control de los procesos cognitivos relevantes. Los resultados de esta investiga- ción muestran que los multitaskers profundos son más susceptibles al estímulo de las interferencias irrelevantes del entorno y menos eficientes en suprimir la dispersión cuando se debe realizar una ta- rea sofisticada. En el mismo sentido y desde la psicología cognitiva, Rubinstein, Meyer y Evans (2001)20 concluyen que la multitarea pue- de resultar en una pérdida de concentración y sobrecarga cognitiva dada la variedad de estímulos que recibe el cerebro, haciéndola improductiva en determinados casos.
  • 125. En una de las investigaciones mejor documentadas con estudios de campo sobre la relación entre los nativos digitales y el sistema educativo, Bennett, Maton y Kervin (2008)21 cuestionan la idea de una generación diferente y dudan de la necesidad de un profundo cambio en los planes de estudio con el supuesto fin de beneficiar- los. Los autores señalan que el argumento sobre nativos digitales disruptivos y profesores analógicos poco adaptados ha sido repeti- damente reproducido sin una evidencia empírica que lo sustentara. Los investigadores creen que el cambio de práctica generacional que se vive de la mano de las TIC es sin duda un proceso evolu- tivo pero no un hecho revolucionario que requiera una profunda reconfiguración de la educación formal. Sugieren que si bien los jóvenes integraron definitivamente las prácticas digitales en su vida cotidiana, no hay evidencia de una amplia desafección con las me- todologías educativas clásicas. Además, la investigación revela un panorama más complejo que debe ser diferenciado por edades y no capítulo 4 se puede reducir a una sola y amplia generación. La Net Generation es probablemente la generación más alfabeti- zada en la historia y posee ciertas capacidades que la coloca en una 123 posición privilegiada en la sociedad del conocimiento, como bien señalan las referencias bibliográficas mencionadas al comienzo de geekonomía este segmento. Pero esto no significa que sea la más preparada de la historia y tampoco convierte a sus miembros en mejores y más eficientes educandos. El tipo de lectura de retazos de información en forma de zapping y una cultura snack de consumo irrelevante, inmediato y de corto alcance torna a los nativos digitales en semi- analfabetos analógicos, con enormes dificultades para recuperar ideas centrales de un texto complejo, erráticos en el conocimiento literario transversal y con problemas para expresar ideas de forma escrita. Esa dispersión cognitiva afecta a su productividad y la capa- cidad para conectarse con conocimientos complejos como la cien- cia. Brey (2009) considera que la sociedad hiperconectada crea una fuerza disgregadora a modo de comunitarismo autista. Para Brey, la ignorancia es atrevida, desacomplejada y cualquier crítica en su contra es políticamente incorrecta.22 Referirse a los nativos digitales en forma superlativa es parte de esa lógica. Para no prestarme a polémicas innecesarias, no es mi intención señalar que los Millenials sean peores que otras generaciones y que el consumo de Internet y
  • 126. las redes sociales los hagan menos capacitados que aquéllas. Nada más lejos de mis ideas. Pero creer que son más inteligentes porque son multitasking e interactúan en las redes sociales, twittean, suben fotos a Flickr, subastan en eBay o consumen videojuegos entre otras acciones en red, es por lo menos reduccionista. Eso no es lo que indica mi experiencia docente en la universidad iberoamericana, Un radar para producir en el postdigitalismo donde una parte significativa de los estudiantes sufre dispersión, tiene falta de compromiso con los estudios y escasa ética del es- fuerzo, carece de curiosidad por la autoformación y no ejerce la serendipia. Además, entrando de lleno en el terreno digital, puedo afirmar que –como profesor de software y usos profesionales de la Web social– la mayoría de estudiantes utilizan de forma muy limita- da las plataformas colaborativas, desperdiciando parte de su gran potencial, como se verá en las posteriores recomendaciones de este capítulo. En el mismo sentido, carecen de una lectura crítica de los recursos que buscan en la Red y se les hace difícil encontrar textos significativos para trabajar en una tarea específica. Lorenzo y Dziu- ban (2006)23 señalan que a los estudiantes les cuesta conectar las unidades de información dispersas en la Red y que necesitan de una information literacy que difiere totalmente de la que puedan apren- 124 der con el consumo pasivo de los nuevos medios o su interacción en las redes sociales. geekonomía En la línea de lo que afirma Brey (2009), creo que en un sec- tor de esta generación existe desinterés y falta de curiosidad por el conocimiento como fin en sí mismo. En definitiva, es un grave error cargar toda la responsabilidad del cambio pedagógico en el profesorado, como señala Prensky (2001). Es cierto que los profe- sores tienen la obligación de digitalizarse lo antes posible y par- ticipar con fines pedagógicos en la conversación que proponen los nativos digitales en la Web social. También es necesario que los educadores conozcan a fondo técnicas de Blended Learning (Bar- tolomé, 2008), combinando situaciones de presencialidad y for- mación a distancia, utilizando las tecnologías más apropiadas para cada necesidad. Pero es imprescindible que los estudiantes asuman la parte de la responsabilidad por su formación, que va mucho más allá de sentarse en el aula, escuchar al profesor en silencio, tomar notas y participar en exámenes periódicos. No se trata de cambios drásticos de un día a otro, sino de coevolución
  • 127. participativa y emergencia24 (Johnson, 2001; Mitchell, 2009) entre todos los actores de las instituciones de la educación formal. Pero no debemos desesperarnos. McLuhan (1964) decía que cuando una tecnología se vuelve un medio social, penetra hasta saturar todas las estructuras. Eso sucederá con las TIC en las instituciones educativas. Las universidades son lentas en la adopción de las TIC para tareas de formación y gestión del conocimiento, pero llegará el punto de saturación que representará un no retorno y la defini- tiva adopción del paradigma. No estamos tan lejos como a veces se cree. Igualmente, el problema educativo es más complejo y no se resolverá con inversión en ordenadores en el aula ni profesores masivamente digitalizados. De más está decir que es un error creer que las instituciones educativas rezagadas puedan encontrar en las TIC la solución a todos sus problemas. Un informe de la Comi- sión Europea de 200825 sobre lifelong learning evidencia los po- bres resultados de algunas inversiones TIC en la educación formal capítulo 4 europea y destaca la necesidad del autoaprendizaje y el aprendi- zaje informal entre pares como mecanismos fundamentales para obtener mayores competencias digitales y educativas, más allá de la infraestructura disponible en el aula. Precisamente de estos me- 125 canismos es de lo que trata el próximo ítem. geekonomía 1.2. Un catálogo de buenas prácticas para estudiantes universitarios. Aprendiendo a olvidar Algunas de estas propuestas no son ideas nuevas y las he divul- gado en seminarios y ensayos ya publicados. Éste es un trabajo de reprocesamiento basado en nuevas lecturas y discusiones con colegas y estudiantes. Estas pistas se asientan en las críticas con- diciones de las instituciones universitarias que he descrito breve- mente en la introducción. Sin embargo, es imprescindible señalar que no es un cuestionamiento colectivo ni me quiero ubicar como observador omnisciente de todo este proceso, ya que las transfor- maciones del entorno educativo afectan a mi trabajo y también me corresponde ser parte de ese proceso de cambio. Convivo a diario con excelentes alumnos y profesores, de quienes aprendo más de lo que yo pueda transmitir. Con gran respeto por ambos colectivos, me tomaré el atrevimiento de recomendar algunas líneas de acción de corto alcance.
  • 128. Para comenzar mencionaré lo que creo son pautas comunes que pueden resultar útiles a profesores y alumnos. Lo que Gardner (2007) considera capacidades para enfrentarse al mundo: a) Mentalidad disciplinada. No aprender de memoria, sino saber conectar. Según Gardner, los contenidos son invención humana, por Un radar para producir en el postdigitalismo lo que no se pueden aprender de forma intuitiva, sino como un proceso. Smith y Potoczniak (2005) trabajan en el mismo sentido refiriéndose a los componentes de la conectividad en el aula.26 Tam- bién lo hace Downes (2005) hablando de connective knowledge.27 b) Mentalidad creativa. En cuanto a los profesores, deben avanzar de forma innovadora en busca de las nuevas ideas escasas y pensar en qué será lo más valioso en el campo del conocimiento y sus prácticas e ir hacia ello. Anderson (2009) afirma que los trabajadores del cono- cimiento de hoy son los obreros del pasado y los granjeros de hace un siglo y deben reconfigurarse para no perder protagonismo social. c) Mentalidad ética. El buen trabajo encarna la excelencia. Rela- cionado con estas últimas dos capacidades, Gladwell (2008) habla 126 de la regla de las 10.000 horas. Se necesitan diez años para dominar un oficio. El autor sugiere que lo que distingue a un buen profesio- geekonomía nal de uno excelente es el trabajo duro y el tiempo que le dedica a su tarea. No hay un componente genético ni generacional que diferencie a ambos. Para hacer este esfuerzo en tiempo hay que aprovechar oportunidades y asumir riesgos. d) Mentalidad respetuosa. Respetar a quienes piensan diferente a nosotros y aprender de ellos. d) Todo con su síntesis. Debemos saber en qué poner atención y qué ignorar. Los metadatos son claves en esta era de la abundan- cia. La información sólo tiene sentido real cuando somos capaces de entenderla. Yo lo llamaría aprender a olvidar y es la primera de las capacidades que debe aprender un estudiante universitario. Vamos entonces a las diez recomendaciones para estudiantes universitarios en la era postdigital.
  • 129. 1. Aprender a olvidar lo irrelevante. Si lo difícil en la fase analó- gica era recuperar la información, hoy la universidad debe ense- ñar a olvidar y a identificar los mejores recursos en línea, a sepa- rar el ruido de lo relevante, a prevenir la infoxicación. Muchas de las plataformas que se diseñan se centran en facilitar la recupera- ción de la información de forma eficiente cuando se la requiere, sin necesidad de reservarla en la memoria ni almacenarla en un formato físico. En esta nueva dinámica es necesario reconocer los recursos valiosos en Internet para su uso en clase y sorprender al profesor con recursos que quizá desconozca. Mayer-Schönber- ger (2009) cree que la tecnología invirtió nuestra relación con la memoria. En la historia, las tecnologías pasadas favorecieron el olvido, pero la digitalización nos agobia con el volumen de infor- mación a nuestro alcance y ha eliminado la amnesia, por lo que recomienda que las personas (como las plataformas en la Red) deben aprender a olvidar, eliminando la información irrelevante. capítulo 4 En la relación memoria-olvido también es necesario modificar la lógica de aprendizaje. A modo de ejemplo, así trabaja el software SuperMemo28 creado por Piotr Wozniak. Este desarrollo se basó en 127 la investigación doctoral de Wozniak, donde concluía que el mejor momento para reaprender algo es en el instante exacto en que se geekonomía está a punto de olvidar. Antes de ese período, recordar es improduc- tivo y posteriormente también, porque ya se ha olvidado y se debe volver a aprender desde cero. Las dinámicas de SuperMemo son muy valiosas para ciertas tareas como el aprendizaje de idiomas, las fór- mulas matemáticas u otros conocimientos en los que sea necesario memorizar procesos. 2. Construir un currículum personalizado en la Red. Esto signifi- ca utilizar todos los instrumentos digitales al alcance para escribir, crear archivos multimedia con nuestro know how, postear, producir ensayos, compartir conocimientos relevantes, etc. En un estudio so- bre la producción académica de la élite universitaria norteamericana, Lunsford (2008)29 concluye que la escritura que motiva a los mejores estudiantes es la que hace que algo suceda en el mundo. Los estudian- tes prefieren escribir fuera del aula para aportar algo al conocimiento social y ser partícipes de esa gran conversación. Ésa es precisamente una forma eficiente de construir un perfil personal. Estar preparados
  • 130. cuando alguien quiera googlearnos en una selección de personal. El título universitario tiene escaso valor si no va de la mano de la cons- trucción de un perfil específico personalizado dentro y fuera de las aulas. La entrevista personal siempre fue la primera instancia en un proceso de selección. Actualmente, ese primer contacto con el candi- dato se establece en la Red porque el currículum se construye allí. Tís- Un radar para producir en el postdigitalismo car Lara (2007)30 considera que las personas se definen a través de las identidades mosaico. Estas identidades han sido potenciadas a través de las TIC ya que un perfil digital abarca diferentes facetas de lo que somos profesionalmente y otorga valor a las personas en función del valor de la propia red de la que forman parte. A los estudiantes se les enseña a diseñar un CV analógico, pero pocos prestan atención a la construcción de un perfil profesional y personal digital y en línea. En la emergente nube, vamos hacia una identidad única y los ciudadanos deben hacerse cargo de la administración de sus datos personales y su perfil digital. Construir eficientemente esa identidad puede llevar años, pero es una tarea necesaria. 3. Aprender a contar historias transmediáticas. Esto está directa- mente relacionado con el punto anterior. Scolari (2009) señala que 128 los contenidos transmediáticos no son sólo una adaptación de un medio a otro, sino historias narradas en diferentes formatos de for- geekonomía ma complementaria. Según Scolari esta dispersión textual es uno de los recursos complejos más importantes en la cultura popular contemporánea. Esa construcción transmediática de textos o traba- jos académicos debería ser una de las virtudes diferenciales de los mejores estudiantes. 4. Fomentar la cultura del remix. Los estudiantes deben optar por el autoaprendizaje guiado y traer al aula el consumo cultural y cog- nitivo que hacen fuera de ella, mezclando conceptos y prácticas, potenciando una vez más la serendipia. Ese trabajo de disgregación y mezcla puede proporcionarles un mayor conocimiento. La clave es adaptar la filosofía pirata a la que hacía referencia en el capítulo 1, pero sin hacer trampas y sin confundir la intertextualidad con el copia y pega. En un excelente estudio sobre el plagio en las universi- dades norteamericanas,31 Blum (2009) considera que los estudiantes no prestan atención al lado académico de la producción de textos y la experiencia universitaria y concentran toda su atención en las
  • 131. evaluaciones y los resultados, perdiendo de vista el objetivo peda- gógico. Por eso resulta tan seductor el copia y pega. Parte de ese objetivo es precisamente mezclar las experiencias externas al aula con lo que se enseña allí. Una observación para docentes. Muchas veces, el foco exclusivo de los alumnos en la evaluación y los resultados es promovido por las estrategias didácticas de los profesores cuando hacen ver que la evaluación final es la instancia crucial del curso. Si se comunica este mensaje a los alumnos, no debemos esperar que éstos transfieran su foco de atención al objetivo pedagógico, porque lo que hacen simplemente es seguir el protocolo que les propone el profesor. 5. Fomentar la creatividad en el aula es tan o más importante que la alfabetización digital o analógica. Como en la cultura del remix, realizar tareas de forma creativa potencia el aprendizaje colateral y capítulo 4 las capacidades de la innovación. Johnson (2005) destaca que cuan- do los jugadores interactúan en el entorno de un videojuego, ellos están aprendiendo el procedimiento básico del método científico: investigar, generar hipótesis y repensar la forma de jugar para tener 129 más éxito en los objetivos del juego. geekonomía 6. Transformar la cultura de la queja en ética del esfuerzo. Existen alumnos que viven su proceso universitario como una estrategia de supervivencia bajo el mínimo esfuerzo. Otros alumnos basan su ex- periencia en el deseo de autoconstruirse y de emprender, más allá de las evaluaciones rutinarias. Como analiza Blum (2009), los estu- diantes arrastran como un enorme peso el proceso de la evaluación y pierden de vista el objetivo de aprender en base al ensayo y error. Así, su principal meta es aprobar, y limitan al mínimo la interacción real y extracurricular con los profesores en pos de ese objetivo. Csikszentmihalyi (1996) señala que para que fluya la creatividad las personas deben esforzarse en realizar una actividad cognitiva que esté por encima de sus capacidades en el momento de comenzar. Los alumnos deben sentirse incómodos y sufrir el proceso. Eso sig- nifica que están aprendiendo. Si la tarea les resulta muy fácil, quiere decir que está por debajo de sus capacidades, por lo cual el apren- dizaje ya ha sido previamente adquirido.
  • 132. 7. No temer el conocimiento volátil, las contradicciones y la con- fusión de las ideas. En estos tiempos de barbarie digital, los estu- diantes deben debatir consigo mismos y con el grupo, sin temor a ser evaluados. Con un aprendizaje autodidacta y sin esperar de for- ma pasiva que los profesores transmitan conocimientos como quien pasa un archivo de un disco duro a otro. Como autoridad del Mas- Un radar para producir en el postdigitalismo sachusetts Institute of Technology (MIT), Rosalind Williams señala (2004) qué es lo que se espera de un ingeniero licenciado del MIT: “Los estudiantes deben ser capaces de abordar problemas mal de- finidos, ejercitarse en la definición de tareas o en el diagnóstico de funcionamiento defectuoso, de tolerar la ambigüedad y trabajar en medio de la incertidumbre”. En ese sentido, Bain (2007) afirma: “Ser clara y explícitamente consciente de las lagunas de información dis- ponibles. Reconocer que se ha llegado a extraer una conclusión o se ha tomado una decisión en ausencia de la información completa, y ser capaz de tolerar la falta de certeza”. 8. Autoaprendizaje colaborativo, exigiendo al docente el rol de tutorización más que el de divulgador de contenidos. Si como es de esperar, los métodos colaborativos de la universidad de la primera 130 parte del siglo xxi reemplazan a las técnicas disciplinarias, el alum- no debe aprender por cuenta propia habilidades de liderazgo para geekonomía poder conducir procesos en este nuevo escenario. Es la base del Lifelong Learning. Vale probar, fallar, realimentarse y volver a probar, pero lo que no vale es desentenderse del proceso. Bain (2007) seña- la que si los estudiantes no pueden aprender a juzgar la calidad de su propio trabajo, es que no han aprendido. 9. Aportar valor al texto que difunde el profesor. A tono con la re- comendación anterior, aporto un dato: Caty Marshall, investigadora de Microsoft,32 ha descubierto que algunos universitarios en Esta- dos Unidos buscan cuidadosamente libros usados, porque valoran las notas que otros estudiantes han hecho en esos libros. Esto de- muestra que los lectores también se pueden profesionalizar y apor- tar conocimiento en la dinámica de la sabiduría de las multitudes. 10. Construirse a uno mismo como nómada. Moravec (2008)33 ha- bla de nómadas del conocimiento: jóvenes que trabajan en diferen- tes lugares del mundo, adaptándose fácilmente a su lengua y cultu-
  • 133. ra y escogiendo las mejores oportunidades. Aunque tú no quieras ser nómada, compites con ellos ya que se introducen en tu entorno laboral y están mejor preparados. Ya no se trata de trabajar en un lugar específico, en una ciudad, en la oficina o en casa: los jóvenes trabajan en los bares con sus notebooks. Igarza (2009) habla del “ciu- dadano Wi-Fi”. Viajan y establecen redes sociales débiles con quie- nes tienen intereses profesionales en común. Castells (2009) señala que la nueva división del trabajo en la sociedad de la información es entre trabajadores autoprogramables que se adaptan a las nece- sidades del mercado desde su capacidad para gestionar la infor- mación de forma flexible, y trabajadores genéricos, quienes pueden realizar tareas muy limitadas y muchas veces resultan prescindibles para la economía. La categoría de trabajadores autoprogramables de Castells (2009) coincide en su caracterización con la de nóma- das del conocimiento de Moravec (2008). En la lógica de lo que he señalado en la introducción con respecto a netócratas y geeks, capítulo 4 los estudiantes universitarios deben comprender que las redes profesionales más relevantes están conectadas a nivel global, y su exclusión de ellas significa la exclusión de las principales oportuni- dades laborales. El nomadismo no es una opción, sino una forma 131 de integrarse al mundo laboral con mayor libertad de decisión. Un mundo laboral donde existe “la inclusión de todo lo valioso en lo geekonomía global mientras se excluye lo local devaluado” (Castells, 2009). 1.3. Un catálogo de buenas prácticas para profesores universitarios. Cada año una nueva rutina pedagógica A modo de introducción, citaré algunas recomendaciones gene- rales que hace Bain (2007) en su investigación sobre los mejores profesores universitarios.34 El autor habla de conceptos clave y pau- tas para el profesorado: a) conocimiento construido, no recibido; b) ayudar a los estudiantes a elaborar nuevos modelos mentales. Se trata de una tarea difícil porque los modelos mentales cambian len- tamente y los estudiantes se sienten a gusto con sus ideas precon- cebidas; c) trabajar más con preguntas que con respuestas. Según Bain, la respuesta del alumno a las preguntas del profesor constitu- yen “un proceso de indexación que produce una mayor flexibilidad, un recuerdo más fácil y una comprensión más rica” que le ayuda a construir su propia explicación de las cosas; d) evitar objetivos o
  • 134. motivadores que estén ligados a la asignatura de forma arbitraria, favoreciendo el razonamiento en sincronía con la vida cotidiana. Del mismo modo que hice con los alumnos, aquí va una serie de propuestas generales para profesores, insisto, hechas con enorme respeto por mis colegas y con el único interés de expandir aún más Un radar para producir en el postdigitalismo el debate en torno a estos temas. 1. Reglas simples en el aula. Motivar a los alumnos asumiendo esti- los de supervisión heterogéneos en función del grado de su desarro- llo individual,35 desdramatizando el fracaso que proviene del esfuerzo. Aprender requiere ensayo, error y repetición, por lo cual es predecible que al principio de un proceso de aprendizaje se cometan errores. Promover que todos los alumnos hablen y expresen ideas en clase, protegiendo el valor de ese aporte ante los ojos de quienes no se im- plican. Llegar puntualmente y bien preparado. Diseñar redes sociales débiles significativas, motivar y aconsejar el diálogo individualizado e informal con los alumnos son roles aún más relevantes que el espacio formal de la clase. Gran parte del conocimiento que necesita un alum- no es tácito y difícil de comunicar, por lo cual el aprendizaje no puede 132 limitarse sólo al aula y a una clase magistral. Otra regla simple en el aula es adoptar el inglés durante todo el curso, promoviendo la lectu- geekonomía ra y exposición de ideas en esa lengua, aunque resulte dificultoso. 2. La innovación como destino profesional. La apuesta por la in- novación debería ser imprescindible para todos los que trabajamos en la docencia universitaria. Ya sea desde la investigación, pero también desde los procedimientos, prototipeando nuevas técnicas y trabajando en formato beta bajo el método de ensayo y error. Pero esto normalmente no sucede y menos en las ciencias sociales, donde el juego de la innovación es prácticamente inexistente, tanto a nivel de prácticas pedagógicas (donde impera la clase magistral) como en la investigación en las respectivas áreas de conocimiento. Por último, enseñar la creatividad no como una variable azarosa sino como una técnica con estrictos pasos a cumplir basados en un gran esfuerzo y perseverancia. En esta línea, lo primero en lo que se debe innovar es en los mé- todos de evaluación. No se puede exigir a los alumnos aquello que
  • 135. el profesor no promueve en la clase. El método con el que se evalúa a los estudiantes debe ser coherente con el tipo de estrategias di- dácticas que se desarrollan. Si cuestionamos que los alumnos pien- san más en la aprobación que en el proceso, no podemos ser los profesores quienes centremos todo el esfuerzo en un examen final o una metodología similar. La evaluación continua otorga a los estu- diantes la sensación de control sobre su propia educación y es el me- jor método para romper esta dinámica de la medición que persiste de forma acrítica en la cultura institucional universitaria. 3. Docentes polialfabetizados. Ya no sólo se trata de las capacida- des analógicas y digitales. En un novedoso punto de vista, Piscitelli (2009) afirma que se necesitan docentes expertos en inteligencia emocional y en persuasión. El autor diferencia la dimensión cogniti- va (en la que más énfasis se hace y la que se evalúa) y la emocional: “explicar contenidos debería ser sólo una de las reglas del juego capítulo 4 educativo pero actualmente canibalizó al resto”. 4. Producir contra la invisibilidad. Nada resulta más frustrante que producir investigación o textos que luego nadie lee ni indexa. Tam- 133 bién podría referirme a los libros que nadie consulta, y mucho peor aún, que no están disponibles en las librerías. La invisibilidad es una geekonomía experiencia demasiado habitual en la producción científica y aca- démica de nuestras universidades y todos la hemos sufrido en car- ne propia en alguna etapa de nuestra carrera (consultar capítulo 1, concepto 3: Vivir distribuidos en las me-spheres o morir invisibles). En la era de la sobreinformación, el prestigio está configurado por el grado de atención de los otros. Un profesional de la educación reconocido es aquel que es leído, citado, consultado y cuyos pdfs se bajan de la Red. La escritura bajo licencias Creative Commons y disponible en línea puede resultar una ruta atractiva para investiga- dores y profesores jóvenes. La satisfacción pasa por el proceso de escritura y su repercusión viral. Como ya dije, lo vital para la mayo- ría de escritores no es ganar dinero con los derechos de autor, sino salir de la oscuridad de un modelo de distribución limitado que a priori los perjudica en beneficio de los autores más vendidos. 5. Los territorios mentales pueden ser mucho más productivos que los geográficos o departamentales. Ésta es una idea de Cor-
  • 136. nella y Flores (2006) en su decálogo de la innovación. Romper los territorios preconcebidos: a) en cada campo de conocimiento pro- moviendo la rotación por departamentos y la multidisciplinariedad. Aprender otras temáticas y con profesores e investigadores de áreas diferentes facilita los puntos de conexión de la hibridación para ex- perimentar nuevos terrenos de investigación y modificar las rutinas Un radar para producir en el postdigitalismo de experimentación a base de mashups; b) a nivel geográfico. Exis- te un componente cultural de sedentarismo y muy poca movilidad en el entorno académico iberoamericano. Cornella y Flores seña- lan que en el actual mundo del conocimiento, el poder se traslada desde quienes se han quedado estancados en la lógica local –inca- pacitados de participar del juego global de la locomoción– a los miembros de las tribus globales móviles. Por eso el conocimiento de idiomas y haber trabajado en diferentes universidades y países es una variable tan relevante, que pocas veces es valorada por el sistema institucional. Yo mismo me considero un nómada que vivió en los últimos 10 años en cuatro ciudades (Buenos Aires, Barcelona, Palo Alto y Vic) de tres países diferentes. Nunca perdí la conexión con mis nodos internacionales y siempre me consideré un profesio- nal en tránsito. Considero esta movilidad como un plus de mi vida 134 profesional, aunque el sistema académico no suele recompensar esta variable en su justa medida. geekonomía 6. Hacer autocrítica en las múltiples instancias de revisión entre pares, propiciando la meritocracia. Los procesos peer review son la principal variable en el crecimiento del profesorado, tanto para as- cender en la escala jerárquica, como para publicar, ganar becas o integrarse a instituciones de élite. A pesar de su importancia, existe una peligrosa tendencia a favorecer a quienes tienen pocos grados de separación con los revisores y eso afecta la inclusión de nuevos actores y fomenta la endogamia. Algunos gatekeepers académicos definen excelencia como “algo más como yo” o “trabajando en la misma línea que mi trabajo”. Bajo esta lógica, los nuevos actores o innovadores son penalizados si avanzan en la frontera de sus cam- pos de conocimiento o si provienen de otros entornos. Innis (1950) decía que ciertos catedráticos son la aristocracia que monopoliza el conocimiento. En la sociedad de la información se puede rede- finir la idea: estos catedráticos son la aristocracia que monopoliza el espacio institucional del conocimiento. Y esto agrava la crisis, ya
  • 137. que –dado el rol de estos gatekeepers– gran parte del conocimiento científico circula fuera de las universidades. Esto se relaciona direc- tamente con el siguiente punto. 7. Evitar la endogamia del profesorado. Es un cáncer del sistema universitario iberoamericano que afecta la competitividad, el creci- miento profesional meritocrático y la calidad de las instituciones. Es imprescindible incluir en la docencia de los centros universitarios a profesores con postgrados de entidades con perfiles dispares y di- ferentes culturas académicas. Diferentes visiones de una cuestión contribuyen luego a tomar decisiones más aptas y a gestionar una formación holística. Además, demostrar la experiencia en otra orga- nización es vital para saber cómo está posicionada en el mercado del conocimiento la institución donde se recibió la formación inicial. Para acompañar el análisis, vale mencionar el grave índice de en- capítulo 4 dogamia en las universidades españolas. Según un estudio de 2006 del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC),36 el 93,3% de aquellos que obtuvieron una plaza en un departamento universi- tario entre 1997 y 2001 en España ya trabajaban en ese mismo centro 135 antes de que se les fuera concedida. El 70% de los profesores titula- res de universidad se presentaron al concurso como candidato úni- geekonomía co. El 56% no había tenido ninguna experiencia postdoctoral en el extranjero en el momento de ganar la oposición, mientras que sólo un 26,3% contaba con estancias de más de 6 meses en el extranjero. Un 47,9% de los entrevistados se licencia, doctora y consigue una plaza en el mismo centro. Esta situación es totalmente inusual en paí- ses como Estados Unidos, cuyo porcentaje de endogamia es del 10%, o en el Reino Unido con un 17%. ¿Cómo se puede ser competitivo a nivel internacional si sólo una cuarta parte de los profesores asig- nados con plaza permanente han realizado previamente instancias largas de investigación en el extranjero? 8. Menos enciclopedismo. Más acción y compromiso con la for- mación individual del alumno. Esto no es muy original y es uno de los objetivos del Plan Bolonia en la Unión Europea. Las tutorías son un espacio de comunicación directa donde el estudiante se siente más libre de interactuar con el profesor y de manifestarle sus du- das o problemas académicos. Además, los estudiantes valoran sin-
  • 138. gularmente el contacto directo con los profesores. Algunas clases magistrales deberían transformarse en talleres y los profesores en facilitadores. Esto no significa que deban desaparecer las clases ma- gistrales. En una educación estudiante-céntrica el rol del profesor divulgador ha perdido relevancia, pero sigue siendo muy importan- te. Un experto ha sacrificado años en formarse y su conocimiento Un radar para producir en el postdigitalismo es muy valioso. Por otra parte narrar historias ha sido el motor de nuestra cultura durante siglos y no observo el motivo por el cual esa dinámica de aprendizaje deba desaparecer. 9. Buscar y diseñar entornos significativos. Un espacio académico que sea honestamente crítico con las limitaciones y generoso con las virtudes del profesorado, pero siempre exigente y competitivo. Un sis- tema más eficiente de premios y castigos, que no desmotive a los em- prendedores. El jefe de departamento o el director del grupo de inves- tigación cumplen un rol vital en esta tarea. Ese manager debería crear espacios formales e informales de encuentro y dar espacios crecientes a quienes hacen un esfuerzo mayor, sin temer la competencia. Una reflexión muy personal. Suele ser frustrante hacer durante 136 años la misma tarea y rutina académica, enseñar las mismas asigna- turas y los mismos contenidos, escalar lentamente en la carrera aca- geekonomía démica publicando un artículo al año en revistas locales, de escasa o nula indexación. Los profesores e investigadores necesitan diver- sión. Funky research, como dirían Ridderstrale y Nordström (1999). 10. Proponer, cada año, alguna idea nueva en el ejercicio de la docencia, a nivel metodológico, pero también a nivel de contenidos. Aunque sean mínimos, dichos cambios constituyen un escenario di- ferente para el equipo docente de la cátedra y significan un incenti- vo hacia dentro para promover acciones pedagógicas alternativas. Luchar contra la entropía, producto de la rutina en la docencia uni- versitaria, promoviendo nuevas prácticas y acciones. 2. La nueva fase de la open education. Intérpretes y sintetizadores Mientras las marcas blancas universitarias se esfuerzan por sobre- vivir, las instituciones más innovadoras comienzan a repensar sus
  • 139. formatos educativos para soportar con mayor eficiencia la tendencia hacia una nueva fase de la educación abierta. Superada la etapa de compartir sus contenidos en la red con toda la sociedad, el modelo open source se reconoce más exitoso a la hora de diseñar formatos de colaboración, dado su mayor aporte comunitario y su flexibilidad para integrar módulos sin depender de estrategias empresariales ce- rradas. El formato distribuido que se analiza en el capítulo 1 también es parte de su éxito. La clave está en comprender los procesos orga- nizacionales que envuelven a estas plataformas open source más que en evaluar los propios contenidos. Cristóbal Cobo profundizó en el concepto de eLearning 2.0 y expuso una serie de herramientas Web 2.0 y plataformas de aprendizaje colaborativo para usos educativos (capítulo 5: Cobo Romaní y Pardo Kuklinski, 2007). Mientras, siguen creándose nuevas plataformas que ganan en sofisticación y eficacia. En este proceso evolutivo, la superación está en el paso del diseño de espacios de divulgación a espacios de producción colectiva. Cobo capítulo 4 (2009) los incluye en la categoría de e-competencias.37 Según Nambisan (2009)38 existen tres tipos de plataformas colabo- rativas para la innovación social. Si bien el autor no se refiere direc- 137 tamente al entorno educativo, su análisis es fácilmente transferible a éste: a) plataformas de exploración: aquellas que definen los proble- geekonomía mas centrales y hacen de puente con los nodos o grupos que pueden resolverlos; b) de experimentación: aquellas que funcionan como prototipos y testers para la solución de los problemas; c) de ejecución: aquellos diseños que proponen directamente una solución y ayudan a quienes los adoptan a transferir la innovación a un grupo amplio de la sociedad. Esta pequeña guía de recursos de open education se basa en las taxonomías que diseñó Nambisan (2009), aunque no se trata de figuras cerradas o exclusivas ya que muchas plataformas son transicionales o están en plena fase de expansión: a) Recursos educativos universitarios cerrados difundidos por Inter- net bajo el modelo de broadcasting, sin interacción real con los usua- rios o entre los propios productores (plataformas de exploración). b) Recursos educativos universitarios abiertos. Plataformas de expe- rimentación y ejecución que conforman un ecosistema aún incipiente. A diferencia de los recursos cerrados, su metaestructura se basa en la
  • 140. conformación de la red, dando prioridad a la apertura de la platafor- ma y no a sus contenidos, favoreciendo acciones de educación abierta más complejas y colaborativas. El rol de sus administradores es so- portar la interacción y mantener la plataforma sin ruido ni problemas técnicos para que los nodos se comuniquen. Estos recursos dan mayor libertad de acción ya que no construyen barreras para la administra- Un radar para producir en el postdigitalismo ción de los contenidos, como hacen las plataformas OpenCourseWare. Esta nueva fase de la open education está a tono con lo que en su momento se denominó open innovation (Chesbrough, 2003).39 La idea es que la innovación abierta de la mano de una estrategia conjunta entre universidades y empresas y con plataformas (colaboratorios) a su servicio resulta mucho más productiva que el paradigma de la in- novación cerrada que se crea en las empresas. Johnson (1992) consi- dera que el conocimiento es generado bajo una negociación y no es eficiente hasta que los intereses de todos los actores del proceso estén incluidos. En ese sentido, el autor propone cuatro tipologías de apren- dizaje: 1) aprender haciendo; 2) aprender interactuando; 3) aprender buscando; 4) aprender compartiendo (Cobo Romaní y Pardo Kuklinski, 2007). Si bien los contenidos educativos mainstream accesibles en la red son relevantes, los recursos abiertos son los que mejor se adaptan 138 para cumplir este proceso. En esta dirección se dirigen los nuevos me- gacampus o ecosistemas del conocimiento.40 geekonomía Si bien ambas categorías son valiosos recursos de open educa- tion, ofertas como el MIT OpenCourseWare fueron diseñadas como canales unidireccionales para transportar los contenidos generados en sus cursos de forma rápida y económica y a un público masivo. Los nuevos formatos de la open education van un paso más allá. Su arquitectura es una constelación de iguales más que grandes nodos que dirigen la comunicación de uno a muchos. Estas nuevas pla- taformas proponen romper de forma simultánea dos piezas cons- titutivas de la cultura organizacional universitaria: a) la exclusivi- dad para sus alumnos de los contenidos que se producen y ofrecen; b) la administración y el control centralizado del proceso educativo y la relación inflexible entre docentes y alumnos según las taxono- mías que diseña la institución y sus cuerpos académicos. La primera característica ya fue quebrada con la oferta de conte- nidos unidireccionales de la primera fase de la open education. Pero
  • 141. la incipiente rotura del modelo centralizado de las universidades no es trivial y democratiza la figura de los intérpretes,41 actores que cumplen un rol fundamental en el aprendizaje informal como inter- faz entre el mundo científico y la sociedad. Estos conectores y sin- tetizadores trabajan correctamente en ambos tipos de plataformas, pero cumplen un rol esencial en las plataformas de experimenta- ción y ejecución con recursos educativos abiertos. Estas redes de intérpretes proporcionan un escenario más amplio de ideas que las que ofrecen los cuerpos académicos institucionales y atraviesan su rígida membrana ampliando las fronteras de las organizaciones abiertas a esta filosofía de trabajo. Además fomentan la merito- cracia y la competitividad, ya que actores externos a la estructura institucional utilizan estas plataformas para poder ingresar en el sistema, lo cual hace que los insiders deban moverse con mayor agilidad y eficacia. capítulo 4 Vayamos entonces al breve catálogo de recursos escogidos. Para una taxonomía más exhaustiva, recomiendo la selección de institucio- nes privadas y públicas, proyectos de investigación y otros recursos relacionados que Cristóbal Cobo y un equipo multidisciplinario desa- 139 rrollaron en 2009 para el ambicioso proyecto e-competencias.42 geekonomía 2.1. Breve catálogo de recursos educativos universitarios cerra- dos. Plataformas de exploración MIT OpenCourseWare http://ocw.mit.edu/OcwWeb/web/home/home/index.htm Nacido en 2002 en el MIT, fue el primer proyecto institucional que ofrecía sus propios cursos de forma gratuita y de acceso público en la Red. Su creación significó un antes y un después en la open education, funcionando como un superador de las plataformas pre- existentes de las universidades virtuales. OpenCourseWare Consortium www.ocwconsortium.org El OpenCourseWare del MIT fue el origen de este proyecto que en 2009 agrupaba a 200 instituciones en 32 países. Es una fuente de materiales educativos organizados como cursos abiertos de acceso gratuito. Espa- ña es el país con el mayor número de instituciones que colaboran.
  • 142. iTunesU www.apple.com/education/guidedtours/itunesu.html La plataforma de Apple ofrece un canal específico para que las uni- versidades puedan subir a la nube clases, vídeos educacionales, au- diobooks o lo que deseen. Accesible también para museos y organiza- ciones públicas de medios. Aunque es gratuito, se gestiona mediante Un radar para producir en el postdigitalismo convenios con Apple. Originalmente se creó sólo para Estados Uni- dos, Canadá y Reino Unido, y está disponible en España desde junio de 2009. Aún no disponible para universidades en Latinoamérica. Open Learning Initiative (OLI) http://oli.web.cmu.edu/openlearning Un proyecto de Carnegie Mellon University. Su principal objetivo es producir cursos y materiales académicos de acceso abierto como so- porte para profesores. También se proponen crear una comunidad de uso y desarrollo que sirva como proceso de revisión entre pares para mejorar y difundir los cursos y sus materiales. iLabs Project http://icampus.mit.edu/iLabs 140 Se trata de laboratorios reales creados en el MIT a los cuales se acce- de a través de Internet. Estos espacios remotos permiten su acceso a geekonomía otras universidades en el mundo. Aspen Ideas Festival www.aifestival.org/audio-video-library.php Una especie de TED, pero con un volumen acotado de ponentes y menor cantidad de contenidos disponibles en la Red. TED Conferences www.ted.com Es el ciclo de conferencias mundiales más famoso sobre tecnología, ciencia y diseño. Se realizan desde 1999 en California. Después de años de exclusividad y formato cerrado sin acceso vía Web, en 2006 sus organizadores comenzaron a ofrecer las ponencias gratis en la Red, con un pequeño desfase entre el momento en que se celebra- ban y el que se hacían públicas. Hoy las TED se han convertido en un medio mainstream educativo. El modelo de gratuidad ha supuesto un gran éxito económico y de popularidad.
  • 143. Polimedia http://polimedia.upv.es/catalogo Un proyecto de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) para producir materiales en vídeo por áreas de conocimiento, que los pro- fesores elaboran en estudios de grabación del propio centro. Según el vicerrector de la UPV Miguel Ferrando: “Participa más del 30% de la universidad, el 80% de departamentos y más de 200 profesores”. Flat World Knowledge www.flatworldknowledge.com Se trata de una plataforma de materiales educativos gratis en línea, como libros, audiobooks, documentos, etc. Según sus creadores pre- servan lo mejor del mundo editorial –la revisión entre pares y la ca- lidad de sus autores– con la rapidez de la producción y distribución en la Web. capítulo 4 Academic Earth http://academicearth.org Se trata de un hulu.com educativo, con contenidos empaquetados en vídeo de las universidades más prestigiosas de Estados Unidos, 141 junto a materiales adicionales como ejercicios, textos u otros extras. Ha sido designada por Time.com como una de las mejores aplicacio- geekonomía nes web de 2009. Science Commons http://sciencecommons.org Creative Commons lo lanzó en 2005 con el objetivo de rediseñar la infraestructura de los contenidos de comunicación científica y abrir un espacio de acceso libre en paralelo a las revistas científicas co- merciales. Directory of Open Access Journals (DOAJ) www.doaj.org Esta plataforma contiene 4.360 revistas científicas publicadas como open access journals, o sea accesibles de forma gratuita en Internet y bajo licencia Creative Commons.
  • 144. Learning Space / OpenLearn http://oci.open.ac.uk Una plataforma de contenidos gratuitos producidos por la Open University del Reino Unido. Nacida en la década de 1960, la Open Uni- versity fue la primera universidad a distancia que tuvo éxito en im- plementar dicho modelo en los tiempos preWeb y constituyó un refe- Un radar para producir en el postdigitalismo rente mundial para otras instituciones de educación a distancia. Otro producto educativo diseñado por la Open University junto a la BBC es Open2.net. University of the People www.uopeople.org Se trata de un nuevo modelo de universidad internacional virtual con un coste de matrícula muy bajo. El proyecto fue fundado por el em- prendedor Shai Reshef bajo una organización sin fines de lucro con la misión institucional de democratizar la educación superior y brindar acceso a quienes no pueden pagarse una carrera. 2009 fue su primer año académico y por ahora sólo enseña Administración de Empresas y Ciencias de la Computación. Todos sus cursos son en inglés. 142 Education Sector www.educationsector.org geekonomía Una asociación independiente que trabaja en política educativa en Estados Unidos, proponiendo caminos de innovación institucional. Ohloh www.ohloh.net Una compañía que mide el peso de la industria open source. En 2008, listó más de 200.000 personas trabajando en este tipo de proyectos, gratis en la mayoría de los casos. 2.2. Breve catálogo de recursos educativos universitarios abiertos. Plataformas de experimentación y ejecución. PeertoPeerUniversity http://p2pu.org En fase de piloto, P2PU ofrece cursos de 6 semanas con horarios pre- establecidos sobre contenidos universitarios. Cada curso, de no más de 14 alumnos, es organizado por un voluntario y contiene el progra-
  • 145. ma, los materiales y la programación. El objetivo es convertirse en una plataforma para que cualquiera pueda diseñar y ofrecer cursos. Campusmovil.net www.campusmovil.net Como CEO y fundador de esta plataforma me llena de orgullo incor- porar este proyecto a la lista de recursos. El caso es que 2009 ha sido el punto de partida de esta red social vía dispositivos móviles para la comunidad universitaria iberoamericana, con acceso exclusivo y transparente a través de la cuenta de correo electrónico asignada por la universidad a sus miembros. Se trata de un campus virtual no- oficial con eje en el uso en dispositivos móviles. Originada en España, a partir del segundo semestre de 2010 está prevista su estrategia de implementación en América Latina, basada en convenios con univer- sidades latinoamericanas y la captación de socios locales privados. capítulo 4 En septiembre de 2009, CampusMovil.net ha sido premiado en la categoría EUROPRIX Quality Seal en la edición 2009 del prestigioso EUROPRIX Multimedia Awards. Dicho sello de calidad fue otorgado solamente a 69 proyectos entre los 333 participantes de 31 países 143 europeos. El EUROPRIX Multimedia Awards es el concurso de multi- medios para jóvenes diseñadores más importante de Europa y está geekonomía íntimamente vinculado a proyectos de origen universitario. Este premio se suma a la selección como terceros (entre 157 proyectos europeos) en la votación en línea de la Startup 2.0 Competition 2009; a la designación como finalistas en el Premi Emprenedors 2009 de Caixa Manresa, España, y a la mención como uno de los 20 mejores proyectos de I+D en Catalunya en 2008 en el 8è Concurs d’Idees de Negoci del CIDEM de la Generalitat de Catalunya. Academia.edu www.academia.edu Se trata de una base de datos colaborativa diseñada con estructura de árbol sobre investigadores, departamentos y áreas de interés. El objetivo es que los investigadores puedan encontrar personas con sus mismos intereses científicos y conocer los últimos trabajos en el campo. Además es posible desarrollar una página propia con el perfil de investigación, a los efectos de obtener mayor visibilidad en la comunidad científica.
  • 146. iCamp www.icamp.eu Es un proyecto de I+D financiado por la Unión Europea con el obje- tivo de crear una infraestructura de colaboración en red en el eco- sistema europeo de la educación superior. Se basa en el aprendizaje autoorganizado y el rol mediador de los profesores. Un radar para producir en el postdigitalismo Edufire http://edufire.com Una plataforma de vídeos educativos en directo que permite a quien lo desee convertirse en un tutor de una amplia categoría de áreas de conocimiento. Cada tutor puede construirse un perfil con su biografía, su área y las horas en las que enseña. Puede cobrar por sus clases u ofrecerlas gratuitamente. La comunidad puede también identificar y puntuar a los miembros más calificados. InnoCentive www.innocentive.com Una red privada de más de 150.000 emprendedores alrededor del mundo que se ha diseñado como una plataforma de intermedia- 144 ción entre aquellos que tienen preguntas que hacer sobre inno- vación y desarrollo y aquellos que pueden responderlas. Las or- geekonomía ganizaciones que tienen problemas específicos pueden plantear sus problemas en la Web y ofrecer una recompensa a las mejores soluciones. Google Académico http://scholar.google.es Quizá el proyecto más conocido de todos los mencionados en esta breve lista. Se trata de una biblioteca virtual que utiliza el motor de búsqueda de Google centrándose en la producción científica. Es una plataforma abierta por cuanto, como el propio Google, es la propia comunidad de Internet la que decide la relevancia de un documento mediante su indexación. Public Knowledge Project http://pkp.sfu.ca Es un proyecto iniciado por la University of British Columbia hace más de una década y está destinado a mejorar los canales de distri-
  • 147. bución de la investigación y buscar formas alternativas de comuni- cación científica a través de las TIC. OER Commons www.oercommons.org Comunidad de recursos educativos abiertos (para todos los niveles de la educación formal) creada en 2007 y de un gran crecimiento en los últimos dos años, en sociedad con más de 120 proveedores de contenidos y más de 24.000 recursos accesibles. Poseen un pro- yecto wiki. http://wiki.oercommons.org/mediawiki/index.php/ Projects Innovations report www.innovations-report.com Se autodefinen como un foro para la ciencia, la industria y los ne- gocios. Un espacio colaborativo a nivel europeo con más de 13.000 capítulo 4 informes, investigaciones científicas, conferencias, proyectos com- petitivos, premios, etc. ResearchGate 145 https://www.researchgate.net Una red social hecha por científicos para científicos, diseñada bajo geekonomía el concepto de ciencia 2.0. Fomenta la cooperación entre los profe- sionales, la industria y el mundo académico. Public Library of Science / PLOS www.plos.org Creada en 2000, se trata de una organización sin fines de lucro de científicos creada con el objetivo de propiciar la literatura científica de acceso abierto y gratuito. SciVee www.scivee.tv Un YouTube para investigación científica creado en 2007 por dos in- vestigadores de la UC San Diego y la UC Davis. La National Science Fundation de Estados Unidos, la Public Library of Science y el San Die- go Supercomputer Center también participan en el proyecto. Sus crea- dores consideran que los contenidos multimedia serán pronto parte destacada de la comunicación científica y trabajan en ese sentido.
  • 148. Cinco ideas principales del capítulo 4 1 Parte del sistema universitario sufre una crisis desde el momento que deja de construir escasez, relega la experiencia de pertenecer Un radar para producir en el postdigitalismo como foco y pone su eje en ofrecer contenidos y emitir títulos oficiales. Esta crisis institucional de entornos, interfaces y métodos de aprendi- zaje está matizada por factores positivos. Pero ¿qué sucedería si en algún momento se cuestionara su monopolio de la acreditación? 2 Las universidades de élite seguirán trabajando bajo la economía de la escasez y la reputación. La dificultad se trasladará a las mar- cas blancas universitarias, que no han sabido construir prestigio y se convirtieron en un costoso parking de jóvenes antes de su ingreso al mercado laboral y en un aún más costoso espacio de profesores sin redes internacionales, exigencias meritocráticas ni competencia real. 146 3 La innovación debe ser prioritaria en la rutina docente, a través de: polialfabetización; producción contra la invisibilidad; diseño de entornos significativos que enfaticen los territorios mentales sobre los geográficos o departamentales; autocrítica en las instancias de re- geekonomía visión entre pares, meritocracia y lucha contra la endogamia; nuevas ideas anuales en el ejercicio de la docencia. 4 Los profesores universitarios debemos adaptarnos a los nuevos tiempos. Pero ¿cuál es la responsabilidad de los alumnos en todo este proceso? ¿Cuál es su voluntad de pasar de sujeto pasivo a activo de su propia educación? Deben cambiar la actitud de frecuentar una universidad-hotel para formar parte de una universidad-laboratorio. 5 No es correcta una segmentación nítida entre supuestos nativos digitales disruptivos y profesores analógicos démodé. Así, toda la presión del cambio es del profesorado y se quita responsabilidad a los estudiantes. Es erróneo creer que los jóvenes son más productivos porque son multitasking. Su capacidad es un signo de su tiempo. En cada generación existen virtudes y conductas menos dinámicas.
  • 149. Cinco recursos relacionados disponibles en Internet 1 De los recursos de open education que mencionamos en el punto 2, quisiera destacar: MIT OpenCourseWare. http://ocw.mit.edu/OcwWeb/web/home/ home/index.htm iTunesU. www.apple.com/education/guidedtours/itunesu.html TED Conferences. www.ted.com 2 Bain, Ken (2004). What the best college teachers do. Harvard University Press. Boston. Disponible de forma gratuita en Google Books. http://tinyurl.com/nptmby 3 “How Web-Savvy Edupunks Are Transforming American Higher capítulo 4 Education”, Anya Kamenetz. Fast Company, 1 de septiembre de 2009. www.fastcompany.com/magazine/138/who-needs- harvard.html 147 4 VVAA (2008). La generación interactiva en Iberoamérica. Niños y adolescentes ante las pantallas. Ariel. Colección Fundación geekonomía Telefónica. Madrid. http://www.fundacion.telefonica.com/ debateyconocimiento/media/publicaciones/La_Generacion_ Interactiva_en_Iberoamerica.pdf 5 “Platforms for Collaboration”, Satish Nambisan. Stanford Social Innovation Review, verano de 2009. www.ssireview.org/ images/articles/2009SU_Feature_Nambisan.pdf
  • 150. Notas Capítulo 4 1. Como ejemplo vale recordar que la educación secundaria era a comien- zos del siglo xx un privilegio de las clases altas. En 1910 la tasa de alumnos en la educación media de Estados Unidos, aun en los estados más ricos, no superaba el 30% de los adolescentes entre 14 y 17 años. Treinta años más Un radar para producir en el postdigitalismo tarde la escolarización secundaria superaba el 70% y llegaba hasta el 90%, según los estados (Carr, 2008). Como es de imaginar, el acceso a la educa- ción superior era aún mucho más limitado y las tasas actuales de ingreso representan un enorme paso hacia delante en la transformación que se ha dado en los últimos cincuenta años de una universidad de élite a una universidad masiva. Un dato de España demuestra la profunda integración de la mujer en la comunidad universitaria en la segunda mitad del siglo xx. Según el Informe de la Inclusión Social en España 2009 de la Fundación Caixa Catalunya, el porcentaje de mujeres con titulación universitaria ha pasado del 4% entre las nacidas antes de 1931 al 45,4% entre las nacidas entre 1971 y 1980. La integración de los hombres a las aulas universitarias es menor. Sólo el 35% entre los nacidos entre 1971 y 1980 poseen título universitario. discovery- net.es/informe_inclusio/informe2009_castella.pdf 148 2. El Programa Erasmus de la Unión Europea, que fomenta la movilidad y geekonomía cooperación de estudiantes y de profesores entre universidades del conti- nente, propició en el período 2007-2008 el traslado de 162.000 estudiantes y 27.000 profesores. Desde su creación en 1987, Erasmus ha superado la barrera de los dos millones de estudiantes de intercambio. http://europa. eu/rapid/pressReleasesAction.do?reference=IP/09/1204&format=HTML &aged=0&language=ES&guiLanguage=en 3. En 2009 alcanza más de 2.000 cursos gratuitos accesibles en la Red y gratuitos. Su homólogo OpenCourseWare Consortium reúne en 2009 a más de 200 instituciones en 32 países. 4. Observando la bajísima ratio de alumnos aceptados en primer año en las principales universidades norteamericanas, se tiene una noción más exac- ta de la idea de escasez del sistema y la pertenencia entre quienes consi- guen ingresar. Éstos son los porcentajes de ingresos asociados al número de quienes presentan la solicitud: Harvard University, 7,9%; Princeton Uni- versity, 9,9%; Yale University, 8,6%; MIT, 11,9%; Stanford University, 9,5%.
  • 151. Datos de 2008 basados en: http://colleges.usnews.rankingsandreviews. com/best-colleges/national-universities-rankings 5. Recomiendo el excelente artículo “How Web-Savvy Edupunks Are Trans- forming American Higher Education”, Anya Kamenetz. Fast Company, 1 de septiembre de 2009. www.fastcompany.com/magazine/138/who-needs- harvard.html Por otra parte, Stephen Downes analiza en su blog la evolución del meme edupunk: www.downes.ca/cgi-bin/page.cgi?post=44760 6. Cristóbal Cobo aporta documentación sobre esta discusión en su exce- lente e-rgonomic. Validando el conocimiento informal, 30 de septiembre 2009. http://ergonomic.wordpress.com/2009/09/30/informal-learning-2 Destaca el documento European guidelines for validating non-formal and informal learning (2009). Office for Official Publications of the Euro- pean Communities, CEDEFOP. www.cedefop.europa.eu/etv/Informa- capítulo 4 tion_resources/Bookshop/publication_download.asp?pub_id=553&dl_ id=1752&pub_lang=EN 7. Dos de las universidades más importantes y masivas de la región, la Uni- 149 versidad de Buenos Aires (UBA) y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), son totalmente gratuitas. La gratuidad de las universida- geekonomía des públicas iberoamericanas (en España no son gratuitas, pero su coste de acceso es muy bajo) se enrola en la categoría cross-subsidies del mo- delo Free que analiza Anderson (2009). Esto significa que para el alumno es gratis, pero los ciudadanos pagan de forma indirecta a través de sus impuestos. 8. Refiriéndose a las universidades catalanas Manuel Castells afirmó en una conferencia en 2008: “les falta flexibilidad y adolecen de una excesiva politi- zación”. www.lavanguardia.es/lv24h/20081110/53575898742.html 9. Aprobado por la Unión Europea en 1999, el Plan Bolonia ha sido creado para modificar el plan de estudios de las universidades europeas y adaptar- las a un formato común en todo el continente. La implementación del Plan Bolonia ha significado para la universidad española un avance importante de adaptación al espacio superior europeo, favoreciendo la superación de su retraso histórico. http://ec.europa.eu/education/higher-education/ doc1290_en.htm
  • 152. 10. http://digitalistas.blogspot.com/2009/01/universidad-empresa-e- innovacion-entre.html 11. Un concepto acuñado para los más jóvenes es el de Generación Einstein (quienes tienen entre 12 y 20 años). Se los denomina Generación Einstein por- que, según el investigador James Flynn, se hace referencia al grupo etario Un radar para producir en el postdigitalismo más inteligente que se haya conocido, dado que el cociente de inteligencia está creciendo hasta 25 puntos por cada generación. La Generación Einstein fue precedida por los Millennials. Wikipedia recopila adecuadamente todos los términos. http://en.wikipedia.org/wiki/Generation_Y 12. Prensky, Marc (2009). “Homo Sapiens Digital: From Digital Inmigrants and Digital Natives to Digital Wisdom”. Innovate. Journal of Online Edu- cation, vol. 5, nro. 3, febrero-marzo de 2009. http://innovateonline. info/?view=issue 13. Jones, Sydney; Fox, Susannah (2009). “Generations Online in 2009”. Pew Internet & American Life Project, 28 de enero de 2009. www.pewinternet. org/Reports/2009/Generations-Online-in-2009.aspx?r=1 150 14. Rowlands, Ian; Nicholas, David; Williams, Peter; Huntington, Paul; Field- house, Maggie; Gunter, Barrie; Withey, Richard, Jamali, Hamid; Dobrowolski, geekonomía Tom; Tenopir, Carol (2008). “The Google generation: the information be- haviour of the researcher of the future”. Aslib Proceedings, vol. 60, nro. 4, pp. 290-310. www.emeraldinsight.com/Insight/viewContentItem.do;jses sionid=21ACEEABAEB68DEBA9A0A6EEC12AACFA?contentType=Article&c ontentId=1733495 15. “L’adolescència digital”, Laura Nicolás. Avui, 2 de octubre de 2009. www.avui.cat/cat/notices/2009/10/l_adolescencia_digital_73515.php 16. VVAA (2008). La generación interactiva en Iberoamérica. Niños y ado- lescentes ante las pantallas. Ariel. Colección Fundación Telefónica. Madrid. www.fundacion.telefonica.com/debateyconocimiento/media/publica- ciones/La_Generacion_Interactiva_en_Iberoamerica.pdf El informe es muy completo y muestra las desigualdades regionales de ac- ceso y consumo de los nativos digitales. En relación con los usos educativos de las TIC, en un fragmento del análisis se señala: “El uso de Internet en la escuela no implica una preferencia mayor por los contenidos educativos o
  • 153. culturales; aunque éstos son visitados por un porcentaje mayor de indivi- duos –que crece con la edad y es mayor entre las chicas–, los contenidos relacionados con el ocio siguen siendo los preferidos”. La investigación concluye que la categoría ocio es la dominante en los usos de las TIC: “El primero lo constituye la búsqueda de experiencias de ocio en el acceso a Internet. Dicho de otro modo, algunos de los contenidos incluidos en esta categoría son los que mayores puntuaciones obtienen, destacando la músi- ca, los juegos, el humor o los deportes”. 17. Fundación Caixa Catalunya. Informe Inclusión Social en España 2009. disco- verynet.es/informe_inclusio/informe2009_castella.pdf. El estudio de la Fun- dación Caixa Catalunya concluye que el aislamiento educativo y el riesgo de fracaso escolar se transmite entre generaciones. La vulnerabilidad educativa severa es prácticamente inexistente en familias donde el padre o la madre po- seen educación superior. La estructura productiva de las comunidades autóno- mas es otro factor de influencia en la deserción escolar. Un mayor porcentaje capítulo 4 de oferta laboral que requiere menor formación aumenta el índice de deser- ción escolar. Ambas variables no tienen que ver a priori con la alfabetización digital de estos jóvenes autoexcluidos del sistema educativo. Sin embargo, di- cha exclusión los ubica en un rango diferente al rango con el que habitualmen- 151 te se generaliza a los nativos digitales en las economías desarrolladas. geekonomía 18. “A Talking Head Dreams of a Perfect City”, David Byrne. The Wall Street Journal, 11 de septiembre de 2009. http://online.wsj.com/article/SB10001 424052970203440104574403293064136098.html 19. Eyal Ophir, Eyal; Nass, Clifford; Wagner, Anthony (2009). “Cogni- tive control in media multitaskers”. Proceedings of the National Aca- demy of Sciences, 24 de agosto de 2009. www.pnas.org/content/ early/2009/08/21/0903620106.abstract 20. Rubinstein, Meyer y Evans (2001). “Executive Control of Cognitive Processes in Task Switching”. Journal of Experimental Psychology: Human per- ception and performance, vol. 27, nro. 4, 2001. www.umich.edu/~bcalab/ documents/RubinsteinMeyerEvans2001.pdf 21. Bennett, Sue; Maton, Karl; Kervin, Lisa (2008). “The ‘digital natives’ debate: A critical review of the evidence”. British Journal of Educational Technology, vol. 39, nro. 5, 2008. www.cheeps.com/karlmaton/pdf/bjet.pdf
  • 154. 22. Por provocadora y sutil, esta sentencia de Brey (2009) me parece genial: “Cualquiera, con independencia de su formación y aun dando muestras evi- dentes de su falta de cultura y de ánimo de enmienda, puede acceder a lo más alto de la estructura social. Cualquier observación al respecto emitida en público sería considerada hoy políticamente incorrecta. La ignorancia es atrevida, desacomplejada y, como todos en esta sociedad que constante- Un radar para producir en el postdigitalismo mente reclama, exige también que se respeten sus derechos”. 23. Lorenzo, George; Dziuban, Charles (2006). “Ensuring the Net Genera- tion is Net savvy”. Educause Learning Initiative Paper 2. www.educause.edu/ir/library/pdf/ELI3006.pdf 24. Se trata de propiciar la emergencia: el movimiento desde reglas de mí- nima complejidad hacia niveles de gran sofisticación. Interacciones locales que resulten en algún tipo de macrocomportamiento discernible (Johnson, 2001). Mitchell (2009) iguala emergencia a complejidad y define que un sistema complejo es aquel en el cual grandes redes de componentes sin un control central y simples reglas operativas dan lugar a un comportamien- to colectivo complejo, sofisticado y muy evolucionado. http://digitalistas. blogspot.com/2009/10/una-lectura-sobre-la-complejidad-y-la.html 152 25. “The use of ICT to support innovation and lifelong learning for all”. geekonomía A report on progress European Commission, 9 de octubre de 2008. http://ec.europa.eu/education/lifelong-learning-programme/doc/ sec2629.pdf 26. Smith, Sarah; Potoczniak, Anthony (2005). “Five Points of Connectivity”. EDUCAUSE Review, vol. 40, nro. 5, septiembre-octubre de 2005. www.educause.edu/EDUCAUSE+Review/EDUCAUSEReviewMagazineVo- lume40/FivePointsofConnectivity/158001 27. “An Introduction to Connective Knowledge”, Stephen Downes. www.downes.ca/cgi-bin/page.cgi?post=33034 28. Wired Magazine publicó un excelente artículo sobre SuperMemo en su nú- mero de mayo de 2008. www.wired.com/medtech/health/magazine/16- 05/ff_wozniak Más información en Wikipedia: http://en.wikipedia.org/wiki/SuperMemo
  • 155. 29. Lunsford, Andrea (2008). The Stanford Study of Writing. http://ssw.stanford.edu 30. “El currículum posmoderno en la cultura digital”. Tíscar Lara. ZEMOS98. 1 de marzo de 2007. www.zemos98.org/spip.php?page=imprimir_articulo&id_article=370 31. Según Blum (2009), el 68% de los estudiantes norteamericanos admite haber copiado y pegado de Internet sin citar, en lo que la autora considera hacer trampa en proporciones epidémicas. 32. Véase “The future of reading”. Clive Thompson. Wired Magazine, junio de 2009. www.wired.com/techbiz/people/magazine/17-06/st_thompson 33. “Knowmads in Society 3.0”. John Moravec. Education Futures, 20 de no- viembre de 2008. www.educationfutures.com/2008/11/20/knowmads- capítulo 4 in-society-30/ 34. Existe una versión en castellano editada por la Universitat de València. Bain, Ken. 2007. Lo que hacen los mejores profesores universitarios. Universi- 153 tat de València. Valencia. La versión original del libro What the best college teachers do (Harvard University Press, 2004) está disponible en forma gra- geekonomía tuita en Google Books. http://tinyurl.com/nptmby 35. Esos estilos heterogéneos tienen que ver con las tres categorías de alumnos que describe Bain (2007) según su actitud hacia el apren- dizaje: a) aprendices profundos y críticos; b) aprendices estratégicos: aquellos que se centran en tener un buen desempeño en la universi- dad, sin desarrollar una comprensión en profundidad de los temas; c) aprendices superficiales: aquellos que evitan equivocarse, recurrien- do a la memorización e intentando reproducir lo que han oído en cla- se, abocándose a la tarea bajo los parámetros mínimos de exigencia. Bain (2007) también categoriza la relación de los alumnos con el conocimien- to de menor a mayor compromiso: sabedores de lo aceptado; sabedores sub- jetivos (todo es materia opinable, entonces si les va mal es porque el profesor no coincide con su pensamiento), sabedores del procedimiento (aprendices estratégicos); sabedores separados (se distancian de una idea, permanecen objetivos o escépticos y siempre dispuestos a discutirla) y sabedores conecta- dos (pensadores independientes, críticos y creativos). El autor considera que
  • 156. un mismo estudiante puede trabajar en uno o más niveles de esta jerarquía. En una conversación informal en 2009 sobre el tema con el profesor y psi- cólogo argentino Marcelo Bentancour tomé nota de algunas observaciones que me hizo a las que refiero aquí. Bentancour cree que el estilo de supervi- sión en el aula depende del grado de autonomía preexistente de cada alum- no. En algunos casos asumir una actitud directiva puede impulsar al alumno Un radar para producir en el postdigitalismo a desarrollar los objetivos del curso; pero en otros casos –alumnos con ma- yores niveles de autonomía– la “presión” o supervisión estricta puede tener como consecuencia la inhibición de la conducta y un mal desempeño. 36. Cruz Castro, Laura; Sanz Menéndez, Luis; Aja Valle, Jaime (2006). “Las trayectorias profesionales y académicas de los profesores de universidad y los investigadores del CSIC”. Consejo Superior de Investigaciones Científi- cas (CSIC) España. Junio de 2006. http://digital.csic.es/handle/10261/1667 El estudio parte de una encuesta por correo realizada entre noviembre de 2004 y junio de 2005 a un total de 2.588 investigadores funcionarios del sistema universitario español, de los cuales 2.350 eran profesores titulares de universidad. Un artículo provocador sobre el problema de la endogamia en la universi- dad española es: “Uno de los nuestros...”. Miguel Delibes de Castro. El País, 154 30 de octubre de 2006. Delibes de Castro afirma: “Por desgracia, en nuestro país los profesores universitarios se seleccionan con demasiada frecuencia geekonomía por procedimientos poco transparentes, donde amiguismo y enchufe pesan sustancialmente más que la investigación y la docencia”.www.elpais.com/ articulo/educacion/elpedupor/20061030elpepiedu_3/Tes 37. Para profundizar en el concepto de competencias digitales o e-skills re- comiendo consultar en el portal del seminario E-competencias: “Creación de capital humano para los siglos 21 y 22”, 31 de octubre de 2008. Ciudad de México. Esta actividad estuvo coordinada por Cristóbal Cobo Romaní y está basada en el trabajo colaborativo de académicos de Flacso-México, la Univer- sidad de Minnesota y la Universidad de Toronto. http://e-competencies.org También es muy útil el mapa de e-competencias realizado por Cristóbal Cobo en Mindmeister. www.mindmeister.com/10614530 38. “Platforms for Collaboration”. Satish Nambisan. Stanford Social Innova- tion Review, verano de 2009. www.ssireview.org/images/articles/2009SU_ Feature_Nambisan.pdf
  • 157. 39. Chesbrough, Henry William (2003). Open innovation: the new imperative for creating and profiting from technology. Harvard Business School Press. Boston. http://tinyurl.com/yd95vlg Center for Open Innovation. Haas School of Business. UCBerkeley. http://openinnovation.haas.berkeley.edu 40. www.elpais.com/articulo/sociedad/Megacampus/crisis/elpepisoc /20080714elpepisoc_2/Tes 41. Sobre los intérpretes, véase Seed Magazine. http://revminds.seedma- gazine.com/revminds/members/group/the_interpreters 42. www.flacso.edu.mx/competencias/index.php?option=com_ bookmarks&Itemid=9 capítulo 4 155 geekonomía
  • 158. geekonomía Un radar para producir en el postdigitalismo 156
  • 159. capítulo 5 Capítulo 5 157 El dulce discurso geekonomía de la I+D+I. Entornos significativos o voluntarismo
  • 160. Según Davenport y Prusak (2001) los componentes centrales del conocimiento son: experiencia, ver- dad práctica, complejidad, valores éticos, creen- cias, reglas empíricas (heurística), criterio e intui- ción. La investigación más desarrollo más innovación tecnológica Un radar para producir en el postdigitalismo (I+D+I) es la puesta en marcha de procesos asociativos de conoci- miento utilizando estos componentes, siempre vinculados a condi- ciones económicas adecuadas y a un entorno influyente, como veía- mos en el análisis de los smart spots en el capítulo 4. La investigación requiere de inversión pública y privada, institu- ciones de calidad e infraestructuras con recursos humanos capaci- tados y funcionando bajo un mecanismo meritocrático. El desarro- llo requiere de lo mismo más cultura empresarial que convierta la investigación en productos. El rol de la financiación no es secun- dario. Debe existir apoyo económico para los nuevos actores, por- que muchas veces los líderes del mercado no innovan y fomentan el statu quo por miedo a perder ese liderazgo. Muchos referentes industriales del siglo xx están en crisis por falta de innovación en 158 sus productos. Como agravante, perjudican al usuario con estra- tegias monopólicas y combaten la integración de nuevos actores geekonomía industriales que buscan hacerse un lugar con ideas innovadoras. Por último, se concentran en sus productos exitosos y recortan in- versión en investigación. A veces, lo que es bueno para ajustar los balances de una compañía, es malo para la economía a largo pla- zo, porque son precisamente las empresas líderes las que deberían innovar en base a la I+D+I, ya que poseen más capital para desti- nar a la investigación básica y llevar la innovación hacia delante. La innovación es según Castells (2009) “la capacidad para recom- binar factores de producción de una forma más eficiente y/o obtener un valor añadido mayor en el proceso o el producto”. La innovación requiere de un ecosistema social con tolerancia al riesgo y al fracaso y baja resistencia cultural para absorber las transformaciones. Con respecto a la tolerancia al riesgo, Brey (2009) cree que existe una parte del discurso de la emprendeduría que habitualmente no se analiza en los medios. La mayoría de las veces que se emprende algo, las cosas no salen bien. Sólo se conocen los casos de éxito,
  • 161. pero muchos buenos proyectos acaban en fracaso por múltiples motivos. Fracaso y éxito son dos caras de la misma moneda y par- te del proceso de aprendizaje en la rutina de los emprendedores. La cultura en la que se desarrolla la innovación también es deter- minante. Csikszentmihalyi (1996) considera que la creatividad (y la innovación es producto de ella) es el resultado de la interacción de un sistema compuesto por tres elementos: una cultura que contiene reglas simbólicas, una persona que aporta novedad al campo sim- bólico y un ámbito de expertos que reconocen y validan la innova- ción. Para uno de los principales analistas mundiales en creatividad, las ideas o productos que merecen el calificativo de creativos surgen de la sinergia de muchas fuentes y no sólo de la mente de una per- sona aislada. La I+D+I es uno de los memes de la clase política de todo el mun- do, aunque pocas veces se transfiere a la economía real, dada la capítulo 5 falta de uno o más de los requerimientos antes señalados. En Ibero- américa la referencia al tema es constante, y se ve potenciado por la crisis económica de este último trienio. Pero su puesta en marcha de forma masiva requiere de décadas de políticas coherentes, con 159 un esfuerzo conjunto del Estado, las universidades, la banca priva- da y los grupos de inversión, como demuestra el modélico caso de geekonomía Finlandia1 y el apoyo del sector público y privado norteamericanos a la innovación en ciencia y tecnología en sus diferentes fases eco- nómicas durante el siglo xx. Como ejemplo de esto último, se pue- de mencionar la inversión en investigación básica y la puesta en marcha del exitoso proyecto público ARPANET a mediados de 1960, un determinante clave en el crecimiento de la economía de las TIC norteamericana dos décadas después. Los resultados de ARPANET promovieron el incremento de la productividad general, crearon nuevos mercados, generaron puestos de trabajo calificados y afian- zaron el rol de liderazgo tecnológico mundial de los Estados Unidos. Esa filosofía se repite en el actual cambio de ciclo producido por la crisis global. Del mismo modo que la economía de la sociedad de la información ha sido el motor central del crecimiento del conjun- to de la economía norteamericana en los últimos treinta años, la Administración Obama trabaja actualmente para crear las precondi- ciones de la nueva fase de crecimiento, financiando la investigación básica en energías renovables y creando la ARPA-E (Advances Re-
  • 162. search Project Agency-Energy), un centro de investigación a imagen y semejanza de su antecesor. Pero a la innovación se le suma una variable que ha ganado fuer- za teórica en los últimos años y que coloca a los ciudadanos como filtros responsables de las transformaciones industriales. Con un ar- Un radar para producir en el postdigitalismo gumento similar a Csikszentmihalyi, Ilkka Tuomi (2002) estudia el tema a fondo y cree que la innovación se produce a través de la interacción entre los usuarios y no puede ser localizada exclusiva- mente en una sola firma o inventor. Lo cual convierte las prácticas de consumo en esenciales. El concepto más significativo de la última década en este campo es el de user-driven innovation, innovación di- rigida por los usuarios. El fenómeno de la innovación conducida por el usuario merece una mención especial. Se relaciona directamente con los capítulos 1 y 3 de este libro y es una variable que debe ser tomada muy en cuenta cuando se enseña innovación en las univer- sidades o se escribe sobre ella. Consciente de su relevancia para enfrentarse a la crisis económica, el Gobierno Obama ha creado la White House Office of Social Innovation and Civic Participation, 2 con eje en el soporte a organizaciones sin fines de lucro que trabajan 160 en innovación social colaborativa. Otros emprendimientos en red van en el mismo sentido. Instituciones clásicas como la Rockefeller geekonomía Fundation financian procesos de innovación basados en recursos abiertos.3 El Berkeley’s Center for Open Innovation4 impulsa a los changemakers. La empresa privada IDEO5 es mundialmente famosa por su filosofía de innovaciones conducidas por el usuario. Positive Deviance Initiative6 trabaja con los líderes comunitarios y los outliers sociales (Gladwell, 2008) identificando los procesos que giran alre- dedor de su liderazgo y analizando sus prácticas para convertirlas en conocimiento tácito. Un caso de innovación social fascinante es el de mPedigree,7 una red que trabaja en África para facilitar que las personas puedan detectar fármacos falsos mediante una simple consulta vía SMS en sus teléfonos móviles. A continuación se analizan dos ecosistemas de I+D+I específicos de economías desarrolladas: Silicon Valley y España. A partir de sus características el lector puede encontrar la explicación a sus enor- mes diferencias de productividad. El primero, un entorno significa- tivo y referencial; el otro, uno voluntarista y poco eficiente.
  • 163. 1. Silicon Valley: un entorno irreplicable e impaciente Muchas de las condiciones preexistentes para la innovación están arraigadas en la historia del sueño americano de la mano de próceres emprendedores como Cornelius Vanderbilt8 o J.P. Morgan. Como ya señalé, varios autores (Csikszentmihalyi, 1996; Florida, 2005 y 2008; Castells, 2009; Byrne, 2009) consideran que existen lugares privilegia- dos en el mundo para desarrollar la innovación. Todas las variables que convierten un sitio físico en un smart point industrial están conte- nidas en la geografía de Silicon Valley, California. Según Tuomi (2002), Silicon Valley se ha vuelto un portal del sistema de la innovación glo- bal, dada su capacidad para recombinar rápidamente recursos y tec- nologías. Como alguna vez dijo el físico Bernardo Huberman,9 Silicon Valley es un entorno impaciente que se reinventa cada cinco años. El famosísimo discurso de Steve Jobs Mantente hambriento, mantente alocado10 representa el alma del Valle del Silicio. Pero estos lugares capítulo 5 simbólicos no nacen por generación espontánea sino que son fruto de años de focalizada estrategia. Esa filosofía es la que hace que la región, a pesar de ser muy pequeña en tamaño, signifique tanto en la economía de la información mundial. Aunque muchos políticos y 161 diseñadores institucionales pretendan replicarla en sus propias eco- nomías, esto es sencillamente imposible debido a las variables que se geekonomía analizarán más adelante, siendo las más significativas la cultura del riesgo empresarial y el capital riesgo que aporta una masa de recur- sos financieros única al servicio de los emprendedores. Hay decenas de cronologías sobre la historia de Silicon Valley.11 Haré una breve síntesis. Su denominación es una invención periodística de la década de 1970 y se trata de un espacio geográfico de un enorme dinamismo empresarial que abarca la parte sur de la Bahía de San Francisco, más concretamente el Valle de Santa Clara. La ciudad más importante en densidad de población es San José, pero Silicon Valley está muy asociada a las ciudades de Palo Alto, Menlo Park, Mountain View, Sunnyvale, Milpitas y Cupertino, entre otras. Zona agrícola por excelencia hasta que la familia Stanford creó Stanford University en 1891, llamada realmente Leland Stanford Jr. University en homenaje a uno de los hijos del clan familiar, muerto de fiebre tifoidea en 1884. Los historiadores de la región coinciden en que sin las sinergias de Stanford U, Silicon Valley no hubiera existido, o por lo menos no hu-
  • 164. biera nacido allí. Aunque toda la red universitaria pública de Califor- nia (especialmente las más cercanas UC Berkeley, UC San Francisco, UC Santa Cruz y UC Davis) y otras universidades del país contribuyen con su masa crítica de recursos humanos al desarrollo de la región, la privada Stanford U es su motor y se sitúa entre las 5 universida- des más importantes del mundo y entre las 3 más prestigiosas en Un radar para producir en el postdigitalismo cuanto a investigación tecnológica, conformando un territorio físico único para las empresas.12 La universidad promueve una filosofía de trabajo que da orientación empresarial a la investigación científica, transformando ideas en oportunidades de negocios. La innovación funciona como una sensible membrana de conexión con el mercado. La historia de la simbiosis de investigación tecnológica entre el Valle y Stanford U es muy larga. Veamos algunos hitos. Con el apoyo de la universidad, en 1909 Charles Herrold hizo la primera transmisión comercial de radio del mundo. En 1911, Cyril Elwell fundó en Palo Alto la Federal Telegraph Company. En los años treinta, William Hewlett y David Packard abrieron su empresa fa- bricando osciladores de audio. Ya en esa década el Valle de Santa Clara se posicionaba como el lugar de las innovaciones electrónicas 162 de la Costa Oeste norteamericana. Con la Segunda Guerra Mun- dial, el trabajo de investigación en Stanford U creció en prestigio y geekonomía contribuyó a muchos emprendimientos tecnológicos militares, con el padrinazgo del Departamento de Defensa. En 1946, se fundó el Stanford Research Institute, de donde surgieron decenas de innova- ciones, entre ellas el módem y el ratón para uso en ordenadores.13 En 1950, IBM (con su sede corporativa en Nueva York) se instala en la región, contribuyendo aún más al fortalecimiento de la investiga- ción y de los negocios en la parte sur de la Bahía de San Francisco. Ya en 1960 más de 60 firmas de la industria electrónica estaban ins- taladas en el Valle. Pero las olas de innovación fueron cambiando. Los circuitos integrados en la década de 1960. Las computadoras personales entre 1970 y 1980. A continuación el software derivado de esa invención, y por último Internet, con las aplicaciones 1.0 y luego, ya a comienzos del siglo xxi con la Web 2.0. Esta constante evolución ha convertido Silicon Valley en una referencia empresa- rial de industrias high-tech de orden mundial, afectando a la trans- formación de la economía de la sociedad de la información en todo el planeta. Cuando la Web nació a comienzos de la década de 1990,
  • 165. la industria tecnológica del Valle de Santa Clara estaba más que pre- parada para absorber toda la innovación que ese nuevo entorno precisaba. En la lógica de reinventarse cada cierto tiempo, el futuro mediato de Silicon Valley es la biotecnología y la nanotecnología. Hasta existen emprendimientos en la industria automotriz, con em- presas innovadoras como Tesla Motors. Según Anderson (2009)14 el futuro en el Valle será más start-ups, pocos gigantes e infinitas oportunidades basadas en la desagregación con empresas grandes divididas en pequeños nichos. Silicon Valley posee algunas propiedades que lo hacen único en el mundo. Pocas regiones poseen una incidencia económica global tan decisiva. Es una de las últimas verdaderas meritocracias. Una idea inno- vadora junto a una incansable ética del esfuerzo e inversores sostenien- do dicho trabajo pueden transformar a unos jóvenes desconocidos en millonarios en menos de una década, como ha sucedido en el paradig- capítulo 5 mático caso de Google. Veamos esas propiedades particulares: • La valoración del fracaso como experiencia empresarial. La idea es que quienes fracasan una vez lo intentan nuevamente. Lo 163 más interesante es que quienes aciertan se ponen a prueba creando nuevas empresas, para saber si la primera ha sido un éxito fortuito o geekonomía fruto de su capacidad, como señala Lacy (2008) en Once you’re lucky. Twice you’re good. Producto de un entorno propicio, los emprende- dores en Silicon Valley son personas normales que pueden hacer cosas sorprendentes, con concentración, esfuerzo, perseverancia y sin temor al fracaso. • Cuarenta años de acumulación de buenas y malas prácticas, competencia y experiencia en recursos humanos. El punto crítico es el acceso masivo a ingenieros de primer nivel, emprendedores e inversores, que vienen de todo el mundo atraídos por las cualida- des del ecosistema. Y esto sigue creciendo de forma exponencial desde la década de 1970. El prestigio de sus redes profesionales y académicas es el principal factor de incidencia en la masiva y cuali- ficada inmigración estudiantil de postgrado a las universidades de la región, promoviendo investigación de élite y resultados que se transfieren al entorno industrial.
  • 166. • Siempre reconstruir, siempre rediseñar, siempre en beta. Nunca creer que un proyecto está terminado, porque la inacción puede re- trasar un emprendimiento con respecto a la competencia y al deseo de los usuarios. • La estrategia fundacional de spin-offs y start-ups se basa en Un radar para producir en el postdigitalismo una particular relación societaria entre los trabajadores fundado- res, extraordinariamente motivados al compartir la propiedad de la compañía y obtener –si el proyecto tiene éxito– grandes incentivos financieros más allá del salarial. • Generación de nuevos emprendimientos e industrias tecnológi- cas, dada la existencia de un gran volumen de capital riesgo y una masa crítica universitaria dispuesta a hacer el esfuerzo de iniciar empresas. El venture capital hace que el sistema funcione. La impor- tante inyección de capital hacia los emprendedores resulta indis- pensable para alimentar la innovación y el desarrollo en la región. • Comenzar un proyecto sin temer a las dificultades y analizar las oportunidades existentes para competir con el statu quo son actitu- 164 des vitales para emprender. Vale un ejemplo. La escasa visión de las corporaciones de medios tradicionales originaria de la Costa Este geekonomía norteamericana –cerrada y sin estrategias de incorporación de ter- ceros desarrolladores para crear innovación–15 se contrapone con la de los jóvenes emprendedores del Valle. Estos rompedores provie- nen de fuera de la industria tradicional, sin intereses preconcebidos y con deseo de destacar a partir de sus propias ideas. La segunda ola de la emprendeduría Web, además, es ayudada por la experiencia de los veteranos que vivieron en carne propia la burbuja de 2001. 2. Una breve reflexión sobre la I+D+I en España El semanario de negocios Business Week lanzó en 2008 el BusinessWeek’s Annual European Young Entrepreneur Contest16 para escoger al joven emprendedor europeo menor de treinta años. Sor- prende la edad de los participantes y la ambición de sus empren- dimientos. Con veintitrés años, la sueca Therese Albrechtson ya ha creado tres compañías en diferentes industrias. Otro caso es el del holandés P.J. Dorst, con sólo diecinueve años. Se trata de ejemplos
  • 167. admirables y todos sin excepción provienen del norte de Europa, de Holanda, Suecia, Noruega, Dinamarca, Reino Unido y Alemania, así como de Israel. No existe ningún candidato de entre los países me- diterráneos. Este dato no es trivial y tiene que ver con condiciones previas que legitiman estos resultados. En el caso de España, existen ejemplos de emprendeduría muy significativos como el modélico caso de Amancio Ortega y otros cientos de emprendedores posicio- nados a nivel mundial,17 pero se trata más de hombres hechos a sí mismos que no provienen del mundo universitario y no son el fruto de una política institucional coherente con base en la investigación científica. El gobierno Zapatero tomó nota en medio de la crisis de 2008 de la relevancia de la I+D+I como camino a seguir para un crecimiento económico sostenido, con empleo de calidad, y donde la explotación del conocimiento sea el eje del desarrollo nacional. Hasta se creó un Plan Nacional.18 Pero más allá del discurso político, hay datos contundentes que demuestran que se trata sólo de bue- capítulo 5 nas intenciones. No se puede dejar de mencionar que la evolución en I+D+I en España desde el inicio de la transición democrática en 1975 ha sido espectacular: de pasar a ser una economía inexistente en la materia, se ha convertido en una de las diez potencias mundia- 165 les en producción científica. Sin embargo, la realidad actual es que cuando en España se habla de modificar el modelo de desarrollo geekonomía con eje en la construcción y el turismo a uno de base tecnológica, no ha habido políticas activas amplias en este sentido en el último trienio. Se requiere un enorme esfuerzo estratégico y financiero gu- bernamental y privado a fin de diseñar condiciones para la innova- ción disruptiva. Veamos algunas cifras que ubican a España siempre por debajo de la media de la Unión Europea y muy lejos de los índi- ces de Estados Unidos: • Inversión educativa europea. España se encuentra cuarta a la cola con el gasto educativo en el 4,23% de su PIB, sólo mayor que Grecia, Luxemburgo y Rumania, según Eurostat (2008).19 El gasto pú- blico español en educación en 2005 era de un 4,2% del PIB, mientras que la media de la UE-19 era del 5,3% y de la OCDE era del 5,4%. Paí- ses como Noruega y Finlandia invierten un 7% de su PIB, Francia un 5,7% y Estados Unidos un 5,1%,20 con el agravante de los términos diferenciales del PIB en las economías mencionadas.
  • 168. • Índices de innovación. España está en los últimos puestos en la mayoría de índices de innovación europeos, junto a Italia, Estonia, Croacia, Hungría y Eslovaquia (Eurostat, 2008). Según el EIS 2008 (indicadores de innovación),21 España cuenta con un índice del 0,37 mientras la media de la UE-27 es de 0,48. España está por detrás de países como Suiza (0,68), Alemania (0,58), Irlanda (0,53) o Luxembur- Un radar para producir en el postdigitalismo go (0,52); aunque está por delante de otros países mediterráneos como Italia (0,35), Grecia (0,36) o Turquía (0,20). Según el Innovation Scoreboard 200822 España se ubica entre los países de moderada innovación en Europa (3, en un índice de 1 a 4 siendo 4 el dato más bajo), y entre el puesto 25 y el 37 a nivel mundial. El agravante es que España (junto a Italia) está disminuyendo su posición relativa en Europa con respecto a años anteriores y está catalogada entre los países de muy bajo crecimiento. • Inversión en I+D+I. Según la Fundación Cotec,23 el gasto estatal en la materia aumentó el 50% entre 1995 y 2006, alcanzando el 1,2% del PIB. Éste es un dato alentador, aunque se debe tener en cuenta el retraso histórico en el punto de partida de esta cifra reflejado en la comparación con otros países de la zona euro. Según el informe, 166 “en 2006 se gastaba por habitante menos de la mitad que en otros países europeos como Francia o Alemania”. Como agravante y a pe- geekonomía sar del discurso del gobierno a favor del cambio de modelo produc- tivo a través del fomento de la investigación, el presupuesto 201024 del área de Ciencia e Innovación se redujo un 15% con respecto al año anterior, siendo el ministerio más afectado en toda la estructu- ra del gobierno central. En una editorial de Nature de noviembre de 200925 la prestigiosa publicación científica sienta posición en contra de esta reducción presupuestaria. Allí se señala que en los últimos veinte años España se ha convertido en un prestigioso jugador en el mapa de la ciencia internacional a fuerza de inversión estatal. Gran parte de ese mérito se lo llevó la primera gestión del presidente Zapatero entre 2004 y 2008, duplicando el presupuesto en el área y creando un ministerio específico para la ciencia y la innovación, fuera de la órbita educativa. Sin embargo, el artículo cuestiona las recientes medidas y pone como ejemplo a Alemania, donde, en res- puesta a la crisis, el gobierno redujo el gasto público para 2010 en todas sus áreas, excepto en educación y ciencia, donde se han dado fuertes incrementos. Además, según Nature, el gobierno sigue sin
  • 169. tomar medidas para mejorar las condiciones de contratación de in- vestigadores, un proceso lento y carente de competitividad inter- nacional, dado los bajos salarios y los escasos recursos disponibles para proyectos de investigación. • Participación de la banca privada en inversiones de capital riesgo. Más allá del rol del Estado, las empresas y la banca priva- da cumplen una función vital en el ecosistema de la I+D+I. España debe reconfigurar el motor de la ciencia. Como sucede en Estados Unidos, el capital riesgo atrae las ideas y a los emprendedores al mercado. Castells (2009)26 señala que toda innovación implica ries- go por definición y que los actores privados (la banca es uno de los principales) tienen que diferenciar el riesgo ligado a la especula- ción financiera que debe ser eliminado de la nueva economía, del riesgo ligado a la innovación, que debe ser protegido. Por ejemplo, la infraestructura para que se desenvuelva la investigación básica capítulo 5 en Estados Unidos es un conglomerado público-privado27 y una po- lítica de contratación que atrae y recompensa a los mejores inves- tigadores. Esta simbiosis público-privada en la investigación básica es clave en el éxito de la economía americana, porque de esa gran 167 inversión inicial en centros de investigación surgen paradigmas tec- nológicos que se convierten en nuevas industrias y en creación de geekonomía trabajo de calidad. Sólo un dato. Dos de los mayores fondos de pen- siones californianos colocan más de un 10% de sus activos en ca- pital riesgo para las nuevas empresas, generadas en el entramado universitario. ¿Se imaginan a los bancos españoles haciendo algo similar? Según Martín Varsavsky (2007),28 más de un 60% de los operadores privados de capital riesgo en España son profesionales independientes, mientras que el resto están controlados por enti- dades financieras. Según la ASCRI (Asociación Española de Capital Riesgo),29 el volumen de inversión de capital riesgo en el país ha pasado de los 972 millones de euros en el año 2002 a 4.329,6 millo- nes en el 2007. Con la crisis, la inversión total de capital riesgo en el año 2008 alcanzó los 3.026,3 millones de euros, un 32% menos que el año anterior. Según ese informe, el volumen de inversión que se dedica en España al segmento de capital riesgo sigue siendo inferior a la media europea: siendo del 4,5% y en Europa del 6,4% sobre el volumen total del sector. Varsavsky (2007) señala: “Estados Unidos continúa siendo con diferencia el mayor mercado de capital
  • 170. riesgo del mundo, captando el 61% de los nuevos recursos apor- tados y el 62% del volumen mundial de operaciones de buyout. La cuantía invertida en capital riesgo clásico (etapas iniciales + expan- sión) fue en 2005 de 18.600 millones de euros frente a los 12.700 de toda Europa”. Un radar para producir en el postdigitalismo El problema se agrava si se analiza el rol de la banca privada en el acceso al crédito de las pequeñas y medianas empresas españo- las. Según el Consejo Superior de Cámaras de Comercio,30 entre ju- lio y septiembre de 2009 el 84,3% de las Pymes que solicitaron un crédito en una entidad financiera tuvieron dificultades de acceso. Un 13% de las empresas presentadas no han obtenido finalmente créditos. Por último y a pesar de la crisis, el tipo de interés de los créditos otorgados así como las comisiones y gastos operativos de los bancos fueron mayores que en el período anterior para el 61,8% de las empresas con créditos otorgados. Esta escasa participación del capital privado en la inversión a la emprendeduría tiene un efecto secundario también negativo. El capital riesgo funciona como un eficiente filtro que beneficia a 168 las mejores ideas y, además, colabora con su puesta en marcha. Lo que busca el inversor es el éxito del emprendedor para obtener los geekonomía mayores beneficios financieros en el menor plazo de tiempo, sin condicionantes políticos de por medio ni valoraciones extraeconó- micas. Cuando este capital privado es escaso o está ausente, es la burocracia estatal la que controla el mayor volumen de ayudas a los emprendedores. Pero su escala de valores es muy diferente y habi- tualmente se priorizan variables particulares como el interés políti- co-partidario, el localismo, el beneficio a los empresarios con ma- yor contacto con dicho funcionariado, etc. Como bien señala Roig (2008), ¿por qué dejar que funcionarios sin experiencia empresarial ni valor añadido curricular sean quienes controlen un enorme volu- men de capital público y decidan dónde invertir y dónde no, escu- dándose en el supuesto interés común? Roig afirma con gran atino que los empresarios y empleados del sector privado viven adaptán- dose a un mundo competitivo que cambia constantemente y exige una formación permanente, viviendo en carne propia el éxito y el fracaso o ambos a la vez. El funcionariado público no sigue esas exigentes reglas de mercado y es inmune a las crisis, los cambios y a
  • 171. la competencia. Sin embargo es el que decide a quién se financia y a quién no, administrando el dinero de todos los ciudadanos. • Validación de la investigación dentro de las universidades. Si no se pertenece a un centro de investigación con dedicación full- time, el trabajo de investigación de calidad en las universidades tampoco garantiza un crecimiento profesional, dadas las precarias recompensas institucionales31 y el desinterés de la industria por el trabajo de los investigadores doctores, como se analiza en el próxi- mo punto. Al problema de la escasa recompensa a la investigación, pueden agregarse el exceso de formalidades burocráticas del siste- ma, la escasez de recursos y la falta de tiempo para el ocio creativo necesario para la investigación y el juego de la serendipia. En las ciencias sociales, además, existe un ambiente muy poco propenso a pensar en términos de innovación, desarrollo y mercado. capítulo 5 • Porcentaje de investigadores doctores trabajando en el tejido empresarial. Según la Fundación COTEC,32 por cada mil ocupados en España, 5,6 son investigadores mientras que en Estados Unidos son 9,3, en Japón 10,4 y en Finlandia 17,7. Sólo el 10% de los doctores 169 españoles trabaja en empresas. Del total de investigadores doctores en España el 29,8% trabaja en el sector privado mientras que este geekonomía porcentaje llega al 80,5% en Estados Unidos, un 67,9% en Japón o un 48,4% en la UE-25. Otra investigación similar33 sobre la escasa incidencia de inves- tigadores doctores en las empresas españolas indica que el 44,4% de los doctorados entre 1990 y 2006 tenía empleo en el sector de la enseñanza superior y el 35,8% en la administración pública. En tanto, las empresas empleaban al 15,7% de dicho colectivo. • Asignaturas troncales de emprendeduría en los planes de es- tudio de las universidades. Aunque no existen cifras oficiales, mi experiencia me indica que la mayoría de universidades españolas no enseñan emprendeduría ni estrategias de innovación de forma sostenida e integrada en sus planes de estudio. Vale la excepción de las internacionalmente prestigiosas escuelas de negocios IESE, ESADE e Instituto de Empresa (IE).
  • 172. A modo de conclusión, se puede señalar que las precondiciones para desarrollar I+D+I en Silicon Valley y en España demuestran claramente que no hay un componente azaroso en la base de una economía emprendedora, sino políticas consecuentes a largo plazo y otras variables que determinan los resultados. Si bien España no está ni de lejos entre los peores índices a nivel mundial, si está por Un radar para producir en el postdigitalismo debajo de la mayoría de economías desarrolladas del mundo y a la cola de Europa. La crisis golpea fuerte en todo el mundo y Estados Unidos no se libra de ella. Esta crisis también llegó a los centros de investigación y a las universidades de élite, que deben tirar de la in- novación y las patentes de sus grupos de investigación para captar nuevos fondos,34 lo cual hace que el desafío se renueve. En España el movimiento para salir de la crisis resulta lento e ineficiente y no se centra en la I+D+I, como demuestra la alarmante desatención presu- puestaria para 2010. Si no se revierten estas precondiciones, la falta de políticas activas pasará factura en la década que comienza. La misma responsabilidad poseen las empresas. Los investigadores de- berían estar mejor integrados en el tejido empresarial 35 y las gran- des empresas deben asumir su responsabilidad de inversión hacia la investigación básica abierta y bajo formatos de colaboratorios, si 170 no quieren perder protagonismo industrial en los próximos veinte años. El debate está abierto. geekonomía
  • 173. Cinco ideas principales del capítulo 5 1 La investigación requiere de inversión pública y privada, institu- ciones de calidad y meritocráticas. El desarrollo exige lo mismo más cultura empresarial que convierta la investigación en produc- tos. La innovación requiere de un ecosistema social con tolerancia al riesgo y al fracaso y baja resistencia cultural para absorber las transformaciones. 2 En Iberoamérica la referencia al I+D+I es constante, y se ve po- tenciado por la crisis económica de este último trienio. Pero su puesta en marcha de forma masiva requiere de décadas de políticas coherentes, con un esfuerzo conjunto del Estado, las universidades, la banca privada y los grupos de inversión. Y esto no sucede. capítulo 5 3 Todas las variables que convierten a un sitio físico en un smart point industrial están contenidas en Silicon Valley, un portal del sistema de la innovación global, dada su capacidad para recombinar 171 rápidamente recursos y tecnologías. Un entorno impaciente que se reinventa cada cinco años. Su futuro mediato es la biotecnología y la geekonomía nanotecnología. 4 Silicon Valley: valoración del fracaso empresarial; cuarenta años de acumulación de buenas y malas prácticas; siempre reconstruir, siempre rediseñar, siempre en beta; un gran volumen de capital ries- go y una masa crítica universitaria dispuesta a hacer el esfuerzo de iniciar empresas; comenzar un proyecto sin temer a las dificultades; competencia con el statu quo industrial. 5 España: los datos del I+D+I están siempre por debajo de la media europea y muy lejos de los índices de Estados Unidos. Esos datos son: inversión educativa y en I+D+I; índices de innovación; participa- ción de la banca privada en capital riesgo; validación de la investiga- ción dentro de las universidades; porcentaje de investigadores docto- res trabajando en el tejido empresarial.
  • 174. Cinco recursos relacionados disponibles en Internet 1 Un radar para producir en el postdigitalismo Benkler, Yochai (2006). The wealth of networks. How social production transforms markets and freedom. Yale University Press. New Haven. Versión gratuita disponible en www.benkler.org/Benkler_Wealth_Of_Networks.pdf 2 “The New New Economy: More Startups, Fewer Giants, Infinite Opportunity”. Chris Anderson. Wired Magazine, junio de 2009. www.wired.com/culture/culturereviews/magazine/17-06/nep_ essay 3 Science, Technology and Innovation in Europe, Eurostat, 2008. epp.eurostat.ec.europa.eu/cache/ITY_OFFPUB/KS- EM-08-001/EN/KS-EM-08-001-EN.PDF 172 4 Tuomi, Ilkka (2002). Networks of innovation. Change and Meaning in the Age of the Internet. Oxford University Press. geekonomía Nueva York. http://tinyurl.com/yh9rsjj 5 Emprendedores TV. www.emprendedorestv.com Infonomia.com. www.infonomia.com
  • 175. Notas Capítulo 5 1. Copio textualmente una cita propia de Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food (2007) y que es pertinente repetir aquí: “El Foro Económico Mundial en su informe de Ginebra (2004) sitúa a Finlandia a la cabeza de la Sociedad de la Información. Manuel Castells y Pekka Himanen, en el libro El Es- tado del bienestar y la sociedad de la información (2002), lo muestran como uno de los tres grandes modelos de la economía de la información junto a Silicon Valley (California) y Singapur, cada uno de ellos con concepciones diferentes. Según Castells (2002), Silicon Valley es sociedad de mercado más democracia, Singapur es sociedad de mercado más autoritarismo y Finlandia es sociedad de mercado más democracia más Estado social. Analizando el caso de Finlan- dia se valora una inversión en investigación de manera conjunta con un eleva- do nivel de desarrollo en relación con su PIB. Los autores ubican su liderazgo en la cultura de la innovación, como motor de su desarrollo económico actual, ligado a la producción tecnológica de vanguardia”. www.planetaweb2.net capítulo 5 2. www.whitehouse.gov/the_press_office/President-Obama-to- Request-50-Million-to-Identify-and-Expand-Effective-Innovative-Non- Profits 173 3. Entrevista a Judith Rodin, por Eric Nee. Stanford Social Innovation Review, geekonomía verano de 2009. www.ssireview.org/site/printer/q_a_judith_rodin 4. http://openinnovation.haas.berkeley.edu 5. www.ideo.com 6. Me atrae especialmente el trabajo que Positive Deviance Initiative realiza para disminuir la corrupción en los países del Tercer Mundo. Su estrategia es valorar y hacer públicas las buenas prácticas, otorgando relevancia a sus impulsores y valorando su esfuerzo de cara a quienes se corrompen o no se implican a nivel comunitario. www.positivedeviance.org 7. http://mpedigree.net 8. Una excelente biografía de Vanderbilt es The first tycoon. The epic life of Cornelius Vanderbilt, de T.J. Stiles (Alfred A. Knopf. 2009). Constructor de la
  • 176. Grand Central Terminal de Nueva York, un modelo de emprendedor y uno de los orígenes de lo que luego pasó a llamarse el sueño americano. Consul- tor de Abraham Lincoln en la Guerra Civil, lanzó la revolución del transpor- te en el país, reconfiguró Manhattan e inventó la corporación americana moderna. Pocos americanos del siglo xix se asemejaron a Vanderbilt. The New York Times (15 de julio de 2007) mencionó a Cornelius Vanderbilt como Un radar para producir en el postdigitalismo el segundo hombre más rico de la historia de Estados Unidos. Vanderbilt fue uno de los creadores de la cultura de la emprendeduría americana, donde la competencia, la meritocracia y la cultura de la oportunidad son prácticas individuales, sociales y políticas que llegan hasta nuestros días y que permiten comprender el éxito del país y también cierta insensibilidad hacia la desigualdad crónica. Vale hacer énfasis en esta desigualdad crónica y en unos hechos que no se reflejan en el discurso de la meritocracia. El origen de muchos casos de fra- caso social ha sido la imposibilidad de acceso a la escalera social y la falta de oportunidades dada la discriminación que algunas minorías de la sociedad norteamericana han sufrido de forma crónica a lo largo de la historia del país. Muchos emprendedores exitosos deben parte de su éxito al conjunto social, en vista de los bienes generales compartidos que ofrece la sociedad 174 norteamericana. Creer que el status adquirido es resultado exclusivo del mérito individual es ignorar o hacer caso omiso de los esfuerzos colectivos geekonomía de la sociedad a través de escuelas y universidades de calidad financiadas por el Estado. Estas instituciones públicas y privadas que funcionan con fondos sociales y donaciones han permitido crear las condiciones para que los emprendedores concretaran su potencial. En este sentido recomiendo leer “La rebelión de los meritócratas”, Jean-Paul Fitoussi. La Vanguardia, 13 de octubre de 2009. www.almendron.com/tribuna/27339/la-rebelion- de-los-meritocratas 9. En diciembre de 2007 le hice una entrevista a Bernardo Huberman en Stanford University. Huberman es director del Information Dynamics Lab de Hewlett-Packard y Consulting Professor en Stanford U. http://digitalistas. blogspot.com/2007/12/entrevista-bernardo-huberman.html 10. Stay Hungry, Stay Foolish, Steve Jobs. Stanford University, Ceremonia de Graduación de 2005. http://news-service.stanford.edu/news/2005/ june15/jobs-061505.html. Disponible en castellano en www.dailymotion. com/video/x18tsi_steve-jobs_school
  • 177. La frase Stay hungry, Stay Foolish no pertenece a Steve Jobs sino que fue extraída del mítico Whole Earth Catalog y pertenece a Stewart Brand. www.wholeearth.com/index.php 11. Recomiendo el artículo de Wikipedia http://en.wikipedia.org/wiki/Sili- con_Valley. Así como el capítulo 2 de Tecnópolis del mundo (1994) de Manuel Castells y Peter Hall. También la investigación histórica de Christophe Lécuyer (2006), Making Silicon Valley. Innovation and the growth of high tech, 1930-1970. Otra recomendación es Designing Interactions (2006), un libro de entrevis- tas del fundador de IDEO, Bill Moggridge. El trabajo es una observación sobre las innovaciones tecnológicas surgidas en Silicon Valley y posee una imprescindible versión en línea gratuita con las entrevistas disponibles en formato vídeo. www.designinginteractions.com Otro libro que nos ayuda a comprender el momento actual de Silicon Valley es Revolution in the Valley (2004), de Andy Hertzfeld. Es, sin duda, la mejor capítulo 5 historia que se ha escrito sobre el nacimiento del ya mítico Macintosh de Apple a principios de la década de 1980. Una historia narrada desde dentro por uno de sus ingenieros estrella. El origen del libro es www.folklore.org, un sitio web diseñado por el autor con más de cien historias sobre esta revo- 175 lución tecnológica con base en Cupertino y que abarca desde la concepción de la idea en el verano de 1979 hasta su lanzamiento en 1984 y la salida de geekonomía Steve Jobs de la empresa en mayo de 1985. 12. Trabajé como Visiting Professor en el Computer Science Department de Stanford University en dos períodos entre junio-diciembre de 2007 y junio- septiembre de 2009 y puedo dar fe de lo que señalo aquí. Emprender es parte del día a día en la universidad. De mi primer período en 2007, retorné a España con la idea del proyecto de CampusMovil.net. Del segundo perío- do en 2009 nació este libro y la consolidación empresarial de Funky Mobile Ideas SL, la spin-off detrás de CampusMovil.net. 13. El Stanford Research Institute (SRI) fue originariamente creado en el seno de Stanford University y hoy es una organización independiente sin fi- nes de lucro. En el SRI se encontraba uno de los primeros cuatro servidores de la original Arpanet, en 1969, junto a otros ubicados en UC Los Angeles, UC Santa Barbara y University of Utah.
  • 178. 14. “The New New Economy: More Startups, Fewer Giants, Infinite Oppor- tunity”, Chris Anderson. Wired Magazine, junio de 2009. www.wired.com/culture/culturereviews/magazine/17-06/nep_essay 15. De manera similar, la industria automotriz americana fue durante décadas olvidada por el capital riesgo. Los fabricantes de Detroit siempre fueron hosti- Un radar para producir en el postdigitalismo les a desarrolladores de fuera de la industria y éste es uno de los motivos de su actual y profunda crisis. Algunos analistas creen que ninguno de los grandes fabricantes de coches americanos existirá de aquí a una década. Según Mann (2009), para sobrevivir deberán hacer una rápida transición del histórico mo- delo vertical, jerárquico y propietario, a uno modular, colaborativo y abierto a nuevos emprendedores (Charles C. Mann. Wired Magazine, junio de 2009). www.wired.com/culture/culturereviews/magazine/17-06/nep_auto 16. www.businessweek.com/globalbiz/europe/special_reports/ 20081126europesyoun.htm Otro premio muy similar pero en el mercado americano es el Young Inno- vators Under 35 que organiza Technology Review. En Silicon Valley la in- novación en manos de veinteañeros es moneda corriente desde siempre, especialmente en la industria de las TIC a partir de la década de 1980. 176 17. No es que en España falten emprendedores. Podríamos nombrar cientos geekonomía de ellos y algunos de fama mundial: Ferrán Adriá, Custo Dalmau, Martín Varsavsky, Ignacio Pérez Dolset, Koldo Aiestaran, Lorenzo Fluxa, Leopoldo Fernández Pujals, etc. El caso es que falta una política sistemática de em- prendeduría a nivel estatal y con base en los laboratorios. Esto es lo que se analiza en el capítulo. Para conocer el trabajo de los emprendedores espa- ñoles, recomiendo el nuevo canal web Emprendedores TV. www.emprendedorestv.com También aconsejo consultar Infonomia.com. www.infonomia.com 18. www.plannacionalidi.es/plan-idi-public 19. Informe Science, Technology and Innovation in Europe, Eurostat, 2008. epp.eurostat.ec.europa.eu/cache/ITY_OFFPUB/KS-EM-08-001/EN/KS- EM-08-001-EN.PDF 20. Panorama de la Educación 2008. Informe español. Indicadores de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
  • 179. www.educacion.es/dctm/mepsyd/horizontales/prensa/notas/2008/09/ informe-ocde.pdf?documentId=0901e72b80027bb7 21. www.eustat.es/elementos/ele9999900/ti_/tbl9999902_c.html 22. European Innovation Scoreboard 2008. Comparative Analysis of Inno- vation Performance. European Commission. Enero de 2009. http://www. proinno-europe.eu/metrics 23. “La inversión en I+D en España crece casi un 50% en nueve años”. El País, 17 de junio de 2008. www.elpais.com/articulo/sociedad/inversion/I/D/ Espana/crece/anos/elpepusoc/20080617elpepusoc_8/Tes 24. “El Gobierno recortará el presupuesto en I+D, pero la mitad de lo previsto”. El País, 24 de septiembre de 2009. www.elpais.com/articu- lo/sociedad/Gobierno/recortara/presupuesto/I/D/mitad/previsto/ capítulo 5 elpepisoc/20090924elpepisoc_6/Tes 25. “No turning back. Spain should not use the recession as an excuse to stall plans to boost its scientific enterprise”. Nature 462, 137-138, 12 de no- 177 viembre de 2009. www.nature.com/nature/journal/v462/n7270/full/462137b.html geekonomía 26. Recomiendo la entrevista a Manuel Castells, realizada por el CitiLab, de Cornellà, Barcelona. http://es.citilab.eu. En un fragmento de ella (parte IV) Castells afirma que “se debe premiar el riesgo que viene de las empresas y sancionar el riesgo que viene de los bancos (…) Lo que se ha quebrado con la crisis es la vieja economía, no la nueva economía”. www.youtube.com/watch?v=tYUm7e2Jxrk&feature=related 27. “The radical future of R&D. It’s a new world of collaboration across cor- porate and national bondaries”. Business Week, 7 de septiembre de 2009. www.businessweek.com/mediacenter/podcasts/cover_stories/cover- cast_08_26_09.htm 28. “El capital riesgo en España”, Martín Varsavsky, en su blog, 29 de marzo de 2007. http://spanish.martinvarsavsky.net/general/el-capital-de-ries- go-en-espaaa-.html
  • 180. 29. SCRI (Asociación Española de Capital Riesgo). Informe 2008. www.ascri.org:8080/info/pdf/INFORME_29042008.pdf 30. “El 84,3% de las pymes tienen problemas para acceder al crédito”. El Perió- dico de Catalunya, 11 de octubre de 2009. http://elperiodico.com/default. asp?idpublicacio_PK=46&idioma=CAS&idnoticia_PK=652114&idseccio_ Un radar para producir en el postdigitalismo PK=1009 31. Es justo señalar el crecimiento en competitividad regional de la investi- gación originada en las universidades en España, dada la construcción de mecanismos de ayudas a investigadores como el Programa Marco Europeo. http://cordis.europa.eu/fp7/home_es.html Otras ayudas premian especialmente a los investigadores jóvenes que se mueven fuera de los grupos consolidados (como el programa José Castille- jo del Ministerio de Educación y Ciencia), así como a propuestas innovado- ras y no convencionales con el objetivo de generar nuevos paradigmas de investigación. 32. Valor de los doctores en las empresas (2004). COTEC. Colección Innova- 178 ción Práctica. Perspectivas de futuro. www.oei.es/salactsi/doctores.pdf geekonomía 33. Instituto Nacional de Estadística. Encuesta sobre Recursos Humanos en Ciencia y Tecnología 2006. www.ine.es/prensa/np509.pdf 34. Stanford University tiene previsto en el período 2009/2010 la pérdida del 30% del endowment, las donaciones que reciben las universidades de empresas privadas o de particulares y que representan un alto porcentaje de sus ingresos anuales para obras estructurales o proyectos a largo plazo. Anteriormente una baja similar fue del 8% en 1974 (datos de The Stanford Daily, 29 de junio de 2009), lo cual demuestra la gravedad de la actual crisis de financiación. Algo similar sucede con Harvard University, MIT y otras universidades de élite. 35. Fundada en 1998, Google es un modelo de integración de los investiga- dores en el mundo empresarial. En su expansión interna, no contrató MBA’s sino que hizo énfasis en la investigación en ingeniería de sistemas, mate- mática y data mining. En su sede corporativa en Mountain View trabajan cientos de doctorados que provienen del mundo de la investigación y están
  • 181. mejor preparados para innovar. Su principal valor es la habilidad analítica para procesar los datos que generan los usuarios. Y eso no lo sabe un MBA, sino un matemático especialista en el comportamiento de los números. capítulo 5 179 geekonomía
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  • 196. GEEKONOMÍA UN RADAR PARA PRODUCIR EN EL POSTDIGITALISMO Son los geeks quienes a su modo rediseñan la economía convirtiéndola en geekonomía. Desde la irrupción de Internet y la computación personal, son los nuevos escribas del mundo, capaces de crear los instrumentos que utilizan, o apropiarse de los ya creados. Ellos configuran y la sociedad consume. Como un early observant, la principal vocación de este libro es dar pistas e incitar al lector a realizar nuevas lecturas o repensar algunas nociones de la economía de Internet en esta década que comienza. www.geekonomia.net HUGO PARDO KUKLINSKI (PhD) CEO y Fundador de CampusMovil.net | Miembro del Laboratori de Mitjans Interactius (LMI), Universitat de Barcelona | Profesor del Dep. de Comunicación Digital de la Universitat de Vic | Autor de Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food (2007) | Produce digitalismo.com