El documento describe la evolución de la producción de arte, desde la manufactura artesanal hasta la producción industrial con máquinas. Antiguamente, la manufactura era más detallada y los artesanos transmitían un sentido al objeto, mientras que las máquinas permiten una producción a gran escala pero menos detallada. Lewis argumenta que las máquinas no pueden transmitir un alma al objeto como lo hacen los artesanos y que el arte requiere detalle, por lo que no debería dejarse a cargo de máquinas.