Los Incas construyeron un gran imperio, el Tahuantinsuyo, gobernado desde Cuzco por el Inca, considerado descendiente del dios Sol. Dividieron su territorio en cuatro partes y desarrollaron una economía basada en la agricultura en terrazas y la crianza de auquénidos en diferentes zonas de altitud. Su sociedad muy estratificada incluía aristócratas, sacerdotes y jefes locales. Un sitio sagrado fue Machu Picchu, construido como refugio secreto en las montañas.