La teoría de las inteligencias múltiples propuesta por Howard Gardner en 1993 sugiere que existen al menos ocho tipos de inteligencia que se desarrollan de manera única en cada individuo, influenciadas por su entorno. Esta teoría indica que la educación debe adaptarse a las diferentes formas en que los estudiantes aprenden, mejorando así su motivación y efectividad en el aprendizaje. Reconoce que el éxito académico no es un indicador único de habilidad y que es fundamental cultivar todas las inteligencias para que las personas puedan contribuir de manera konstruktiva a la sociedad.