La investigación operativa combina ciencia y arte para resolver problemas de decisión a través de técnicas matemáticas y creatividad analítica. Su aplicación ha evolucionado en el ámbito empresarial, destacando teorías como la clásica, empírica, psicológica y moderna que abordan la organización y administración. Esta disciplina interdisciplinaria utiliza métodos matemáticos y herramientas computacionales para apoyar a los administradores en la toma de decisiones.