Las telecomunicaciones en Latinoamérica han experimentado una revolución en los últimos 30 años, con transformaciones más importantes que en los 150 años anteriores. Hasta fines de los 1980, tener un teléfono fijo era un lujo y era difícil comunicarse fuera de casa. Hoy en día, gracias al teléfono móvil e Internet, la mayoría de la población puede estar conectada en cualquier lugar. Esta revolución se debe a un ciclo virtuoso donde el desarrollo tecnológico genera nuevos servicios que impulsan mayores inversiones en infraestructura,