La gastronomía del Magreb se caracteriza por el uso de ingredientes halal y la ausencia de cerdo. Los países comparten platos como el cuscús y el tajín, aunque cada uno tiene peculiaridades. La cocina tunecina se distingue por platos como la chakchouka y el couscous tunecino. Algunos postres típicos son el baklawa y el makroud. La gastronomía argelina se centra en el cuscús y guisos de cordero. En Libia destacan la sopa Sharba y el platillo nacional