Este documento resume cómo Jesús nos acepta a pesar de nuestros pecados y borra nuestro pasado con su sangre. También enfatiza que aunque seremos rechazados por el mundo, lo único que importa es la aceptación de Dios. Exhorta a no comprometer las creencias propias con tal de ser aceptados, y a honrar a Dios sin importar lo que piensen los demás.