La microtecnología implica el uso de procesos y materiales para crear circuitos integrados miniaturizados, siendo el transistor, un componente clave con múltiples funciones como amplificador y conmutador. La Ley de Moore indica que la cantidad de elementos en un chip se duplica cada 18 meses, lo que impulsa la innovación en microelectrónica. Existen diferentes clasificaciones de circuitos integrados según el nivel de integración, desde pequeña hasta larga escala, y según el tipo de transistor utilizado, como el bipolar y el MOS.