La orquiepididimitis, que incluye la inflamación del epidídimo y testículo, se clasifica en aguda y crónica, con diferentes causas según la edad. Se identifican factores de riesgo como prácticas sexuales sin protección y antecedentes de cirugía, y el diagnóstico se realiza a través de estudios clínicos y microbiológicos. El tratamiento varía según la gravedad y grupo etario, abarcando desde antibióticos hasta medidas no farmacológicas.