La ortopedia dentofacial utiliza aparatos fijos o removibles para aplicar estímulos que modifican el patrón esqueletal. Es más efectiva en pacientes en crecimiento para corregir problemas esqueletales. Se usa para dirigir el crecimiento óseo en casos de deficiencias o excesos esqueletales. Existen diferentes tipos de aparatos según el problema, y la edad ideal para el tratamiento es entre 4 y 12 años.