La pesca proporciona anualmente 85 millones de toneladas y satisface la creciente demanda mundial de pescado. Sin embargo, los recursos pesqueros se encuentran en peligro debido a la contaminación, el aumento de la temperatura del mar y el abuso en las capturas. La Unión Europea es el tercer productor mundial y España depende en gran medida de esta industria, aunque su flota es anticuada y los caladeros internos se encuentran sobreexplotados.