El positivismo surgió en Francia en el siglo XIX de la mano de Auguste Comte, quien propuso que el único conocimiento válido es el que proviene de la ciencia y el método científico. Se extendió por Europa y primó el estudio empírico de los fenómenos sociales y naturales sobre la especulación. El positivismo tuvo un fuerte impacto en la educación mexicana a través de Gabino Barreda y su lema "Saber para prever, prever para obrar".