El documento describe cómo diferentes profesionales contribuyen al aprendizaje de la técnica vocal. Explica que el otorrinolaringólogo evalúa y trata problemas de salud en la cabeza y cuello, mientras que el fonoaudiólogo se enfoca en la educación y reeducación de la voz. También destaca que la producción vocal requiere conocimiento de las estructuras biológicas, la fisiología, y factores psicológicos y culturales.