El concepto de sociedad de la información ha sido examinado históricamente, destacándose el positivismo tecnológico que promueve las TIC como herramientas de desarrollo. Sin embargo, el autor cuestiona la efectividad de las promesas de progreso, resaltando que a pesar del auge de las tecnologías, las desigualdades han aumentado. Se argumenta que las TIC deben ser vistas como instrumentos, no como soluciones únicas a problemas sociales complejos.