El documento describe las características arquitectónicas y artísticas del arte románico. En términos de arquitectura, destaca la planta de cruz latina, el uso de bóvedas de cañón, arcos de medio punto y contrafuertes. La escultura se usaba para decorar portadas e iglesias con figuras religiosas. La pintura tenía una función decorativa y didáctica a través de frescos, tablas de altar y miniaturas en libros.