La temporada navideña en los Estados Unidos comienza tradicionalmente después del Día de Acción de Gracias en noviembre y se caracteriza por las compras, la decoración de hogares y tiendas, y la celebración tanto de la Navidad como de otras festividades como Hanukkah y Kwanzaa. Aunque originalmente era una celebración religiosa, la Navidad en los Estados Unidos se ha vuelto muy comercial y secular, aunque para muchos aún retiene un significado espiritual.