Este documento describe la conversación como una interacción social fundamental para el desarrollo de la identidad y las relaciones entre las personas. Explica que la conversación depende del contexto cognitivo, cultural y social, y que para ser entendida requiere coherencia entre la estructura, el significado transmitido y las acciones. Finalmente, concluye que la conversación es un elemento social, cultural y cognitivo que permite el intercambio de experiencias y conocimientos entre las personas.