Este documento discute la privatización de la sanidad pública en España a través de varios grupos. Menciona que la privatización puede ocultar deudas públicas y deshacerse de empleados públicos. Luego se enfoca en dos grupos principales, Capio y Ribera Salud, que han obtenido contratos para gestionar hospitales públicos con apoyo financiero de cajas de ahorro y con conocimiento inicial del sector por parte de Adeslas. Finalmente, señala que el director actual de hospitales del gobierno de Madrid supervisó las pérdidas