Un ciervo y un pavo real se hicieron amigos a pesar de las normas que prohibían la mezcla de razas de animales. Decidieron dar un paseo juntos para conocerse mejor y pasaron por varios lugares, pero otros animales se reían de ellos. Aunque al principio la gente también se reía de ellos, con el tiempo todos se dieron cuenta de la importancia de su amistad y decidieron romper las absurdas reglas que impedían otras amistades.