El capítulo aborda la diversificación curricular en instituciones educativas, enfatizando la adaptación del diseño curricular a las necesidades y contextos locales. Se proponen procedimientos y orientaciones para construir un proyecto curricular que contemple capacidades, conocimientos y actitudes relevantes, basándose en la realidad del entorno educativo. La diversificación curricular se ve como una herramienta para responder a desafíos específicos de la comunidad, fomentando así una educación más pertinente y contextualizada.