La profesora incorporó la poesía en su clase de tercer grado para motivar la lectura. Los estudiantes leyeron y analizaron un poema de Pablo Neruda, participaron en actividades lúdicas relacionadas con la poesía, y crearon sus propios versos. Al escuchar las creaciones de los estudiantes, la profesora se dio cuenta que la poesía permitió que los niños expresaran su realidad y entorno de una manera creativa. Ella concluyó que la poesía no solo puede usarse para enseñar, sino también para transmit