El asma es una enfermedad respiratoria crónica que afecta al 3-7% de la población y se caracteriza por vías aéreas hiperreactivas. Aunque actualmente no tiene cura, los síntomas pueden mejorar con tratamientos que incluyen broncodilatadores y glucocorticoides inhalados, así como recomendaciones dietéticas para prevenir crisis. Los métodos de diagnóstico incluyen espirometrías y pruebas de alergia para determinar la severidad de la enfermedad.