Este poema describe un paseo por la bahía de la infancia del poeta, que le trae recuerdos felices y consuelo. La bahía es descrita como un lugar hermoso bañado por la luna y reflejado en el agua, con montañas y cielo rindiéndole pleitesía. La bahía fue cuna y nodriza del poeta durante su vida errante, y madre de sus sueños, y el poeta desea que después de la muerte su cuerpo se una a la arena y el agua de la bahía.