Las dictaduras militares en América Latina se caracterizaron por la represión violenta de la oposición política y los movimientos de izquierda, así como por graves violaciones a los derechos humanos. Estos regímenes autoritarios contaron con el apoyo de Estados Unidos y encontraron espacio en las sociedades latinoamericanas debido al empobrecimiento y las diferencias sociales. Aunque prometieron modernización, en realidad dejaron un legado de deuda externa y problemas de derechos humanos que aún persisten.