Las escasas lluvias en Estados Unidos y Argentina en las últimas semanas han generado déficits de humedad en el suelo que comprometen los cultivos. Se necesitan entre 60 y 120 mm de lluvia para revertir la situación, pero los pronósticos prevén sólo lluvias menores a 20 mm, por lo que los cultivos como la soja continuarán siendo afectados. El clima ha impulsado los precios de la soja y el maíz al alza en los mercados.