El documento habla sobre el derecho a la educación de los niños y niñas según la Convención sobre los Derechos del Niño de las Naciones Unidas y la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea. También menciona que las políticas europeas recomiendan que las escuelas tengan autonomía financiera y en la gestión, y que los padres participen en decisiones sobre la educación de sus hijos.