El decálogo propone que los profesores respeten los estilos y ritmos de aprendizaje de los estudiantes, se actualicen permanentemente en su disciplina incorporando las TIC, y consideren que el aprendizaje de los estudiantes es una herramienta para la inserción social. También sugiere que los profesores desarrollen su labor de manera proactiva y dinámica, favorezcan la adquisición de herramientas sociales y laborales, y promuevan el entusiasmo por aprender en los estudiantes.