Este documento discute el papel de la tecnología y las redes sociales en la promoción de la salud en las escuelas. Señala que los estudiantes usan las TIC para aprender, comunicarse y participar activamente como ciudadanos. Sin embargo, también plantea preguntas sobre los riesgos potenciales como la adicción, las drogas y la sexualidad. Concluye que es importante trabajar con las familias, enseñar habilidades socioemocionales a los estudiantes y normalizar el uso de la tecnología, al tiempo que se cuida