La monografía presenta el constructivismo como un enfoque pedagógico esencial en la educación contemporánea, promoviendo la comprensión activa del aprendizaje y destacando la importancia de la interacción entre el alumno y el objeto de conocimiento. A través de un análisis de las contribuciones históricas y teóricas, se enfatiza que el conocimiento es construido individualmente y está influenciado por contextos socioculturales. Los autores buscan fomentar una asimilación crítica del constructivismo, invitando a la discusión y revisión de diversas concepciones sobre este paradigma educativo.