Los Hechos de los Apóstoles, escrito por Lucas, narra la expansión de la iglesia cristiana desde la ascensión de Cristo hasta el auge del cristianismo en Roma, destacando el papel del Espíritu Santo en esta transformación. El texto sirve de puente entre los Evangelios y las Epístolas, relatando cómo los apóstoles, inicialmente tímidos, se convirtieron en valientes testigos del evangelio entre judíos y gentiles. A lo largo de 30 años, Hechos documenta los eventos significativos de la iglesia primitiva, incluyendo la persecución, el crecimiento y la misión hacia los no judíos.