TRIZ, o teoría de resolución de problemas inventivos, fue desarrollada por Genrikh Altshuller y se basa en la identificación de 40 principios creativos tras analizar miles de patentes. El enfoque de TRIZ busca resolver contradicciones en el desarrollo técnico sin recurrir a compromisos, promoviendo el uso de recursos disponibles y un análisis sistemático para generar soluciones. Los hallazgos de TRIZ sugieren que gran parte de la innovación puede venir de transferir soluciones de distintos campos, superando la inercia psicológica que limita la búsqueda de nuevas ideas.