Un cura encuentra a un niño abandonado que había sido parido por una burra. El cura lo crista como Juan Borriquito. Juan crece hasta tener un apetito enorme, comiendo 3 vacas por día y dejando al cura sin comida. El cura intenta deshacerse de Juan enviándolo a misiones peligrosas, pero Juan sobrevive a todos los peligros. Finalmente, Juan encuentra un tesoro enterrado que le da la propiedad de una hacienda, donde pasa a vivir comiendo moderadamente.