El documento describe la evolución de la web desde la web 1.0, que era estática y pasiva, hacia la web 2.0, que promueve la interacción y colaboración de los usuarios, hasta llegar a la web 3.0, conocida como la 'web semántica', que mejora la eficiencia en el manejo de datos. Destaca la importancia de las redes sociales y los contenidos generados por los usuarios, así como los retos técnicos en la implementación de estándares semánticos. Además, ofrece un análisis sobre cómo estas transiciones han transformado la comunicación y la interacción en el entorno digital.