El documento discute cómo las TIC impactan la educación y el desarrollo de habilidades fundamentales y habilidades del siglo XXI (HS21) en un contexto de transformación tecnológica. Propone la creación de metodologías comparativas y indicadores para evaluar estos impactos en América Latina, enfatizando la necesidad de innovaciones en la medición y análisis de la equidad en el uso de TIC. Además, destaca la importancia de un marco común para facilitar la colaboración entre ministerios de educación en la región.