Los mapas conceptuales son herramientas pedagógicas que representan las relaciones entre conceptos, facilitando el aprendizaje significativo al vincular nuevos conocimientos con experiencias previas. Su estructura jerárquica y el uso de palabras enlace permiten a los aprendices organizar, sintetizar y reflexionar sobre la información. Aunque tienen ventajas en la colaboración y comprensión, pueden ser desventajosos si son demasiado complejos o requieren de un entrenamiento considerable para su correcta aplicación.