Este documento presenta un estudio de caso sobre la Sra. Thompson, una mujer inglesa de 85 años que vive en una residencia. Sufrió una caída y le duele la espalda y la cadera. La enfermera Agnieszka la evalúa sin su consentimiento y decide que no necesita ver al médico. Cuando el dolor empeora, llama al médico, quien descubre que tiene una fractura de cadera. El caso ilustra los desafíos de brindar atención culturalmente competente y centrada en la persona a los adultos mayores.