El screamo es un subgénero del emo y el hardcore punk que se caracteriza por vocales o gritos fuertes y dramáticos, letras existencialistas o políticas, y ritmos caóticos que alternan entre secciones melódicas y agresivas. Surgió a finales de los 90 en EE.UU. y se expandió con bandas europeas que experimentaron con nuevos sonidos. Actualmente muchas bandas adoptan un estilo más lento y melódico pero manteniendo la esencia caótica del género.