Los estudiantes colombianos obtuvieron bajos resultados en las últimas pruebas PISA, lo que llevó al país a descender 10 puestos en el ranking, siendo el mayor retroceso. Expertos atribuyen esto en parte a la mala calidad del profesorado en Colombia. Aunque la ministra de Educación reconoció la necesidad de mejorar, otro experto expresó preocupación por que Colombia ya no supera a la mayoría de países de la región.