Este documento ofrece consejos para que los padres protejan a sus hijos en el uso de Internet, incluyendo no revelar información personal, no aceptar conocer a nadie en persona, no intercambiar fotos personales, avisar a los padres ante cualquier comentario amenazante, ubicar la computadora en un lugar familiar y no en habitaciones privadas, y revisar gastos en la tarjeta de crédito y factura telefónica para detectar actividades sospechosas.