El documento aborda la educación emocional en entornos digitales y los riesgos de la hiperemocionalidad, destacando la necesidad de un enfoque complejo para gestionar la identidad y las relaciones en línea. Propone formas de acompañamiento socioeducativo, enfatizando la importancia de la conexión física, la autoatención emocional y las relaciones sociales de calidad. Además, sugiere estrategias para evitar la hiperconexión y promover una vida estructurada, así como la gestión emocional adecuada entre jóvenes y adolescentes.