El documento describe tres niveles de lectura: el nivel literal, el nivel inferencial y el nivel crítico. El nivel literal implica comprender y recordar con precisión la información explícita en el texto. El nivel inferencial requiere inferir significados implícitos y relacionar ideas. El nivel crítico implica evaluar y emitir juicios sobre el contenido del texto. Además, señala que la lectura no es un proceso pasivo sino activo que involucra actividades mentales como observar, preguntar y reflexionar.