El documento presenta un análisis estadístico sobre el nivel de alcohol en sangre de 300 conductores involucrados en accidentes automovilísticos mortales. Se concluye que la mayoría de los conductores tenían entre 0.59 y 0.61 mililitros de alcohol, y se discute la relación entre el consumo de alcohol y la probabilidad de accidentes, subrayando la importancia de ser conscientes de los efectos del alcohol al conducir. El estudio incluye medidas de tendencia central, dispersión e interpretaciones gráficas de los datos.