El documento aborda el autoliderazgo, definiéndolo como la habilidad para influir en uno mismo y en los demás hacia la consecución de objetivos comunes. Propone cinco normas básicas para el autoliderazgo que incluyen curiosidad, proactividad, responsabilidad de resultados, acción continua y trabajo con capacidades personales. Además, enfatiza la importancia de alinear el 'yo real' con el 'yo ideal' mediante el cambio de pensamientos y actitudes para mejorar los resultados en la vida personal y profesional.