La electroporación es una técnica no invasiva que permite la introducción de sustancias a través de la piel mediante corriente alterna, facilitando la apertura temporal de los poros celulares. Esta técnica se utiliza para administrar compuestos como ácido hialurónico, vitaminas y colágeno, tanto en tratamientos faciales como corporales, mejorando la absorción de productos. Se recomienda combinarla con microdermoabrasión y realizar sesiones de 10 a 60 minutos, garantizando que no hay contacto eléctrico directo con el paciente.