La enseñanza asistida por computadora ha transformado la educación desde los años sesenta, proponiendo el uso de materiales educativos computarizados para mejorar el aprendizaje. Esta metodología permite a los estudiantes interactuar con contenidos multimediales, ofreciendo retroalimentación inmediata y favoreciendo el desarrollo cognitivo. El rol del docente se redefine como guía y facilitador, aprovechando los recursos tecnológicos para fomentar un aprendizaje activo.